Era un día tranquilo, Izuku se encontraba camino a clases cuando fue interceptado por Aizawa y All Might.

—Midoriya queremos hablar algo contigo, ven con nosotros. —le dijo el azabache, sin entender aún el peliverde los siguió hacía la oficina del rubio.

—¿Qué necesitan?

—Tu conoces el bajo mundo, por esa razón supongo te haz relacionado con muchos villanos. —comenzó a hablar Shota.

—Si...¿qué hay con eso?

—Últimamente la yakuza se ha estado movilizando, logramos averiguar que su lider es-

—Overhaul. —terminó la frase Midoriya.

—¿Lo conoces? —preguntó All Might.

—Si, he trabajado con él en algunas ocasiones, es un hombre con poca paciencia y alguien del cual temer. La última vez que lo vi estaba en un nuevo negocio respecto a los quirks pero no sé más que eso...

—Ese es el punto, hace un par de semana una extraña sustancia ha estado rondando las calles, por los testimonios que tenemos esa "droga" vuelve más fuerte a los villanos.

—Como les he dicho no tengo mucha información, aún así puedo conseguirla, tengo un buen contacto. —sugirió el menor.

—No. No te expondras a ese peligro.

—Pero-

—He dicho que no Midoriya, eso era todo, ve a clases. —resignado el peliverde se fue a clases, aún así desobedecería a su profesor y averiguaria algo al respecto.

—Podría ser de ayuda Aizawa.

—No lo expondremos al peligro Toshinori, aunque se crea indestructible sigue siendo un chico de 16 años que trata de sobrellevar muchas cosas.

—¿Te has encariñado con él? —preguntó divertido el símbolo de la paz.

—¡Claro que no!, ya debo irme, adiós. —el rubio comenzó a reír ya que había logrado avergonzar a su amigo, sabía que el hombre era alguien de pocas palabras y de ocultar sus sentimientos por lo que admitirlos le era difícil.

—Aunque digas que no quieres exponerlo estoy seguro que él solo se meterá en problemas... —murmuró en aquella solitaria habitación, por lo que iba conociendo a su alumno sabía perfectamente que romper las reglas era su deporte favorito.

—Necesito información sobre alguien.

—¡Sir Vergil! lo he extrañado tanto, es mi mejor cliente después de todo.

—Soy tu único cliente idiota. —soltó una carcajada.

—¡Se ha reído!, este es el mejor día de mi vida.

—¡Concentrate Ichigo!, quiero que me des toda la información que sepas sobre la Yakusa. En especial sobre Overhaul.

—Eso será fácil, últimamente solo buscan que los noten.

—Servicial como siempre, me gusta. Te veré en el mismo callejón de siempre.

—No me diga eso Sir que puedo enamorarme. Lo esperaré a la media noche. —bromeó el chico al otro lado del teléfono.

—Ya cállate. —rió y así cortó la llamada.

—¿Con quién hablabas Midoriya? —mentiría si dijera que Momo casi no lo mata de un susto.

—¿No sabes que espiar a las personas es de mala educación?

—Eres un villano, no tienes idea de lo que significa la educación.

—En realidad si, por ejemplo ahora, estoy siendo educado para no romperte la cara ya que eres una dama. —le sonrió dulce, molestando aún más a la azabache.

—Deja de fingir, no eres una blanca paloma, tal vez todos se crean tu farsa ¡pero yo no! Verás que dentro de poco estarás en la cárcel donde perteneces.

—Hasta que la Liga de Villanos esté a 3 metros bajo tierra o pudriéndose en la cárcel me verás muy seguido...Momo-chan. —el peliverde pico la punta de la nariz de la chica y se fue del lugar, dejando a una Yaoyorozu más que enojada.

—Estás un poco tenso Deku-kun ¿qué ocurre? —preguntó Uraraka, se encontraban en la hora del almuerzo y habían notado a su amigo algo ausente en las clases de la mañana.

—Tampoco has tocado tu comida. —le siguió Iida.

—Estoy bien no sé preocupen...

—Está bien pero si algo sucede dinos por favor. —le dijo preocupado Kirishima.

Izuku solo asintió, no quería meter a sus amigos en problemas por lo que su pequeña salida la dejaría en secreto, solo esperaba que Momo no lo hubiera escuchado.
Por su parte Yaoyorozu estaba planeando la manera perfecta para exponer a Midoriya, claro que lo había oído y tanto su profesor como sus compañeros verían que ese peliverde seguía siendo el mismo villano de hace unos meses. Haría todo lo necesario por recuperar a sus conpañeros y mucho más a Todoroki.

La noche había llegado, la cena fue amena como siempre pero la rara actitud del ojiverde aún los tenía intranquilos a sus amigos.
Luego de comer Izuku se dirigió rápidamente a su cuarto, para su mala suerte no podría ir con su antiguo traje de villano por lo que estaba buscando ropa que lograra cubrir su rostro y algún cubre bocas. Todo debía salir perfecto, sabía perfectamente que el salir de la U.A. sería difícil pero no imposible.

