16. Sangre

T/N

Había pasado dos meses en el que Rin no estaba a mi lado, sin embargo cada vez que podía me comunicaba con el pero mientras más pasaban los días la comunicación se fue perdiendo cada vez más. Y si antes hablaba con el todos los días ahora solo es una vez por semana.

Papá, había logrado estar más estable ya que el cancer no es una enfermedad que vences de la noche a la mañana, simplemente toma tiempo.

Mamá, nunca perdía las esperanzas en el que algún momento todos nos volvamos a sentar en la misma mesa y así poder disfrutar de una cena recién preparada.

Ran, cada vez se notaba muy preocupado por su hermano y quien no lo estaría, no había día en que no pensara en Rin.

Por otro lado, con mi grupo de amigos habíamos logrado terminar el proyecto exitosamente y Ran amablemente se ofreció ayudarnos, sacamos la mejor nota del salón e incluso hicimos una exposición en frente del decano de la universidad.

Hoy es viernes por la tarde, así que me toca ir al hospital a visitar a papá.

Cuando llegue él estaba leyendo un libro y traía puestos sus típicos lentes de lectura.

— ¡Princesita! Te extrañe tanto .— Me sonrió.

— ¡Hola papá! .— Corrí abrazarlo.

— ¿Cómo estas? Espero que bien, una princesita como tú tiene que estar feliz.

— Estoy bien, bueno o eso creo.

— ¿Sucedido algo con Rin? Y yo que creí que era un buen hombre para ti...— Interrumpí.

Sonreí ante su comentario .— Lo es papá, solo que lo extraño demasiado y está de viaje.

— Oh ya veo la situación, sabes hija ¿Te acuerdas cundo yo me iba de viaje por unos días? .— Asentí .— Aún recuerdo que cada día me esperabas en la puerta a que yo llegará, eso fue lo que me comentó tu madre, aún así regresé .— Sonrió .— A lo que voy es que Rindou llegará a verte y tú podrás estar más tranquilo, ese hombre es para ti.

— ¿Tú crees?

— Un padre jamás se equivoca ante sus palabras cuando ve al hombre con quien su hija sale, Rin realmente es muy afortunado de estar contigo, ya que se gano la lotería con mi princesita.

— Te amo mucho papá .— Lo abrace.

— Y yo a ti, sabes que así pasen mil años siempre serás mi princesa consentida.

— Y losé muy bien.

— Por eso es que no pienso que ningún hombre te trate menos, porque desde de tu existencia a ti no te a faltado nada ni te faltará, quizás no tengamos mucho dinero pero al menos eres una niña muy deseada.

— Gracias por tus palabras papá, créeme que me calma demasiado, vas a poder recuperarte de esto .— Sonreí, luego de haber conversado con mi padre acariciaba mi cabello y me quede dormida como una niña pequeña en su regazo.

Papá, lo es todo para mi. Siento que todos deberíamos tener una familia que nos ame y nos cuide, así no compartamos la misma sangre, lo importante es sentirnos deseados y queridos.

Narradora

T/N, después de haber pasado un momento tan intimo con su padre, se dio cuenta que lo necesitaba tanto a pesar de que ya lo había visto.

Sin embargo, el no tenerlo cerca o vivir en la misma casa, la estaban afectando y es normal cuando tienes una relación tan admirable como la de ellos.

Si bien es cierto la relación con Rin, cada vez es más escasa ella lo sigue amando con toda la intensidad de su corazón, porque ese amor que ese par se tiene no es algo que encuentras de la noche a la mañana.

Si, Rin estaba ocultando, el querer tener una venganza limpia y efectiva lo había condenado y cegado completamente, ya que él se encuentra en grandes problemas.

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Cuando Rin dejó a T/N, en manos de Ran y a su cuidado el viajó en lo más recóndito del país a buscar venganza por lo que le habían hecho a su chica.

Los disparos eran más frecuentes y le habían dado dos balas en el abdomen y la sangre no paraba.

— ¡Maldita sea! Yo no moriré aquí, le hice una primera a T/N, tengo que verla una vez más .— Habló aquel hombre quien está desangrándose y le hablaba a la pantalla de su celular donde tiene de fondo de pantalla a su novia.

— Eres tan linda T/N .— Repetía una y otra vez, de alguna manera eso le daba fuerza para seguir con su venganza. — No es momento de rendirme, no, aún puedo.

Desde que Rin siguió repitiendo aquellas palabras le dio fuerzas para seguir adelante, ya que le quedaban pocas balas y el estaba acorralado en una casa quien pertenecía a una de las cabecillas de la mafia China.

Si, Rin se fue contra todo y no le importó el peligro y el riesgo que esto trae, pero el sabía que debía hacerlo...por ella.

