〃∬❨Ιηςσrrεςτσ❩∬〃

Así es plebes, vámonos con la ilegal y el sugar Daddy 😯😅

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『MarcoSaku』

Sabía que era incorrecto, sabía que era una falta a la moral, pero dios, con solo ver esas piernas color crema hacían que todo su sistema hiciera corto circuito. El era muchísimo más mayor que ella, prácticamente le triplicaba la edad. También estaba la cuestión con su padre y quiénes adoptaba como sus hijos, todos se consideraban hermanos. Pero a esa chiquilla de trece años nunca la vio como una hermana.

(Nta: che madre, me voy al puto infiero por escribir estás cosas, haya las veo!!)

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Comencemos con aquel día en que comenzó todo. Fue hace unos meses, la tarde estaba hermosa, el agua golpeaba suavemente los laterales de aquel enorme barco, todos los integrantes de la tripulación estaban en cubierta y Edward, el padre de todos, estaba en su quinto sueño con un globito saliendo de su nariz.

Los tres primeros comandantes estaban tomando los últimos rayos sol el la proa del barco, unos más jugando cartas en cubierta y otros tratando de pescar algo, de los cuales solo eran tres. Fossa, Haruta y Namur estaban compitiendo para ver quién conseguía el pez más grande, no obstante en toda la mañana no había picado ninguno...

—Humm~ esto es aburrido, llevamos cuatro horas sentados y no pica nada.. –dijo con decepción Haruta– ..me duele el trasero..

—Y si lo dejamos en empate??.. –propuso Fossa ya cansado de estar pescando sin obtener nada a cambio– ..tu qué opinas Namur?? ¿Namur? –ambos miraron como el giojin no dejaba de mirar algo en el océano, los dos comandante voltearon hacia la dirección de su nakama–

—Un barril.. –solo dijo eso y se lanzó al mar–

...

—Apuesto que es un licor delicioso.. –dijo Haruta saboreando el contenido–

—Pues ayuda o no vas obtener nada.. –Namur y Fossa subían el barril, rápido Haruta los ayudo–

Ya unos cuantos tripulantes se habían acercado para ver lo que los tres comandantes habían subido al barco, la mayoría tenían curiosidad aunque algunos estaban alertas a lo que pudieron haber encontrado. Ace saltó desde la proa hacia sus nuevos hermanos, pues hace algunas semanas atrás se había vuelto parte de la tripulación, camino entre los chicos hasta llegar a los tres involucrados...

—¿Que esperan?.. –pregunto animado tras el silencio que se había formado– ..abranlo..

Ya más contentos, Haruta con ayuda de Fossa abrieron el barril, el cual extrañamente estaba muy suelto. Pero lo que muchos esperaron encontrar ahí no fue un delicioso ron o ninguna otra bebida alcohólica, no, dentro se encontraba una niña de cabellera rosa junto con una mochila ligera. Namur la cargo en brazos y la colocó en el suelo de la cubierta, parecía muerta...

—¡Marco! –gritó Ace, alertando al mayor–

Marco acudió al llamado y a paso rápido llegó junto a la niña, dispersando a quienes se habían juntado en el proceso. Dos más enfermeras llegaron para ayudar, pero al parecer todo estaba controlado...

—¿Que sucedió?.. –preguntó Izou llegando– ..¿Y ella?

—Esa bien, solo está inconciente y le falta líquidos-yoi.. –apuntó a una botella vacía, al parecer contenía agua–

—¿Que hacemos?.. –preguntó Ace curioso, era nuevo en eso de ser comandante de flota–

—Manda a llamar a los comandantes-yoi..

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Ahora estaban ahí, todos los comandantes de flota al rededor de padre. En el suelo la jovencita que aún estaba inconciente...

