31- Un nuevo inicio...Un gran final.
Narrador omnisciente:
Han pasado sólo cinco días desde la batalla en Hogwarts.
El cuerpo de todos habían sido sepultados en un mismo lugar.
En el valle de Godric.
Harry había pensado que había sido la mejor decisión.
Los cuerpos Sirius Black y Lisseth Scamander descansaban en una tumba, situada justamente a un lado de los mellizos Black.
A su frente, tenían a sus mejores amigos, Lily Evans y James Potter.
A su otro lado, descansarían sus otros mejores amigos, Remus Lupin y Nynphadora Tonks.
Y detrás de ellos, quienes una vez se convirtieron en los padres de Sirius, Fleamont y Euphemia Potter.
La mayoría estuvo de acuerdo con la idea de Harry, así que todos estaban allí para hacerles un homenaje.
Porpentina Goldstein y Newt Scamander estaban un poco alejados del resto, pero eso no impidió que ambos lloraran.
Seguían sin poder creer la noticia.
Robert Scamander prefirió quedarse en casa.
No soportaba la idea de haber perdido a su hermana menor...
Parecía que fue ayer cuando casi se come a Leo, su pequeño Bowtruckle, y tuvo que soportar los regaños de su madre por descuidar a su pequeña hermana de apenas 5 años.
Eso lo dejó destrozado.
Sobre todo cuando vió a su hijo llegar a casa con rastros de sangre y grandes ojeras que acompañaban sus ojos brillantes esmeraldas
Los padres de Collin Creeve lloraban por su hijo, al igual que su hermano.
Él había sido un valiente niño, quién a pesar de tener la opción de huir con su hermano y mantenerse seguro, prefirió luchar...
Pasaría a cuidarlo por siempre.
Andrómeda Black cargaba al pequeño Teddy, quién no paraba de llorar.
Su cabello constantemente se convertía en rosado...
El pequeño deseaba ver a su madre otra vez.
Minerva Mcgonnagal había tomado el mando de Hogwarts, tal cuál debió hacerlo desde hace mucho tiempo.
Kingsley fue nombrado Ministro de Magia Provisional.
Aunque sus acciones como autoridad durarían por mucho más tiempo.
—Lumus.
Los presentes alzaron su varita, dejando que luces blancas provenientes de ellas iluminaran el cielo.
—Una vez, alguien me dijo que las peores guerras de un hombre... Son contra una mujer —Hermione hizo reír a los invitados—. Si, cómo se imaginarán, eso fue dicho por Sirius Black.
Minerva negó divertida, porque reconocía que era algo que sin duda alguna su ex alumno diría.
—Yo pienso, en cambio, que las peores guerras son contra nosotros mismos.
La castaña estaba en una especie de Tarima, siendo el centro de atención de cada invitado.
—Constantemente luchamos por sentirnos parte de la sociedad, por buscar seguridad en nosotros mismos, o simplemente por amor.
Todos le prestaban atención.
—Y es que esa última opción es la que más nos motiva a cometer muchos errores... Pero cómo diría Lisseth Scamander, cada resbalón no es caída, sino más bien un nuevo aprendizaje.
—Que ellos sientan que estamos agradecidos...
Que ellos sientan que jamás los olvidaremos.
Porque sus muertes no fueron en vano. Ninguna lo fue.
—Aprendamos a dejar de juzgar.
Muchas veces creemos que, porque una persona no sea amable, no tiene corazón.
Miren a Severus Snape.
Muchos creyeron que no era más que un traidor...
Pero después de todo, estaba de nuestro lado.
—No comparto la idea de juzgar a los demás, mientras que nuestros errores son mucho peores.
—Remus Lupin era un hombre lobo, sí, eso todo el mundo lo sabe.
Pero él nunca buscó hacerle daño a nadie, aún cuando muchos nos comportamos de la peor manera con él.
—Aprendamos de Collin, un niño que demostró que la guerra no era su impedimento, a pesar de tener la opción de refugiarse.
—Aprendamos de todos, que nos dejaron de enseñanza una gran lección:
A pesar de las sombras del camino, deben ser los recuerdo quienes nos motiven a seguir caminando.
...
Andrómeda mostraba un aspecto de cansancio total.
Ya no tenía quien la ayudase.
Así que Minerva vió al pequeño Teddy queriendo gatear, y pidió a Andrómeda que le diera al niño, y así ella pudiera descansar por un momento, cosa que ella agradeció.
Una vez en sus brazos, el pequeño quiso tocar los lentes de la directora, pero ella se lo impedía.
Cómo resultado, el niño cambió su cabello rosa a un castaño particular.
El pequeño había recordado cómo Remus no le dejaba tocar sus lentes de lectura, y era Nymphadora quien se los daba a escondidas.
Obviamente Minerva no lo entendía, pero se rindió a fin de cuentas, dejando que el niño lo tomara.
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En ese mismo momento, ellos no eran los únicos que estaban reunidos.
Aquellos que habían muerto los veían, y todos ellos deseaban profundamente que ellos los vieran.
Tonks le hacía muecas a su hijo, cómo si eso pudiera animarla un poco, y simulaba tomar los lentes de su antigua profesora, mientras veía al niño sonreír.
