— ¿En serio vamos a ir a la casa de Park? — Preguntó Namjoon no muy convencido.

—Claro que vamos a ir, él mismo nos invitó— les recordó Hoseok.

— ¿Están conscientes que allí van a estar todos esos idiotas a los que tanto detestamos? — Les preguntó Namjoon de brazos cruzados.

— ¡Y justo por eso vamos a ir! — Soltó Tae alegremente — imagínate las caras que pondrán esos imbéciles, al darse cuenta de que llegamos a su fiestecita y no pueden echarnos, porque fue el mismo Park Jimin que nos invitó— dijo malicia.

—Ya dejen las tonterías y no se metan en problemas— fue lo único que dijo Jungkook.

Tae rodó los ojos —No te preocupes, no echaremos a perder la fiesta de tu novio —

Jungkook le dio una mirada asesina y se levantó del sofá, — Muévanse, si quieren llegar conmigo—

Los chicos se levantaron y caminaron tras Jungkook, tomaron el autobús y luego caminaron un poco más, la música se escuchaba fuerte y había muchas personas entrando y saliendo de la casa de los Park.

Hoseok silbó al mirar el lugar —Vaya casita la de Park— dijo asombrado.

— ¿Casita? — preguntó Tae con sarcasmo.

—Ya entremos — ordenó Jungkook de mal humor.

El no era fan de las fiestas, el ruido lo fastidiaba eran demasiado ruidosas y había mucha gente, demasiado molesto.

Pero debía venir por ser el novio del anfitrión, Jimin le había hecho pucheros insistiendo en que debía estar ahí.

Jungkook tocó y una chica les abrió mirándolo con una ceja arqueada, —¿Tienen entradas? — Preguntó con desagrado extendiendo su mano.

Jungkook le mostró las cuatro entradas dejándolas en su mano de mala gana —Te quitas o te quito— espetó de mal humor.

La chica rodó los ojos y los dejó pasar.

—No se emborrachen ni hagan tantas estupideces — Les advirtió Jungkook inmediatamente alejándose de ellos.

Inmediatamente, fue en búsqueda de Jimin, después de mucho pensar meditar, y sobre todo dibujar muchos bocetos con el rostro de su novio, Jungkook se dio cuenta de que debía abrir los ojos, a la realidad algo estaba pasando en su cabeza con Park, era algo confuso, pero no debía seguir negándolo, el chico le atraía, era la única explicación que le daba a su forma de actuar alrededor de Jimin.

Jungkook podía ser un idiota desalmado con sus amigos, y con la mayoría de las personas que lo rodeaban, pero no con Jimin.

Era como su debilidad, incluso su manera de hablar era distinta cuando estaba cerca de Jimin, le podía decir cualquier grosería a Namjoon, Tae u Hoseok, pero no a ese chico de cabello castaño y linda sonrisa que escondía sus ojitos en un par de líneas perfectas.

Se había dejado dominar totalmente por los pucheros de Jimin y ni siquiera entendía cómo.

Después de deambular un poco encontró a Jimin, estaba en la sala sentada en un sofá hablando con sus amigos, se veía precioso, vestido de esa manera.

Min Yoongi estaba detrás de él con un brazo en el espaldar del sofá, prácticamente abrazando a Jimin, eso a Jungkook no le agrado para nada, ese chico pálido ya había dado indicios de estar interesado en Jimin, y por alguna estúpida razón que estuviera así de cerca de su novio lo ponía de muy, muy mal humor.

—Jimin— Lo llamó parándose frente a ellos ganándose varias malas miradas, y SeokJin incluso se levantó de su lugar alejándose.

— ¡Jungkookie! — casi gritó Jimin al levantarse y saltar hacia el — si viniste— Murmuró con una sonrisita rodeando el cuello de Jungkook con sus brazos.

—No me lo perdería por nada del mundo — Aseguró con un deje de sarcasmo que Jimin no notó, y miro por encima del castaño a Yoongi que lo fulminaba con la mirada.

Jungkook le dio una mirada maliciosa, y bajó su rostro besando los labios de Jimin que le correspondió de inmediato, Yoongi se levantó desapareciendo del lugar.

— ¡Jungkookie vamos a bailar! — Le pidió Jimin de inmediato.

— ¿Bailar? No sé hacerlo y tú lo sabes — Le respondió Jungkook de inmediato.

