Kuroo y Bokuto han sido violentados unas cinco veces en la mente de ese extraño hombre.

-Kucha- lo llama de nuevo Bathory.

Bokuto y yo sentimos pena por la suerte que vive Kuroo. Sí, parece (pero solo lo parece) que Kuroo es una especie de atracción sexual experimentado pero mi niño es solo un nerd, raro y con amigos que impulsan su locura, eso no lo sabe Bathory.

-¿Quieres ayudarme?- le pregunta haciendo ojitos.

Puedo escuchar a la mayoría tragar saliva, es tanto el silencio que me causa horror.

Suspiro y me levanto.

-Yo lo ayudo- me acerco rápidamente hasta él- ¿En qué?

Ferid se ríe con suavidad.

-¿Es tu novio? Lo lamento- se disculpa falsamente.

-Pero no es el único- decido que es un buen momento-, Bokuky también lo es.

Los ojos de Ferid se abren con sorpresa, pero es solo por un segundo, mi seriedad no cae en ningún momento.

-¿Sucede algo, profesor? ¿Aún requiere mi ayuda?

-Izbell Clearke- parece examinarme de pies a cabeza- ¿Quién lo diría, Clearke?

Escucho como una silla es empujada hacia atrás y fuertes pasos acercarse con velocidad, al girarme el chico extraño de ojos rojos está frente a mi, ahí noto lo alto que es.

-¿No prefiere que lo ayude yo?- su expresión grita psicópata por todos lados, parece querer que yo desaparezca de la visión de Bathory, por lo que agradezco en un susurro y regreso a mi lugar.

-¿Qué diablos ocurrió ahí?- pregunta Bokuto, viendo al frente.

-Bro, te lo agradezco, no quería volver a pasar con él- Kuroo estaba rojo.

-No... No hay problema- mi tartamudear es extraño-. No sé que sucedió ahí.

Nos fijamos en que Bathory y ese chico hablan a susurros en el frente por unos segundos más.

-¡Bien, chicos, presten atención!- nos llama Bathory-. Tendo va a repartir estos Libros, necesito que para la otra semana hayan leído hasta el capítulo ocho.

Tendo, su nombre me suena conocido. Él pasa sin detenerse mucho en nosotros, nos da los tres libros y se marcha.

-¿Estas segura?- Bokuto puede ser un poco tonto, pero igual nota las cosas extrañas.

Yo no puedo dejar de observar a Tendo ahora.

-Ya, Izz, tranquila- Kuroo me habla, ganándose mi mirada, aunque él observaba ahora al chico.

-Dejenlo en paz- es lo único que soy capaz de decir antes de guardar el libro para llevarlos fuera de la clase.

Ya lejos del edificio entero, me siento más ligera.

-¿A donde nos escapamos?- pregunta Bokuto en susurros.

-¡A la libertad!- Kuroo habla de forma épica.

-Iremos a la cárcel un día de estos- les recuerdo.

-¡Ojalá no!- Bokuto ríe de forma escandalosa-, nos comeríamos a todos ahí dentro.

-El canibalismo no se practica hace tantos siglos- sonríe irónico Kuroo-, desde que se borraron las religiones.

-Supongo que todos le tememos al gobierno- analizo un poco-, si va contra sus leyes podemos romperlas.

-Callate, Clearke- Bokuto me da un golpe en el hombro- o te escucharán.

Yo subo los hombros, no es algo que me importe mucho.

Llegamos a mi cuarto en poco tiempo, Kuroo y Bokuto sacan sus libros para comenzar a hacer las tareas cuando la puerta es tocada.

-Tal vez es Tooru- digo y abro sin más.

Pero me equivoqué. Era ese chico de la mirada de miedo, ese chico que acompañaba al de cabello naranja.

Kageyama.

-¿Clearke S.A.?- pregunta.

-Sí, ¿Necesitas ayuda?- le doy espacio para que él pase.

Cuando entra mis amigos lo ven extraño.

-Él es Kageyama, viene por un Plan de Cupido- les informo- ¿Sí es por eso, verdad?

Él asiente con la cabeza, se fija en mi y puedo ver que sus ojos me reconocen.

-Es él- afirma.

Este chico no es de muchas palabras al parecer.

-¿Hinata?- mi pregunta es directa.

Vuelve a asentir.

-Necesito que me contestes, muchacho, ¿Cuanto llenas así?

-Año y medio- cuenta.

-¿Él sale con alguien?- pregunta Bokuto.

Kageyama cruza sus brazos sobre el pecho.