—¿Por qué una niña estaría en un barril de ron?.. –preguntó Izou confundido–

—Tal vez su barco náufrago.. –opinó Kingdew, esa era la respuesta más lógica–

—No creo, mira.. –Curiel mostro el bolso que la jovencita traía–

—¿Un cuchillo?.. –habló Vista cogiendo dicha arma, era muy extraña pues nunca había visto nada parecido (es un kunai)–

—Eso es un cuchillo kunai.. –respondió Izou tomando el arma que Vista le había entregado– ..raro, pensé que solo había ninjas en Wano..

—Tal vez salió a navegar.. –dijo Ace–

—Un ninja en el mar??.. –preguntó curioso Jozu–

—Por el momento hay que esperar a que despierte. ¿Que opinas, Padre?.. –preguntó Vista mirando a la pequeña pelirrosa y luego al mayor–

—Como dijo Kingdew, lo más probable es que su barco náufrago, o tal vez escapó de el.. ¿La revisaron por si traía alguna marca que la ligue con un esclavista?.. –pregunto a sus hijos. Estos desviaron la mirada, podían ser piratas pero no pederastas–

—No..

—¿Por qué?.. –cuestiono hacia Vista, este desvió su mirada a otro lado–

—Es una niña.. –El mayor entendió a sus hijos, suspiro y miró a Marco–

—Las enfermeras, ¿Por qué no la revisaron?..

—Se nos paso por alto buscar alguna marca, así que las despedí-yoi.. –dijo Marco. Edward suspiro calmado–

—¿Podrías revisarla?..

—Por supuesto, padre..

Todos estaban incómodos, eran temibles piratas pero jamás le harían daño a un niño, mucho menos tocarlo de forma sexual.

Marco era un doctor y no le incomodaba eso. Era su labor trabajar con el cuerpo humano, sea de un adulto o de un niño, hombre o mujer. Así que se dispuso a inspeccionar el cuerpo de la menor, no obstante, cuando trato de levantar su blusa roja, la niña abrió los ojos. Verde choco contra azul. Luego verde se levantó y se alejo del azul.

...

Sakura había despertado, tan solo a segundos de ser tocada por un hombre que ella no conocía, ni aunque la conociera. Se apartó de el y se puso en guardia, miró los ojos de quienes la miraban. Alguien normal se asustaría de la mayoría de los individuos que ahí se encontraban, pero ella no, bueno, antes si. Prácticamente hace una semana...

—¿Podrías tranquilizarte-yoi?.. –pidió amablemente el hombre piña. Sakura no bajo su postura en ningún momento–

—¿Que paso?.. –preguntó con el entrecejo fruncido. Un tipo de piel extrañamente coloreada le respondió–

—Te encontramos dentro de un barril de ron..

Entonces Sakura recordó todo, absolutamente todo. Inconcientemente quiso tocar su espalda, no obstante desistió al último momento. Volteó a ver al más alto de todos, sorprendiéndose en el intento. Su cuello estaba hasta atrás tratando de ver al gigante, hizo un pequeño puchero y retrocedió para así tener una mejor visión...

—Supongo que necesitan una explicación.. ustedes son.. –volteo a ver el mástil, donde la bandera de la banda hondeaba libremente contra el viento– ..piratas.. no soy pirata, el barco en el que estaba náufrago y para salvarme me metí en el barril..

—¿Por que tenías esto entre tus pertenencias?.. –preguntó Izou mostrando el cuchillo kunai. Cualquiera con un ojos meticuloso se hubiera dado cuenta del pequeño agrandamiento en los párpados de la menor, pero al parecer ninguno de los comandantes lo noto, a excepción de Marco y Edward–

—Lo robe.. –respondio calmada–

—¿Por qué?.. –preguntó está vez Ace. Sakura lo volteó a ver–

—Para cuidarme.. –Sakura miró por el rabillo del ojo la intención de un castaño con una cicatriz– ..el barco que náufrago no era la clase de barco amigable, simplemente quise estar protegida..

—Y tus padres, ¿Dónde se encuentran?¿Estaban en el mismo barco?.. –preguntó está vez Barbablanca–

—Ellos..

