~Llévame lejos

Las doce de la noche y Jimin permanecía sentado en el sofá mientras mordía sus uñas nervioso. Taehyung estaba en la cocina preparando té.

Y es que no había razón para preocuparse porque Yoongi estaba con sus amigos y compañeros de trabajo ¿verdad?

¿Pero que era aquella sensación de incómodo golpeteo en su corazón? ¿Por que aquella inquietud?

La inquietud y el desasosiego que estaba experimentado le aturdía por momentos y le llenaba de  ansiedad.

Y no era para menos, había llamado al celular de Yoongi un par de veces y éste no respondía. Solo quería asegurarse de que estuviera bien, podía que hubiese bebido de más y necesitara que fueran por él  Jimin lo haría, pero hasta el momento no recibia señal de él.

Su mente se ofuscaba y le volvía una montaña rusa  su emocionalidad. Quizá estaba sintiendo un caso de ansiedad porque tenía  los síntomas fisiológicos que solían invadirle cuando debía salir al escenario o cuando estaba enbarazado y Yoongi no estaba con él, sudaba y estaba experimentado palpitaciones o quizá simplemente tenía alta la presión arterial.

¿Qué le causaba todo aquello? ¿Yoongi estaba bien? ¿Cierto? Porque si Yoongi estaba bien por que sentía eso en su pecho,  esa opresión que le hacía a su lobo estar alerta.

Se levantó intranquilo del sofá y fue a la habitación de los bebés hallandolos profundamente dormidos así que los cubrió bien y volvió a salir para tomar  el teléfono de la casa y así llamar a la persona que lógicamente debía llamar si Yoongi no respondía.

Con sus dedos resbalando cada vez que intentaba marcar logro hacer que el pitido de espera sonara.

Después de unos instantes que a él le parecieron horas el teléfono fue contestado.

     —¿Diga?

     —¿Hoseok Hyung? Habla Jimin.

Al fondo se podía oír música y risas de personas.

     —Jimin si, ¿se te ofrece algo? ¿Yoongi olvidó algo aquí?

Fue en ese instante en que su cuerpo tembló.

     —¿C-como? ¿No está ahí en la reunión con ustedes?

Del otro lado Hoseok solamente se había quedado en silencio y eso ponía más nervioso a Jimin.

     —No... creí que se había ido hace tiempo. ¿Lo has intentado llamar?

     —¿Hace tiempo? ¿Cuánto exactamente? Porque aquí no está y claramente lo llamé y no respondió por eso te he llamado a ti Hyung. 

     —hace tres horas, Jimin esto es preocupante. No estaba ebrio cuando estuvo aquí así que dudo que se haya quedado estacionado en algún lugar.  Su auto no está aquí. Déjame hacer un par de llamadas y te volveré a llamar si tengo noticias. Y jimin... descuida lo vamos a localizar.

     —Está bien,  gracias Hoseok Hyung. 

Se dejó caer al sofá con su rostro totalmente lleno de preocupación cuando Tae entró en la sala y se acercó con la taza de té para para los nervios. 

     —¿Y? ¿Alguna novedad?

Jimin negó mordiendo su labio.

     —Tae hace tiempo que debió haber llegado al departamento. No responde su celular y en la fiesta nadie lo vio. ¡Tengo miedo!

Tae rápidamente lo abrazó para tratar de calmarlo un poco y eso lo agradeció demasiado porque sentía que su corazón podía escaparse de un momento a otro.

     —Tae quédate con los cachorros.

Jimin se levantó rápidamente del sofá soltándose de los brazos del pelirrojo.

     —¿A-a donde vas Mimi? No digas que...

     —Claro Tae ¿A donde más? A buscar a mi Alfa, me necesita Tae y yo lo necesito a él.

Se fue para su habitación a buscar un abrigo que lo cubriera lo suficientemente bien, un corpiño y un gorro y lentes oscuros. No debia verlo nadie, nadie debía saber lo que pasaba porque la prensa era muy amarillista y eso podía causarle problemas. 

Se arregló bien y consiguió las llaves de su auto bajo la atenta mirada de Taehyung quien mordía sus uñas ansioso.

El sonido insistente de su teléfono le hizo detenerse y correr hacia él ya que lo había dejado sobre el sofá.

Eran mensajes de texto con fotos de un número que no conocía, las descargó en su teléfono solo para ver algo tan desagradable como impactante para él.

Era Yoongi,  su Alfa.

Estaba desnudo y sobre él estaba una mujer pero a ella no se le podía ver su rostro su cabello largo y negro le tapaba bastante bien. Lo primero que su corazón sintió fue un dolor punzante, lo segundo fue una rabia inmensa y ganas de llorar que casi se le cae el celular.

     —¿Pasa algo? ¿Es él?

Jimin negó pero como sus manos temblaban Tae se animó a quitarle el teléfono.

     —¿Pero... que mierda?

