Capítulo 13

—¿Escuchaste mi conversación con DaHyun?— preguntó Hyun Sik.

—No era mi intención, pero lo hice. Y no te preocupes, no quiero inmiscuirme en tu matrimonio, solo quiero saber si en verdad te interesa Jimin— dijo Jungkook, serio.

—No, Jungkook, no estoy interesado en Jimin de forma romántica ni en ningún sentido sexual. Si eso es lo que quieres saber, soy heterosexual— contestó Hyun Sik, mirando los ojos de Jungkook con seguridad.

Jungkook arqueó una ceja, dudoso.

—¿Entonces por qué DaHyun piensa que llevas años enamorado de Jimin?—

—¿Podemos hablar en otro lugar?— preguntó Hyun Sik, mirando hacia la sala. No quería que nadie escuchara su conversación.

—Claro, ya tengo mis ingredientes para el desayuno de Jimin— respondió Jungkook.

Hyun Sik le hizo señas hacia la puerta que daba al jardín trasero. Jungkook lo siguió; caminaron unos metros alejándose de la casa, mirando a los árboles que daban inicio al frondoso bosque.

Hyun Sik se aclaró la garganta—Yo iba a la misma universidad que Jae Hyun y conocí a Jimin cuando él solo tenía 14 años. Siempre lo vi como el hermanito menor de mi amigo, aunque Jimin era diferente a todos los adolescentes que había conocido. Era valiente, obstinado y muy amable. A esa edad ya le había dicho a sus padres que no le gustaban las niñas. Era una cosita totalmente digna de admirar, llena de energía, bailando de un lado a otro, pero él siempre estaba solo. Sus padres no le prestaban mucha atención y sus hermanos se empeñaban en molestarlo todo el tiempo. A pesar de eso, Jimin siempre tenía una sonrisa para mostrar y un optimismo inquebrantable. Creo que él pensaba que algún día todos en su familia cambiarían y empezarían a aceptarlo tal como era.

Jungkook miró a Hyun Sik, que tenía la vista perdida en los árboles. Ni siquiera quería imaginar cómo debió ser la adolescencia de Jimin con esa familia.

—Jimin causó mucha curiosidad en mí y también admiración, porque a pesar de todo el rechazo que recibía, él tenía sus propias metas. Así que quise ser una especie de hermano mayor para él. Cada vez que venía aquí, le traía sus golosinas favoritas, le explicaba las tareas de la escuela cuando no entendía. Él sabía que contaba conmigo cada vez que lo necesitara. Hice todo lo posible para hacer su vida más fácil, pero DaHyun se desquita con él, y ella, en su retorcida mente, me acusa de estar enamorado de Jimin— explicó Hyun Sik.

Jungkook asintió.

—Entonces debo agradecerte por estar para Jimin en esos momentos.

—No tienes que hacerlo. Jimin es una persona única, algo torpe cuando se siente presionado, pero es encantador. Y no merece todas las cosas malas que le han pasado. La vida ha sido demasiado injusta con Jimin. Él es de esas pocas personas puras que existen en el mundo, que dan ganas de tomarlo y llevarlo a un lugar donde nada ni nadie lo lastime— concluyó Hyun Sik.

El castaño sonrió de acuerdo con Hyun Sik. Jimin merecía estar lejos de toda esa mierda de familia que tenía, realizar sus sueños, ser feliz.

—No te preocupes, me lo voy a llevar tan pronto como las carreteras estén habilitadas— dijo Jungkook. Él iba a hacer todo lo posible por ayudar al pelinegro, como amigos o como algo más. Jimin ya no iba a poder deshacerse de él.

Voy a estar pegado a él, y si se queja, le diré que fue su culpa por haberme secuestrado, pensó Jungkook en su mente.

—Me alegra mucho que te tenga. A ti no te van a poder comprar o enviar lejos— dijo Hyun Sik.

Jungkook lo miró curioso.

—¿Por qué dices eso?—

Hyun Sik se encogió de hombros.

—Te has enfrentado a todos por defenderlo.