Un disparo y mucha sangre, nunca había escuchado aquel sonido producto de un arma que jamás vio.

—Murieron.. no estaban conmigo en el barco.. –Sakura nunca quitó sus ojos de los del mayor–

—¿Eres una esclava-yoi?..

—Nunca, si escapas, nunca muestres tu marca.. –Sakura asintió ante las palabras de su mentora–

—No.. –fue simple, pero había algo más en su respuesta– ..vengo de una isla donde el clima variaba mucha, ocurrió un desastre natural y muchos perdieron la vida, yo fui una de los únicos que logro escapar antes del desastre, por desgracia mis padres no.. el barco en el que estaba no era del todo confiable, había gente mala, así que decidí tomar el ku-cuchillo para protegerme.. –titubeo cuando hablo del Kunai, por poco y se le sale decir el nombre del arma ninja– ..después hubo una tormenta y el barco se volcó, por suerte logré meterme en un barril junto mis pertenecías..

Por lo poco que había escuchado hablar de sus compañeros, los ninjas eran muy raros, de ahí el porque dijo cuchillo en vez de kunai. Durante toda una semana repaso lo que podría decir si escapaba, solo si por algún milagro lograba escapar. Meticulosamente creo una historia creíble y no muy fantasiosa, evitando incluir que era un ninja, de dónde provenía y que fue esclavizada. Por suerte, y obra divina, aquella tormenta logro volcar el barco en el que se encontraba...

—Podria quedarme hasta llegar a una isla??.. –pidió al mayor, no solo por la bandera (pues tenía su característico bigote) o porque era el que más daba aire de líder, todos los presentes escuchaban atentamente lo que el mayor decía, como subordinados– ..trabajaré..

—Bien.. Ace, llévala a la bodega.. –miro al moreno y luego a la pelirrosa– ..no contamos con alguna habitación disponible, espero que no sea de tu disgusto, también la cubierta es buena para dormir, si no llueve..

—No hay problema.. –respondió sería–

—Acomoda tus cosas, luego sal a cubierta a comer.. –Sakura asintió ante la orden del mayor– ..mañana trabajaras limpiando y ayudando en la cocina, probablemente tardemos tres semanas en llegar a alguna isla..

—Si, ayudare en lo que pueda..

—Por cierto.. –la pelirrosa sintió para que prosiguiera– ¿Hace cuanto fue esa tormenta?..

—Fue ayer..

...

Luego de que todos los comandantes se dispersaran, y de que Ace se fuera con la menor, Marco se acercó a su padre...

—Esta mintiendo.. –no pregunto, lo afirmó–

—Ha de tener sus razones.. tienes el cuchillo??.. –Marco le pasó el Kunai, el mayor admiro dicho objeto, en el era tan pequeño e inservible, pero en manos de un ninja era un arma letal– ..la dejaremos cuando paremos en alguna isla..

...

Sakura estaba sentada en un costal de harina, sus mochila estaba aún lado de ella abierta. La chica apreciaba una foto donde salía ella y sus dos padres, además otra donde estaban sus amigos y maestro, todos vestidos de manera informal, una fiesta que habían tenido ya hace tiempo. Además de esas dos fotos no traía muchas cosas, el listón que le había regalado Ino y la propia mochila, también el Kunai, pero ese se había "extraviado". No los culpaba, después de todo era una extraña que había subido abordo, en este caso la habían subido...

—Sakura.. –Ace entro a la bodega cuando Sakura guardaba las fotos en la mochila– ..toma..

La chica sonrió y tomo las mantas y la almohada...

