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—Físicamente está en perfectas condiciones.— aseguró HoSeok revisando al eternâ.

—Eso les dije, pero no escuchan.— comentó JiMin virando los ojos, no molesto, más bien se encontraba divertido con todo esto.

HoSeok le sonrió —Es porque están locamente enamorados de ti.

JiMin no respondió, miró a los lados para observar a cada uno de los Min y lo absortos que estaban en él, realmente preocupados de haberlo lastimado después de haberlo puesto a prueba y pelear contra ellos. Hace unas cuatro horas que había amanecido y todos salieron a una parte del bosque para poner en acción las habilidades del neonato eternâ, las cuales definitivamente no eran para nada parecidas a las de un neonato normal.

El mago estuvo supervisando todo desde el comienzo, ya había tomado unas muestras de sangre y luego de acabar realizó un chequeo de su cuerpo, músculos, huesos y demás, pero JiMin estaba en perfecto estado.

—Entonces sus ojos se quedarán en ese color.— murmuró YoonGi dudoso.

—Sí, pero no es nada malo, JiMin es una combinación de sus tres sangres y la suya propia, esto se debe a que bebe directamente de ustedes y estuvo alimentándose por un tiempo de esa manera.— informó pensándolo un poco mejor antes de continuar hablando —Cuando ustedes transformaban a un neonato normalmente le daban la bienvenida a su clan con la sangre de los tres y luego de convertirse les dan dosis individuales ¿No?

Agust asintió —Solo les damos la sangre de los tres en un comienzo porque solo lo muerde uno de nosotros, es por eso que hay neonatos de Suga, otros de YoonGi y claramente también otros míos como lo fue SeokJin. Luego de la conversión, cada quien les da su sangre, ya sea una vez por mes o quincena para mantenerlos sanos y regularmente se alimentan de sangre que les conseguimos en los hospitales.

JiMin puso más atención en lo dicho y JungKook que estaba con ellos también, eran cosas que ellos no conocían tan a fondo y como recién llegados al clan estaban interesados en cómo se coordinaba todo.

—JiMin es una nueva generación de neonato por ser el eternâ, pero gracias a eso es y será el único de su clase, por otro lado, está la generación raza pura que podría venir de la sangre de JungKook.— señaló HoSeok mirando al mencionado sin ninguna mala intención, solo diciendo una posibilidad.

—¿A qué te refieres?— dudo el menor sin comprender.

—Eso es imposible, ya no hay un árbol de la vida para hacer el ritual de conversión, sin frutos no hay transformación.— dijo Suga confundido.

HoSeok negó —JungKook no es igual que ustedes, él nació formándose como un vampiro, creció en el vientre de Hilda alimentándose de la sangre que ustedes le daban a ella para mantenerla con vida. Lo que quiero decir es que obviamente no necesita un árbol para traer neonatos porque puede convertirlos al instante, pero en algo muy distinto, en neófitos y un claro ejemplo de que puede fue NamJoon.

Todos guardaron silencio unos instantes tratando de procesar las palabras del mago, pues era obvio que Kim era distinto, un vampiro más agresivo y salvaje de los que normalmente había. Lo único que los tranquilizaba en este momento es que NamJoon estaba muerto y gracias a que JungKook quiso darle un descanso estaba reducido a cenizas desde hace días.

—¿Qué son los neófitos?— cuestionó JiMin, acercándose a JungKook para abrazarlo, pues el menor se veía realmente ido con todo lo dicho y quería consolarlo.

—Los neonatos son en pocas palabras los hijos de YoonGi, Agust y Suga, todos tienen mitad humanidad y mitad demonio, por eso es que pueden controlar sus instintos y satisfacer su sed de sangre normalmente. Poseen habilidades decentes como velocidad, leer mentes y fuerza, no tienen inmortalidad porque necesitan de sus creadores para mantenerse viviendo. Los neófitos, por otra parte, son más demonios que humanos, sus instintos los dominan, son mucho más fuertes que los neonatos, pero no leen mentes y se vuelven asesinos cuando tienen hambre. Es probable que NamJoon al ser uno de estos haya matado a varias personas para alimentarse y de no haberlo hecho... explicaría por qué su actitud rabiosa.— comentó, pensando en el frenesí del cazador cuando estuvieron en los pasadizos, ciertamente Kim había comido la manzana, pero se mantuvo como vampiro hasta hacerlo y JungKook le había dicho que jamás lo alimento como los Min hacían con sus neonatos.

—No quiero transformar a nadie.— dijo JungKook, llamando la atención de todos —No lo volveré a hacer porque no quiero que se vuelvan como NamJoon, pero tenemos un problema y es que el Vaticano probablemente supiera todo esto desde antes que nosotros por las pruebas que me hicieron.