—No me refiero a eso. ¿Por qué dijiste que a mí no me pueden comprar o enviar lejos?—

—Jimin no sabe esto. Creo que si lo supiera, le haría mucho daño, pero su primer novio en la secundaria, ese chico Taemin, era inteligente y un gran deportista. Había ganado una beca en el prestigioso colegio de Jimin, pero su padre era un pescador que tenía un pequeño barco. Sung-rok ni loco iba a dejar que su hijo estuviera con el hijo de un pescador, así que los quitó del camino sobornando al padre del chico. Con el segundo novio de Jimin pasó lo mismo. Era un buen chico, lleno de sueños, al igual que Jimin. Se motivaban el uno al otro, pero entonces el padre de Namjoon recibió una oferta de trabajo muy jugosa del otro lado del mundo y se llevó a su familia. Esas dos veces, Jimin se quedó solo y destrozado. Si él se entera de que por culpa de su padre sus relaciones no han prosperado, lo desbastaría totalmente.

—Entiendo. No te preocupes, a mí nada ni nadie me va a alejar de Jimin— le aseguró Jungkook, sintiéndose realmente enojado y lastimado. ¿Realmente existían personas así?

—Es bueno escuchar eso.

—Respecto a tu matrimonio con DaHyun, ¿por qué no se divorcian?— preguntó Jungkook.

Hyun Sik suspiró profundo.

—Mi padre y Sung-rok son tal para cual. Ellos organizaron nuestro matrimonio y un divorcio en nuestra sociedad se ve muy mal. Además, ella está esperando un hijo mío— Hyun Sik sonrió tristemente mientras una lágrima se deslizaba por su mejilla. Se aclaró la garganta para aclarar su voz. —DaHyun no quiere al bebé. Sé que si hablamos de divorcio, lo perderá a propósito. Solo lo tendrá para ganarle a Jae Hyun y ser la primera en darle un nieto a Sung-rok.

—Lo siento, hombre— Jungkook le puso una mano en el hombro a Hyun Sik. —Si quieres, puedo aconsejarte a una ginecóloga amiga mía. Es de las mejores del país, para que chequeen el embarazo.

—Te lo agradecería, y le avisaron a Sung-rok que para mañana el camino a la carretera principal estará despejado— le informó.

—Bien, iré a prepararle el desayuno a Jimin.

Hyun Sik se carraspeó la garganta.

—Puedo llevarles el almuerzo a la cabaña. Sé que no te agrada tener que estar todos en la misma mesa para cada comida.

—Te lo agradezco— dijo Jungkook para alejarse.

Esta familia estaba más jodida de lo que pensaba. Parecía que lo único que los movía era el interés por el dinero, y pasarían por encima de cualquiera para obtener lo que querían. Y Hyun Sik, de alguna manera, había quedado atrapado con ellos. Suponía que el chico también pertenecía a esas familias aristócratas donde "el qué dirán" era más importante que los sentimientos.

Su corazón estaba muy emocionado con la idea de llevarse a Jimin. Tal vez si lo conocía fuera de estas circunstancias, dejando atrás el "secuestro", podrían tener una oportunidad de llegar un poco más lejos. Sería una completa idiotez de su parte seguir ocultando su atracción por Jimin. Ese chico de cabello negro y sonrisa adorable estaba enredando a su corazón con una red llena de sentimientos nuevos a los que temía ponerles nombre.

Abrió la puerta de la cabaña, encontrándose con Jimin sentado en el sofá con una pijama puesta. ¿Por qué diablos lo decepcionaba que ya se hubiera despertado? Tal vez porque Jungkook quería llevarle el desayuno a la cama y también ver un poco más de su cuerpo.

Jimin lo miró con los ojos muy abiertos y estaba completamente rojo hasta el cuello.

—Yo... estaba desnudo cuando desperté, ¿por qué estaba desnudo?— preguntó, mordiéndose el labio inferior con insistencia.

Jungkook tragó sonoramente. No quería que Jimin pensara mal de él o que se había aprovechado de la situación.

Lo que no sabía Jungkook era que Jimin tenía la cabeza llena de escenas muy explícitas donde no solo él estaría desnudo, y estaba totalmente rojo de la vergüenza por sus tan pervertidos pensamientos.

Holi, ¿cómo están bebés?

Espero que les haya gustado este cap. tengan un lindo resto de día.

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