☯︎Ocho☯︎
Una semana había pasado desde el incidente de Inko Midoriya, All Might se había encargado que la salida de Izuku sea bajo seguridad y esté había prometido no lastimar a ningún héroe o aspirante a héroe durante el tiempo que estuviera a fuera. Al comienzo fue difícil convencer a gran parte del comité educativo de admitir a Midoriya como un alumno más, todo para mantenerlo vigilado las 24 horas del día, también estaría en los dormitorios junto a los alumnos de la clase 2-A.
—Sigo creyendo que es mala idea. —decía Shota mientras caminaba junto al rubio esquelético en busca del peliverde.
—También tengo mis dudas Aizawa pero es lo único que nos queda, lo mantemdremos vigilado todo el tiempo y el joven Bakugo también se ha comprometido a cuidarlo. No hay nada de que preocuparse.
No muy convencido el azabache de grandes ojeras asintió con la cabeza, aún tenía un mal presentimiento y el hecho de solo pensar que él estaría a cargo del mocoso le causaba dolor de cabeza.
Ya se encontraban en la entrada de la cárcel por donde Midoriya saldría, luego de recogerlo irían directamente a la U.A. para comenzar sus clases. Después de éstas se encargarían de hablar sobre toda la información que tenían sobre la Liga de Villanos, ahora lo primordial era que el chico lograra llevarse bien con sus nuevos colegas.
—¡Hola joven Midoriya! —saludó efusivamente el héroe número uno, sin embargo como recompensa obtuvo una mirada de desagrado por parte del menor.
—No podía venir por mi otra persona... —bufó molesto— Oh es el señor momia. —dijo refiriéndose a Aizawa.
—Y sigues sin respetar a tus mayores... —soltó un suspiro de cansancio, si así comenzaban no quería saber como seguirían—. Vamonos ya que tus clases esperan.
—Alto ahí ancianos, ¿clases?. Yo no salí de ahí para aprender, salí porque me necesitan para matar a esos bastardos.
—Mira niño, el porque saliste no me interesa, la única condición que debes cumplir para salir de "allí" es que demuestres que no lastimaras a nadie y eso lo haces siendo un aparente aspirante a héroe. Si no lo quieres tienes toda la libertad de volver dentro.
—Son unos... —respiró profundo y exalo—. Lo haré solo porque debo hacerlo, no significa que estoy de acuerdo. —el peliverde comenzó a caminar en dirección al auto que estaba estacionado. Aún no cruzaba palabra con ninguno de esos chicos y ya tenía ganas de vomitar.
—¡Bien hecho Aizawa! —All Might subió su pulgar en aprobación a su amigo.
—Ya camina tonto. —los adultos se subieron al auto y así emprendieron su camino hacía la institución, claro que en un total silencio ya que Izuku no les dirigía la palabra ni en lo más mínimo y eso era respetado por los mayores.
Al adentrarse en la U.A. el chico ojiverde no pudo contener su impresión debido a lo gigante de ese lugar, soltó un silbido pero fue callado rápidamente por Aizawa ya que todos estaban a punto de comenzar sus clases.
—Aquí está tu uniforme, ve a cambiarte ahora que yo te esperaré.
—No pienso usar esta...cosa. —soltó asqueado Izuku.
—¿Debo repetir mi discurso una vez más Midoriya?
—Así que ahora no soy "mocoso". —dijo burlón.
—Claro que lo sigues siendo pero por protocolos de la escuela debo tratarte bien así que "Midoriya" ya vete a vestir. —el joven obedeció de mala gana y se adentró al baño, no tenía intenciones de quitarse sus aretes y piercings. Luego de unos 5 minutos el joven salió vestido.
—Eso fue rápido.
—Tengo experiencia atando corbatas, ¿acaso no vio mi espléndido traje de villano?
—Cállate y camina. —Midoriya se soltó una carcajada, comenzaba a agradarle ese sujeto.
Ambos comenzaron a caminar, Aizawa le informaba todas las clases que tendría y los entrenamientos junto a All Might, Midoriya estaba a punto de reclamar pero el azabache se había detenido de golpe frente a una puerta. ¿Estaba nervioso?, no podía creer que ese sentimiento estuviera en su interior por solo conocer a un grupo de héroes, trató de disimular un poco pero, su ahora profesor, lo había notado de inmediato.
—Tranquilo, no son malos chicos. Solo no actúes tan...tú y estarás bien. —no sabía si eso lo tranquilizaba o no pero de algo había servido—. Primero entraré yo y les daré la noticia de que hay un alumno nuevo, puede que entren en pánico al principio pero yo estoy allí así que tranquilo. —Izuku asintió y con ello el azabache entró al salón.
