Kaesu mantenía una mirada impasible y las manos dentro de los bolsillos de su pantalón ante el gesto furioso en el rostro de Takuna. 

—Nada de lo que hagas impedirá mi cometido — y agita el informe en el aire—No con el ritual en mis manos.

—Haré lo necesario para impedir cometas tal locura. 

—Pierdes tu tiempo.

—No sabes lo que haces, estas a tiempo de recular. —expreso Takuna, intentando apelar por su lado humano.

La comisura de los labios de Kaesu se curvaron hacia arriba, era obvio que eso ya no existía en él.  La ambición de poder había gobernado su corazón desde hace mucho tiempo.

—No lograste mantenerme lejos. 

—Engañaste a gente inocente. — respondió enojado Takuna.

— Si, ellos no tuvieron la ventaja de ver mis verdadera intenciones como tu —espetó Kaesu haciendo un ademán con la mano. 

Cuando logro dar con la ubicación exacta de la cueva, Takuna, el espíritu a cargo de proteger el santuario luego del exterminio del Clan, salio a su visita al sentir sangre Himitsu, pero cuando ambos quedaron frente a frente le prohibió inmediatamente la entrada.

Mediante la frustración conoció a Nakamoto, y lo convenció de emprender el proyecto. Mas tarde, vio irritado como su socio no quería arriesga a ninguno de sus trabajadores dentro de la cueva. Fue cuando se le ocurrió convencerlo de contratar el servicio ninja de la aldea mas cercana; Konoha. 

—¡No!— grito Takuna cuando boqueo la primera palabra, lanzo un daga en forma de rayo hacia Kaesu, pero este la esquivo con facilidad.

—Es cierto, tu poder no es tan fuerte afuera del templo. —corroboro rascando su barbilla fingiendo sorpresa.  —Hasta pronto.

Alzo una mano y pronuncio un jutsu de sellado que hizo retroceder a Takuna, pero que sin darle tiempo lo envolvió en una esfera de luz.  

Kaesu camino hacia la esfera cuando miro dentro de esta, la sonrisa en su rostro se ensancho llena de excitación al mirar al molesto espíritu contra la superficie tratando de protegerse ahí dentro. 

—Sabía serías como un grano en el culo. Pudiste ponerte de mi lado, como guardián y descendiente del Clan Himitsu, pero ahora desaparecerás por... ¿que casualidad? por este mismo jutsu de sellado perteneciente al Clan.

Takuna coloco las manos sobre rostro, tratando de protegerse de la luz. Pensó en la joven chica de cabello violeta, rezó por que llegara a tiempo. Takuna podía prohibirle su entrada a los seres de corazón oscuro, pero no a los de corazón puro. Así que cuando vio a Boruto y Sumire, temió y desespero al ver que llevarían inconscientemente el grabado hacia Kaesu, pero entonces antes que ser marcharán, creyó que igual podrían ser su esperanza.

Así que por eso toco a Sumire, para poder aparecer frente ella afuera del santuario. 

Kaesu se alejó de la esfera y se detuvo justo en la entrada de la cueva. Sintió algo frenarlo. Takuna había colocado un jutsu de retención. 

—Pero no servirá de nada.

Alzo una mano y con la otra sostuvo el informe, las palabras fluyeron de su boca como agua. Solo basto la ultima palabra y la tierra bajo sus pies empezó a temblar. Con precaución hecho hacía atrás. La sonrisa no se apartada de su rostro. 

No paso mucho tiempo para que algo mediano apareciera arriba de la entrada de la cueva.

Tenia forma de núcleo, de color morado, Kaesu dio un impulso y voló hacia el. 

—Precioso —pronuncio hipnotizado viendo tal poder. 

Extendió su mano hacia él y cuando estuvo a unos milímetros de tocarlo, algo impacto contra él, haciéndolo volver a tierra bruscamente. Enfurruñado alzo la cabeza del suelo, y miro hacia Boruto y Sumire, quienes le miraba enojados. 

—¡Señor Takuna! —exclamo Sumire al mirar la esfera donde estaba retenido el espíritu. Corrió hacia él y toco la esfera, vio con lastima como el espíritu iba de a poco desapareciendo. 