-Ese es el problema- Kageyama cubre su rostro con ambas manos-. Hinata tiene un problema.

-¿Noviazgo difícil o abusivo?- Kuroo parece alarmado.

-No- ahora se descubre para dirigirnos una mirada penetrante a cada uno-, él se enamora demasiado rápido de cualquier persona que conozca, es un problema que tiene.

Mi corazón se detiene un segundo.

-¿Como...?

-Hinata conoce un día a una persona y al día siguiente ya se siente enamorado de esa persona. Le pasó con todos menos conmigo.

Bokuto se deja caer de espaldas al suelo.

-¡La pones difícil!- se queja.

-No sé que deberíamos hacer- Kuroo analiza la situación.

Me levanto para tomar el cuaderno y una pluma, luego me siento al lado de Kageyama en el suelo.

×KageHina×

Eso escribo en el índice de planes, luego me voy de lleno a la página en blanco donde irá la información.

-No lo tomes a mal, pero necesito conocer a Hinata- le pido mientras continúo escribiendo el caso.

-Me está esperando en las canchas- me informa él.

-Perfecto. Vamos, la tarea la dejamos para el rato- le digo a los demás.

Dejando el cuaderno sobre mi cama, tomo mis cosas y partimos junto a Kageyama directo a las canchas donde Hinata estaba. El chico parecía generar alegría sin querer, era como un sol en medio de esa noche sin luna.

-Hinata- lo llama Kageyama al verlo.

El pequeño gira con la pelota de volley en las manos, nos sonríe también.

-¡Hola, Hinata! Venimos para tomar ideas para un proyecto- miento-. Ellos son Kuroo y Bokuto.

El chico se acerca con confianza.

-Esta bien- se ríe- ¿Ya comenzamos?

Kageyama parece ser demasiado frío con él, por lo que no me preocupa que lo descubra.

-Sí- es lo único que le responde.

Ah, muchacho, me quejo mentalmente.

Kuroo, Bokuto y yo tomamos asiento a un lado de la cancha para poder ver perfectamente a ese dúo tan raro.

-¿Creen que será muy difícil?- Bokuto se preocupa.

-No, podemos hacerlo- le recuerdo-, nosotros superamos a Cupido, podremos con esto.

-Pero no se une aún ninguna pareja de los planes...- Kuroo se gana mi puño en su hombro por ese comentario.

-Callate, estúpido gato, ya saldrán.

-Me preocupa Ciel también- Bokuto parece comenzar a bajar sus ánimos.

Yo me levanto.

-Se los mostraré, pero ayudenme. Chicas, llevense a Kageyama un rato para que yo pueda hablar con Hinata.

Ellos se levantan de golpe y corren al lado de Kageyama para acatar mi pedido, logrando cargarlo entre ambos para luego gritar que irán por aguas, que ya regresarán.

Sí, por eso amo estar con ellos en esto.

Era mi oportunidad de hablar con Hinata sin la mera interrupción de Kageyama. Era hora de saber si a él le gustaba el chico aunque fuera un poco.

-Hinata- canto su apellido para que me preste atención.

-¿Sí?- al fin pone su atención en mi.

-¿Puedo hacerte unas preguntas?- es irónico, porque es una pregunta ya.

-Ah... Claro- no parece alguien que se niegue a las peticiones agenas.

-¿Cuantas veces te haz enamorado?- le pregunto con malicia.

Su rostro se prende (literalmente, está brillando de rojo) y comienza a balbucear incoherencias.

-Vamos, Hinata, no diré nada- le prometo.

-Yoooo...

-Túuuu...

Esconde su rostro entre sus manos.

-Tengo un raro desorden ¡Me enamoro muy rápido de cualquiera!- él sigue sin verme por lo que permito que mi quijada toque el suelo de la impresión.

¡A la mierda todo! ¡Esto se está complicando!

Regreso a mi postura de interés mientras Hinata se descubre el rostro para observarme.

-¿Y qué?- le pregunto.

-Bueno... Eso me dio muchos problemas en el pasado...

-¿Por?- necesito indagar más.

-Tuve una novia... Y terminé enamorándome de su hermano una semana después.

Está vez me controlo bien.

-¿Y te gusta alguien?

-¿No comprendes, Clearke?- Hinata parece desesperado- ¡Siempre me gusta alguien por un tiempo y luego me enamoro de otro!

Oficialmente ya no quiero ser Cupido.

KageHina:
Complicándose.

Plan Para Salir Ilesos De Las Clases De Bathory:
Aún no se realiza, pero se necesita.