Yoongi lo tomó con rapidez por la cintura para elevarlo en el aire y Jimin no perdió tiempo enredandose en las caderas del pelinegro mientras no paraban de devorarse la boca con hambre insaciable.

Los labios calientes de Yoongi bajaron por toda la barbilla y demorandose en su cuello dejando mordidas esporádicas por toda esa zona que al omega le hacía jadear cerrando sus ojos. Hacía su cabeza hacia atrás totalmente sumiso listo para que su Alfa tomara el control de él.  Su lobo gruñia ansioso, deseoso y desesperado porque el Alfa lo dominara. 

     —Mmm omega me tienes mal, muy mal. —Habló el Alfa sobre su cuello, hundido ahí empapandose del aroma dulce de Jimin.

Eso lo embriagaba mejor que cualquier licor, amaba sentirse atraído por ese aroma que lo volvía un desequilibrado, un desquiciado totalmente por su omega.

El cuerpo de Jimin fue llevado fácilmente hasta la cama donde fue depositado con suavidad y calma. Desde arriba en su posición Yoongi se dedicó a admirar a su amado.

Sonrió de lado, era suyo completa y totalmente suyo, benditamente  suyo.

     —Yoongi.

Jimin Estaba ansioso porque la mirada dilatada de su Alfa lo recorría sin pudor alguno y su lobo aullaba incesante llamándolo queriéndolo para él, entonces Yoongi volvió a acercarse y unir sus labios, sus dos brazos se posaron a cada lado de Jimin sobre la cama sosteniendo su propio peso y los chasquidos de sus bocas hacían eco en la habitación.

El menor subió sus manos hasta el cabello largo de Yoongi donde enredó sus dedos y jaló suavemente y después bajaron por todo el cuello  el pecho y torso del Alfa acariciando  toda el área hasta llegar a la orilla de la camisa donde delineó despacio y luego la subió para ayudarle  a quitarla.

Cuando lo hubo logrado continuó con las caricias sobre la piel pálida del pelinegro.

     —¿No te parece que estás en desventaja? —Yoongi Alzó una ceja haciendo reír a su Omega.

Sus mejillas se tiñeron de rojo cuando  las manos del mayor subieron su camisa, Jimin había perdido la timidez al estar con su Alfa pero aún así le hacía sentirse vulnerable ante él y su toque suave por su piel.

     —Eres hermoso Jiminie.  —Susurró Yoongi acercándose nuevamente besando sus labios y mordiendo un poco duro haciéndole jadear.

Se separó de él, los labios de Jimin estaban hinchados y rojos ya por los besos y las mordidas que Yoongi le dejaba.

Entonces su cuerpo se tensó y tembló de pies a cabeza arrancado una sonrisa de Yoongi cuando la lengua mojada de él le bailó sobre su cuello, mordió el hueso de su clavícula deteniéndose en el lunar que el omega tenía ahí el cual era una tentación y bajó por su pecho desnudo para él.

     —¿Qué pasa? ¿Te hago sentir cosas?

Jimin apretó sus labios contra sus dientes a la vez que asentía porque Yoongi ahora besaba uno de sus pezones y soltó un grito ahogado cuando involucro sus dientes, mordiendo el botoncito y jugando con él.

Yoongi solamente sonreía ante el manojo de nervios que su omega era debajo de él. Y es que Jimin estaba tan excitado que había comenzado a restregarse contra las caderas del Alfa, necesitaba no... le urgía ese contacto. Rozarse contra su Alfa le hacía jadear de satisfacción.

     —Con calma bebé. —Susurró Yoongi soltando un pezon y atrapando el otro para darle también atención.

     —Mmm Yoongi. 

El mayor mordía y succionaba su rosado botón con devoción y la otra mano se enterraba duro en sus caderas. La presión en la parte baja de ambos era notoria, cada uno tenía su entrepierna dura y Jimin escurría su lubricante entre sus piernas.

Entonces Yoongi atendiendo la necesidad de Jimin comenzó a moverse sobre el, a frotarse sobre la ropa haciendo que sus erecciones chocaran y a pesar de que aún tenían el pantalón puesto ambos  podía sentirse tan intenso.

Jimin sentía las cosquillas invadir su vientre, lo quería, lo ansiaba. Movía sus caderas al encuentro de las de Yoongi provocado un encuentro rudo y Yoongi que no dejaba de besarle por el cuello no ayudaba mucho a calmar esa necesidad al contrario el calor iba en aumento.

En un momento el mayor comenzó a dar falsas embestidas sobre la entrada húmeda de Jimin y este jadeó deseándo desaparecer la ropa por arte de magia, pero no quería detenerlo, ese juego previo lo estaba volviendo loco en definitiva y se sentía tan jodidamente caliente que no le importaba demorarse más.