Era media noche, ya todos estaban dormidos, de manera sigilosa salió de los dormitorios, por lo que veía la seguridad era muy alta ya que sus múltiples ataques con la Liga de Villanos les había dado una mala reputación.
Con gran destreza y durmiendo a algunos guardias Izuku logró salir de la institución con su motocicleta la cual había sacado minutos antes, debía admitir que esperaba las cosas un poco más difíciles y ese malestar lo estaba torturando solo un poco pero no tenía tiempo para pensar en ello, no haría nada malo, en realidad estaba ayudando a los héroes por la gran información que les daría.
Al cabo de una hora por fin había llegado a ese callejón, un punto de encuentro con Ichigo que hacía un año utilizaban, lo había conocido por casualidad ya que se corría el rumor que el gran Vergil estaba en busca de un informante de confianza, el chico era alguien escurridizo y rápido para los trabajos, si Izuku quería algo él con todo el gusto se lo traía. Era un buen lacayo. A pesar de todo lo que pensaba de él le daba lástima el hecho de que fuera tan joven y estuviera en ese mundo, nunca supo su historia pero estaba seguro que era difícil, aún así siempre tenía una actitud confiada y bromista, fue por esa razón que confío en él.

— Sir Vergil!, lo he extrañado tanto ¿dónde estuvo todos este tiempo? —un chico alto y flacucho, con cabello castaño claro y una sonrisa burlona se acercó al peliverde.

—Lejos de aquí Ichigo pero ese no es el asunto que nos concierne, ¿tienes lo que te pedí?

—Siempre con su formal vocabulario...espere, su voz es diferente...

—No tengo mi traje conmigo, tuve algunos problemas, por esa razón estas escuchando mi verdadera voz.

—¿Cuántos años tiene Sir? —preguntó curioso.

—Solo puedo decirte que soy más joven que tú.

—Que genial! es tan asombroso... —dijo emocionado.

—Ichigo. —le dijo con voz seria.

—Oh si, si, aquí está todo lo que me pidió. No fue tan difícil encontrar información sobre ellos pero...

—¿Pero? —elevó una ceja esperando a que siguiera el chico.

—Al parecer Overhaul está buscándolo por cielo y tierra, tiene a todos sus hombres por estos lados. No sé que es lo que quiere con usted pero cuídese, la yakuza a estado tomando fuerza e incluso la Liga de Villanos está pensando en tener un trato con ellos.

—Bien...gracias por la información, aquí tienes tu pago. —claro que tenía sus ahorros y no eran pocos, no dejaría que los héroes se quedara con su esfuerzo.

—Esto es mucho ¿no lo cree?

—Lo mereces, hace mucho tiempo no trabajas para mi. Además tómalo como un pequeño regalo por este favor de último momento.

—¡Gracias Sir Vergil!

—Nos vemos en otra ocasión Ichigo, adiós.

—¡Adiós Sir! —gritó feliz.

Izuku se dirigió rápidamente a la U.A. ya que no debía tardar tanto o sospecharían, aún así tenía la esperanza de que nadie haya notado su ausencia.
Luego de otra hora de viaje, esquivar de nueva cuenta a los guardias y dejar su vehículo en su lugar Midoriya abrió la puerta de los dormitorios con sumo cuidado y cuando estaba a punto de subir las escaleras la luz de la sala se encendió y con ello el peliverde pudo ver como Aizawa y sus conpañeros de clase estaban allí.

—¿Qué significa esto Midoriya?, se puede saber ¡¿dónde estabas?! —le exigió su profesor.

—Solo salí a tomar un poco de aire...

—No me mientas, Yaoyorozu nos advirtió sobre que escapaste a no sé donde para verte con un tal Ichigo.

—Izuku ¿qué significa esto?, creímos que ya habías dejado esa vida atrás. —le dijo Denki con cierto tono de decepción en su voz.

—Claro que deje eso atrás. —se defendió el peliverde.

—¡Mientes!, escuché muy bien cuando le decías a ese chico que se vieran en un callejón y que necesitabas información, estoy segura que era sobre nosotros los héroes. Así podrías destruirnos cuando quisieras. —le acusó Momo.

—Deku-kun explicanos por favor.

—Si Midoriya, necesitamos una explicación sobre todo esto. —le siguió Iida.

—Si dejaran que hablara podría explicarles todo...idiotas. —dijo molesto Katsuki.

—Tienen razón salí, me escapé de aquí, pero no por las razones que todos creen. Tengo un informante y le pedí que me diera información sobre la yakuza y Overhaul ya que últimamente se han dejado notar mucho y están implicados en muchos ataques a héroes.

