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La noticia llegó a toda la ciudad como si fuese una de las mejores primicias, quienes no tenían vida iban a saco con aquella noticia "El superintendente con pareja" aquel hombre que los atormentaba ahora estaba con alguien que muchas veces los había atendido con una gran sonrisa en comisaría o hasta había estado atracando con algunos en un tiempo pasado. Mientras los días pasaban aquello atormentaba por momentos a la chica quien no dejaba de cerrarle la boca a quienes insinuaban que su puesto era gracias a que salía con el perro mayor de la policía.

-Estoy harta- la chica suspiro tirando su cuerpo en el sillón mientras un gran canino se le acercaba- Ay Ivadog... ¿Porque la gente es tan idiota? Yo trato de ser una buena persona... Pero ellos me lo impiden- se volvió a levantar para tratar de tomar fuerzas e ir a trabajar- Solo espero que cuando ya no sea una sorpresa los gilipollas se calmen.

Muchas veces también trataban de hacerle daño a __ para así lastimar a Conway, pero por más de que lo intentaran no sabían con quien se metían; habían tratado de secuestrarla o hasta tratar de conquistarla para quitársela al superintendente pero no tenían idea de que __ no era un hueso fácil de roer. Aunque también Conway recibía ciertas incitaciones de que se estaba volviendo blando por salir con ella aunque a él sinceramente le sudaba la polla, solo se encargaba de que su amada estuviese bien y por eso le dio una copia de las llaves de su departamento por si algún día necesitaba refugio o simplemente quería estar con el.

Hoy es un día como otro cualquiera, no muchas cosas en especial sucedían. Pero algo llamo la atención de la chica y fue cuando vio a Gustabo y Horacio reunidos con Emilio y como estos tres la liaban; no muy segura los siguió de lejos hasta que sus neuronas lograron conectarse y sacar una conclusión, retrocedió y se dirigió a comisaría esperando quizás que aquel par aparecía por el lugar con sus otras identidades.

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-¿Estaban con Emilio?- pregunto en susurro la joven a los encapuchados

-¿Nos haz visto?- pregunto Fred a lo que ella asintió- De puta madre, entonces el plan funcionó

-¿El plan?

-No se si podemos informarte de eso- respondió Dan algo temeroso- ¿Podemos Fred?

-No lo sé... Por las dudas no lo hagamos, haber si hacemos enojar al viejo

-Pero pueden confiar en mi ¿No recuerdan los viejos momentos? Donde atracabamos los 3 juntos, nunca los traicione ¿Porque lo haría ahora? Solo es curiosidad, nada más.

-Bueno...- Dan se ánimo a contarle algo- Emilio esta dentro de una mafia y estamos tratando de entrar en ella para sacar información

-Exactamente, estamos tratando de ser miembros de la mafia para después ¡Bam! Desmantelarla y acabarlos

-Ya veo...- ella volvió a conectar sus neuronas- Gracias chicos.

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Luego de su turno __ se dirigió al departamento de Conway ya que no se habían topado con el en todo el día y la curiosidad le estaba matando. Al entrar, como siempre, el canino la saludo, ella recorrió todo el departamento notando como aún el dueño no llegaba.

-Que extraño... Bueno quizás tuvo que atender asuntos de trajeado ¡Ven Ivadog! Ayúdame a cocinar, si no el T-800 no come

La joven comenzó a preparar la cena mientras disfrutaba de la compañía del perro y para ambientar colocó la música que siempre escuchaba el viejo. Luego de una hora y quizás algo más de tiempo el dueño de la casa llegó encontrándose con un delicioso aroma; Ivadog al sentir la llegada de su dueño corrió para recibirlo y esto hizo que la chica dejara su tarea para hacer lo mismo que él canino.

-Te estaba esperando, preparé la cena - sonrió ella al verlo- ¿Como te ha ido?

-Gracias- el cansado hombre abrazo el cuerpo de ella sintiéndose en casa- No me encuentro del todo bien...

