Jimin se encontraba con toda su ropa esparcida en cada rincón de su reducida habitación, mientras hacia una pequeña pataleta, ¡Es que no tenía idea de que ponerse!, no se le ocurrió preguntarle a Jungkook que tipo de cita tendrían, y ahora no podía decidirse por cual ropa usar, y en realidad tampoco tenía muchas opciones para escoger, su sueldo apenas y le alcanzaba para sobrevivir, y no podía darse el lujo de comprarse algo.

Lo peor era que no tenía el número de teléfono de Jungkook para llamarle y preguntar a donde lo llevaría, el castaño era un exitoso doctor y Jimin dudaba mucho que fueran a comer Kimchi en el puesto de la esquina.

Inhaló llenando sus pulmones de aire e inflando sus mejillas, debía calmarse y empezar a escoger de nuevo, después de una hora más se había decidido por lo que creía que podía ser el oufit indicado, constaba de una camisa formal azul mangas largas, un pantalón negro que ajustaba perfectamente a sus piernas y zapatos formales, sumándole un abrigo negro por si la noche era fría.

Por fin aliviado por su elección se fue directo al baño, mirándose en su pequeño espejo, esa misma mañana con la ayuda de Baek le había dicho adiós a sus mechones de cabello azul y ahora lo tenía completamente negro, se veía increíble, Jimin le sonrió a su reflejo, era la primera vez en mucho tiempo que se sentía bien tanto fisca como mentalmente, dejar de preocuparse por lo que pensaría su familia de él, lo hacía sentir libre y seguro de sí mismo.

Se dedicó a asearse mientras los nervios y las expectativas lo llenaban, la última cita que tuvo había fue hace mucho pero mucho tiempo, y no podía evitar estar un poco demasiado ansioso, una vez listo revisó cada detalle de su ropa y miró el reloj en forma de pez de su pared, faltaban cinco minutos.

Jugó un poco con sus deditos y se mordió el labio inferior cuando se dio cuenta que eran las 7:05 ¡Solo son 5 minutos de retraso! No exageres, se dijo.

Justo después de eso unos golpes en la puerta lo hicieron sonreír, se apresuró a abrir la puerta, encontrándose con la radiante y coqueta sonrisa del atractivo doctor dueño de sus pensamientos, Jungkook se veía increíblemente bien, estaba vestido formal con un traje pero sin corbata, y en sus manos traía un hermoso ramo de rosas.

El médico le dio una mirada apreciativa -Te ves increíble Jimin-

-Tu tampoco te ves mal- le respondió Jimin sin poder quitar la sonrisa de su rostro.

Jungkook le tendió el ramo de rosas.

- ¿Para mí? - Preguntó Jimin sosteniéndolas eran realmente preciosas.

-No, en realidad se las traje al portero de tu edificio, pero está dormido- Dijo Jungkook con una mueca.

Jimin soltó una carcajada -El señor Kang sí que hubiera estado sorprendido -el pelinegro miró a Jungkook a través de sus pestañas - Gracias Jungkook están preciosas- susurró haciéndolo pasar para buscar un jarrón con agua para sus rosas.

Jimin tenía el pulso acelerado por la emoción, ¡Era la primera vez que alguien le daba un ramo de rosas tan grande y hermoso!, sentía un cosquilleo recorrer todo su cuerpo, se sentía como un colegial enamorado que tendría al fin su primera cita.

-No tienes que agradecer Jimin, es nuestra primera cita tiene que ser perfecta, como tú- dijo Jungkook atrayendo a Jimin hacia el - Me gusta tu cabello-

Jimin se puso de puntitas y se atrevió a darle un beso en los labios al doctor -A mí me gustas tú-

Jungkook suspiró y negó con la cabeza ante la tentadora imagen frente a él, -Creo que es hora de irnos-

Jimin asintió y tomó su abrigo, bajaron las escaleras y salieron del edificio, Jungkook abrió la puerta de su Mercedes para Jimin y subió al asiento copiloto, el trayecto hasta el lugar de su cita fue divertido, volvieron a discutir por quien debía elegir la música en la radio.

Jimin no tenía idea a donde se dirigían y Jungkook se negaba a decirle nada, hasta que el doctor se estacionó frente a un restaurante, Jimin le dio una mirada llena de confusión, este lugar aún no se inauguraba- ¿Qué hacemos aquí? -

Jungkook le sonrió -Vamos a comer- dijo bajándose del auto y abriéndole la puerta.