—Buenos días Aizawa-sensei. —saludó Iida.
—Buenos días a todos, les debo decir que hoy se nos une un nuevo alumno. Por favor denle la bienvenida y sean amables con él, puedes pasar. —un peliverde de mediana estatura, piel lechosa y semblante serio se adentró al salón de clases. Todos quedaron hipnotizados por unos segundos debido al hermoso color esmeralda que esté poseía en sus ojos hasta que uno de ellos lo reconoció.
—¿No es el villano que nos atacó hace unas cuentas semanas? —dijo Momo.
—Lo es, todo tiene una explicación pero a su debido tiempo se las daré, ahora solo tomen a Midoriya como uno más de ustedes. Preséntate.
—Me llamo Midoriya Izuku, tengo 16 años y bla, bla, bla.
—¡¿Tiene nuestra edad?! —gritó sorprendido Denki—. Creí que eras más joven...
—Oh gracias... —sonrió, causando un sonrojo en el chico eléctrico.
—Sientate tras Bakugo, hay que comenzar la clase. —Midoriya se dirigió a su asiento.
—Hola Kacchan~ —saludó campante.
—Hola maldito nerd.
—¿Ya no eres amable conmigo? que pena. —hizo un puchero fingido.
—Midoriya silencio.
—Si...Aizawa-sensei.
La clase transcurrió con normalidad, Izuku aunque no quisiera prestaba atención y todos sus compañeros tenían su atención en él, lo había notado y le resultaba incómodo por lo que luego se los dejaría en claro.
La hora del almuerzo había llegado y con ello las miles de preguntas y acusaciones para el peliverde, esté tenía muchas ganas de utilizar su quirk pero le habían dejado en claro que normalmente no estaba permitido expecto para sus entrenamientos.
—¿Qué haces aquí?, ¿no se supone que eres un villano? —cuestionó Mina.
—¿Qué comes que adivinas? —dijo sarcásticamente.
—Midoriya-kun de parte de todos mis compañeros te doy la bienvenida al curso de héroes, espero podamos llevarnos bien. —Iida había sido el único respetuoso con el chico, cosa que lo conmovió un poco y con algo de vergüenza le devolvió el buen gesto.
—Gracias...
—Oye Midoriya. —Todoroki se había acercado al peliverde ya que tenía una pregunta que necesitaba respuesta.
—¡Hijo de Endeavor!
—Soy Todoroki Shoto, no "hijo de Endeavor" —soltó algo molesto.
—Todoroki-kun~ —dijo de manera dulce, solo tenía intenciones de bromear pero al parecer al medio albino le había parecido tierno.
—¿Por qué estás aquí?, no se supone odias a los héroes y todo eso.
—Tengo mis razones, no sé preocupen no tendrán que ver mi cara tanto tiempo, yo no me meteré en su camino y ustedes no se meterán en el mío —sonrió para luego salir de allí, tenía hambre por lo que se dirigió a la cafetería, sin embargo no tenía idea de dónde estaba—¿Iida-kun verdad? —preguntó acercándose al peliazul, este asintió a su llamado—, necesito saber donde está la cafetería ven conmigo eres el menor molesto de todos ellos.
Izuku emprendió su caminar esperando a que el delegado de la clase lo siguiera y efectivamente este lo hizo aún así en el transcurso el pecoso no pudo callar lo que su cabeza martillaba.
—Oye Iida-kun.
—¿Si?
—Lamento lo que pasó con tu hermano —dijo con semblante sereno—, él a mi parecer es el menos idiotas de todos los héroes.
El delegado pensó un momento las palabras de su nuevo compañero, a pesar de ser duras sabía que a fin de cuentas le estaba dando su reconocimiento a su hermano.
—Gracias Midoriya-kun.
Aún en el salón de clases el resto de algunos comentaba su parecer a su nuevo compañero.
—Que chico tan desagradable. —dijo Momo.
—Aún no lo conocemos bien, démosle una oportunidad. —sugirió Uraraka.
—Sigue siendo un villano, un uniforme y rodearse de héroes no cambiará lo que hizo en el pasado. —sentenció de nueva cuenta la chica de coleta larga.
Cada grupo de amigos se separó por su lado, afortunadamente ese día tendrían entrenamiento con All Might por lo que podrían ver al nuevo alumno en acción. Tenían mucha curiosidad por saber de lo que era capaz.
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