—Humm~ no tenemos ropa para niña, podría prestarte una camiseta y unas bermudas.. –la ropa que traía la joven estaba rota y se veía mugrosa–

—Solo una camiseta, gracias.. –dijo sonriente, aunque había melancolía en su sonrisa–

—Si quieres bañarte tienes que despertarte muy temprano, yo paso por ti en la mañana y te entrego la camiseta.. –sonrio el chico pecoso– ..pero eso será mañana, ahora vamos a comer.. –el estómago de la chica rugió en afirmación–

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La comida estuvo muy animada, los tripulantes del barco cantaban, jugaban y reían. Sakura decidió comer lejos de ellos, cercas de la barandilla, no apetecía comer junto a ellos, y aunque así lo fuera le era incómodo, pues no conocía a ninguno tripulante.

Ace y algunos de los comandantes la miraban desde lejos, comían y de vez en cuando le lanzaban un vistazo. Ace era el que sentía más empatía por ella, le recordaba a el cual subió por primera vez al enorme barco. Sonrió como solo el lo puede hacer y camino hasta ella...

—No tienes mucha hambre.. –dijo apuntando al plato medio lleno de la niña. Sakura negó con la cabeza gacha–

—Hump.. –asintió desganada–

—¿Te apetece más un postre? Si estás triste come un postre..

—Cariño, si estás triste come un postre.. –la mano de su cariñosa madre le revolvió el cabello. Siempre, cuando llegaba triste por la indiferencia de su compañero, la rubia le preparaba un postre–

—Tienen, Humm.. –jugo con sus dedos un poco– ..¿Amitsu?

—¿Amitsu?.. –preguntó Ace curioso, nunca había escuchado el nombre de ese postre–

—Si.. Humm, está hecho con gelatina de algas, helado y fruta..

—Nunca había escuchado de él.. –Sakura se sorprendió, aunque no lo demostró–

—Era un típico postre de mi isla, supongo que afuera no se ve mucho..

—Si... pero hay helado en la cocina.. –Sakura asintió y siguió al mayor–

...

Sakura tenía tres reglas para sobrevivir en esta vida:

1°-. Mentir, las mentiras te mantienen viva.

2°-. Recordar porque mientes.

3°-. No bajar la guardia, mucho menos por alguien que te ofrece comida con una sonrisa.

La tercera no era válida en ese momento. Ace había sido tan amable de robar un bote de helado y compartirlo con ella. Estaba tan contenta de probar algo dulce, desde hace una semana no probaba nada parecido. El dulce le alegraba, el dulce le traía recuerdos lindos. Al menos, solo por esa noche, quería dormir sin recordar nada.

..

Sakura había caído dormida en el hombro del pecoso. A los pocos segundos Ace también había caído dormido...

—¿Por que le pusistes tranquilizantes al helado-yoi?.. –Thatch sonrió ante la pregunta–

—Queria saber quién robaba el helado, al parecer Ace es el culpable..

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Le dolía la cabeza cuando despertó, sentía pulsaciones y sus oídos escuchaban un horrible pitido. Rápido se dio cuenta de lo acontecido en el día anterior, no era un sueño y era libre, una preocupación menos.

En fin, utilizando su ninjutsu médico alivio el dolor de cabeza, tenía que ser mucho más cuidadosa en utilizar sus habilidades ninja, no se sabe cuándo puede estar un fisgón viéndola. ¿Pero quién estaría despierto a las tres de la madrugada?. Como una rutina diaria siempre se levantaba a las tres de la madrugada, limpiaba su cuarto, colocaba su ropa en la lavadora automática mientras preparaba su almuerzo y uno ligero para el entrenamiento, luego sacaba la ropa para colgarla en el patio trasero de su hogar y corría a su habitación para cambiarse a su ropa ninja. Era una rutina diaria que hacia todos los días, a excepción de aquellas veces en que tenían misión fuera de la aldea. Pero ya no estaba en Konoha, ahora.. ¿Como sería su rutina?. Bueno, no le dio mucha vuelta a la hilacha y salió de la bodega para tomar un poco de aire. Bajo un poco la cabeza, aún no se acostumbra al aire salado del mar. Estaba tentada a ir donde se encontraba Ace, para pedirle la camiseta, de todos modos ya conocía su firma de chakra.. Haki.. ¿Chaki?.. en fin, eran lo mismo. Pero, si hacia eso, se vería muy sospechoso, mejor dejar que el chico viniera a ella.