-Pero este lugar ni siquiera ha abierto al público-

-No, pero está abierto esta noche para nosotros- Respondió guiñándole un ojo y tendiéndole el brazo.

Jimin abrió los ojos asombrado y enganchó su brazo al del doctor, ese lugar era increíblemente hermoso, decorado de forma elegante y preciosa, siguieron hasta un salón donde una mesa para dos estaba preparada y unos músicos tocaban en vivo para ellos.

- ¿Cómo hiciste todo esto? - Preguntó Jimin aun sin poder creerlo, ¿Cómo diablos Jungkook había arreglado todo en un solo día?

-Te lo he dicho varias veces, soy bueno en muchas cosas- Respondió Jungkook rodando la silla para que Jimin se acomodara.

Jimin negó con la cabeza y sonrió amplio un camarero llegó con una botella de vino entre miradas picaras empezaron su velada, era tan irónico que estuvieran así después de como habían empezado las cosas.

La comida estuvo deliciosa y hablaron un poco de como volverían a sus rutinas, Jungkook tenía que ir al hospital a primera hora en la mañana, y Jimin tenía una "Clase de baile en el parque" para después ir al restaurante en el que trabajaba para su turno nocturnos.

-Sé que suena un poco complicado, lidiar con los horarios, hay días en los que no salgo del hospital, turnos dobles y tal vez ahora pienses que eso apesta - comenzó a decir Jungkook

Jimin tomó un poco de su vino y le sonrió - ¿Me estas queriendo decir que tal vez no tengamos mucho tiempo para vernos, por tu trabajo como médico? -

Jungkook asintió - Mi ritmo de vida no es el más fácil, pero me gustaría intentarlo Jimin, ver hasta dónde podemos llegar, si tu estas dispuesto-

Jimin se mordió el labio inferior - No lo dudes Jungkook, estoy muy dispuesto, tampoco tengo el estilo de vida más estable del mundo, pero creo que si pudimos sacar algo bueno de todo lo que hemos pasado, es precisamente esto, y si te soy sincero me gustaste desde que te vi entrar a esa cafetería -

Jungkook arqueo una ceja - ¿Y por eso decidiste secuestrarme? -

Jimin rio con descaro -SIP, y lo haría de nuevo - confesó.

-Yo me dejaría secuestrar, con mucho gusto me ofrecería como voluntario - respondió Jungkook, tomando la mano de Jimin entre las suyas -Ahora, ¿me concede esta pieza señor Park? -

Jimin asintió feliz y se apartaron de la mesa, mientras la música fluía ellos juntos llevaban el ritmo, Jungkook con las manos en la cintura de Jimin, y el pelinegro le rodeaba el cuello con los brazos.

Acercaron sonriéndose de manera cómplice sin dejar de mirarse a los ojos, acercaron sus labios de forma lenta, un beso suave y delicado porque tenían público, cuando se separaron, Jimin escondió su rostro en el cuello de Jungkook.

Bailaron todo tipo de ritmo que los músicos tocaron, rieron hasta más no poder y disfrutaron cada segundo de la compañía del otro.

Si. Definitivamente la mejor primera cita que había tenido.

Cuando estuvieron de regreso en el auto ya no podían seguir ignorando la tensión que existía entre ellos, así que Jungkook tomó el rostro de Jimin entre sus manos y lo besó profundo a su antojo.

Jimin sonrió en medio del beso al darse cuenta que al menos no era el único con ganas de más.

- ¿Quieres que te lleve a conocer mi departamento?, así sabrás donde vivo- susurró Jungkook con la respiración pesada.

-Si me gustaría eso, mucho - dijo Jimin con voz picara.

Jungkook no dudó un segundo en pisar el acelerador.

-Lindo edificio - Dijo Jimin una vez que llegaron.

-Buenas noches, Doctor Jeon- Lo saludó el portero.

- Tú tienes una versión más joven del señor Kang- susurró Jimin al ver al portero.

Jungkook se rio bajito al ver el rostro confundido del hombre -Buenas noches, Daniel- Se despidió guiando a Jimin al ascensor poniendo una mano en la espalda baja del pelinegro.

Jimin se mordió el labio inferior cuando Jungkook marcó el número del último piso - Pensé que tenías ganas de besarme en un ascensor- dijo suspirando.