Yoongi le miraba ahora a los ojos con una sonrisa ladeada, Jimin amaba esa sonrisa llena de deseo e impregnada de lujuria, solo hacia falta ver los ojos del Alfa para darse cuenta que estaba casi tomando el control del humano. 

     —¿Te gusta omega? —Preguntó con su voz profunda que le erizo la piel más de lo que ya estaba.

     —¡Dios,  si Alfa!

Eso fue suficiente, una dura estocada sobre la ropa y Jimin ya se había corrido soltando un jadeo ahogado entre el cuello de su Alfa.

Pero Yoongi aún no estaba listo para descansar, se incorporó rápidamente sobre él y con la  rapidez de un rayo le despojo de todo lo restante dejandole completamente  desnudo a su merced y no conforme con eso le dió la vuelta sobre el colchón. 

     —En cuatro bebé. —Le Ordenó y Jimin no iba a hacerle esperar.

Se colocó como Yoongi le estaba pidiendo alzando gustoso su gran trasero para su Alfa quién gruñó satisfecho ante la maravillosa vista.

Primero un azote seguido de una lamida sobre donde había quedado rojo y entonces Jimin sintió que su miembro volvía a ponerse duro, luego soltó un jadeo fuerte cuando Yoongi pasó su índice sobre la entrada de su esfinter acariciando sobre la piel sensible y mojada de lubricante.

     —Pero mira nada más bebé como estás para mi.

Jimin sonrió tímidamente y sentía  sus mejillas volver a encenderse y hundió su cabeza en la almohada para ahogar ahí sus jadeos vergonzosos porque el Alfa ni si quiera lo estaba tocando.

Entonces sintió la respiración caliente de Yoongi ahí abajo sobre su trasero, las manos del Alfa tomaban sus nalgas separandolas para darle mejor acceso y por fin hundió su lengua en la línea que dividía las piernas hasta llegar a la entrada mojada, llevando a su paso todo el lubricante del omega.

     —¡Ahh Dios... maldición Y-yoongi!

Jimin apretó fuerte sus ojos y tuvo que agarrar fuerte también las sábanas debajo de él cuando sintió aquello.

El Alfa volvió a repetirlo una vez más, pasando toda su lengua a plenitud sobre su entrada, sorbiendo todo su elixir y entonces su lengua se detuvo en el esfinter donde comenzó a hundirla lentamente.

Los pantalones de Yoongi estaban tremendamente apretados y mojados con su propio líquido porque tener a ese omega gimiendo su nombre lo tenía dañado y pérfido en ese momento.  Quería enterrase en él tan duro  y tan mal, pero quería que su omega disfrutara tanto como él, así  que la demora valdría la pena.

La estrechez de Jimin envolvía por completo su lengua mientras el lo follaba con ella, y el castaño no paraba de jadear desesperado, el pelinegro no paraba de mover su lengua dentro de él mientras apretaba duro sus dos nalgas,  enterrando sus dedos en la piel y deparandolas.

     —¡Mmm Yoongi! V-voy a c-correrme otra vez. —Suspiró con su respiración agitada y su corazón a punto de explotar.

Yoongi sonrió pero no se lo iba aponer fácil.

     —No se te ocurra. —Le Avisó o más bien Ordenó.

Jimin estaba a punto del colapso, sus piernas comenzaban a temblar. Giró levemente su cuerpo hacia un lado y la cabeza también para ver al Alfa quién sonreía ladino mientras seguía torturandole.

Apretó sus ojos un poco mareado pues quería correrse, lo necesitaba su miembro dolía como la mierda.

Yoongi supo que Jimin no iba a aguantar así que llevó una mano adelante envolviendo el falo del menor y obstruyendo el orificio para que no se corriera.

Jimin gimoteó y Chilló sobre la cama de la desesperación y frustración, lo estaba disfrutando pero también estaba muriendo. Pero esa lengua parecía que tenía vida propia le hacia querer más y más.

     —¡Mierda... Y-yoon!

Entonces el Alfa se detuvo de nuevo dejando a Jimin tomar aliento, no tardó entonces en bajarse el pantalón y el bóxer y tirarlos por el suelo, su miembro grande y duro palpitaba chorreando líquido pre seminal.

Yoongi lo tomó en su mano y con él comenzó a rozar la entrada del omega de nuevo, dando otra vez falsas estocadas.

     —Joder...

Sonrió al ver la desesperación de su omega pero no se detuvo ahora de su labor de rozar su duro miembro entre el Exquisito culo del omega. Dios, es que era jodidamente precioso y lo mejor de todo es que era solo suyo.