-¿Te sientes mal?- ella coloco su mano en la frente de el para medir su temperatura- No creo que tengas fiebre

-__- Conway se separo de ella y se quitó sus gafas- Hoy he fusilado a unos hombres... Y no te voy a mentir, se sintió de maravilla ¿Acaso eso esta mal? ¿Me hace menos humano?

La joven miró la oscuridad de esos ojos que tanto sufrían, que tanto anhelaban acabar con semejante dolor, ella suspiro, tomo la mano de Conway y lo guió hasta la sala donde lo sentó en la silla.

-La bondad y la maldad son relativas como todo en este mundo- ella le sirvió un plato de comida que dejó delante de el- Nada en esta vida te hace menos humano ¡Absolutamente nada! Los humanos nos componemos de distintos valores, distintas enseñanzas, creencias, diplomacias, distintas decisiones y errores- tomo el rostro del mayor para verle a los ojos- No tienes que castigarte por lo que afrontaste, tienes que aprender y valorarte.

Conway la miro y luego miro el plato de comida, sintio como su perro le lamia la mano en busca de jugar y por un momento olvidó todo problema, las palabras de __ sonaban en su cabeza sabiendo bien que ella estaría para el cuantas veces hicieran falta.

-Dime Jack ¿Acaso eres capas de no sentir el calor de esta comida? ¿O el sabor de mis besos? ¿Eres capas de no sentir la piel de Ivadog o las balas que recibes en atracos? Porque si es así déjame decirte que no eres humano; pero yo se bien que si sientes y te jode sentir, así que deja de estar pensando que no eres humano.

-Gracias... - el le dedico media sonrisa para luego besarla

Cenaron casi en silencio, la muchacha se moría de ganas por preguntarle respecto a sus dudas, pero no sabía bien si ese era el momento o no.

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-Hoy no dormirás ¿Verdad?- le cuestiono __ somnolienta levantándose de la cama siendo las 4:30 de la madrugada

-Vuelve a dormir pequeña- el se encontraba sentando en la cama sin poder dormir, la chica hace rato había logrado quedarse dormida sin embargo aún le preocupaba aquel sujeto así que se sentó a su lado- No quiero molestarte

-No me molestas- ella recostó su cabeza en el hombro de el y tomo su mano- Es normal no estar bien

-¿Es normal no estar bien todo el tiempo?

-Bueno, es más normal de lo que crees, es preocupante y tristemente normalizado... ¿Tengo alguna posibilidad de alegrarte?

-Esta bien muñeca- el beso dulcemente su frente- Solo quédate a mi lado

La joven se movió para sentarse en el regazo del mayor y abrazarle tratando de recostarlo en la cama.

-¡Anda Jack! Es hora de dormir, no de pensar

-Quizas sea hora de jugar y no de dormir- el la tomo de la cintura- Eso me haría feliz muñeca

La chica pensó unos segundos su respuesta sabiendo que podría usar el juego de jack con otro sentido doblemente placentero. Para ella no había nada más placentero que recolectar información para terminar de armar su rompecabezas.

-Se que te gusta tener el control- __ sonrió- Y que normalmente casi nunca te lo sedo por completo... Que te parece querido, ¿Si esta vez jugamos a tu juego con mis reglas?

-Interesante propuesta- sonrio lascivo- ¿Cuales son las reglas?

-¿Cual es el juego? - reprochó recostandole en la cama

-Tu bajo mis estrictas órdenes, como cuando soy el superintendente y tu solo una inspectora- Conway tomo el mentón de ella con suavidad- Sin quejas, sin interrupciones, solo siguiendo órdenes

-Acepto ese juego, pero a cambio mi única regla será que contestes a mis preguntas sin engañarme.

-Bien- el la beso- Pero apenas podrás hablar de lo mucho que te haré gemir muñeca.

Ambos se besaron de manera apasionada para empezar aquel juego envuelto de placer.

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