Pasaron dos hora hasta que el joven de piel morena se hizo presente, en su mano traía una camiseta roja y al parecer acababa de despertar...

—Buenos días, Sakura.. –saludo sonriente, o eso parecía, su cara aún estaba apoderada por el sueño y el cansancio. Sakura lo saludo y luego bajo de la barandilla– ..vamos haa~ te llevaré a un baño..

Así si más ambos comenzaron a caminar. Ace se tambaleaba mientras murmuraba cosas que no llegaban bien al oído de la rosada, en cuanto a Sakura, bueno, ella iba inspeccionando el barco y creando un mapa mental sobre la zona, no se sabe cuándo es bueno tener todo bien investigado.

En fin, cuando Sakura llegó al baño, en compañía del moreno, ingreso al pequeño cuarto y dejo que Ace regresara a su camarote. Dentro era muy pequeño, un retrete, donde era muy difícil para pasar al otro lado, y una ducha en en fondo. Cerro la puerta con seguro e inspeccionó el área, por suerte no había ningún lugar por el cual la podrían fisgonear...

—Al menos estaré segura.. –dijo aliviada retirando la ropa que traía puesta desde hace una semana–

La licra negra estaba en buenas condiciones, su ropa interior también, lo único que estaba quemado y sucio era su vestido rojo. Lo hizo bolita y lo dejó aún lado, por suerte la playera que Ace le dio cubriría muy bien su espalda. Desnuda y tranquila ingreso al baño, la agua estaba tibia y le daba una agradable sensación, la marca en su espalda aún ardía pero ya no tanto como la primera vez, en algunos días terminaría de cicatrizar, por suerte sabía ninjutsu medico.

El agua cubrió su cuerpo y se deslizó hasta desaparecer por el desagüe junto con la mugre que traía encima. Cogió un poco de champú y lo frotó en sus rosados mechones, habían crecido desde que Sasuke se marchó de la aldea, lo había olvidado cortar, lo estrujó un poco hasta arrancarse algunos cabellos, luego lo soltó y dejo que el agua se llevará sus lágrimas. En fin, después de un tiempo mojándose bajo el agua apagó la regadera, salió y se seco la piel. La playera que Ace le había traído era roja, que bien, su color favorito, aunque le quedó un poco larga...

—Ace-san.. –dijo al salir del baño, el pecoso no se veía por ningún lado así que comenzó a caminar– ..Ace-san…

—Ace regreso a su cuarto.. –la chica saltó en su sitio al escucharlo tan de repente. Namur sonrió ligeramente– ..todos están dormidos..

—Heemm.. Humm.. –titubeo. Namur ladeó la cabeza confundido, luego resopló molesto, siempre sucedía lo mismo cuando lo conocían–

—¿Que?.. –preguntó molesto. Sakura desvió la mirada avergonzada, no quería molestarlo ni nada por el estilo, pero nunca en su escasa vida había visto a una persona como el–

—Lo lamento, este.. –se rascó la nuca avergonzada– ..en mi isla no había visto a nadie con tu tono de piel.. lo lam..

—¿Y eso acaso importa? –fruncio el entrecejo– ..las personas como tú siempre se comportan igual con alguien de mi especie..

—¡Oye, yo no te dije nada ofensivo! –gritó irritada– ¡Solo me quería disculpar por mi comportamiento!

—Que no dijiste nada?? Con tu comportamiento es más que suficiente..

—¡Rara!¡Frentona! Así me decían, ¡Solo por tener está tonalidad de cabello y mi frente! ¡Odio mi cabello!.. ¡Perdona por como me comporte pero nunca había visto a un giojin! –una vena resaltó en su sien– ..¡Me sucedió lo mismo con los gigantes, las personas con dos articulaciones en los brazos y más personas! ¡¡¡Nunca he salido al mar!!! ¡Siempre viví con papá y mamá en mi isla! –su cara estaba roja y de sus mejillas bajaban lágrimas al igual que moco de su nariz–

Simplemente explotó, tantas emociones en su sistema que ya no pudo soportar más.

