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"Oh, estás en mis venas y no puedo sacarte de aquí."

-In My Veins

(Andrew Belle)

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Ese instituto era una verdadera definición de lo que el mundo real y la sociedad suponían tras sus puertas. Una pequeña casa de muñecas en la que las clases más altas parecían practicar el uso de sus privilegios aprovechándose de aquellos que ante sus ojos se podían considerar débiles o diferentes. Sanha lo sabía mejor que nadie. Incluso si durante un tiempo quiso integrarse ahora ni siquiera le importaba formar o no parte de algún grupo. No le gustaba tener que encasillarse para poder conseguir algún estúpido amigo entre esas paredes y precisamente por eso todos lo miraban como si estuviese loco. Probablemente ninguno de los presentes conocía el significado de la palabra ciclotimia, incluso si lo hacían daba igual porque con toda seguridad decidirían usarlo en su contra.

A Moon Sanha le había llevado un tiempo pero después de mucho sufrimiento y una infancia compleja, llegó a entender que para algunos resultaba mucho más sencillo caracterizar de locura eso que se apartaba de lo que generalmente se consideraba "normal".

-¿Has comido? -Sanha alzó la mirada, se había encerrado en el laboratorio de fotografía artística para que nadie lo encontrase pero ahí estaba Min Hyuk, cumpliendo con lo que su amor platónico le había pedido.

Sanha se hacía el tonto de vez en cuando, sin embargo estaba bastante lejos de ser uno. Sabía que si ese fuera un día normal Min Hyuk hubiera dedicado sus horas libres a jugar al baloncesto o hacer idioteces con sus amigos pero Moonbin estaba de viaje de negocios. Así que el menor de los Lee se había decidido a cuidar de Sanha para marcarse un tanto con el magnate.

Todo aquello, su presencia y la expresión preocupada que se reflejaba en el brillo de sus grandes ojos, se debía a Moonbin y no a él. No era muy difícil de averiguar, de todos modos Sanha estaba acostumbrado a ser ese al que todos querían cuidar de una manera u otra para complacer al mayor de los Moon, al magnate, al jefe, al mejor amigo, al hombre con poder y dinero... Y en este caso, a un amor platónico.

-"Min Hyuk cuida de Sanhie, ya sabes que a veces necesita ayuda." - Sanha habló, imaginando la conversación que se habría dado entre el hermano de Dong Min y el suyo. - Y por supuesto has aceptado. ¿Es así?

Sanha ignoró el hecho de que Min Hyuk se había sentado sobre una de las meses y lo miraba con curiosidad, casi pareciendo divertido ante su modo de imitar la voz de Moonbin. La luz roja de la sala de fotografía tropezaba sobre la mandíbula marcada del menor de los Moon.

-Moonbin solo se preocupa por ti, no lo juzgues con tanta facilidad. -Min Hyuk había sacado algunos recipientes con comida y ahora disfrutaba de una manzana mientras miraba divertido a Sanha por su aspecto molesto. - ¿Qué? ¿Acaso he dicho alguna mentira? Tienes un hermano que daría su vida por ti, no veo nada malo en ello.

Ya. Lo malo no era que Moonbin se preocupase por él, Sanha también estaría dispuesto a morir por su hermano. El problema llegaba cuando este usaba su posición para pedirle a las personas que lo rodeaban que por favor lo cuidasen como si él no se conociese en absoluto o no estuviera plenamente consciente de lo que una enfermedad como la suya implicaba a pesar de la enorme cantidad de tiempo que llevaba teniendo que hablar con psicólogos semanalmente.

-Lo sé, no me molesta que mi hermano me cuide. Me molesta que le encargue a un niño más pequeño que yo que ponga sus ojos sobre mí en caso de que mi estado mental se descontrole y me vuelva loco.

En los últimos meses a Min Hyuk había dejado de agradarle esa palabra que él mismo había usado con anterioridad para definir a Sanha con el único objetivo de sembrar su ira sobre una persona que no merecía en absoluto convertirse en el blanco de sus comportamientos y rabietas infantiles. Lo cierto es que el hermano de Moonbin poco a poco lo estaba animando más y más a seguir adelante con la idea de sacarse una carrera de psicología, no por el hecho de sufrir en sus carnes lo que alguien con traumas experimentaba sino por el hecho de que verlo a él lo empujaba a desear poder ayudar a otros que estuviesen sintiéndose solos e incomprendidos.

Ni siquiera entendía bien qué le ocurría a Sanha todavía pero sabía que tras su personalidad risueña había mucho dolor. Él había hecho sus predicciones pero el magnate nunca hablaba del tema ni confirmaba cuando Min Hyuk le preguntaba con la excusa de que le serviría en caso de que en alguna ocasión surgiera alguna emergencia que tuviera que ver con Sanha y sus repentinos ataques de pánico. El estado del menor de los Moon parecía ser un tema completamente tabú que siempre derivaba en un "a mi hermano no le ocurre nada, solo tiene algunos recuerdos que le hacen daño. Nada que tenga que ser mencionado en su presencia si es posible evitarlo".

