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Narra Jade

Una vez más mi cuerpo se sentía vivo, esos sentimientos salieron de la pequeña cajita que los guardaba, nos separamos unos centímetros para respirar, de nuevo nuestros labios se buscaron para besarse de nuevo.

Nos separamos con la respiración agitada, era imposible no amar a Lucifer.

— Déjame amarte por toda la eternidad— acaricia mi mejilla — quiero que seas el veneno más abunde en mí— sus pupilas destellan pequeñas llamas

— No quiero sufrir de nuevo — bajo la mirada — te amo — lo miro — pero me amo más, para seguir sufriendo —

— Prometo que no se repetirá la misma escena, haré que viva un infierno en vida, seré tu cómplice —

— ¿Cómo creerte Lucifer?— suspiro — ¿Cómo creer al ser que todos culpan del mal?— murmuró

— Te he mostrado lo que esconde está cara bonita, soy capas de esto y mucho más —

— Cariño, todos me odian por las desgracias y pecados que ellos mismo hacen en voluntad, a mi solamente me asignaron castigar a quienes han cometido errores — cierra unos segundos sus ojos — por algo te amo, por algo me encantas —

— ¿Cómo amar a una rubia que es monstruo?—

— Existen miles de motivos, sin embargo eres la rubia que he amado en mi vida, te pido una oportunidad —

— Lucifer — levanto su barbilla — Si me fallas una vez más, te irás lejos de mi vida y jamás sabrás de mí— habló fríamente— te amo, pero me amo mucho más para seguir con algo que me lastima —

— prometo que serás la mujer más feliz — sonríe acercándose más a mi — no sabes lo mucho que te necesite — rosa levemente nuestros labios — mi veneno — murmura antes de besarme.

•••

— Padre — llamó la atención de mi papá

— Dime cariño — me sonríe dejando su vaso de whisky — Tienes toda mi atención

— Debo darles una noticia — miro a Dimitrov y a mi padre

— Princesa, espero y no sea nada malo — habla Dimitrov bebiendo un trago

— He decidió regresar con Lucifer — muerdo mi labio nerviosa

— Hija — me mira papá intentado decir algo pero se queda callado.

— Respetamos tu decisión hermana — me sonríe — si esa es tu felicidad, nosotros estamos de acuerdo —

— Hablaré con el tipo, debe quedar en claro que no volverá a dañarte o lo mato — gruñe bajo

— Papi, de eso me encargo yo — me siento en su regazo abrazándolo por su cuello — me siento feliz que lo tomen a bien — beso su mejilla

— siempre tendrás lo mejor de nosotros— asegura mi hermano — por cierto, te quedó genial el vestido de Natasha — se ríe viéndome

— ¿Vestido?— pregunto fingiendo confusión

— Hermana, te conozco perfectamente— me mira burlón — ella se lo merece —

— ¿Te gustó?— pregunto burlona — ¿Está hermoso?—

— Precioso — nos reímos — Quien te viera dijera que no matas ni un insecto—

— Soy capas de muchas cosas — miro a papá — por qué tengo al mejor maestro — me paro — debo irme, Lucifer me espera —

— Dile que deseo hablar con él— me mira

— Tenemos que hablar con él— agrega mi hermano — no se escapara de nosotros —

— esos no son mis planes — habla Lucifer entrando al despacho —

— Excelente— sonríe un poco mi padre — me gusta la actitud

— Me encargaré de preparar una cena espectacular— miro a mi padre —

— Hermana, pide que está noche estén presentes todos — me mira —

— le diré a las chicas que se queden — les doy la espalda viendo a Lucifer — suerte cariño — le susurró dejando un pequeño beso en sus labios saliendo del despacho.

Narra Lucifer

Tomo siento frente a mi suegro y cuñado, Dimitrov me extiende un vaso con licor el cual recibo gustoso.

— Dígame, ¿Qué desea hablar?— pregunto cruzando me de piernas viéndolo con una sonrisa

— Advertirte de algo, si la llegas a dañar de nuevo no vivirás para contarlo — habla en tono amenazante mi querido suegro

— Bueno, soy inmortal pero, me agrada esa idea — dejo el vaso en el descanso del sofá — me encargaré de no cometer el error dos veces — prometo viéndolo — le doy mi palabra.

— Creo que no es necesario remarcar quien es prioridad en la familia — agrega mi cuñado

— Por supuesto, la rubia es lo mejor que puede existir y debe ser cuidada como tal —

— Me agradas — habla mi suegro con una sonrisa de lado — creo que podremos entendernos muy bien —

— Eso espero, querido suegro — sonrió mostrando mi dentadura blanca — será un honor tener una gran amistad con usted —

Narra Jade

Desde una pequeña esquina del comedor me encargo que todas mis órdenes se cumplan, esta noche era una cena especial.

Después de un rato, junto a mis amigas nos sentamos en la sala leyendo revistas, otras jugando videojuegos mientras platicábamos.

— ¿Alguien sabe cuándo regresa Ivanna?— pregunto nostálgica

— dentro de tres semanas — respondo Ximena — tres ardientes semanas — nos reímos ante la cara de Ximena

— espero y nos haga tías muy pronto — miro a Paola — se está tardando mucho

— Puedes ganarle — me guiña el ojo Camila

— Por el momento estoy bien así — la miró — prefiero primero ser tía luego mamá — bostezo

— ¿Y Dimitrov?— pregunta Paola

— Están hablando con Lucifer — bebo un trago de vino

— ¿Lucifer?— pregunta asombrada Valeria

— Olvide decirles, he regresado con Lucifer — sonrió viéndolas

— ¿Es broma?— pregunta burlona Ximena

— No es una broma, tiene muy claro que esta es la única oportunidad—

— Bueno, eso le dijiste a Brian y terminaron— se encoje de hombros

— Brian no era tan importante— rodeo los ojos — Ivanna es la portada de todas las revistas — muestro las revistas 

— Se mira preciosa — halaga Valeria — ese día se miraba perfecta —

— sin duda era toda una princesa — sonrió viendo la foto.

•••

Tomamos asiento en el comedor, las empleadas servían una deliciosa langosta, un buen vino acompañaba la cena de esta noche.

— Excelente elección amiga— habla Ximena

— Que buen vino — me mira Paola

— Gracias, lo mejor para mi familia — sonrió viendo a todos — también a la servidumbre— miro a Natasha

— Siempre dando un buen ejemplo — sonríe burlona Camila

— Por supuesto— sonrió —

— Pueden iniciar — habla papá alzando su copa — buen provecho

— Gracias — hablamos unísono

Iniciamos a comer en una charla tranquila, un silencio inundó el comedor el cual fue interrumpido por la voz de Natasha.

— Dimitrov, ¿Ya diste la noticia?— nos ponemos alerta

— ¿Qué noticia?— pregunta sin interés alguno mi hermano

— Que seremos padres — sonríe viéndonos haciendo que todas casi escupamos el vino que habíamos bebido

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