Restregó las lágrimas y el moco con su antebrazo, pero aún sus ojos estaban hinchados y rojos...

—Tengo que ir a limpiar, ¿Por donde empiezo?.. –preguntó por lo bajo. Namur estaba en silencio, luego comenzó a caminar con Sakura detrás de él–

Si, era un tonto por discutir con una niña.

...

Sakura barría el suelo de la cubierta, había polvo y algunos líquidos dispersos en el suelo, ya había retirado los platos y vasos, igual que los cubiertos, solo faltaba terminar de barrer y trapear. Las juergas que armaban los piratas siempre eran así??, Quien sabe.

Pensó en lo que haría cuando desembarcaran en la primera isla, conseguir algún empleo o vivir del campo, evitar a todos y morir a una edad avanzada, si, es un buen plan. Suspiro agobiada...

—¿Estás bien?.. –preguntó un castaño con una cicatriz en la cara–

—Si.. –respondió arisca–

—Parece que no.. –enserio, si no media su fuerza el palo de la escoba terminaría partido en dos– ..mi nombre es Thatch.. –como si a ella le importará eso, solo los conocería por tres semanas–

—Soy Sakura..

—Solo Sakura??.. –sonrió para luego caminar a la barandilla y sentarse en ella–

—Solo Thatch??.. –preguntó sarcástica, termino de barrer y comenzó a tirar agua en el suelo, luego se hincó y fregó las partes dónde habían manchas con una esponja y jabón–

—Me agradas niña..

—Aja, ¿Que tengo que hacer después de esto?.. –el castaño la miró mientras está terminaba de trapear–

—Vamos, hay que pelar papás para el desayuno.. –la niña miró el sol que lentamente iba saliendo por el horizonte– ..pensé que aún estabas dormida, ¿Por qué tan temprano?..

—Ace-san dijo que tenía que levantarme temprano para bañarme..

—Si, pero eso es demasiado temprano.. –la chica levantó los hombros restándole importancia–

...

...

Thatch la miró a lo lejos, la forma en que pelaba las papas, dios, eran perfectas, ni siquiera las suyas eran tan precisas. Y la manera en que movía el cuchillo, era como si tuviera años de experiencia.

Sakura fue entrenada, al igual que todos sus compañeros, desde la infancia para utilizar Kunais y shurikens, estaban en su sistema mover tan ágilmente un cuchillo cualquiera. Bueno, también estaba el tema de las papas con su equipo, Kakashi había tomado una sencilla misión de rango D en el comedor comunitario de Konoha, toda una semana estuvieron pelando papas, que recuerdos...

—Ya las termine de pelar, que hago ahora??..

Thatch dejo lo que hacía y miró a la pelirrosa, sonrió y apunto a la gran olla que hervía en el fogón. Sakura entendió y con cuidado las colocó en el agua...

—Vamos a hacer tortitas de papas, arroz al vapor y algunos complementos adicionales. ¿Por qué no llamas a Izou?.. –preguntó a la rosada, está asintió– ..es el tipo con pintalabios rojo y cabello largo azabache, se lo peina como una mujer.. hummm.. creo que a esta hora están en las duchas, ¿Podrías ir por el?..

La chica asintió y salió de la cocina para ir en dirección a las duchas, aun dentro de la cocina se escuchaba a Thatch murmurar algunas cosas como que a Izou le sale bien el arroz y a el se le vate...

—No le dije donde estaban las duchas.. –dijo dejando el cuchillo sobre la mesa–

...

