Capítulo unico

Belleza, yo la describiría con una sola palabra, "rosa".

La belleza para mi no es posible de describir de manera exacta, pero, con solo decir el nombre de mi color favorito, basta, ya que el hermoso sentimiento que me ocasiona verlo, es bello

Y esa descripción puedo utilizarla con el, con ese bello humano, al que antes odiaba, pero al que ahora, no puedo evitar pensar en el, simplemente me ha enamorado profundamente de su presencia, se que yo gusto de él, pero, siento miedo de intentar confesarme, mis inseguridades y el maldito de Canvas no me ayudan mucho que digamos, pero puedo intentarlo, y si soy humillado, tengo la opción de cambiarme el nombre y mudarme de cuidad.

Me encontraba en la cocina de nuestra casa, comiendo lo poco que quedaba del cereal, hoy no era el día, aún no conseguíamos la comida suficiente, pero bueno, a veces el agua me basta para no morirme, diría que la tierra también, pero mi 'estómago' no está tan acostumbrado a no comer aunque sea un poco, eso déjenselo a los reptiles, no a los robots.

Y es cierto, no me he presentado de manera correcta.
Mi nombre de Mattian, apodado Crisantemo por la flor que tengo en una de mis brazos, soy hijo de una versión alterna de Muffet y Mettaton, lamentablemente ellos fallecieron cuando yo solo tenia cuatro años, la única familia que me queda es mi hermano Tristan, aunque creo que se ha cambiado el nombre a Trajaan, también tengo a Cherry, la mascota de mi madre, el es como una niñera, siempre ha estado ahí para mi.
Realmente soy un fantasma, pero como Mettaton, puedo poseer un robot para utilizarlo de cuerpo, aunque tengo unos cuantos rasgos de araña.
Y no se preocupen, mis padres se conocieron cuando ambos tenían más de 18 años.

Ligh, el humano, es hijo de ambas humanas de Undertale, Frisk y Chara, esta última, una bruja, no digo más.
El llegó a nuestro multiverso por accidente, creo que calló por un portal o lo abrió sin querer, fue hace más de un año, ya no lo recuerdo la verdad.
Es alguien muy dulce, pacifista, simplemente perfecto, no se como se ha podido fijar en alguien como yo.

Volviendo al tema, esa mañana estaba esperando a que el llegara, como siempre, el y su grupo casi siempre nos vienen a visitar, como si no se nos pudieran despegar, parecen chicles, realmente no me molesta, pero, no me siento muy seguro, hay veces que siento que alguno de ellos se burlara de mi a mis espaldas.

Cuando me empeze a pensar de más, escuche la puerta principal abriéndose, parecia que ya habían llegado, y me alegro por ello, un poco más y me daba una crisis en medio de la cocina, y odio cuando pasa eso, más cuando Canvas esta cerca, a veces se comporta muy, como decirlo, demasido preocupado, aunque sabiendo lo que pasó a su corta edad de nueve años, no me sorprende que nos proteja demasiado, y sobre todo, nos aleje de callejones solitarios y oscuros.

Justo cuando Ligh y los demás entraron a casa, el parecía buscar algo con la mirada, yo no sabía que era lo que buscaba, quizás a Mistletoe o algo que se le había quedado, pero cuando noto mi mirada sobre el, volteo su cabeza hacia mi, no sé si me estaba mirando fíjate, ya que el siempre tiene sus ojos cerrados, pero supuse que era yo ya que rápidamente se me acercó dando pequeños saltos de niño contento

— ¡Mattian, que bien que te veo!

— ¿Cuál es la ocacion?

— ¿Acaso no puedo desearle unos buenos días a mi persona favorita? — Me dio un pequeño toque con uno de sus dedos en mi nariz, eso provocó un leve sonrojo en mi, o bueno, parece que no fue tan leve pues el soltó una leve risa, una bastante tierna y llena de felicidad, muy cute.

Me costaba mirarlo fijamente, no podía evitar desviar la mirada, tocar mis mejillas con mis garras o jugar con mi cabello, además de tartamudear, odio ponerme así frente a él ¿Pensara que soy raro? ¿Lo pondré incómodo? No lo sé, pero, creo que no, vaya, tengo pensamientos positivos, eso es un gran avance, eso, creo.

Ambos continuamos hablando, yo seguí metiendo la pata mientras el me miraba con ternura, le invite un poco de lo que me quedaba, pero lo rechazo, me dijo que no quería dejarme sin comer, y de hecho, nos trajo unas cuantas frutas, algo maravilloso, hace meses que no veía ni probaba una, muy lindo de su parte.

Después de hablar por un largo tiempo, pude armarme de valor para pedirle un gran favor

— Oye Ligh

Volteo a verme, en ese momento, se decidiría lo que pasaría con mi futuro, morir o vivir, ya lo veríamos

— Podrías, ¿Acompañarme a un lugar? Aseguro que te gustará

Logre distinguir un poco de duda en su rostro, pero no duró demasido, pues a los pocos segundo sonrió y me extendió la mano

— Yo voy a cualquier lado contigo

Les juro que pude sentir como mi corazón golpeaba desesperadamente mi pecho, me suplicaba salir, este niño me terminará matando algún día, y realmente, no me quejaría.

Le ayude a levantarse con gentileza y lo guíe a la salida de la casa, para después, llevarlo atraves del bosque, a un lugar especial.