Muchas veces por amor a veces solemos cometer estupideces.

Y si, Rin había perdido la cabeza por T/N, ya que no le importaba poner en riesgo su vida con tal de salvar otra y aunque suene egoísta, él solo la quería para ella.

Ya era de noche y Rin, había logrado escapar del lugar, inmediatamente fue a su guarida y con habilidades de primeros auxilios que el anteriormente había aprendido pudo curarse las heridas y sacar las balas, hasta coserse el mismo, lo cual es demasiado sadico de su parte.

— Esto duele como la mierda, pero prefiero hacerlo yo que ir a un hospital y me llenen de pregunta, simplemente es algo que prefiero mantener en perfil bajo .— Agregó.

Luego de haber tenido una charla con el mismo, predispuso a tomar pastillas para el dolor y dormir, ya que en esos últimos días el no había logrado conciliar el sueño.

Y así, fue como pasó un mes más y su comunicación con T/N, ya era casi nula y si antes se comunicaba una vez por semana...ahora se había vuelto del mes dos veces, poco a poco se perdía el contacto, pero ojo que no es algo que el no quiera, simplemente el mantenerse enfocado en depurar todo el mal lo mantenía muy ocupado.

Son riesgos que uno decide tomar cuando eres mafioso.

Aunque Rindou Haitani lo quiere hacer a su manera pues obviamente está mal.

Por otro lado, desde el mes que había pasado T/N había entendido en que iban a ver días en los cuales la comunicación no sería constante pero el amor se mantiene intacto.

Mientras otras relaciones se alejaban otras se concretaban.

La unión de los padres de T/N, cada vez es más fuerte ni el propio cancer los había separado.

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T/N

Hoy era otro día más en la universidad y cada vez extraño más a Rin, pero se que no puedo tenerlo todos los días como quisiera.

Estuve sumergida en mis pensamientos y no me di cuenta que la clase ya había terminado.

— ¿Se puede saber porque estás tan desanimada? .— Interrumpió la voz de mi profesor Dazai.

— No es nada.

— Oh vamos, no seas dura contigo misma, puedes confiar en mi y es que en todo este tiempo has demostrado ser una alumna excelente y buena compañera, aunque no hables con los de aquí, de alguna manera me siento identificada contigo .— Pausó.— Entre nos, yo tampoco tengo muchos amigos.

— Bueno, si lo pones de esa manera .— Suspire .— Por donde empiezo.

— Vamos, estoy para escucharte ya que aún falta para que inicie la próxima clase.

— Está bien, en primer lugar mi padre tiene cancer y el saber que se puede morir en cualquier momento me tiene mal .— Pausé.— Soy adoptada y ya entenderás que les debo todo, porque el amor y el hogar que me brindan es un lujo y bueno en segundo lugar, mi novio no lo veo hace meses, me dijo que se fue por trabajo y cada vez pierdo comunicación con él, si tan solo supiera lo que está pasando, quizás dejaría de sentirme deprimida.

— ¡¿Cómo puedes con tanto?! Yo en tu lugar ya me habría suicidado y si mejor aceptas un suicido doble conmigo, hermosa dama? .— Sonrió.

— Ya decía yo, el porque no tiene amigos.

— No seas tan cruel conmigo eh .— Suspiró y se sentó a mi lado.

— ¿uhm?

— En primer lugar, sobre tu padre es muy doloroso porque es una enfermedad que no tiene una cura rápida y lo único que puedes hacer es esperar lo peor, pero algo que debes tener en mente es que a los padres y te hablo en general así compartan sangre y no, es que los hijos no le deben nada, ya que la decisión de tenerte fueron de ellos y no tuya, por ende ellos están obligados a brindarte todas las comodidades porque tú no pediste que te adoptaran, aún así los admiro tanto ya que no todos tenemos esa suerte...de ser amados y queridos por nuestros padres.

— No pensé que un loquito como tú, pudiera dar expresarse así .— Sonreí.

— ¡Oye! Por algo soy tu profesor de filosofía y he leído mucho, también estoy escribiendo unos cuantos libros, quizás cuando termine puedas leer uno y así reflexiones sobre tu vida, estoy pensando en llamarlo indigno de ser humano, aún está en borradores .— Pausó.— Escribir alivia mis penas.

— Ni siquiera tienes que pedirlo, sabes que yo lo leeré, después de todo si estás aquí hoy es porque eres realmente una persona muy dotada en lo qué haces.

— Losé, aún así gracias por escucharme .— Me miro a ojos .— ¿Tú crees que tu novio te esté engañando?

— Uhm...la verdad es que no, hay demasiada historia de por medio ¿Quieres oírla?

— Por supuesto que si, vivo y muero por el chisme, ósea a lo que voy es que puedo ayudarte, ya que si hablamos de experiencia soy mayor que tú y eso podrías usarlo a tu beneficio .— Habló el castaño.