-No sueles parecer el mayor entre ambos. -Min Hyuk estaba intentando bromear. -¿Sabes eso, verdad?

-¿Necesitas hablar de los momentos en los que sí lo parezco? Apuesto a que hay alguno perdido por ahí. Piensa un poco. -Las manos de Sanha se movían ágilmente mientras mojaba las fotografías en los líquidos necesarios.

Min Hyuk sólo sabía usar cámaras digitales pero se había fijado en la atracción que el chico frente a él parecía experimentar por las analógicas y las polaroids.

-Cuando te enfadas... -Comenzó a enumerar Min Hyuk con los dedos. -Y con los caballos o la hípica, cuando estás haciendo algo que realmente te interesa o cuando besas.

Sanha sonrió sin poder evitarlo al escuchar la última frase de Min Hyuk.

-¿Eso es todo? Así que en cierto modo estás admitiendo que realmente yo soy el mayor en las materias importantes de la vida. -Sanha se encogió de hombros. -Sé que mi hermano cree que no puedo sobrevivir por mí mismo pero lo he hecho durante mucho tiempo. Sigo haciéndolo, generalmente no me cuidas en el instituto pero llego a casa vivo todos los días, a veces sufro y otras simplemente me hago el sordo. Sin embargo, sobrevivo.

-Con respecto a eso... -Min Hyuk no estaba realmente seguro acerca de su siguiente pregunta así que decidió adornarla. -¿Por qué entras en trance con algunas cosas y te pones tan nervioso cuando simplemente podrías hacer que echen a todos esos idiotas con la posición de tu familia? Todo esto... -Min Hyuk miró a su alrededor. - Este instituto y la gente que se mueve por los pasillos, ellos solo piensan en las conexiones familiares, las empresas y el dinero que amasarán en un futuro cercano.

Sanha se quedó quieto y finalmente subió la mirada para observar a Min Hyuk, no le molestaba la pregunta pero no se creía que hubiese preocupación en esta. Quizás solo interés o curiosidad.

-Puedes hacer tu propia apuesta. Déjame escuchar todas esas teorías que seguramente te recorren la cabeza. -Sanha se quitó los guantes y los dejó sobre el fregadero para a continuación limpiar sus manos y sentarse al lado de Min Hyuk, sobre las largas mesas del laboratorio. -Adelante.

-Bipolaridad y quizás... Algún tipo de shock que te ata a ciertos recuerdos. -La voz de Min Hyuk sonó a modo de pregunta mientras le pasaba uno de los recipientes a Sanha para que comiese algo. -No quiero apostar nada pero podría ser eso.

-Negativo. Un poco menos fuerte que la bipolaridad. Moonbin tiende a confundirse con el término también.

Min Hyuk apoyó las manos a ambos lados de su cadera y dejó caer la cabeza hacia atrás mientras pensaba. Sus piernas se habían cruzado sobre la mesa.

-Tal vez distimia, como una depresión que te acompaña siempre.

Sanha volvió a negar.

-No. Ciclotimia, Hipotimia y Mnemofobia. Moonbin sufre la primera en menor medida que yo. Son cambios en el humor de un momento a otro. Puedo estar completamente feliz y sentirme asustado o depresivo de la nada. Es realmente asqueroso.

Min Hyuk lo miró sorprendido. Si bien conocía poco acerca de la ciclotimia, al menos sabía lo suficiente como para entender que podría tratarse de algo hereditario y que quizás por eso Moonbin caía en depresión de vez en cuando incluso si todo a su alrededor funcionaba bien.

-Nunca he oído hablar de lo segundo. ¿Qué tienes realmente?

Sanha tomó la última cucharada de arroz antes de suspirar.

-Miedo a ciertos recuerdos, mis problemas llegan cuando se combinan y entro en pánico. -El menor de los Moon suspiró sin atreverse a mirar a Min Hyuk mientras hablaba. -Solo recuerdo mis ataques en algunas ocasiones, la mayoría del tiempo no soy consciente de lo que me está pasando o lo que estoy haciendo. Es un asco.

Por un instante Min Hyuk sintió en su cuerpo el instinto de acercar a Sanha para abrazarlo y decirle que lo cuidaría, que todo saldría bien... Pero solo duró unos segundos. Al fin y al cabo él no era nadie para hacer eso, se iría en cuanto el contrato de Dong Min acabase y ni siquiera quería oír hablar acerca del dinero. Llegó a dudar sobre su decisión en algunos momentos, solo debido a lo mucho que le gustaba el magnate, sin embargo sabía que para estar tranquilo necesitaba ganarse la vida por él mismo.

Además, si Sanha sufría de ciclotimia sería egoísta entrar en su vida cuando sabía que después de un año sencillamente tendría que olvidarse de este.

-Suena como una mierda. -No sabía qué decir o hacer por lo que simplemente se acercó a Sanha y le sonrió mientras le cedía otro de los recipientes de cartón que estaban en el interior de su mochila. -Moonbin mencionó que es tu comida favorita, disfruta de la hamburguesa Sanhie.