Jungkook sonrió pícaro -Y las tengo, pero aquí hay cámaras de seguridad -Dijo mirando disimuladamente - Al menos que quieras darle un espectáculo a Daniel-

Jimin se sonrojó por completo y soltó una risita, cuando salieron del ascensor Jungkook marco la clave para abrir la puerta, Jimin arqueo una ceja, el departamento de Jungkook era jodidamente espacioso y elegante - Eres todo un snob - Dijo Jimin burlándose de Jungkook.

-Pero de los buenos - Contesto Jungkook riendo - ¿Una copa de vino? -

- ¿Quiere embriagarme doctor Jeon? -

-Tal vez- dijo Jungkook sacando una botella de vino y dos copas

Jimin sonrió mirando todo a su alrededor, Jungkook tenía muchas fotos en repisas, algunas con quienes parecían ser su familia, una donde tenía el brazo alrededor de un chico bajo y de piel pálida, otra donde tenía estaba abrazado a un hermosa chica.

-Ella es mi hermana, Tzuyu- Le dijo Jungkook ofreciéndole la bebida.

-Es muy bella- contestó Jimin.

- La belleza está en nuestros genes-

Jimin rio negando con la cabeza y dio otro a su copa de vino, caminó hasta la barra de la cocina seguido por Jungkook, dejó la copa allí -Creo que ya cumplimos con el requisito de la primera cita- dijo lamiéndose los labios.

-Definitivamente - Jungkook tiró de la cintura de Jimin acercando sus cuerpos, ambos estaban ansiosos pero intentaban controlar sus cuerpo, pero cuando sus labios se tocaron todo se fue al demonio.

-Realmente necesito que me examine doctor- dijo sonriendo picará tirando del labio inferior de Jungkook con sus dientes.

-Le haré una revisión exhaustiva, señor Park- dijo Jungkook levantando a Jimin y sentándolo en la barra de la cocina, haciendo que la copa de vidrio callera rota del otro lado pero poco les importó.

Jimin abrió las piernas y Jungkook se metió entre ellas de inmediato, besándose de forma desenfrenada, la tensión sexual que había existido en ellos desde que se conocieron al fin estaba llegando a la cúspide.

Jungkook tiró de la camisa de Jimin para sacarla del pantalón y se deshizo de ella en un santiamén, cayendo en algún lado, estaba ansioso por volver el hermoso cuerpo desnudo de Jimin en todo su esplendor.

Jimin hizo que la chaqueta de Jungkook desapareciera pero estaba teniendo problemas con los botones de la camisa así que tiró haciéndolos esparcirse por todos lados dejando ver el sexy torso de Jungkook desnudo -Eres un esnob puedes comprarte otra- dijo terminando de quitarle la camisa.

Jungkook se rio de forma ronca y volvió sus labios para un nuevo y profundo beso.

Jimin pasó sus manos por el pecho del médico sintiendo los duros músculos -Si que valen la pena esos 10 kilómetros cada mañana-

-Tengo mucha resistencia - Cantó Jungkook mirándolo directamente a los ojos con la pupilas dilatadas.

-Demuéstramelo - dijo Jimin envolviendo sus piernas en la cintura del médico.

Jungkook llevó sus manos a los glúteos de Jimin levantándolo de la barra, camino a tropezones sin dejar de besarse hasta su habitación, juntos cayeron en la cama sintiendo sus cuerpos en llamas, los pantalones eran demasiado estorbo para sus doloridas erecciones, así que desaparecieron de inmediato.

Jungkook acarició con su dedos los duros pezones de Jimin mientras besaba el mentón del pelinegro bajando hasta su cuello, los gemidos de Jimin eran tan deliciosos y eróticos que solo deseaba enterrarse dentro de él.

Jimin sentía como si cuerpo se estuviera quemando por donde quiera que Jungkook lo besaba, las manos del médico jugueteaban con sus pezones haciéndole arquear la espalda y rosar su dolorido miembro con el muy duro de Jungkook cubierto apenas por la tela del bóxer.

-Jungkook amo sentir tus manos en cada parte de mí, pero ahora lo que más deseo en sentirte dentro de mi - Pidió con voz agitada y con descaró.

Jungkook sonrió llevando su boca a uno de los pezones de Jimin viéndolo escuchándolo jadear -Pero yo quiero ser un buen doctor y hacerte una minuciosa revisión - contestó con voz ronca.