—Ninjas de Konoha, son mas apto de lo creía —hablaba Kaesu mientras se levantaba, había petulancia en su voz. — Veo derrotaron a mis subordinados.

Boruto no respondió, estaba concentrado, esperando a su siguiente movimiento.   Kaesu se quedo por un momento de pie, mirando por igual a Boruto, enseguida sin pensarlo se abalanzo hacia él y Boruto enseguida le siguio el paso metiéndose ambos en una lucha cuerpo a cuerpo. 

—Es rápido—, pensó Boruto, cuando por poco no esquivo una patada a su cara. 

Sumire estaba aun enfrente de Takuna, mordiendo su labio, meditando sobre la situación, pensando a la vez como poder ayudarlo. Pero no conocía como contrarrestar aquel sellado. Entonces Takuna alzo un poco la cabeza y Sumire entendió lo que le susurro.

«El segundo líder debió de destruir ese poder» vocifero Sumire. 

«No supo como destruirlo, entonces junto al Clan Uzushio, desarrollaron un gran poder de sellado, y cada cierto tiempo recitaban por miedo a que se liberara... hasta que llegó el tercer líder, y descubrió como librarse de tal poder, pero la ambicioso es la perdida de la cordura para cualquier hombre, y cuando casi estuvo todo preparado, lo asesinaron aquellos miembros del concejo»

«Dios...» susurro Sumire.

«Si. Pero irónicamente llego la guerra, y todos fueron asesinados. Ninguno de esos individuos logro hacerse con el, pero como espíritu protector, me quede a custodiar solo porque fue en un principio mi deber... Hasta que llego Kaesu y su anhelo de poder»

Sumire mordió su labio inferior. 

«Así que, hay una manera ¿cuál es?»

Sumire miro hacia Boruto.  Mantenía una ardua batalla contra Kaesu. Hacia tanto tiempo que no lo veía luchar de esa forma. Y como siempre, había cierta elegancia y poder en su manera de combatir. Y estaba entregado. Ninguno quería de nuevo esa oscuridad pisara sus talones, no de nuevo. Si estaba en sus manos, lo detendrían antes de que se propagara. 

Cerró sus ojos.

—Lo haré.—Pronuncio decidida cuando los abrió. 

Camino hasta la esfera lentamente, de pronto corrió, con todas sus fuerzas.  

«Si, tomas el poder, Kaesu, ya no podría tomarlo...» 

«Se siente como que hay un pero» intento bromear en medio de aquel suspenso.

«Fue un pacto, el primer líder en su ambición, hizo un pacto con algo oscuro...Es algo fuerte, cuando el primer líder lo tomo, murió a no soportarlo... Pero ahí entra el tercer líder, y podre ayudarte, pero puede Kaesu me liquida para poder tener control total sobre la cueva... Así que puedes también morir»

«Yo lo tomaré Sumire» le había dicho Boruto cuando le explico la solución de Takuna «Ya tuve a ese tipejo de Momoshiki dentro de mi ¿Puede ser peor?» 

—Boruto, siempre te estas sacrificando por los demás... —, pensó con tristeza mientras corría hacia el núcleo. Pensando en aquel año donde pelearon contra los Otsutuski y él estuvo a punto de morir en varias ocasiones para proteger el mundo shinobi— Tengo miedo esta vez no puedas despertar y no seguir con esa paz que pareces haber recuperado luego de tanto...Así que yo lo haré, tu ya has pasado por mucho, Boruto. 

Se impulso lo que pudo y cuando estuvo a unos centímetros, sonrío determinada.

Por su mente pasaron todos aquellos agradables momentos junto a sus mas queridos amigos.

Por su mente paso la agradable sonrisa de Boruto y su mano extendida hacia ella, ayudándola en el momento en que mas se sintió perdida. 

Extendió la mano. Toco la esfera. Todo se volvió negro. 

—¡Sumire no! — grito con todas sus fuerzas Boruto, la sorpresa y la angustia impregnada en su rostro.

