Capitulo uno

WILLOW
-Es tan increíble como la vida se encarga de darte lo que mereces, tu sabrás si hiciste bien o hiciste mal, Raven, déjame adentrarme en donde tu no quieres llegar y esos sentimientos que te da miedo mostrar. Te han hecho daño que ahora tienes temor de ser feliz por qué crees que alguien o algo te arrebatará de ello, te mantienes pequeña y ¿Por qué? ¿No has visto de lo que eres capaz? Exacto, crees que tu vida no tiene sentido, por que no has explotado tus capacidades y no tienes miedo al mundo, te tienes miedo a ti misma y eso hace que te sabotees ¿Crees que lo malo que te paso fue casualidad? No, es el destino, eso que te paso te estaba esperando no solo para volverte más fuerte, sino indestructible. En esta vida que tienes no estás conforme así que adelante, detona todo, dile adiós, el sol por tu ventana, la brisa que llega a tu cara, el agua que recorre tu espalda en la lluvia, llora, enamórate, grita, ríe. Todo esto podría ser una agradable eternidad si no centras una sola realidad. -
Me dijo Willow con una voz tan serena mientras me abrazaba, que sentí que solo quería que el tiempo se detuviera por unos momentos y congelar ese momento no solo en mi corazón, sino en mi mente.

-Siempre tienes las palabras correctas en los momentos más emocionantes, ¿no? -
Le respondí, ya que jamás fui buena diciendo lo que sentía ni expresándome, me entristece no haber podido decirle en ese momento como me sentía, pues estar con él era como un lugar seguro cuando sus brazos me rodeaban y jugueteaba con mi cabello mientras mis brazos trataban de rodearlo también y recargaba mi cabeza en su pecho.

Viernes 07 Enero de 2017
Una de tantas mañanas, mi alarma para ir a mi colegio sonó así que me apresuré a vestirme, desayuné un poco y salí de mi casa. Mis padres jamás estaban en casa así que cuidarme sola al tener solo 16 años no solía ser tarea fácil, ese día decidí irme caminando.

-Fue la peor idea que pude haber tenido. -

Mire el reloj y estaba llegando tarde a mi clase de química, el profesor Jackson no era un hombre de mucha paciencia y siempre estaba malhumorado...

-Llegas tarde Raven, más allá de la hora de
tolerancia- dijo el profesor entre dientes cuando me vio en la puerta apunto de tocar y pedir permiso para entrar al aula.

Intente pensar en una excusa lo suficiente buena para que se compadeciera un poco y me dejara tomar su clase, si seguía así podría repetir su materia el siguiente semestre y esa idea probablemente haría que mis padres mágicamente aparecieran en casa y estuvieran controlando cada movimiento que hiciera. Pero fue demasiado tarde y el profesor solo sacudió su cabeza y me cerró la puerta en la cara ¡No podía tolerarlo!
Termine faltando a su clase y me dirigí a la cafetería por una bebida, caminar mucho en vano me había dejado sedienta, compré un pequeño jugo y un paquete de galletas para matar mi rato esperando la siguiente clase. A lo lejos pude ver entre las mesas escondidas del lugar a un chico delgado escuchando música y pintando de un extremo a otro, me pareció interesante, no todos los días que perdía la clase solía ver gente aquí.
Pude notar que me dirigió una mirada de extrañes al percatarse de que estaba mirándolo, apenada de mi falta de discreción quite la mirada y saqué uno de mis cuadernos para repasar apuntes de la siguiente clase, era mejor intentar estar preparada para cualquier pregunta.

El chico salió del lugar y noté que había dejado en su mesa lo que parecía ser una cadenita con un reloj pequeño como si de bolsillo se tratara, intente salir de la cafetería a buscarlo rápido y devolvérsela pero ¿Por que estaba siendo tan gentil con un desconocido, por que no simplemente llevarlo a cosas perdidas y el después lo buscara?

Supongo que me causaba curiosidad ese chico de cabello desteñido y largo, su mirada violeta era hipnotizante, algo en el despertaba mi curiosidad... ¿pero que exactamente?

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top