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Sakura sabía dónde estaban todos, una gran acumulación de hombres en un solo punto es fácil de encontrar. Así que camino guiándose por el ¿Chaki?, Hacia dicho lugar, recordó algo y se detuvo antes de abrir la puerta, regreso sobre sus pasos y espero en la salida a qué salieran cada uno. Calculando habían alrededor de trece hombres. Uno a uno fue contando hasta que el último salió, un tipo moreno enorme con cabello anaranjado hasta los hombros...

—Humm.. disculpe.. –el sujeto paro y miró a la menor con duda– ..¿Sabe dónde está Izou?

—Esta en su cuarto.. –apuntó a dicha dirección. Sakura agradeció y comenzó a caminar– ..Que rara.. –su forma de caminar era muy rara al igual que su espalda, demasiada recta y los músculos de su cuello estaban bien trabajados, sin parecer exagerados, como si entrenará con un toro–

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Por suerte, una grandísima suerte, no había nadie cercas, así que el único lugar al cual se dirigía era uno, pues solo una firma de chakra se sentía. Toco tres veces y espero que saliera.

Izou miró con extrañes a la chica rosada que estaba parada enfrente de su puerta, no por que estuviera ahí, sino por su postura, era recta a modo de parecer un soldadito, solo ha visto a muy pocos pararse de esa forma, pero no recuerda bien...

—¿Que sucede..?

—Sakura.. –se inclinó con respeto, mentalmente se maldijo al ser tan descuidada, solo espero a que el sujeto delante suyo no se haya dado cuenta–

Efectivamente Izou se dio cuenta de aquella forma tan peculiar de saludar, no se solia utilizar mucho fuera pero en Wano era muy común, una forma de respeto y cortesía. No supuso que aquella chica venía de Wano, no tenía la pinta...

—¿Entonces, que sucede Sakura-chan?.. –preguntó sonriente–

—Humm.. Thatch me mandó a llamarte, y murmuró algo de arroz batido.. –Izou sonrió he ingreso nuevamente a su camarote, luego le hizo un ademán a la pelirrosa para que también entrara–

El camarote estaba bien decorado, le recordaba a los festivales hanami en Konoha, muy tradicional.

Izou estaba arreglándose el cabello delante del espejo mientras miraba por el rabillo del ojo a la pelirrosa, luego observó como está movía un mechón de su cabello hacia atrás de su oreja...

—Ven.. –le dijo al terminar con su peinado. Sakura camino con un poco de desconfianza hacia el. Izou le sonrió para tranquilizarla– ..no te haré nada..

Ya delante del espejo el mayor comenzó a peinarla, un sencillo moño con algunos mechones cayendo sobre su rostro...

—Tienes el cabello muy lindo.. –Sakura se sonrojo, aunque rápido frunció el entrecejo. Izou la miró confundido aunque no dijo nada–

—¿Que tal si vamos a la cocina?.. –ella asintió un poco desganada y comenzó a caminar hacia la puerta. El moreno espero un poco para así colocarse labial rojo. Sakura lo miro desde la puerta, sus mejillas estaban rosas y miraba con fascinación sus labios ya pintados de carmín– ..¿Te gusta el rojo? –le tendió el labial para que lo probará. Ella negó–

—Si, me gusta el color pero no cae con mi piel.. –toco sus labios, sonrió de lado a lado y lo miro aún sonrojada– ..¡Pero en ti se ve muy bien!

Izou sonrió enternecido, desde el día anterior la chica se veía muy retraída y cerrada a todos, algo típico pues no conocía a nadie. Saco un labial más claro de un cajón y camino hacia la chica, le sonrió para no tensarla y paso con cuidado el labial sobre sus labios. El sonrojo de la pelirrosa aumento. Izou sonrió enternecido...

—Puedes quedarte con el labial, se te ve lindo.. –Sakura cogió el labial–

...
...

[Yo digo que a Sakura le encanta el labial rojo 💋.

Haaaa!!! No sé si poner también Izou×Sakura.

Putas, pase directo al infierno]

...
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Bueno, aquí la dejo, luego les traigo el final Xd

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