Había una neblina espesa, no lograba distinguir nada, así que, me agache y le ofrecí subirse a mi espalda, el acepto, así podríamos llegar sin problemas, además, ya me sabía este lugar de memoria, no sería ningún problema.

El camino fue silencioso, más no incómodo, fue muy tranquilo, lindo y acogedor, sentía su respirar, era relajada, eso me alivio bastante.

Varios minutos caminado, llegamos a donde lo quería llevar, una pendiente con una casa en ruinas, o lo que antes solía ser, ahora solo quedaba una pared y una parte de un arco, de la pared, salía un hermoso árbol de buganvilias rosadas, bellos pétalos caían de manera lenta, siguiendo el dulce y delicado ritmo del aire, pasándose sobre un mantel que se mantenía debajo de la sobra del árbol.

Nos acercamos y le ayude a bajar de mi espalda

— Prepare esto para ambos, digo, si quieres quedarte claro...¿Te gusta?

Abrió sus ojos de la emoción, incluso dio brinquitos de conejo, demasido tierno, se notaba que le gustó

— No necesito más, vamos, siéntate, toma lo que quieras, ahorre lo suficiente para que pudiéramos comer decentemente

Ambos nos fuimos a sentar, le pase un vaso y un plato, le serví un poco de té frío y un postre de fresas que había preparado con lo que compré, pude notar como disfrutaba cada mordida que le daba a su comida y cada sorbo al té, como yo no soy bueno haciendo bebidas, le pedí a Aiden que me ayudara a preparar un delicioso té, que bien que le pedí que hiciera dos litros, uno de ellos se lo llevare a un buen amigo mio.

Después de que ambos comieramos con toda la tranquilidad, decidimos hablar un buen rato sobre anécdotas, como nos había ido estos días, nuestros gustos, incluso hicimos adivinanzasara ver que tanto sabíamos del otro, me sorprendió lo mucho que supiera de mi, creo que le gusto jeje.

Varias horas habían pasado, las estrellas eran visibles, el hermoso cielo color azul con toques morados, rosas y turquesas, desde acá abajo podríamos ver lo que ahora es Outertale, brillos muy lindos, acompañados junto a una hermosa luna deslumbrante.

Ligh se recargo sobre mi hombro mientras me explicaba las construcciones que podíamos presenciar, todo era muy tranquilo y lindo, pero, ya no podía aguantar más, tenia que decirle.

Suspire y me levante, poniéndome delante de él, mirándolo fijamente, con mis mejillas ardiendo y unos nervios intensos.

— Ligh, necesito decirte algo que he apuntado desde hace varios meses

Su mirada se clavo sobre mi, poniéndome más nervioso, pero solo deje todo salir, dejando salir lo que mi corazón sentía

— Sabes, amo el rosa, un color bello, lleno de tanto pero al mismo tiempo, tan escaso significado, siendo el color que la gente, por lo general utiliza para el amor, y amor, es lo que yo siento por ti, un amor, que jamás podría describirte como es, simplemente, esta ahí, haciéndome sentir feliz, lleno, vivo, he podido encontrar un motivo para vivir, por que, que sería vivir miles de vidas, si no puedo estar contigo, la persona que se ha robado miles de noches de suspiros incontables, miles de sonrisas, la persona que se ha robado mi corazón, y a quien le regalaría millones de noches más, con tal de poder permanecer a tu lado, hasta que ambos podamos descansar en paz, por siempre y para siempre, entonces, que dices ¿Te gustaría ser la persona con la que compartirías tu todo?

Mi voz no evito romperse más de una vez, incluso empecé a sollozar al terminar, siento que saqué más de lo que tenía que, pero estaba bien, al menos así el podría saber que lo que yo sentía, siento y sentiré por el es legítimo y jamás lo cambiaría por nadie ni nada más, solo el y yo, juntos por siempre, un sueño que espero se cumpla.

Sus ojos estaban como platos, cristalinos, llenos de lágrimas mientras aún me miraba fijamente, colores variados se reflejaban sobre ellos, los colores del famoso botón de SAVE y el hermoso reflejo del espacio se mostraba sobre ellos.

Aclaro su garganta para después levantarse, pararse de puntas y acercase lentamente hacia mi, posando un delicado y a la vez, hermoso beso sobre mis labios, una respuesta clara, era un si.

Así duramos al menos unos cinco minutos, no me cansaría de saborear ese dulce chocolate blanco de sus labios, pero ya se hacia demasiado tarde, y aquí, la noche es bastante peligrosa.

Antes de irnos, se acercó a mí y me dijo algo que me dejaría tranquilo de por vida

— Juro por mi vida, que yo estaré contigo, por siempre yor siempre, hasta que la muerte nos separe, por que, yo jamás abandonaría a mi felicidad

Me estiro la mano y le canto su dedo meñique

— Ligh Dreemurr nunca falla con las promesas ni sus juramentos

Yo sonreí y selle esa promesa con mi dedo meñique, mi alma latía tranquila, ya no había preocupación en mi ni en ella, así que ¿Esto es la verdadera felicidad? No, EL es la verdadera felicidad.

Cuando ya estábamos pro abandonar el lugar, me acerque a él y lo abrace muy fuerte, cosa que el correspondió

— Oh hermosa rosa, justo como tu

Soltó una leve risa, para después separarse y tomar mi mano, entrelazando nuestros dedos, ya era hora de irnos a descansar

Ahora, queda disfrutar  lo que nos queda vivir, juntos

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top