Algunas primaveras atrás -no muchas- , nació una bella flor, a quien con el tiempo conoceríamos como Ann Rodd.
Las hadas le concedieron muchos dones y talentos; pero el destino en su gracia se digno darle mucho más que eso.
Futura diseñadora, poseedora de creatividad e inspiración, escritora conocida y apreciada por muchos hoy.
Su desbordante ternura, le hacen acreedora de mucho cariño; pues son muchos los que ahora se pueden llamar sus amigos.
Apreciada y querida, respetada, además; aunque tiene una Bambam que malcría y que mima por igual.
Faltarían más palabras para describirla justamente, pero mucho más que esto, hay que reconocer que a ella se le querrá siempre.

Hoy en tu día, no te traigo Biebers o Jonas o Stylinsons; solo te ofrezco mi cariño con este gesto y mi amistad.

Que la vida siga bendiciéndote y dándote tanta dicha y felicidad, como la que recibirás en este día y que perduren por cien años más.

Mi querida Ann, dejando ya las medias rimas... espero que hoy al iniciar este nuevo año de vida, te tomes unos minutos para mirar atrás, reflexionar sobre aquello que vas dejando con el tiempo y rescatando de todo ello lo bueno para repotenciarlo y lo malo para mejorarlo. Que des aquel paso que da inicio a este nuevo trayecto con ansías y esperanza renovada y siempre mirando al frente, orgullosa de quien eres y por sobre todas las cosas, teniendo presente que eres una flor bella, particular y especial entre millones; y que por ello tu futuro te deparará muchas bellas sorpresas.

Feliz cumpleaños Ann y que vengan muchos más!!

18 de noviembre del 2015