Ya sólo quedaban exactamente veinticuatro horas para que la espera de Jungkook acabara, estaba más que ansioso, sin duda sería un increíble día.

Jungkook puedo superar esas tediosas horas muy bien, aquella noche sólo se había tocado un poco.

Como siempre, realizaron su presentación y seguido de eso los miembros lo festejaron con una agradable sorpresa; un delicioso pastel y unas hermosas flores, cada uno le dio un abrazo, y Army también participó, estando en el escenario corearon las mañanitas y Jungkook sonrió agradecido.

—Gracias... ―tomó una fresa de aquel pastel

—¡Vamos a casa! — gritó Yoongi corriendo a la camioneta, cuando el staff se los permitió

Fueron detrás de él, llegaron a casa y luego de festejar un poco más por su cumpleaños, beber y de que recibiera sus regalos; durmieron un poco, fue un día bastante cansado para todos, así que en cuanto llegaron, durmieron plácidamente.

Las botellas de soju quedaron totalmente vacías, gracias al festejado.

Jungkook estaba ansioso; ya era el día en el que, por fin, escuchará los verdaderos gemidos de Taehyung.

Eran exactamente la media noche del segundo día del siguiente mes, su mejor mes, según él.

Con cautela se levantó de su cama, y caminando en puntas fue hasta afuera de la habitación, caminó dos puertas más para encontrarse con la del mayor, quién dormía sólo, y con cuidado entró.

Algo que en verdad agradecía ahora, era que, por alguna razón, Taehyung siempre que dormía; inconscientemente se desvestía...

Una vez estando dentro y al lado de su lecho, acercó su rostro al del mayor, el cual estaba con la cabeza sobre sus manos, boca semiabierta y suspirando.

Jungkook no esperó más, se colocó encima suyo y milagrosamente

Kim no despertó, ya que estaba demasiado cansado como para prestar atención a su exterior.

Jungkook no quería desperdiciar ni un segundo de esa gran oportunidad, así que también aprovechó para sacarle un par de fotos a su mayor, efectivamente, completamente desnudo.

Lentamente bajó sus pantalones de pijama, y como si se tratase de una película para adultos, realizó un sensual baile, a pesar de que Taehyung no lo veía. Y así fue como también removió su bóxer.

Nada lo cubría ya, su camiseta se esfumó hace segundos, para evitarse algún problema, acorraló las muñecas de Taehyung contra la cama, y sin esperar más, lo besó; adueñándose de esos labios, humedeciéndolos, cortó la respiración del mayor, y ya comenzaba a jadear, para finalmente despertar.

—¿Kook...? —jadeo —Jungkook , ¿qué estás haciendo? — quiso retirarlo de encima, pero por lo adormilado que estaba, el menor de ambos logró retenerlo bajo suyo

—Taehyungie... Ya no aguanto, necesito que me ayudes... Sólo tú puedes hacerlo — dijo entre besos que depositó en el cuello contrario

—¿Qué? — jadeó, realmente estaba tan desubicado

—Kook, bájate ya... — dijo algo asustado, por ser muy nuevo en eso

—Vamos, Tae — se removió en su regazo, para inclinarse y susurrarle al oído — ¿no quieres que te quite la virginidad? — rió levemente — yo sé que nadie, en tus 23 años de vida te ha tocado, ni siquiera tú mismo ¿no es patético? — dijo burlón

—No es mi culpa no ser un hormonal como ustedes — sonó firme, estaba algo molesto, porque era cierto todo lo que Jungkook dijo

—Bueno, como humano también tengo necesidades, y... — se apoyó en el pecho de Kim para verle a la cara — hace poco que encontré algo "tuyo" por ahí, y debo admitir que me dejaron con grandes dudas, y otra cosa grande también... — se rió y bajo su rostro, escondiéndolo

—¿Y....? —Taehyung volvió a estar nervioso

—Necesito — dio un brinco — hacerte — otro — mío — terminó su frase tomando bruscamente a el mayor, girándolo, quedando boca abajo

—¿K-Kook? ¿e-estas ebrio? —  su voz salió entrecortada por la repentina sorpresa. Pero luego de que el olor a alcohol llenara sus fosas nasales, entendió por qué actuaba así

Mientras Jungkook simuló darle una embestida.

—Ah... — jadeó ante el tacto y al instante se ruborizó al recordar que sus ropas no estaban

—Date vuelva ―mandó

Taehyung, asustado por el demandante tono que usó Jungkook, obedeció cuál sumiso.

Jeon, quién estaba por acabar con su total cordura, trató de no hacer nada apresuradamente y joder su única oportunidad de escuchar a Taehyung.

Tomó a Taehyung de las muñecas nuevamente - a pesar de que el mayor no hacía el menor esfuerzo por zafarse - y comenzó con un torpe beso, por culpa de Taehyung , la verdad era un principiante en ello.

—K-Kook— eso había sonado tanto a un gemido, según Jungkook

—No hagas eso — nuevamente utilizó ese aterrador tono

Taehyung se sintió pequeño.

Volviendo al beso, al igual que sus manos viajaban por todo el cuerpo de su mayor, pasando por su abdomen y terminar en sus botones, con los que jugó hasta ponerlos duros.

Jungkook ya no podía, escuchar jadear a Taehyung lo volvía loco, y cada vez ansiaba más escucharlo gemir como en aquellos vídeo que encontró en un martes de aburrimiento.