Los ojos de Tae se habían agrandado y ahora miraban a Jimin con cautela y algo de pena.

     —Mimi...

     —Tae, ya regreso.

     —¿Pero a donde vas? ¿No ves que esta al parecer bien y con... otra?

Jimin miró detenidamente a Taehyung mientras se anudaba su abrigo por la cintura y apretaba sus llaves en la mano.

     —Por Dios Tae ¿Crees que eso es real? Yoongi es un gran Alfa me ama y yo lo amo y sé que me necesita que está pidiendo mi ayuda porque lo siento aquí. —Jimin señaló su pecho —Y ahora voy por él.

Taehyung asintió y le entregó su celular a Jimin.

     —Jimin, te creo y si dices que Yoongi te necesita no voy a detenerte. ¿Pero a donde vas?

Esa pregunta le hizo detenerse de inmediato a media sala. ¿A donde demonios iba?

Mordió su labio inferior con fuerza casi al punto de sacarse sangre y entonces tuvo una idea.

Tomó de nuevo su celular para hacer otra llamada y rezó para que le respondieran rápido.

     —¿Ji-jimin? ¿Apareció? Lo hemos buscado en los alrededores y llámamos a hospitales cercanos.

     —Hobi, no tengo mucho tiempo solo responde una cosa. ¿La asistente Nayeon también estaba ahí?

Un silencio incómodo prosiguió después de su pregunta.

     —Si, estaba con él antes de que no lo volviera a ver. ¿Por qué? ¿Crees que esta con ella?

Jimin entonces lo comprendió todo, no había más explicación ni mejor  evidencia.

     —Gracias Hobi Hyung. 

Cortó la llamada y ahora si, sabía a donde ir, o bueno más o menos porque no conocía la casa de esa mujer.

El timbre del apartamento lo hizo salir corriendo a  abrir, quizá era Yoongi aunque lo deseaba también lo dudaba.

Abrió con su rostro crispado y las comisuras de sus labios ligeramente temblando, su ceño se frunció aún más cuando vio a aquel muchacho afuera de su apartamento.  Lo había visto un par de veces y sabía que trabajaba para Yoongi.  Estaba ahí pálido y sudando evidentemente nervioso y asustado aparte de que parecía haber corrido.

     —J-jimin Hyung...

     —¿Te llamas Jihoon verdad? ¿Que haces aquí?

El chico nerviosamente asintió.

     —S-se donde esta Hyung.  Estaba con Hoseok Hyung cuando usted llamó   y entonces s-supe que algo no iba bien. Y-yo lo vi, lo quise detener pero no pude no tuve tuve valor de hacerlo.

El chico balbuceaba sin parar mientras sus ojos se humedecian.

     —¿Viste con quien se fue?

Estaba seguro donde estaba pero de todos modos solo quería confirmar además de averiguar donde vivía.

      —N-nayeon Noona, ella se lo llevó. No se veía nada bien a pesar de que no bebió casi nada.

     —Lo sabía, fue esa  bruja. ¿Sabes dónde vive?

Woozi asintió.

     —Bien. —Jimin le tomó por el brazo y lo arrastró con él por el pasillo hasta empujarlo en el ascensor.

Woozi no dijo nada, se sentía tan culpable por no haber dicho nada a tiempo. Cuando escuchó a Hoseok en la llamada entonces comprendió que debía ir con Jimin y decirle lo que pasaba con su Alfa.

     —L-lo lamento Jimin Hyung... si no hubiera sido tan tonto.

El castaño negó mientras le consolaba con su mano sobre su hombro.

     —Me llevaras a donde esta él y todo estará bien.

El chico asintió un poco más aliviado.

Jimin y Jihoon entraron al auto del primero y comenzó a manejar por donde Woozi le indicaba. Jimin sabia que su Alfa estaba mal.

Esas fotos se lo habían confirmado porque él creía firmemente en Min Yoongi,  su Alfa, el amor de su vida y sabía que nunca le haría algo como eso. Ellos se amaban y no había poder en la tierra que dijera con contrario.  Su lazo con él era irrompible.

     —Ten llama a la policía. —Pidió y Jihoon tomó sin chistar el celular y marcó.

Al llegar a un complejo residencial Jimin tenía que registrarse pero eso levantaría sospechas así que fue Jihoon quien se pasó al asiento del piloto y entregó su documentación. El guardián le dejo pasar y el joven  manejó por unas cuadras más y finalmente se estacionó frente a una casa ya bastante conocida para él.

Jimin bajó rápidamente y Jihoon a su lado.

     —Toca. —Pidió el castaño y Woozi se adelanto para llamar al timbre.

Después de un corto tiempo la puerta se abrió y por ella salió Nayeon,  llevaba una bata blanca puesta y su cabello recogido en un moño. Para ser tan tarde parecía que no había dormido aún.

     —¿Woozi? ¿Qué rayos haces aquí a esta hora?