Jimin jadeo su cuerpo estremeciéndose cuando cada poro reacciono a los besos de Jungkook sobre su estómago y la juguetona lengua del doctor en su ombligo casi lo hizo correrse, se mordió los labios cuando Jungkook llego a la cinturilla de su bóxer y tiró de ellos con los dientes.

- ¡Jungkook, por favor! - Jadeó.

-No desesperes bebé, necesito prepararte-

Jungkook se alejó un poco de la cama y sacó de una gaveta un tubo de lubricante y un par de condones que puso en la cama y se quitó el bóxer ente la hambrienta mirada de Jimin.

El pelinegro se lamio los labios viendo lo bien dotado que estaba el doctor y una coqueta sonrisa se formó en su rostro, extendió sus piernas como una deliciosa y tentadora invitación, Jungkook volvió la cama en segundos sus cuerpos estaban juntos de nuevo.

Sintiéndose piel contra piel, gimiendo y jadeando Jimin disfruto de la preparación de los dedos de Jungkook en su interior, pero fue increíblemente maravilloso cuando, Jungkook se introdujo dentro de él, lento pero firme.

Llenando a Jimin por completo haciéndolo arquearse y gemir de forma necesitada, el primer empuje lo hizo tocar el cielo, sus cuerpos moviéndose al mismo ritmo, necesitándose, con cada embestida llegando al punto exacto.

Jimin apretó los dedos en las sabanas -Oh sí, no pares bebé- suplicó

Para Jungkook no existía una vista más perfecta que el rostro lleno de deseo y lujuria de Jimin suplicándole por más, tomó los labios de Jimin entre los suyos, haciéndose el amor en todas las formas posibles.

Los dedos de Jimin se clavaron en el cuello de Jungkook tirándolo más cerca, mientras gemía por mas, disfrutando de tanto placer como jamás lo había sentido, enredados el uno con el otro sus cuerpos sudando y cada estocada en su interior llevándolo a la gloria, se corrió con un grito de placer que retumbo en toda la habitación y posiblemente en todo departamento.

Jungkook si gimió ronco en su oído mientras era apretado por las resbaladizas paredes anales de Jimin llegando al clímax de su orgasmo, ambos sufriendo los últimos espasmos, por lo que acababan de hacer.

Jimin miró a Jungkook con una sonrisa cansada y tomo el rostro del doctor entre sus manos para besarlo profundamente, - Sí que eres bueno en esto- susurró.

Jungkook sonrió mordiéndole el labio inferior, con una mano aparto los mechones de cabello que Jimin tenía pegado a la frente - Te ves realmente hermoso mientras te corres-

Jimin soltó una risa picara aprensando el miembro de Jungkook aun en su interior, Jungkook gimió de manera ronca y se retiró lentamente quitándose el condón, le dejó un fugas beso en los labios a Jimin antes de levantarse e ir al baño para buscar unas toallas y limpiar un poco a Jimin.

-Que sexy trasero tiene doctor- Jimin le guiñó un ojo.

-El tuyo lo es más - respondió Jungkook agarrándole el trasero a Jimin descaradamente.

Jimin sonrió y miró la hora en el reloj de la mesita de noche de Jungkook -Creo que debería irme- dijo lamiéndose los labios.

-Claro que no, ya es muy tarde y la zona donde vives no es la más segura de la ciudad, quédate por favor- dijo Jungkook dejando reiterados besos en los rojos labios de Jimin.

- ¿Harás panqueques en la mañana? - Preguntó Jimin arqueando una ceja.

-No estoy seguro de los panqueques, tengo que ir al trabajo a primera hora - suspiró Jungkook.

Jimin hizo un puchero - Entonces compénsame por la falta de panqueques para el desayuno- exigió.

- ¿Cómo? - Preguntó Jungkook curioso.

Jimin fue muy rápido y en menos de un minuto tenia a Jungkook con la espalda en el colchón y sentado a horcajadas sobre el - Otra ronda de sexo, podría ser-

Jungkook sonrió amplio acariciando los muslos de Jimin -Eres un descarado-

-Y tu un presumido y yo debo aguantarte - Dijo Jimin con una risilla traviesa acercando sus labios a los de Jungkook.

El castaño lo besó con pasión a un delicioso ritmo, a Jungkook realmente le estaba encantando este Jimin descarado.

Holis bebés, cap un poco largo, espero que les haya gustado mucho, y que también les esté gustando como es Jimin cuando está lejos de la presión de su familia.

Les amo nos leemos pronto.