2. Shared Blood
Narra T/N:
Me encontraba caminando en dirección a la universidad donde iba a pasar el rato con mis amigas cuando lo vi. ¿Acaso no tenía trabajo? Porque si no, no se de donde saca tanto tiempo como para seguirme.
Desde aquel baile, él había empezado a seguirme como si yo fuera su bien más preciado. Nunca se había atrevía a salir de ese vehículo negro y lujoso que llevaba siempre.
No sabía que quería por lo que me asustaba. Él era ahora una mafioso y que me vigilase podía ser desde bueno hasta muy malo para mi vida.
- Ame estará por llegar. - Me murmuré a mi misma con la intención de intentar olvidar esa mirada penetrante que siempre estaba puesta en mi desde el coche oscuro.
- ¡Hola! - Saludó animada desde mi espalda.
Me giré y la vi sonriendo, ignorando a Rindou. La tomé de la mano para comenzar a caminar en dirección al centro comercial. Mientras llegábamos a nuestro destino le conté la experiencia que viví en la boda de mi querido ex crush.
- Jo... Yo pensaba que se iba a arrepentir al instante por como ibas vestida. - Suspiró alzando las manos al aire. - Pero que le vamos a hacer, ¿no? - Asentí para asustarme al girarme y ver una sonrisa pícara en su rostro. - En cambio...
- No. - Ya sabía que iba a decir, conocía a Ame como la palma de mi mano.
- ¡Venga, vamos! No pierdes nada, al fin y al cabo comparten sangre y por lo que hizo me parece un caballero de élite. - Me golpeé la cara con mi mano libre porque predije lo que me comento a la perfección.
- Pero no es igual a Ran. Rindou es más... Como decirlo... ¿Seco? - Y sentí una fuerte colleja. - ¡Mierda! ¿¡Y a ti que te pasa ahora!? - Le grité irritada por el golpe.
- ¡Nunca juzgues a un libro por su portada! - Me regaño para volver a tomarme de la mano. - Ahora vamos rápido a esa tienda que se nos hace tarde.
Pasé una mañana de compras bastante agradable hasta que ella tuvo que ir al aseo. Entonces todos mis esquemas se derrumbaron. Al fin y al cabo ella tenía razón, él compartía su sangre.
Para ir a los aseos había un gran pasillo el cual se encontraba vacío hasta que llegamos nosotras.
- Espérame aquí por favor. - Pidió mi amiga a lo que yo le regale una sonrisa para indicarle que le haría caso.
Ella se marchó caminando dejando las bolsas en el suelo a ambos lados de mi. Por mi parte, dejé las bolsas que cargaba en el mismo lugar para empezar a pasearme por el pasillo. Al ver que tardaba saqué de una de las bolsas un paquete de ese objeto recurrido normalmente para relajarse o simplemente por el vicio que le formó sus ingredientes.
Me apoyé en una columna para, con el pechero negro que llevaba, empezar a fumar gracias a que hacía unos segundos lo había encendido.
Empecé a caminar por el pasillo como siempre hasta que, cuando giré de dirección, alguien me empujó contra la pared provocando que se cayera mi cigarro. Por fin se había atrevido a darme la cara.
Me encontraba acorralada por el Haitani menor, en una zona oscura del susodicho pasillo. Iba hablar cuando me tapó la boca.
- ¿¡T/N!? - Gritó mi amiga al ver que no estaba. - ¡Agh! Te pedí que me esperarás, maldita sea.
Luego de eso se escucharon sus pasos alejarse hasta que desaparecieron intercambiándose por una sonrisa en el rostro de Rindou.
- ¿Qué carajos haces? - Le pregunté en voz baja por que por el eco que había en el lugar tal vez alguien nos podría encontrar.
- Aquí el que hace las preguntas soy yo. - Dijo con la mirada baja y con una voz que dejaba ver un poco de enojo en su tono.
- Me importa bien poco lo que- De la nada me tomó del cuello pegándome a la pared provocando que solo pasará el aire necesario para respirar a mis pulmones.
