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Model together?
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La sesión de fotos terminó finalmente, y Haewon se dirigió al camerino para cambiarse. Estaba agotada tanto física como emocionalmente, y solo quería un momento de paz.

Pero justo cuando estaba por entrar, escuchó una voz familiar detrás de ella.

—Haewon...

La voz de Lily murmurando su nombre hizo que se le erizara la piel. Un escalofrío recorrió su espalda y sus músculos se tensaron. No se dio vuelta, pero sus manos empezaron a sudar y su respiración se volvió más rápida y superficial.

Sintió cómo las manos de Lily pasaban suavemente por sus hombros, manteniéndola estática. El contacto era electrizante, pero también la llenaba de un nerviosismo que no podía controlar. Quería darse la vuelta, mirarla a los ojos, pero su cuerpo no respondía.

Lily se acercó más, su presencia envolvente haciendo que Haewon sintiera su calor.—¿Por qué...me evitas?—murmuró Lily, con voz hipnótica, su aliento acariciando la nuca de Haewon. El corazón de Haewon latía con fuerza, casi dolorosamente, en su pecho.

De repente, la puerta del camerino se abrió con fuerza y Bae entró. La interrupción fue como una sacudida eléctrica. Lily retiró sus manos rápidamente y se fue bufando, molesta por la interrupción.

Bae miró a Haewon, claramente desconcertada.

—¿Qué pasó aquí?— Haewon se llevó una mano a la cabeza, sintiendo una mezcla de frustración y alivio.

—Nada, Bae. Solo... ahora mismo estoy odiando que aparezcas como si nada.—

Bae frunció el ceño, confundida.—¿Qué quieres decir con eso? ¿Qué estaba haciendo Lily?—

Haewon suspiró y se dejó caer en una silla.—No lo sé, Bae. Solo estoy agotada. Ella apareció y... no lo sé, no puedo pensar claramente.

Bae se acercó y puso una mano en su hombro.

—Haewon, si algo está pasando entre tú y Lily, necesitas resolverlo. No puedes seguir así.

Haewon asintió lentamente.

—Lo sé. Pero no es tan simple.

—Entonces, hazlo simple. Habla con ella. Aclaren las cosas de una vez.— Bae se sentó a su lado.

Haewon miró a su amiga y luego al espejo frente a ella, viendo su reflejo cansado. Sabía que Bae tenía razón, pero el miedo y la confusión seguían dominando su mente.

(...)

Haewon recapacitó y decidió que tendría que hablar con Lily, pero antes tendría que terminar todos sus proyectos diarios.

Solo le quedaba una sesión más y terminaría, así que ya podría ir a su casa. Como ya estaba vestida, se dirigió hacia el set, para encontrarse nuevamente con Bae.

—¿Y bien, es otra sesión juntas?— preguntó Haewon.

Bae negó. —No, Haewon. Te toca a ti junto a... alguien, no lo sé.—

Por el tono de su voz, Haewon se dio cuenta de que Bae sí sabía con quién le tocaba, pero no le quería decir. Haewon bufó y se dirigió hacia el set para esperar a su compañero.

Le preguntó al staff quién era la persona con la que le tocaría realizar la sesión de fotos, y antes de que pudieran responder llegó.

Era Lily, Lily Jin Morrow.

Haewon se sorprendió y casi se desmayó al verla, pero disimuló y siguió con su cara seria para no delatarse. Lily solo le dirigió la vista y se posicionó para comenzar con la sesión.

La sesión de fotos comenzó con ambas modelos en poses relativamente simples, pero a medida que avanzaba, las indicaciones del fotógrafo se volvieron más desafiantes y provocativas.

Primero, Haewon y Lily tuvieron que posar una frente a la otra, sus cuerpos inclinados hacia adelante hasta que sus frentes casi se tocaron.

Las manos de Haewon se apoyaban suavemente en los hombros de Lily, mientras que Lily descansaba las suyas en la cintura de Haewon. La cercanía hizo que ambas pudieran sentir la respiración de la otra, creando una tensión palpable en el aire.

Luego, el fotógrafo les pidió que se sentaran en el suelo, con las piernas entrelazadas. Lily se acomodó entre las piernas de Haewon, su espalda contra el pecho de esta.

Haewon envolvió sus brazos alrededor de Lily, sus manos descansando cerca del abdomen de la mayor. Los cuerpos de ambas se moldearon juntos de manera íntima, generando una imagen cargada de sensualidad.

En la siguiente pose, Lily se paró detrás de Haewon, sus brazos rodeando su cuello y sus labios casi rozando la oreja de Haewon.

La proximidad de sus cuerpos y el aliento cálido de Lily sobre la piel de Haewon provocaron un escalofrío en la castaña, visible solo para aquellas que estaban lo suficientemente cerca para notar los sutiles cambios en su postura.

Finalmente, llegó la última pose, la más desafiante. El fotógrafo les pidió que se miraran fijamente a los ojos mientras sostenían un labial entre sus labios, a punto de besarse. Haewon y Lily se acercaron lentamente, sus rostros tan cerca que podían sentir el calor del aliento de la otra.

Sus labios apenas se separaban por el labial, y la tensión entre ellas era tan intensa que parecía que el tiempo se había detenido. Ambas podían sentir el palpitar de sus corazones, el nerviosismo y la atracción en el aire.

Las instrucciones del fotógrafo fueron claras: mantener la mirada fija y no moverse.

Haewon sentía que sus manos sudaban y su respiración se aceleraba, consciente de cada centímetro que la separaba de Lily. La cercanía de Lily, el suave roce de sus cuerpos, la hacían desear algo más, algo que no podía expresar en ese momento.

—Perfecto, manténganlo así—dijo el fotógrafo, su voz apenas un murmullo comparado con el ruido ensordecedor del corazón de Haewon.

Después de lo que pareció una eternidad, el fotógrafo finalmente les permitió relajarse. Haewon dio un paso atrás, liberando un suspiro que no sabía que estaba conteniendo. Lily hizo lo mismo, sus ojos aún fijos en los de Haewon, como si estuvieran teniendo una conversación silenciosa.

El staff aplaudió su desempeño, rompiendo el hechizo que parecía haberlas atrapado. Haewon se dio la vuelta rápidamente, tratando de ocultar el torbellino de emociones que la sacudía.