—Te dije que no debías meterte en este asunto Midoriya. —le dijo Aizawa.

—Es verdad pero no podía quedarme con los brazos cruzados, si podía ayudar lo haría.

—Debiste decirnos, podíamos ayudar. —le reprochó Kirishima.

—No quería meterlos en problemas, ese no es su mundo. Además en ¿qué podrían ayudarme? ¡ni siquiera confían en mi!

—Momo nos dijo... —trató de excusarse Sero.

—¿Y le creen solo porque ella es una heroína y yo un ex villano? ¡que buenas personas! Y luego yo soy el desgraciado... —rió irónico.

—Fue peligroso lo que hiciste, podrías haberte cruzado con la Liga de Villanos.

—Pero no fue así, estoy aquí siendo acusado por algo que no hice. Yo quería ayudarlos... —todos lo miraban con pena, se habían equivocado terriblemente—. Aquí tiene profesor, espero le sirva.

Izuku se acercó al mayor y le dejó una pila de hojas donde estaba toda la información.

—Espera Izuku... —Denki trató de pararlo pero Midoriya rápidamente apartó su mano.

—No me lo esperaba de ti Denki-kun, ni de ustedes tampoco —miró al resto de sus amigos que agacharon sus cabezas—. Hasta me sorprende que el único que me dejó hablar fue Katsuki, ¡felicidades! son peores personas que ese idiota.

—No te hagas la víctima... —murmuró Momo.

—¿La víctima?, me espiaste, me acusaste y ahora no quieres que me duela lo que hicieron. ¿Tanto te molesta el hecho de que tu querido Todoroki-kun me preste más atención a mi que a ti?, ¿tanto te duele el que tus compañeros confíen más en mi que en ti?. ¡Despierta princesita! me importa una mierda tu envidia pero no te metas conmigo o veras lo buen villano que puedo llegar a ser. —le amenazó el peliverde.

—¡Lo escucharon me está amenazando!

—¡Momo ya cállate, lo único que haz hecho hasta ahora es solo molestar a Midoriya. Ten un poco de vergüenza por favor! —le dijo Jiro cansada.

—Pero-

—Todos a dormir, esto ha sido demasiado.

Aizawa les ordenó a todos que se fuera a sus dormitorio, él fue el primero en irse ya que debía revisar esa información que su alumno le había dado y, si era sincero, estaba apenado por haber pensando algo del menor que no era.

—Midoriya ¿podemos hablar? —le suplicó Shoto.

—Un amigo dijiste, lloré frente a ti...confie en ti y con solo un maldito rumor destruiste todo eso.

—No desconfiamos de ti, es solo que...tu actitud había estado rara todo el día. —le dijo Urarak apenada.

—Debía escapar de este lugar sin que nadie me descubriera, no quería meterlos en problemas por mi culpa, ¡y ahora resulta que un enfermo mafioso está buscándome por cielo y tierra!

—¿Quién te está buscando? —preguntó Bakugo.

—No debería importarles, después de todo soy solo un villano en el que no pueden confiar. Y yo que pensé que por fin tenía amigos de verdad...que idiota fui —rió con tristeza—. Si quisiera dañarlos no necesitaría la ayuda o información de nadie más, vivo con ustedes. Piensen antes de hablar.

Izuku subió rápidamente las escaleras y dejó a aquel grupo de héroes con un gran enojo a ellos mismos.

—Maldita sea... —murmuró frustrado Eijiro.

—No puedo creer que caímos en tus tonterías, todo esto es tu culpa. —le dijo enojado el rubio con un rayo en su cabello a Momo.

—Solo les dije lo que escuché, no pueden acusarme de nada.

—¡Dijiste que tenía planeado ir contra nosotros!, que estabas "aterrada" —le siguió Uraraka con el mismo enojo que Kaminari.

—Ya dejen de pelear, esto no nos llevará a nada, lo más importante aquí es demostrarle a Midoriya-chan que si confiamos en él y que es uno de los nuestros kero~.

—Tienes razón, hoy hablaremos con él. —habló determinado el pelirrojo.

Todos los demás estuvieron de acuerdo, harían hasta lo imposible para recuperar la confianza del peliverde. Por su lado Momo estaba más que furiosa y frustrada ya que su plan no había salido del todo como ella quería, solo agradecía que Izuku salió lastimado por lo que estaría alejado un tiempo.
Midoriya por su parte estaba dolido, hacía mucho tiempo no se sentía traicionado de esa manera, tenía tantas ganas de salir huyendo y dejar todo atrás. Pero no era una opción, estaría con aquellos héroes solo por su objetivo de venganza, nada más lo ataría a esos chicos.

-☆-☆-☆-☆-☆-☆-☆-☆-☆-☆-

¿Alguien más quiere matar a Momo? Jajajajajajja

Espero hayan disfrutado el capítulo, nos leemos pronto bye~ ♡