Leyla observo como sus cosas eran llevadas fuera de la que por muchos años había sido su habitación, había jurado venganza y en un futuro haría que Adalet se hundiera hasta morir.

—Espero que tu hagas que se embarace, al menos sigue como hombre  - Aslan suspiro —Debes de obtener poder y gloria, hazla débil y haz que te necesite tanto que te haga regente.

—No te preocupes madre, haré que ella sea solo mía. -Leyla suspiro y salió —la haré caer en la locura.

Adalet bajo los papeles y miro a Rezef con una pequeña sonrisa, aun tenían mucho trabajo y tan solo era el primer día de su regreso.

—Debes entrar en una semana junto a los demás, he enviado a que Preparen los palacios, elige uno para ti.

—Eres tan benevolente  - Adalet sonrió —¿A donde enviaras a tu esposo?

—Hemos adorado que dormiremos juntos, ya no existe el palacio de la emperatriz, será para nuestros hijos  - Rezef asintió.

—Quiero el palacio de cristal, ese era el palacio de Leyla, la concubina más poderosa  - Adalet asintió —Envía a Rubiana al palacio rubí, va con su cabello, Lor Robanne puede ir al palacio ambar y Aslan déjalo con las de limpieza.

—Compórtate. -Rezef sonrió —Planeo enviarlo al palacio obsidiana, es el más lejano, el menos habitado y entre más lejos mejor para mi.

—Me parece bien -se puso de pie —Tengo una reunión con tu esposo, debe de saber más sobre nuestro imperio.

—Ayudalo mucho Rezef, te recompensare bien.

—No quiero recompensas, quiero que el imperio crezca bien  - Rezef beso su mano y salió.

Rubiana observo como los sirvientes bajaban los baúles con todo tipo de regalos, debido a su entrada al harem de la emperatriz, ella había enviado regalos a todos para premiarlos por su entrada al palacio.

—Me iré luego de ver que estarás bien. - Rubiana observo a su hermano, había renunciado a su oportunidad de ser un consorte por ella, le agradecía su amabilidad.

—Gracias hermano.

—Recuerda tu trabajo, pero más que eso recuerda que tu vida es importante, si ves que no puedes ve a casa, siempre te recibiremos - Rubiana se lanzó a sus brazos.

—Lo se hermano, pero me protegeré para protegerla a ella - Caesar negó y beso su frente, se oponia a esos sentimientos de su hermana, pero jamás le quitaría la ilusión.

Regis observo el ostentoso traje, rojo con dorado y negro, con sus condecoraciones que obtuvo en Ashet y con el pergamino que avalaba que era el esposo de la emperatriz y que debía de llevar acabo las tareas del hogar.

—¿Estas bien Adalet?

—Es sorprendente, yo jamás pensé que llegaría este día. -Regis la abrazo por la espalda —Ser emperatriz, creí que moriría antes de eso.

—Estaré a tu lado, te protegeré de Aslan y haremos que caiga para que estés segura. -Adalet acaricio sus manos y sonrió.

—Gracias Regis, eres el mejor esposo - Regis la giro y la tomó del rostro para besarla.

Aslan observo la escena desde la lejanía, ser humillado por su madre era una cosa, pero ser humillado por una simple mujer era terrible.

—Prepara todo, si voy a entrar como un simple concubino al menos debo de hacerlo a lo grande - su sirvente se reverencio y salió —Pero es solo por hoy, el día de mañana entraré al palacio como el emperador, y acabare contigo querida Adalet.

Adalet se miró al espejo y sonrió, el atuendo le asentaba bien, sus ojos brillaban debido al contraste de los colores y su rubio cabello pararecia resplandecer.

—Que hermosa  - Regis beso su mano —Me gustaría que Jubel estuviera aquí y nos viera.

—Ella nos esta bien -lo beso —¿Listo?

—Yo si ¿tu?

—Lo estoy - dijo tomando su mano.

Toda la nobleza de Siberya se presentó para la coronación de Adalet, desde el vizconde más pobre hasta el duque más rico, también habían ido la población en general de todas partes de Siberya.

—¡Atención su alteza la princesa herdera de Siberya! - todos los presentes se reverenciaron ante ella.

Adalet avanzo por la enorme catedral con una enorme sonrisa en su rostro, cada paso que daba era un paso en donde dejaba atrás su triste pasado, era una nueva Adalet dispuesta a matar a todos aquellos que la dañaron.

—Princesa heredera Adalet, ¿jura ante la diosa, los ministros y la nobleza presente que gobernará con justicia y severidad a Siberya?

—Lo juro.

—Jura usted proteger a Siberya del mal, hacerla prospera y ser una gobernante digna de la gran responsabilidad de tener un gran imperio en sus manos.

—Lo juro.

—Jura usted dar a luz herederos dignos para Siberya, dar a luz príncipes que aporten al imperio y que no empañen su crecimiento.

—Lo juro.

El obispo le tendio la daga, Adalet la tomó y corto un poco de su dedo, deposito la sangre en el cuenco y el agua sangrada fue depositada también, con ello se aseguraban que Adalet fuera descendiente directa del difunto emperador.

—Tres reverencias a su majestad la Emperatriz Adalet Aleyna Siberya, gobernante absoluta. - todos los presentes se levantaron y se reverenciaron tres veces.

Adalet se giro hacia ellos y se reverencio una única vez en su vida, aquella reverencia aceptaba que sería por y para el pueblo.

—Tome asiento majestad  - Adalet camino hacia su puesto y tomó asiento. —Entra el consorte real, Regis Andre Ploen de Siberya.

Regis camino lentamente con un aire de solemnidad, de valentía y de justicia, todos los presentes sintieron su potente andar, pero los ojos de Regis solo fueron hacia una persona, Adalet.

Adalet le sonrió y con la mirada le señaló los puestos de adelante, para su sorpresa su hija estaba entre los presentes junto a Max.

—Consorte principal, como esposo de la emperatriz y emperador consorte, ¿jura usted proteger a la emperatriz, dar herederos dignos del trono y llevar con paz las tareas del harem?

—Lo juro.

—Jura usted ser fiel al imperio, a la emperatriz y a sus ciudadanos.

—Lo juro.

Realizo el mismo procedimiento que Adalet, pero la sangre seria juntada con la de Adalet para comprobar que la unión era verdadera.

—Tres reverencias al emperador consorte, Regis Andrei Ploen de Siberya.

Los presentes se reverenciaron tres veces.

Regis se acercó a Adalet y se sento a su lado.

Seguiría la ceremonia del harem y finalmente el recorrido desde la catedral hasta el palacio en donde se celebraría una fiesta.

Ya tenemos quien nos gobierne jajaja

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