-¿Es mi premio por haberte dicho el nivel de locura de mi familia?

Min Hyuk negó y sin poder evitarlo acarició la mejilla de Sanha. A pesar de que se había dicho a sí mismo que permitir que Sanha lo sintiera cercano sería egoísta e incluso cruel.

-En realidad estaba demasiado cansado para entrenar y tampoco me apetecía causar problemas con mis amigos. -Min Hyuk acompañó la última frase con un tono repleto de sarcasmo. -Así que eres mi tercera opción pero también la mejor que se me ha ocurrido. Al menos sabes que no estoy aquí solo porque Moonbin me lo ha pedido. Y en cuanto a tu "locura" o lo que sea que sea... Creo que como todos los seres humanos, necesitas amor y cariño para mejorar. Cuando encuentres a alguien bueno y dispuesto a cuidarte tus síntomas mejorarán. La ciclotimia es menos fuerte que la bipolaridad y el miedo se puede superar. Y en cuanto a la hipotimia que me imagino que llega como efecto de la ciclotimia... También ayudará que tengas a alguien a tu lado. Supongo que por eso Moonbin cree que necesitas a una persona observandote de cerca, ahora yo también lo creo. Supongo que cuidaré de ti si me lo permites.

-Te estás volviendo educado, Hyukie.

Ambos sonrieron.

-Come de una maldita vez antes de que se acabe la hora del descanso, idiota. - Min Hyuk estaba sonriendo en grande.

Sanha asintió y regresándole la sonrisa, desenvolvió la hamburguesa. A pesar de todos los platos caros que había probado a lo largo de su vida estas seguían suponiendo su comida favorita. Era sencillo y sabroso, exactamente como a él le gustaban las cosas.

-Supongo que me gusta ser tu tercer plato, solo por hoy.

La luz roja seguía iluminando sus movimientos y mientras Sanha comía Min Hyuk se acercó a observar las fotografías que el chico había realizado.

-Todavía son negativos. -Habló Sanha. -Puedes mirar las del cajón si lo prefieres.

Min Hyuk asintió. Cada una de las fotografías tenía la fecha, parecía una manía bastante recurrente en Sanha. Había algunos paisajes, caballos, alguna que otra dónde se mostraba a Baekhyun sonriendo en el lago y finalmente él. Sanha tenía más fotos suyas que de cualquier otra cosa y persona. Y aunque el mayor de los Lee sabía que era extraño sentirse bien al respecto, lejos de asustarlo le gustó ver la forma artística en las que habían sido tomadas. No cómo un acosador lo haría, sino como un artista lo retrataría.

-¿Cuántas fotos me tomas al día?

Sanha se encogió de hombros y suspiró antes de lamerse los labios y beber uno de los refrescos que Min Hyuk había comprado.

-Cuando lo que fotografío es bonito suelo probar varios estilos, ángulos y colores. Eso significa que probablemente te he fotografiado mucho.

Min Hyuk sonrió colocando las fotos sobre la mesa para mirarlas. A pesar de la iluminación rojiza, podía distinguir el estilo a blanco y negro tan característico en Sanha. La habitación de este también se encontraba repleta de imágenes con esos tonos.

-Entonces debo de parecerte muy bonito porque realmente has tomado muchas.

-Bueno, estás respondiendo tu propia pregunta. ¿No es así, Lee Min Hyuk?

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Aquí les dejo una explicación de las enfermedades mentales que sufre Sanha.

-Ciclotimia: La ciclotimia se caracteriza por una inestabilidad persistente del estado de ánimo. Es decir, que la persona que sufre este trastorno muestra periodos de depresión y euforia leves. El ciclotímico no se da cuenta de sus oscilaciones de humor, pues son relativamente leves. Además, los periodos eufóricos suelen ser percibidos como agradables y, por tanto, es habitual que no busquen ayuda psicológica. Un 30% de las personas con trastorno ciclotímico pueden acabar padeciendo trastorno bipolar tipo I o tipo II.

-Hipotimia: La hipomanía es una manía leve. La fase de hipomanía que presenta el ciclotímico se caracteriza por un estado de ánimo elevado, euforia, excitación e hiperactividad. Durante el estado de hipomanía, el sujeto ciclotímico tiene menos necesidad de dormir y descansar, y se muestra lleno de energía. Pese a que los síntomas de la hipomanía son más leves que los de la manía, también son muy destructivos, pues causan conflictos y rupturas en las relaciones amorosas y las amistades, afectan al trabajo, provocan dificultades financieras, etc.

-Mnemofobia : Las personas que sufren mnemofobia temen tener recuerdos en general, o pueden temer ciertos malos recuerdos únicamente. Al igual que otras fobias, la mnemofobia puede surgir súbitamente después de un evento traumático, o puede desarrollarse más lentamente con el tiempo. Cuando las personas que sufren de mnemofobia se enfrentan a sus recuerdos, o a la perspectiva de perderlos, pueden sufrir síntomas como ansiedad intensa o incluso sentimientos de pánico.

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