     —Nayeon, s-solo vine a preguntar por  Hyung... Yoongi Hyung. Lo están buscando y debía venir aquí porque se que él se vino con usted.

     —¿Estás loco? El  no está aquí...

     —P-pero usted...

Woozi no fue capaz de terminar la oración porque Jimin salió detrás de la puerta asustando por completo a Nayeon.

Lo que hizo a continuación fue empujarla hacia adentro con fuerza y entrar detrás de ella. Woozi también lo hizo.

     —¿En donde está? —Bramó el castaño.

Nayeon parecía bastante nerviosa y asustada. Negó repetidamente mientras balbuceaba sin parar.

     —N-no está aquí.

     —¿Me crees estúpido? La estúpida aquí eres tú,  el aroma de mi Alfa esta está aquí, leve pero se siente y sobre ti también. Me has enviado fotos, ¿con que fin? Eso no va a conseguir que Yoongi y yo dejemos de amarnos.

Volvió a empujarla y ahora se dirigió hasta el pasillo que tenía enfrente por ser el  más obvio, además el olor de Yoongi aunque así de débil podia sentirlo y lo llamaba.

La primera puerta que abrió esa era, lo encontró ahí sobre la cama y ya estaba vestido o al menos parecía que Nayeon había intentado hacerlo ya que tenía sus pantalones pero su camisa estaba a medio poner.

Jimin se acercó rápido y lo vio, tenía la piel pálida y sus labios algo secos e iban tornándose grisáceos.

     —¿Qué le hiciste? ¿QUE MIERDA LE HICISTE?

La voz alterada de Jimin logró asustar a los dos Omegas detrás de él, Nayeon con sus ojos bien abiertos y Woozi casi llorando.

     —Te voy a matar estúpida.

Jimin trató de hacer a Yoongi reaccionar pero éste parecía simplemente no poder hacerlo. Estaba tan sumido en un sueño profundo por la sobredosis que tenía.

Las manos de Jimin temblaron cuando sacó su celular de nuevo y llamó a la ambulancia. 

     —Woozi, avísale a Hoseok que ya lo encontramos.

El menor asintió mientras que Nayeon salía rápidamente de la habitación.

     —Yoon... Yoongi, cariño ¿Me oyes?  Resiste por favor. Cariño estoy aquí, vine por ti, vamos a casa... ¿Si? Por favor. 

El omega rogaba mientras sostenía la cabeza de Yoongi entre sus brazos y se  mecía lentamente, sus lágrimas comenzaron a salir. Tenía miedo de perderlo. No podía ni imaginarlo si quiera. 

     —Amor, a-amor y-yo...

No pudo más, su voz se le quedó atrapada entre en jadeo y un suspiro doloroso en su pecho.

¿Por qué no le dijo que él también lo amaba cuando se despidió de él en casa?

Debió decirle que también lo amaba, que era el amor de su vida que iba a amarlo siempre que no importaba el tiempo y el espacio que siempre lo amaría, ahora simplemente tenía miedo de no poder decirlo una vez más y que Yoongi no pudiera escucharlo.

     —¡Dios, Y-yoongi, reacciona por favor! ¡Tenemos hijos Joder! ¡Vamos despierta!

Jimin lo zarandeó, sabía que con ello no iba a despertar pero quería intentarlo sus esperanzas le gritaban que lo hiciera, que hiciera todo lo que estuviera a su alcance.

Y entonces lloro más fuerte cuando la conexión con su Alfa se cortó.

     —N-no, no Yoongi por favor ¡No!

...

     Y me rendiría por siempre para tocarte
Porque sé que me sientes de alguna manera
Eres lo más cercano que estaré del paraíso
Y no me quiero ir a casa ahora, no sin ti...

Y todo lo que puedo saborear es este momento
Y todo lo que puedo respirar es tu vida
Porque tarde o temprano terminará
Simplemente no quiero extrañarte esta noche

Esta vez todo lo que quiero es a ti
No hay nadie más
¿Quién puede ocupar tu lugar?
Esta vez me quemas con tus ojos
Ves más allá de todas las cosas
Llévatelo todo
Lo he visto todo
Y nunca es suficiente
Sigues dejándome,  necesitándote

Llévame lejos
Llévame lejos
No tengo nada que decir
Sólo llévame lejos

Trato de llegar a ti
Pero aún así me siento tan perdido
No sé qué más puedo hacer
Lo he visto todo
Y nunca es suficiente
Sigues dejándome, necesitándote

Llévame lejos
Llévame lejos
No tengo nada que decir
Sólo llévame lejos

No te rindas conmigo todavía
No olvides quién soy
Sé que aún no he llegado
Pero no dejes que
Yo me quede aquí solo

Esta vez todo lo que quiero es a ti
No hay nadie más
¿Quién puede ocupar tu lugar?
He visto lo suficiente y nunca es suficiente
Sigues dejándome,  necesitándote

Llévame lejos"







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