Capítulo 23

















Adalet se sento en su trono a como dictaban las costumbres, la junta de aquel día era para poner a Adalet al corriente de los asuntos del imperio, era mero protocolo.

—La emperatriz debe de dar a luz a finales de año - dijo un viejo conde —Necesita dependencia para solidificar el imperio.

—Lo se muy bien -hablo ella —Estoy trabajando en ello, pero ahora quiero dejar en orden el imperio, he pasado un tiempo largo fuera, no se que esta bien o esta mal.

—La regente se encargo de eso - hablo el duque Roth.

—Leyla ya no es más la regente duque Roth, ahora estoy yo sentada en el trono, exijo saber absolutamente todo - Sentenció —Es mi derecho.

—Su majestad tiene razón -Rezef tomó la palabra —La facción ha echo un listado, todo esta detallado aquí  -le tendió el libro, Adalet le agracio y tomo el libro en manos.

—¿Su facción duque Roth?

—Mi hermana... - Adalet golpeó la meza causando un gran ruido.

—¿A quien tienes enfrente?

—A la emperatriz...

—Con todo el respeto que te tengo a ti y a mi madre te dejo en claro que yo soy la que manda, así que tráeme tu reporte, si se omite algo toda la facción pagara.

—Si majestad  -dijo a regañadientes

—Doy por terminada la sesión - se puso de pie y salió.

—¡Su majestad!  - Adalet se detuvo, Rezef se acercó y tomó su mano haciendo que todos se detuvieran a verlos.—¿Nos veremos esta noche?

—Si querido - Adalet beso su mano y camino, debían de actuar para hacerles creer que tenían algo más que un trato.



















Regis observo a Adalet y negó varias veces, no quería dejarla ir, le daba rabia saber que iría con otro hombre.

—Debemos de fingir

—Dormirán juntos.

—Tú mismo lo dijiste, dormir - Adalet lo beso —Tú eres mi esposo legal, una vez que Aslan y Leyla sean arrancados de raíz enviare a los consortes a sus hogares.

—¿Iras con todos?

—Esta semana los visitaré a todos, la siguiente será solo tuya.

—Tendré que aguantar mis celos - Adalet soltó a reír.

—¿De verdad te gusto?

—Te amo - Adalet se quedó quieta— Más de lo que crees.

—Entonces confía en mi - Regis asintió y la abrazo.



















Al caer la noche se reunió con Rezef, este la invito a cenar y a tomar algo, luego ambos fueron a la cama para platicar asuntos de estado.

—Es delicado este asunto.

—Rezef, la prioridad es deshacerse de Aslan y los miembros claves de su facción- El rubio asintió —Necesitamos encontrar su almacén de comida y contrabando.

—Raphael esta trabajando en ello, pronto lo encontraremos, solo hay que tener paciencia, Dion podría ser de ayuda, su padre y el jamás han tomado un bando, facción izquierda o derecha, el es neutro y fiel al emperador, su madre fue doncella de la difunta emperatriz, su padre fue un comandante fiel, hazte su amiga.

—No conozco nada de él.

—Ama los libros, es un ratón de biblioteca, es bueno con la estrategia pero la espada es su debilidad, encontraré más y te diré, debes de ir mañana con él.

—Bien querido, cumple tu papel de consorte mimado.

—Me doy asco cada que finjo serlo -ambos rieron.















Al siguiente día otra sesión de la corte se llevo acabo, desde las cinco de la mañana hasta la una de la tarde, con poco tiempo para almorzar decidió ir a dar un paseo en el jardín y despejar su mente.

—Su majestad.

—Rubiana, creí que estabas en tu palacio.

—Quise verla...

—Sabes que no puedes salir de forma descuidada.

—¿Cuándo me visitará?

—Mañana, vere a Sir Dion hoy - Rubiana sonrió.

—Entonce te preparare tu comida favorita  - Beso su mejilla y salió corriendo.

—Me pondré celoso a este paso - Regis la abrazo por la espalda.

—¿Y Jubel?

—Fue a recorrer, Max esta por ahí estorbando - ella soltó a reír. —Estoy celoso.

—Lady Rubiana es una tonta enamorada, en un futuro espero encuentre a alguien que la ame tanto como ella me ama - Regis asintió —Cómo yo te amo.

—¿Me amas?

—Cómo una tonta - Regis beso su hombro —Vamos a la habitación antes de que me toque ir a visitar a Dion.

—¿Y si por su ayuda te pide que te acuestes con el?

—¿Tienes miedo?

—Jamás. - ella sonrió.

—Veremos hasta donde quiere llegar mi querido concubino - Regis suspiro y ella le dio un beso —Pero solo te quiero a ti Regis, a nadie más.

Aslan los observo desde lejos, apretó sus puños y bufo, sabía que Adalet le daría poca prioridad, pero su plan era uno sin fallas, tomaría el poder sin importar a quien pisotear, incluso si tenía que sacrificar a su madre lo haría sin dudar.

—Ten cuidado hermana, esta guerra no esta perdida.














































Disculpen la tardanza, y disculpen lo corto, he estado con temas de la universidad y con poca imaginación.

Mis redes.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top