- T/N he estado mucho tiempo detrás de ti, y lo sabes. Lo que pasa que la mayoría de tiempo me has ignorando. Quiero una cita contigo. - Él levantó la cabeza viéndome con superioridad sin sumarle que la altura no ayudaba para no sentirme intimidada, pero extrañamente mi corazón estaba acelerando como nunca.
- ¿Y-Y si me niego? - Hablé en un hilo de voz observando como su mirada oscurecía provocando que mis piernas temblaran levemente.
El de pelo teñido sólo sonrió de forma sutil para acercarse a mi oído rápidamente y pronunciar lo que me descolocaría mientras me metía un trozo de papel en mi escote provocándome un sonrojo.
-Simplemente no puedes negarte.~
Y desapareció provocándome que cayera al suelo respirando entrecortadamente.
- ¡No me jodas! - Gritó Ame al contarle lo que había pasado. - Y... ¿Vas a ir? Dime que sí, dime que sí por favor. Es muy lindo ¿no ves? Además estas toda sonrojada.
- ¿¡Eh!? ¡Que va! Sí pudiera negarme, me negaría, pero ya sabes que me lo ha prohibido. - Hablé apartando la mirada.
- Anda, vamos a buscarte algo para la cita. - Me tomó de la mano para reír. - Con que ese chico era un seco ¿eh?
- ¡Cállate ya! - Pronuncié molesta para ser arrastrada por ella.
Al fin y al cabo en el papel ponía que la cita sería esta noche en un restaurante bastante caro.
Compramos un vestido largo de un color azul marino el cual tenía un hombro al aire mientras que el otro yacía al aire. Luego de aquello fuimos a mi casa para comer y empezar a prepararme.
- Si algo sale mal, o no te termina de cuadrar, llámame que te sustituyó. - Comentó a modo de broma Ame pero dicha me dolió, no lo entendía.
Cuando llegó la hora mi amiga me llevó en coche al restaurante debido a que yo no podía conducir con los zapatos que llevaba.
- Nos vemos T/N. - Pronunció al dejarme en la puerta del local. - Y lo dicho, si no te cuadra, me lo das ¿sí? - Asentí para luego verla marcharse en su coche y sentir unas manos agarrarme de la cintura provocando que me sobresalte.
- Estas hermosa esta noche "Ma dame" - Me sonroje al escucharlo en mi oído.
- Aja. - Solté con desinterés para girarme y verlo con su clásico traje. - Tu estás como siempre, ahora entremos. - Le obligué a soltarme para ir a dentro no sin antes escucharlo reír provocando que mi corazón se acelerara más una vez más en este día.
El lugar era de lo más refinado. El color que predominaba era un blanco beige mientras que pequeños adornos hechos en base a joyas bastante caras lo acompañaban.
- Buenas noches señora, ¿me hace el favor de decirme el nombre de la reserva? - Habló un señor detrás del atril en donde seguramente yacía un libro con todas las reservas de la noche y el número de la mesa.
- Esta a nombre de Rindou Haitani. - Me sonrojé levemente al notar cómo volvía a hacerse presente mi cita él cual ahora tomaba mi cintura para pegarme a él.
- Oh, ya veo. - El señor nos regalo una sonrisa para hacer una reverencia. - Un placer, les enseñaré su mesa reservada. Sr Haitani y su acompañante síganme por favor. - El trabajador nos guio hacia una sala en donde habían una mesa con velas, era bastante romántico en cierto modo. - Disfruten de la velada. - Y se marchó cerrando la puerta.
- Nunca pensé que fueras un romántico Rindou. - Pensé en voz alta sin pensar en que me escucharía.
- Yo nunca pensé que fueras una difícil. - Se carcajeo mientras me separaba la silla para sentarme. - De verdad te ves hermosa hoy. Hasta la gente de allí afuera cuando te han visto entrar seguramente se han sentido celosos de mi o celosas de tu belleza. - Soltó de repente para besarme el cuello, pues apartó mi cabello castaño y suelto a un lado, produciendo como resultado que se me pusiera la piel de gallina.