—Pero esto no es vals, puedes mover tu cuerpo como quieras — Dijo Jimin con puchero —Mira solo sigue el ritmo de la música—

Jungkook tomó aire —Jimin, no me gusta bailar— dijo serio.

—Es porque nunca lo has intentado — Le aseguro Jimin.

Jungkook hizo un gesto con su boca con molestia, rascándose la cabeza —Déjame tomar algo y lo intentamos ¿sí? —

Jimin asintió sonriendo y tomó la mano de Jungkook, para pasar entre todos los chicos que los rodeaban hasta llegar a cocina.

Tae y Hoseok estaban bailando cada uno por su lado intentando convencer a alguna chica pasar el rato, Namjoon se quedó sentado en el sofá no se sentía cómodo en ese lugar, tal vez si se tomaba un vaso más de cerveza las cosas cambiarían se dijo a sí mismo.

Hasta el momento no habían tenido ningún altercado con sus enemigos, entró a la cocina y abrió el refrigerador encontrando un paquete de cervezas, cuando las sacó y se dio la vuelta se dio cuenta de que no estaba solo.

Kim SeokJin lo mirada con desdén —Ya me preguntaba yo ¿por qué la cocina de Jimin olía a basura? —

Namjoon trago grueso por lo general él evitaba las confrontaciones con este chico, pero levantó su mirada fijándola en esos ojos cafés que lo observaban con desprecio —Cuando yo llegué aquí no olía a nada, hasta que llegaste tú— contestó encogiéndose de hombros.

— ¿Qué estás queriendo decir? — SeokJin se acercó un poco más a él. 

—Lo que escuchaste — Respondió Namjoon simplemente — Mira Kim no sé por qué te empeñas tanto en joderme la vida, pero ya estamos grandecitos para andar con bromitas estúpidas, si para ti fue muy gracioso llenar mis cosas con pintura para mí no lo fue, y si tienes algún problema dímelo de frente —

SeokJin le dio una sonrisa de superioridad — Y si no lo hago ¿Qué?, ¿Y si me da la gana de seguir jugando y poniendo pintura en tus cosas que harás? — le pregunto con altivez.

Namjoon miro al chico frente a él, aún no comprendía por qué Kim SeokJin se empeñaba tanto en molestarlo a él —Tal vez te devuelva el favor — dijo restándole importancia.

— ¿Y eso es una amenaza? —

—Yo no te estoy amenazando, simplemente si vuelves a meterte conmigo no me quedaré de brazos cruzados— Namjoon no se dejó intimidar — Aún no comprendo por qué te ensañas conmigo, habiendo tantas personas en el instituto ¿Por qué me jodes la vida a mí? —Le preguntó Namjoon.

—Porque me da la gana— SeokJin se encogió de hombros.

—¿Eso, o te molesta que haya sacado notas más altas que las tuyas?, no es mi culpa que tu dinero no pueda comprarte un cerebro, soy mejor que tú supéralo— bufó Namjoon.

—¿Mejor que yo?, eres una basura despreciable, un insignificante bicho raro y me molesta tu sola presencia — Le respondió Jin con odio.

Namjoon arqueo una ceja ante la cruel respuesta — Para ser un insignificante bicho raro me das mucha importancia ¿no? —Namjoon dio un paso al frente —O es que en realidad ¿te gusto? —

La mirada de seguridad de SeokJin vaciló un instante y su labio inferior tembló, Namjoon se sorprendió ante ese gesto y dio un paso más hacia el pelinegro frente a él haciéndolo retroceder — ¿Te gusto? —

SeokJin salió de su shock y al responder — ¿Gustarme tu?, un imbécil con pinta de delincuente, y me atrevería a apostar que drogadicto sin futuro — pero su voz no salió tan segura como SeokJin hubiera querido, más bien sonó temblorosa —Quizá soy yo el que te gusta y por eso quemas tu cerebro para sacar buenas notas y tener un poco de mi atención—

Namjoon dio un paso más haciéndolo retroceder de nuevo y chocar con la pared — Entonces si no te gusto, y soy tan insignificante para ti como dices —Namjoon se acercó tanto que sus rostros nada más estaban a centímetros  — ¡Deja de joderme la vida!, Porque para mí, tú con todo tu dinero y perfume caro vales menos que la mierda, personas prepotentes y que se creen más que los demás como tú, son la verdadera basura de este mundo, ¿gustarme tú?, ni en mis peores pesadillas, yo no estoy interesado en los hombres,  y aunque tuvieras un par de pechos y vagina tampoco serías una opción para mí— dejo el moreno claro antes de salir de la cocina.