Kaesu miro absorto como aquella insulsa corría hacia su núcleo. 

—¡Maldita perra lo querías para ti! — vocifero iracundo e ignorando a Boruto se lanzó a Sumire.

Boruto fue tras de él enseguida.

De su espalda salieron unas cadenas, las cuales salieron disparadas hacia Kaesu.  Este se dio cuenta, y salto para esquivarlas. Boruto se lanzó de nuevo a él y se enfrascaron en una nueva pelea cuerpo a cuerpo.

Kaesu estaba colérico, su plan había fallado cuando Sumire tomo el núcleo y su cuerpo absorbió todo su poder.  Pero Kaesu no sabía que Boruto también estaba iracundo, pensando en lo mal que se debía sentir Sumire luego de tomar aquel sacrificio. 

Boruto lanzo un improperio cuando Kaesu le golpeo  en la mejilla en un descuido.  Volvió a lanzarse hacia él, aprovechando Boruto había trastabillado, pero no contó los rápidos reflejos del Uzumaki y este lo esquivo y giro para saltar y quedar encima de él. 

 Boruto enseguida saco un kunai y fue a clavarlo en el pecho de Kaesu, pero este se aparto rodando por el suelo, al mismo instante que se levanto formo unos sellos y de su boca  salio disparada una gran bola de fuego. 

Boruto hizo lo mismo, pero de su boca salio un gran chorro de agua. 

Ambos jutsus chocaran entre si, y siendo el de Boruto mas potente, hizo retroceder el fuego de Kaesu y llegar hasta este, hasta hacerlo derribar y volar varios metros hacia atrás.  

Boruto salio corrió hacía el, con un rasegan en mano.  

—Maldito seas — escupió, y saco un sello de su chaqueta. —Tendré que usar...

Pero no termino de hablar, sus ojos se vieron desorbitados, bajo la mirada y miro con horror el filo de la espada atravesado su pecho. Miro por detrás de su hombro y miro sorprendido al rubio, luego miro hacia el frente y noto aquel Boruto desaparecer con el rasengan. 

— ¿Como?

— Hiraishin no Jutsu—pronuncio con ira contenida. Saco la espada con fuerza y Kaesu avanzo unos pasos, aun incrédulo que su plan haya fallado. Luego de tanta planificación e ir meticulosamente, había fallado.

Miro hacia Sumire, pero no miraba a Sumire, sino el poder que había absorbido, y alzo una mano, con anhelo, hasta que se desplomo en el suelo. 

Boruto guardo su espada y sin esperar más, corrió rápidamente hacia Sumire, quien yacía inconsciente en el suelo. Se sentó de rodillas bruscamente y la alzo por los hombros. 

—¡Maldición mujer te dije que lo haría yo! —zarandeo su cuerpo, la desesperación marcada en su voz— ¡Sumire, no me hagas esto! — grito con fuerza, y acuno el cuerpo en sus brazos cuando ya no tuvo fuerzas para agitarla por los hombros. 

Las lágrimas se acumularon en sus ojos y acaricio su cabello paulatinamente.

No podía ser, la había perdido.

—Por favor no, tengo que decirlo, tengo que decírtelo ¿por qué lo hiciste? —murmuraba con dolor.

—Puedo ayudarla.

Escucho hablar débilmente a su lado, levanto la cabeza bruscamente y miro hacia aquel espíritu, él que suponía había avisado a Sumire de toda aquella trata.  Ya casi ni se podía ver, estaba despareciendo.

—¿Cómo? —miro hacia donde había estado atrapado hace un momento.

—La esfera se debilito cuando acabaste con Kaesu —explico sin más, miro hacia Sumire y sonrío condescendiente — Su sacrificio es algo que admiraría mi Clan. —volvió a mirar hacia Boruto—. Puedo intentar salvarla, no te lo estoy garantizando, siento su alma aun pelear con esa gran invasión a su cuerpo, pero a veces parece querer rendirse y terminar con todo ese sufrimiento. 

—¡Has lo que tengas que hacer!—cuestiono desesperado, su mejillas estaban húmedas debido a las lágrimas.