— Entiendo, es un poco largo, así que prefiero ir a otro sitio, yo vivo en una casa no muy lejos de aquí.

— Entonces vayamos ahora mismo, solamente he tenido esta clase y de ahí ya no tengo nada más.

— Igual yo, esta es mi única clase del día.

— ¡Perfecto T/N, pues en marcha! .— Finalizó Dazai.

Dazai y yo, nos la pasamos hablando en el camino, ambos tomamos el bus para irnos a mi casa ya que ahí podemos conversar mejor sin que nadie nos interrumpa, no podía llevarlo al departamento de Rin, donde actualmente vivo con Ran, porque se prestaría para malos entendidos y lo que menos quiero es tener problemas con el hermano de mi novio.

No pasó mucho tiempo y ya habíamos llegado.

— Siéntate cómodo, pondré la tetera ¿Quieres café ó té?

— Creó que café está bien.

— Esta bien, espérame aquí, no me demoraré o puedes acompañarme como gustes la verdad.

— Prefiero quedarme aquí a leer estas revistas.

— Está bien, como digas .— Sonreí.

No tarde en llegar hacia la cocina para poner el agua y preparar café.

Habrán pasado algunos minutos y ya todo estaba listo, lleve lo que tenía que llevar donde Dazai y si, el momento había llegado.

— Bien, T/N te escuchó.— Habló para darle un sorbo a su café.

— Rindou Haitani, quien había sido tu reemplazo hace algunos meses el hoy por hoy es mi novio .— Dazai interrumpió.

— Lo sabía, nena bueno en si es algo que casi todos comentan pero tú síguele.

Reí .— Si, bueno a lo que voy es que hace algún tiempo Ran, Rin y yo fuimos atacados salvajemente por una organización criminal y bueno no es algo que muchos saben pero Ran y Rin, pertenecían a Bonten .— Dazai en ese momento casi escupe su café.

— ¡¿D-d-dijiste Bonten?!

— Si, dije Bonten.

— Supongo que ser novia de un mafioso tiene sus ventajas o bueno ni tantas ya que muchas veces tu vida está en riesgo.

— Exacto, eso es a lo que voy .— Pausé.— Después de ese ataque yo salí muy mal herida, las balas iban hacia Rin y yo me opuse, obviamente me lleve la peor parte pero la verdad no me importa si de Rin se tratase yo moriría por él.

— ¿Y si él está dispuesto a morir en estos momentos por ti? Después de todo es lo más lógico. ¿No crees?

— Créeme que lo he pensado tanto, Rindou me dijo que tenía un viaje de negocios y al comienzo las llamadas eran seguidas y con el pasar de los meses eso fue disminuyendo cada vez más, ya que si antes hablábamos todos los días al mes el hoy por hoy solo son dos veces al mes, y si decirte que estoy preocupada está demás.

— No es necesario que me lo digas ya que es algo que noto en tu mirada.

— Losé...yo, si tan solo supiera lo que está pasando en estos momentos quizás así podría ayudarlo en algo.

— No, lo mejor que tú puedes hacer es quedarte aquí estudiando se que es algo que el quiere en estos momentos y siento que si el no te a dicho lo que realmente está pasando es porque quiere protegerte .— Pausó.— Algo que puedo hacer por ti, es investigar yo trabajo en un agencia de investigación bueno en realidad no soy el único que trabaja ahí, ya que el profesor con el que me viste la anterior ves también trabajamos juntos.

— ¿Enserio harías eso por mi?

— Tómalo como el regalo de un buen amigo, realmente me apena que estés pasando por tantas cosas en estos momentos y tengas que afrontarlo a tu manera, no es nada enserio, es más siento que a mi vida le faltaba esta adrenalina que hace mucho no sentía y créeme que será un placer .— Sonrío.

— La verdad es que no se que decirte, pero empezaré com un gracias Dazai .— Mis ojos rápidamente se cristalizaron.

— No llores, porque si lloras yo también lo haré y después no hay quien me calme .— Sollozo .— ¡Ay perdón! Es tu culpa.

Reí .— Ya se me pasó, si que eres todo un personaje eh.

— Bueno, yo siento que a veces soy insoportable para otros pero para ti no es así, gracias por escuchar los consejos de este loco profesor.

— No es nada, ya haces demasiado con ayudarme que más podría pedir ante esto.

Sonrió .— Ay niña...eres un dilema .— Finalizó.

Después de haber tenido aquella charla con Dazai, se despidió de mí y después siguió con su camino. Realmente fue un momento muy gratificante poder desahogarme...me siento mejor después de sacar todo eso de mi, yo solamente espero que los días se pasen rápido para tener a Rin a mi lado.