SeokJin trago grueso, su barbilla le temblaba y con el dorso de su mano limpio una lágrima que se deslizó por su mejilla, nunca en su vida se había sentido tan humillado.

Esas palabras le dolieron un poco demasiado.

Ni siquiera las palabras de su padre lo hacían sentir tan mal, a SeokJin no le gustaba Namjoon, claro que no, él debía odiar se repitió mentalmente, por su culpa no podía obtener el primer lugar, por culpa de ese chico su vida era miserable, así que si SeokJin debía vivir un infierno, arrastraría a Namjoon con él, ya que el era la causa de su desgracia.

— ¿Jinnie te paso algo? — Jimin le preguntó desde la puerta de la cocina a su lado estaba Jungkook.

SeokJin miró sus manos entrelazadas y una pizca de envidia lo golpeo —No, Solo necesito aire hay muchas personas y me siento asfixiado— dijo saliendo por la puerta de la cocina que daba al jardín trasero.

Jimin lo vio salir y miró a su novio, Jungkook se encogió de hombros restándole importancia, en lo que menos estaba interesado era en los odiosos amigos de Jimin —Probablemente le molesta verte conmigo —

—No lo creo, les dejé claro a todos que eres mi novio, ambos estamos intentando que nuestra relación funcione, es algo que deben respetar—

Jungkook vio la carita decidida de Jimin por defender su relación, haciéndole sentir culpable, pero a la vez una calidez recorrer su cuerpo.

— ¿Qué  quieres tomar Kookie? — Jimin lo hizo salir de sus pensamientos.

—Una cerveza está bien, ¿Tú vas a tomar? —

Jimin se sonrojó —Esta es la primera vez que tomaré alcohol, pero solo porque tú estás conmigo y me cuidaras —

Jungkook tomó un trago de la cerveza y arqueo una ceja — ¿Y si yo tomo de más y me propaso contigo? —

—Eso no me molestaría — dijo Jimin bajito.

— ¿Eh? —

—Que brindar me gustaría — dijo Jimin riendo.

— ¿Brindar? —Pregunto Jungkook confundido.

—Si, por lo nuestro, por el tiempo que hemos pasado juntos, y por todo el tiempo que vamos a compartir de ahora en adelante— le explico Jimin levantando su cerveza.

Jungkook miró la sonrisa de Jimin y también sonrió chocando sus cervezas, y por un instante olvidándose que solo planeaba estar unos meses con su novio.

Después de eso todo fue como un borrón, Jimin lo arrastro a la pista entre canciones movidas, Jungkook no sabía dónde poner sus manos en el cuerpo de Jimin.

Los recuerdos de como se veía Jimin con su traje de ballet, no deberían llegar a su mente en ese momento, Pero lo hacían, Jungkook se sentía sofocado.

Añadiéndole que Jimin era un buen bailarín de todo tipo de música al parecer, por lo sexy que Jimin le estaba bailando en esos momentos, trato de tocarlo lo menos posible al moverse al ritmo de la música, tener una erección a mitad de una sala repleta por sus compañeros de instituto no era lo que quería.

Entre bailes y muchas cervezas llego la media noche, Jimin no dejaba de reír como loco, y abrazarlo, en ese momento Jungkook se dio cuenta que su novio estaba totalmente borracho.

Era de esperarse que el alcohol se le subiera rápido, si era la primera vez que Jimin tomaba.

—Koookiee, quiero ir a mi habitacioon— Le pidió Jimin en el oído alargando las palabras y haciendo pucheros más pronunciados de lo normal.

— ¿A tu habitación? — Jungkook tragó saliva, tratando de mantener a Jimin de pie.

—Si, estoy cansado, me duelen mis piecitos, y tengo muchoooo calor — lloriqueo intentando sacarse la chaqueta que tenía puesta.

Jungkook bufó acomodándole la chaqueta en su lugar, ya lo que tenía por debajo de esta era una camisilla sin mangas —Pero yo no sé cuál es tu habitación—

—Yo te indico — Soltó Jimin en una risita.