—De nada les sirve porque ellos no tienen nuestra sangre.— siseo tranquilamente Suga, cruzándose de brazos.

—No la de ustedes directamente, pero tienen mucha de la mía.— refuto JungKook con los ojos cristalizados, recordando como se la extrajeron por la fuerza.

JiMin al ver su clara reacción traumática y escuchar su tono de voz quebradizo empezó a consolarlo con caricias sobre sus cabellos rubios. JungKook se restregó en su pecho un poco apenado por su comportamiento y por todos los problemas que provocó su ingenuidad.

Agust gruño —Ellos podrían intentar convertir por su propia cuenta con eso, no saben lo que pueden provocar, debemos hacer algo.— opino mirando a YoonGi en busca de una respuesta.

YoonGi asintió —Estuve hablando ayer con los neonatos que llevan más tiempo con nosotros y Jackson, Sana, JiYong, SiWon, JinRi, Leetuk, YeSung y JiEun se ofrecieron para acompañarnos al Vaticano.

—Quiero ir.— dijo rápidamente JiMin.

—Yo también.— se sumó JungKook.

—No creo que sea buena idea que vayan, ambos serían puntos débiles que ellos intentarían atacar para distraer— comentó HoSeok, aunque estaba seguro de que los dos eran fuertes JiMin apenas se sabía manejar y JungKook, bueno, simplemente temía perderlo.

Los hermanos escucharon la opinión del mago, pero también fueron conscientes de cómo JiMin y JungKook se encontraban molestos por lo dicho, obviamente estaban en desacuerdo con él. Ellos pensaban diferente también y lo hablaron en sus pensamientos, no era necesario que ninguno se quedara en el castillo porque el ataque iba a ser sorpresa y los dos tenían habilidades muy sorprendentes para considerarse cargas.

—JiMin y JungKook pueden venir si así lo desean.— aceptó YoonGi, mirando al par con una sonrisa extensa.

HoSeok sabía que no podía detenerlos, JungKook no era nada suyo todavía y aunque lo fuera, no podría dominarlo u obligarlo a nada, pero su miedo de que algo malo pasará continuaba presente. Estaba demasiado desesperado y preocupado, por lo que no tuvo otra elección más que unirse a ellos cuando a los días todos se preparaban para ir al Vaticano.

Los neonatos que YoonGi había mencionado se encontraban en la entrada del castillo, despidiéndose de sus amigos y compañeros, ya que sabían el riesgo que tenía la misión. Si bien era un ataque sorpresa, había probabilidades de que el Vaticano tuviera protección y era bien sabido por JungKook que tenían un equipo de cazadores entrenados.

—Solo debemos quemar la información que han reunido con el paso de los años y deshacernos de la sangre que le robaron a JungKook.— dijo Suga en voz alta hacia el grupo de ataque.

—Nuestra prioridad es esa, pero también recuerden que deben mantenerse vivos, si se encuentran en riesgo huyan y busquen a algún compañero cercano.— agregó Agust después.

—Somos catorce en total, haremos tres grupos: SiWon, Sana, JiYong y Jackson son el grupo uno.— señaló YoonGi, provocando que rápidamente los neonatos mencionados se separaran a un lado — JinRi, JiEun, YeSung y Leetuk son el grupo dos.—continuó e hicieron lo mismo —Nosotros somos el grupo tres.— aclaró mirando a JiMin, JungKook, HoSeok y sus hermanos. El grupo uno de SiWon irá al sótano y se deshará de la información recolectada, pueden romper todo o preferiblemente incendiarlo. El grupo dos de JinRi se encargará de la sangre en el laboratorio, lo mejor es que recolecten todas las muestras que vean y las quemen. Nuestro grupo estará a cargo de la distracción y seguridad, le haremos frente a los cazadores mientras ustedes llevan a cabo sus misiones, no tendrán que enfrentarse a ninguno en el camino. Una vez que terminen vuelvan directamente al castillo sin esperar a los demás, cuando todos ustedes se encuentren fuera de peligro, nosotros volveremos.— finalizó YoonGi, todos asintieron de acuerdo con el plan.

—Estos son mapas del Vaticano, les ayudarán a llegar directamente al sótano y el laboratorio.— dijo JungKook, dándoles uno a cada grupo.

HoSeok no interfirió en ningún momento, ayudaría en lo que pudiera, aunque no era bueno en combate, podía ayudar con la protección. YoonGi antes de partir le dio una misión secreta por precaución, una que salvaría a todos, pero que solo se llevaría a cabo si se encontraban en un absoluto peligro.

Aquí acaba el maratón, pero si veo apoyo a la historia pronto les traigo los últimos capítulos y nos despediríamos de Eternâ 🥺