—Sígueme...

Abrazo sus piernas y escondió la cabeza entre ellos. Sentía mucho ardor y dolor. Como si fuego ardiente la rodeara. Su garganta quemaba. Sentía que se quedaría sin respiración en cualquier momento. 

—¿Pero lo hice por algo bueno...Mucha gente se salvará—lágrimas rodaron por sus mejillas y una débil sonrisa se apodero de sus labios.

Por su mente pasaron los rostros de Hakobe y Nue. 

—Los extraño...quizás deba...

—Lucha Sumire, no te rindas— escucho de pronto y levantó la cabeza.

—¿Eh? —pronuncio en la oscuridad que la envolvía.  

—Aun no es tu momento hija —le susurro alguien al oído. Viro la cabeza y sus ojos se aguaron la ver el rostro de su madre. Ella le acaricio la mejilla, dio un beso en la frente y alborto el flequillo por ultimo —. Aun debes de disfrutar de la felicidad de la vida, mi pequeña violeta...

Y la imagen de su madre despareció.

—¡Mamá! — alzo una mano y cuando intento levantarse, cayo de nuevo al suelo de un modo estrepitoso, debido a lo pesada que aun se sentía. 

Afuera, Boruto tomaba su mano, mientra tenían a Sumire recostada  en el centro del santuario. Takuna se encontraba a un paso de ella, con sus manos juntas, su traslucido cuerpo brillaba. El circulo a su alrededor brillaba de igual forma. 

— ¿Esta funcionando? — pregunto Boruto pro quinta vez hacia Takuna, el tinten del desespero y anhelo en su voz. 

—Esta batallando, no se esta rindiendo...

Boruto miro esperanzado hacia Sumire, alzo su otra mano y acaricio su mejilla.

—Despierta Sumire, quiero decirte algo—, le susurro al oído con ternura. 

Miro a todos lados desorientada, buscando a su madre.  Pero ya no había rastro de ella. Bajo la mirada con tristeza. Pero no tuvo tiempo de seguir lamentándose cuando sus palabras volvieron a ella. Se levanto con cuidado, y se sorprendido de ya no sentir del todo su cuerpo quemar y las piernas un poco mas ligeras.  

Volvió a escuchar una voz y se levanto con todo dificultad. Camino despacio, hacia donde creía que venía su voz. Era cálida. Aliviaba todo a su paso. 

Despierta Sumire...Vamos

Se detuvo al escucharlo de nuevo, y luego de un tercer intento, distinguió finalmente de quien era portadora. 

—Boruto... —susurro, y de pronto abrió sus ojos de par en par — ¡Boruto! — y salio corriendo. 

El brillo en Takuna fue disminuyendo, hasta desaparecer por completo. Boruto lo observo sorprendido.

—He terminado, ahora solo queda esperar — pronuncio.

Boruto no dejaba de mirarla, ansioso. Pero pasado unos minutos, sintió la derrota sobre sus hombros. Agacho la cabeza y presiono su frente con la de Sumire. Cerró los ojos. El dolor en el pecho se identifico y gruño tras la impotencia. 

Boruto mojo sus labios, sabia debía ya marcharse, pero aun no quería aceptar que Sumire estuviera muerta. No podía. No quería.

—Te quiero, te quiero...

Fue cuando sintió algo suave posarse en su mejilla.  Abrió los ojos de golpe, y miro con absoluta incredulidad como los ojos de Sumire se abrían poco a poco. La comisura de sus labios se alzaron un poco y con voz débil pronuncio:— hola...

Boruto la miraba extasiado, el dolor en el pecho fue suplantado por algo más. Alegría, inmersa alegría. Sin esperar mas, la rodeo con sus fuertes brazos y agradeció por aquel milagro una y otra vez. 

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seguramente encontraran errores e incoherencias, así que editare en cuento vuelve a leer este capitulo. Pero si no publicaba ya, sentía que iba a tardar mucho más, y no quería tardar más. 

También quiero decirles que el próximo es el final♡ (y ya tengo un 50% escrito, así que no creo tarde tanto a diferencia de los otros capítulos jajaja)