A Jungkook no lo convencía del todo la idea de estar solo en la habitación con el castaño, pero tampoco lo iba a dejar allí, intento ayudarlo a llegar a las escaleras, pero Jimin parecía tener dos piernas izquierdas, para evitar una catástrofe el pelinegro cargo a Jimin como una princesa y subió al segundo piso.

— ¡Así me cargaras el día de nuestra noche de bodas! — Chilló Jimin emocionado moviendo sus piecitos.

Jungkook abrió los ojos un poco sorprendido por lo que dijo Jimin, pero estaba claro que eso solo era producto de lo ebrio que se encontraba —Si sigues moviéndote así, te dejaré caer y solo te cargaré para llevarte al hospital — dijo Jungkook.

— ¡Kookie!, que poco romántico eres, tienes suerte que este taaaaaan enamorado de ti — se quejó Jimin con puchero —Esa es mi habitación— dijo Jimin señalando una puerta color rosa pastel.

Jungkook como pudo abrió la puerta y entró, caminando hacia una enorme cama llena de diferentes muñecos de peluche, dejando a Jimin allí, el cuarto era bastante grande, mucho más que el suyo, había una enorme TV, un escritorio con un computador, otro con libros,  una estantería con más libros, otra con mucho más peluches, un guardarropa, un enorme espejo.

Jungkook se quedó tan embelesado mirando todo lo que Jimin tenía en su habitación, que no se dio cuenta en que el momento el castaño se levantó de la cama.

— ¿Jimin que haces? — Preguntó Jungkook al verlo tambalearse.

—Ya te dije que tengo calor Kookie— Jimin se quitó la chaqueta y la tiró al piso, y como pudo empezó a deshacerse del pantalón.

Jungkook se quedó paralizado un momento sin quitar la mirada del cuerpo de Jimin, la forma desordenada en que logró quitarse el pantalón dejando ver un minúsculo bóxer blanco.

— ¿Te gusta lo que ves Kookie? — Jimin intentó caminar sexy hacia Jungkook, pero se tropezó con sus propios pies y casi cae al piso.

Jungkook fue más rápido y pudo atraparlo.

—Es mejor que duermas — Dijo Jungkook tratando de no observar las largas piernas de Jimin.

Jimin se río, —Creo que ya no tengo sueño Jungkookie— canturreo divertido acariciando los brazos de Jungkook —Tienes músculos muy fuertes Kookie, me encantó lo que vi en el baño ese día —

Jimin se mordió el labio inferior tomando a Jungkook por sorpresa lo empujó haciéndolo caer sentado en la cama, Jungkook se quedó asombrado no creía que Jimin tuviera tanta fuerza.

— ¿Jimin? — Dijo tragando grueso.

Jimin rio y se subió sobre los muslos de Jungkook —Sé que me deseas Kookie — susurró sobre los labios del pelinegro —Pero no sé porque no me tocas— puso un puchero.

—Yo te toco— Jungkook coloco una de sus manos sobre la mejilla de Jimin intentando disuadirlo.

—No de esa manera — Jimin sonrió y tomó una de las manos de Jungkook y la colocó sobre sus glúteos, y la otra la introdujo por debajo de su camisilla de rallas.

El cuerpo de Jungkook se puso rígido de inmediato en todas partes incluyendo su entrepiernas —Jimin no creo que esto sea una buena idea — Dijo tratando de controlarse.

—Si es buena idea Kookie, además ¿sabes qué?, también quiero un beso — Jimin paso su lengua por sus labios tentadoramente.

Jungkook no se perdió ese movimiento —Yo te he besado varias veces— dijo casi inaudible.

—Pero yo quiero un beso real — Jimin acerco sus labios a los de Jungkook y movió su trasero sobre la erección de su novio.

Jungkook gimió ronco y mandando todo el autocontrol a la mierda se apodero de los labios de Jimin, sosteniéndolo por la cintura, disfruto de los deliciosos labios del castaño, dulces y suaves.

Jimin le correspondió de inmediato restregando su trasero en el muy despierto miembro de Jungkook.

Jungkook se dio cuenta que los labios de Jimin eran más deliciosos de lo que jamás imagino, succionó a su antojo hasta deslizar su lengua dentro de la boca de Jimin en ese momento Jungkook sintió que estaba en la gloria.

Holi mis amores, los amo mucho muchote espero que hayan disfrutado del capítulo…