La velada transcurrió bien, entre risas y leves coqueteos agradables para ambos. Cuando íbamos por el postre la conversación se volvió más seria sorpresivamente.
- Oye, T/N. ¿Te puedo pedir una cosa? - Preguntó limpiado sus labios manchados de caramelo por el flan que se estaba tomando.
- Claro. Dime Rin. - Levanté de mirada para verlo interesada en que me iba a pedir.
- ¿Puedes construirme una mansión? - Me quedé en blanco. - Es que, como eres arquitecta me apetece que la hagas tú antes que un desconocido. Obviamente no tienes por qué contestar ahora. - Saco un bolígrafo y un papel para anotar algo y dármelo, al parecer su número. - Cuando lo sepas solo llámame ¿sí? - Asentí para seguir comiendo hasta que terminamos para estar hablando durante un tiempo sobre cuando éramos unos críos.
- De verdad no me esperaba que terminaríamos así. - Mencionó nostálgico Rindou sonriendo levemente al plato vacío hasta que empezó a sonar "How deep is your love - Bee Gees" entonces él se levantó e hizo una pequeña reverencia provocando que una risita apareciera en mi rostro. - My lady ¿me concedería el honor de bailar con usted? - En su rostro podía verse un sonrojo no sabía si de vergüenza o de las copas que llevábamos de aquel buen vino que nos sirvieron.
- Claro que sí mi caballero. - Sonreí al verle para tomar su mano y levantarme.
Aquella velada terminó cuando la canción y nuestro baile terminó pero no obstante habíamos quedado en que a ambos nos gustaría repetir dicha en otro momento.
Por la mañana, como de normal volví a la universidad solo que me encontré con algo que no me esperaba y se basaba en 3 ocurrencias.
1- Un coche de matrícula más que conocida para mi aparcado enfrente de la universidad.
2- Una quedada de mis amigas sorpresa alrededor de la tercera ocurrencia muy interesadas.
3- Rindou Haitani con su cara de amargado de siempre.
- Vamos, llévanos a dar una vuelta chico guapo. - Soltó una.
- No. - Respondió el del peinando en forma de medusa.
- Seguro estás libre hoy, además casi nunca te vemos por aquí. Dinos tu nombre por favor. - Soltó otra chica pegándose mucho a él.
- No. - Insistió mientras seguía mirando buscando a alguien.
Sentía mi corazón roto y rabia hacía la situación. No lo comprendía, era todo tan difícil que simplemente me di la vuelta para empezar a caminar por dónde había venido. Me sentía impotente ante todo. Ame me llamó en aquel momento provocando que Rindou me mirase a lo que decidí colgar y ponerme a correr a pesar de sus gritos llamándome.
También escuché durante minutos los gritos de las chicas pidiendo que me dejará provocando que un fuerte dolor en mi pecho apareciera al ver que él no corría tras de mí. Empecé a llorar hasta llegar a mi casa donde estaba sentada en la puerta Ame, quien me consoló a pesar de no saber que había pasado.
No entiendo porque me duele y por qué me molesta que esté con chicas... A mi me gusta Ran
¿No?
Uffff nuevo capítulo después de 50 años en fin. Me encanta.
🙏 Por favor den le a la estrellita y voten se lo agradecería mil veces
🏃♀️ Sígueme para enterarte de los avisos etc
🧐 Te invito a que si te gustan mis historias y Tokyo revengers leas:
-The cause of my obsession (Ran x TN)
-The other face (Los Kawata x TN)
-Animals (Kakucho x TN)
-Tips and secrets (Mitsuya x TN)
-Gamblers (Takeomi x TN)
-Oneshots Tokyo revengers (+18)
-Haunted by death (Mikey x TN)
😎Pueden dar ideas en los comentarios o simplemente escribir lo que piensan yo los leo todos toditos
😅 Perdonen si hay alguna falta de ortografía, soy de números no de letras
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top