     —Oh bebé, eres tan hermoso.

Jimin solamente sintió como era de nuevo alzado por su Alfa y ahora estaba con la espalda pegada al colchón mirando de frente directamente a Yoongi quien tenía su grueso falo en una mano bombeandolo con fuerza. No pudo evitar tragar saliva duro.

Lo deseaba ya.

     —Abre tus hermosas piernas para tu Alfa cariño. —Susurró con voz áspera y rasposa.

Un escalofrío le recorrió desde la espina dorsal hasta la punta de los pies.

     —Si Alfa.

Jimin asintió obedeciendo, vio lentamente como Yoongi se acercaba nuevamente y jugaba sus dedos entra sus piernas llenadolos de lubricante y rozaba intencionalmente su entrada. Primero deslizó un dedo, lo hundió tan profundo que Jimin volvió a chillar apretando sus dientes.

Los dígitos de Yoongi largos y expertos se movían dentro de él con rapidez. El Alfa arqueó dos dedos  sólo un poco hacia un lado y cuando Jimin Gritó alto sonrió, ahí estaba su punto dulce.

     —Mmm Yoonie, así...

     —¿Te gusta, bebé?

     —Ujummm

El Alfa metió un tercer dedo, con ese sería suficiente para poder enterrarse dentro de él y Jimin se deshacia en jadeos y gemidos bajo su toque. Amaba verle así hermoso hecho un desastre, con su cabello por todos lados, sus ojos llorosos y labios hinchados suplicando por más.

No lo pudo evitar y consiguió su segundo orgasmo solamente con los dedos del Alfa lo que lo dejó totalmente temblando de pies a cabeza mientras su esencia manchaba todo su abdomen.

Yoongi sonrió complacido.

Entonces estaba listo para por fin poseer a su Omega.

Se acercó a su cuello para inhalar profundamente su aroma tan dulce y morderle el cuello, pasó su lengua por todo su rostro y cuello dejandole marcas. No importaba si las veían después.

Entonces sin previo aviso se metió de lleno en el interior de Jimin quien lo succionó con gusto y apretó deliciosamente.

     —¡Yoongi!

El Alfa comenzó a moverse de manera lenta acostumbrandose a lo apretado de ahí, apretaba también sus dientes para no perder el control y moverse duro, no lo quería lastimar. 

Después de un par de movimientos lentos supo que la respiración de Jimin se había regulado entonces ya podía moverse con más seguridad,  se elevó flexionando una pierna sobre la cama para mayor penetración  y comenzó con movimientos rápidos y constantes sosteniendo la cintura del omega.

     —¿Así te gusta bebé?

     —¡Mmhg si Yoongi!

Su miembro estaba duro por tercera vez palpitando por correse de nuevo, desesperado llevó una mano ahí para tocarse pero fue apartada por el Alfa.

     —Aguanta bebé  s-solo un poco más.

Yoongi se enterraba en él con dureza  y Jimin creía ver doble o triple, sus jadeos sonaban por toda la habitación al igual que el rechinar de la cama contra la pared y el olor mezclado de ambos lo envolvía más en una turbulencia desquiciada de placer.

Perdido,  estaba totalmente perdido  arremetiendo duro a su Omega, deseaba llenarle de su caliente semen su interior.

     —¡Mierda Si, si Yoongi si, más... duro!

El Alfa complaciente se movía sin control, tocando duramente sobre su próstata que lloraba por ser maltratada  por el duro falo que entraba y salía con precisión. 

     —Mm Jiminie... tan rico.

Yoongi bajó su torso por completo sobre el cuerpo de Jimin y enterró su nariz sobre su cuello  amaba ahí  era su lugar favorito y el omega Aprovechó eso para aferrarse a los cabellos negros del Alfa.

Yoongi daba duro contra su próstata que ahora comenzaba a sentir un calambre en su abdomen.

Entonces finalmente se corrió en un gemido que sonó fuerte mientras su cuerpo temblaba sin parar y el Alfa también se corría dentro de él formando de inmediato el nido y enterrando de nuevo sus colmillos en la fina piel del cuello de Jimin quien ladeo sumiso ante su Alfa.

Su lobo y el de Yoongi aullaron afianzando su lazo otra vez  que cada día era más y más fuerte. El Alfa y el omega eran uno solo.

Jimin con su respiración acelerada solo alcanzo a decirle a su Alfa cuanto le amaba antes de caer totalmente rendido y Yoongi sobre él.

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Omg omg ¿Vieron el Teaser? ¿Lo vieron?
Dios desfallecí...

Que ganas de ser ese piso 🌚

Vieron la sangre? Creo que mató al  Rey...