Junto a ti escribiré mi último pensamiento

Humillado...

Eso es lo que en estos momentos sentía y sabía que tal vez no tenía sentido alguno, después de todo siempre se había aclarado que solamente era una relación de sexo y no había sentimientos de por medio ¿Soy repetitivo? Claro, lo soy porque sigo sin poder meterme en la cabeza aquellas palabras tan estúpidas.

- No puedo más, por más que me esfuerzo y por más que intento complacerlo, no puedo - mi voz salía con dolor mientras miraba las tablillas de mi hermana y mis padres - seguramente también piensan que soy estúpido, que un joven no me haga como yo no debería de estar pidiendo migajas de un amor que no es correspondido ¿Cómo puedo dejar de pedir un amor que no me es dado? Desearía que sus ojos brillaran de la misma forma al estar a mi lado, pero es ridículo pedir eso cuando no soy esa persona a la cual él ha esperado tanto tiempo.

Sigo bebiendo aquel licor, desde aquellos acontecimientos me he sentido sumamente mal y no puedo ni siquiera tomar algo de alimento, Jin Ling está furioso conmigo y lo comprendo, no le tuve la confianza suficiente como para explicarle que mi querido hermano y su tío estaba de regreso, ¿Cómo es que debía de abordar el tema? "Hola, tu querido tío y el que es culpable de la muerte de tu madre y tu padre, está de regreso y me llevo bastante bien con él, porque acabo de enterarme de que no es tan imbécil como yo creía" eso sin duda habría sido algo estúpido.

- Necesitó tomarme un tiempo - digo mientras veo mi reflejo en aquella copa de vino - ¿En qué momento pasé a ser tan desagradable? Es por esto que jamás he tenido pretendientes y por mi maldita actitud tan estúpida, soy una persona demasiado asquerosa e incluso jamás estuve entre los chicos más guapos. - las palabras de un hebreo siempre son verdad y en estos momentos estas palabras son una verdad para mí.

Repugnante.

Asqueroso.

Una mierda de persona.

Todas esas palabras atacan mi mente mientras intento mantenerme tranquilo, todas esas palabras giran como si fuera un torbellino, ese líquido salado comienza a resbalar por mis mejillas y termina muriendo en mis labios, malditas lágrimas... Son producidas por el dolor que siento en mi pecho en estos momentos, son producidas por un estúpido que no deja de sobrepensar en lo que ha pasado.

- No puedo, no puedo continuar con esto - llevo mis manos a mis ojos y comienzo a llorar de forma desconsolada, como un niño pequeño que busca encontrar alguien que lo cuide y le dé protección como un padre, pero en estos momentos estoy solo y nadie puede protegerme, soy como un niño pequeño que está a la deriva en un mundo cruel y que es complicado de entender. El filo de la espada es cada vez más llamativo, importa poco lo que pase a continuación.

Una

Dos

Tres

Cuatro

Cinco...

La paso por mi muñeca las veces que son necesarias, la cantidad que sea adecuada para olvidar todo el dolor que siento en estos momentos, las suficientes como para notar que ahora sale algo de sangre de aquellas heridas que me provocado, Por supuesto que duele y muchísimo.

Después de aquel momento en el que logró desahogarme, trato de forma rápida mis heridas y claramente las oculto para no generar lástima. Una carta, a mis manos ha llegado una carta en la que se expresa la visita de alguien a quién realmente no esperaba volver a ver, la última vez que tuve contacto con él fue hace 4 años y nos conocimos gracias a una cacería nocturna.

- ZhiYu Feng... - susurro con voz baja su nombre y comienzo a leer aquella carta que me ha mandado, por lo que puedo notar vendrá dentro de poco y parece ser que se ha enterado de todo lo que ha pasado en torre carpa.

~×~

La noches se hace presente y con ella también la presencia de aquel joven.

- A-Cheng - Sonríe con alegría al verme y me siento confundido y atraído por aquellos ojos azules que me miran con total adoración. - Lo siento - sus brazos me envuelven en un cálido abrazo y me siento protegido. - Supe todo lo que pasó, lamento todo el daño que has tenido que soportar y discúlpame por no haber estado aquí contigo para protegerte y cuidarte ¿Porque no me dijiste?

-¿Cómo se suponía que lo hiciera?- Nuevamente siento ganas de llorar - ¿Cómo tenía que decírtelo?

- ¡No lo sé!- Baja la voz - No lo sé, pero tenías que haberme contado y yo habría venido tan rápido como hubiera podido, sabes que no tienes que cargar todo el dolor tú solo.

Lo sé, pero jamás supe cómo intentar expresar esos sentimientos que se quedaban atascados en mi pecho. Lo intenté, siempre traté de ser lo más honesto que podía con las personas y me dolía el no poder expresar cuando algo me molestaba, cuando logré hacerlo Lan Wangji me lastimó y ese dolor se quedó marcado por siempre.

- ¿Que sucedió?- Sin darme cuenta sujeta mi mano y es aquella en la que me he causado daño - A-Cheng... - La forma en la que me mira me hace sentir débil.

- ¡No, no te atrevas a mirarme así! - No quiero que me vea con lastima - Sabés que no tolero que me miren de esa forma, no me gusta que lo hagan.

- Perdón, ¿Cómo quieres que te vea? Te has causado daño por culpa de ese tonto, Hanguan-Jun no merece tus lágrimas, ni tu dolor - Besa mi muñeca y se apega cada vez más a mi - Eres fuerte, pero no puedes llevar todo ese dolor, no puedes esperar a que te derrumbes cómo lo estás haciendo.

- No quería causar molestias, siempre tuve la esperanza de que él se daría cuenta de mis sentimientos y los aceptaría, pero me di cuenta de que eso era poco probable y que realmente yo no era una persona a la cual él podía amar... - No puedo continuar, nuevamente comienzo a llorar y él está ahí dándole consuelo a mi corazón, me abraza y siento cálido mi cuerpo.

- A-Cheng...- Besa mi frente y se queda en silencio, esto es justo lo que necesitaba, alguien dispuesto a estar a mi lado en un momento de debilidad.

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