Remus también reía.
Hacía mucho que no lo hacía.
¿Y quién no?
Después de todo, no era común ver un ciervo corriendo perseguido por un perro.
A su lado, Severus rodaba los ojos, y Regulus sólo se burlaba del panorama.
La cosas entre ellos no había cambiado del todo, pero luego de ver "aquel propósito", muchos pudieron llevarse de mejor manera.
Peter Parker les alentaba a seguir en su persecución, a diferencia de su hija, quién leía junto a su madre bajo un árbol.
Lo más duro para Fred y George era ver llorar a su madre, al igual que a todos sus hermanos.
Lily se dió cuenta, y por ello codeó a su mejor amiga.
Lisseth se atrevió a acercarse lentamente a los chicos, y los tomó de sorpresa.
—Vamos a estar bien —La rubia intentó animarlos—, y ellos también.
—Quisiera volver —Comentó Fred con pesar—, quisiera poder decírselo personalmente a mi madre.
El corazón de ambas mujeres pareció hacerce pequeño.
Ambas sabían lo que se sentía estar lejos de sus hijos.
Ambas entendían su dolor.
Simplemente, la rubia jugó con sus cabellos, haciendo que ambos rieran.
—¡Fred, George! —Gritó la pequeña Lyra Black—. ¡Miren lo que he hecho!
—¡Mamá! —Se quejaba el pequeño Leo, quién estaba asqueado por el líquido verde que su hermana le había tirado sobre su cabeza—.
—Lyra...
Y sabiendo cómo era Sirius, él se acercó hacia su hija y la correteó, logrando que ella riera y corriera.
—Ven acá, Leo —George fue el primero en acercarse al niño—.
—Ufffff, apestas... —Se quejó Fred tapándose la nariz—.
—¡Oye! —Se indignó el Black menor—.
—Necesito saber que es —Dijeron los dos hermanos a la vez—.
—¿Para qué? —Preguntó inocentemente el rubio—.
—Porque...
Ambos se acercaron al niño y le susurraron:
—Le haremos una broma a tus padres... ¿Te apuntas?
—No lo sé... Quizás luego.
Fred elevó una ceja en señal de confusión.
—¿Encerio creen que voy a desperdiciar esa oportunidad? —Se burló el menor—. ¡Por supuesto que...!
—Shhh
—Perdón —Bajó la voz—. Por supuesto que quiero unirme.
Los tres muchachos se fueron hacia otro lado, buscando a su nueva víctima...
Malika Parker.
Mientras esto sucedía, Lisseth miraba apenada a Molly.
La mujer pelirroja parecía no querer alejarse de la tumba de sus gemelos...
Y fue cuando ella se sintió identificada.
—Gracias por cuidar siempre a Harry —Dijo Lily cómo si la otra madre pudiera escucharla—.
Molly sollozaba, siendo abrazada esta vez por Fleur.
—No te preocupes, yo cuidaré a Fred y a George por ti... Es lo menos que puedo hacer.
Aquellas palabras hicieron que la menor de los Scamander soltara unas lágrimas.
—Ambas —Corrigió—. Ambas cuidaremos de los gemelos Weasley... Lo prometo.
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Andrómeda esperó a que la mayoría se fuera del lugar para romper a llorar.
No sólo había perdido a su hija en esa guerra, también había perdido a su esposo.
Cada noche guardaba la esperanza de que todo lo vivido hubiera sido un recuerdo... Una pesadilla.
Sin embargo, todo fue real...
Todas las noches se derrumbaba en su cama... Mientras el pequeño Lupin dormía en su cuna.
Muchas veces pensó en irse...
En ir con ellos...
Pero algo la detuvo: Su nieto.
Edward Lupin Tonks era lo único que le quedaba a la mujer, y era la única razón para quedarse a su lado.
Deseaba poder continuar... Pero todo era demasiado para ella.
Inconscientemente su nieto lograba alegrarle los días, y sería algo con lo que ella aprendería a lidiar con el tiempo.
Andrómeda secó sus lágrimas al sentir un pasos, y tomó al niño nuevamente en sus brazos con la intención de irse.
Sin embargo, se detuvo al reconocer al rubio.
—Draco.
En ese momento sólo eran ellos.
Dos almas rotas...
Dos inocentes de una injusta vida.
— Tía Andrómeda.
Draco Malfoy había asistido al lugar en silencio.
Nadie sabía que estaba allí... O al menos eso había intentado.
—¡Teddy, no!
Muy tarde.
El pequeño había cambiado su cabello azul a un tono cobrizo, e intercambio sus ojos cafés por unos grises, y empezó a reír por su logro.
Por primera vez en varios días, Draco sonrío.
El pequeño intentó quitarle uno de sus anillos, pero fué él quien se lo dió mucho antes.
Su tía sonrío ante el gesto, pero también debía irse.
Debía darle su tiempo.
Quiso preguntar por su hermana Narcisa, pero sólo se atrevió a dar dos palmadas en los hombros del muchacho, para luego irse.
Y Draco no sabía cómo sentirse.
Era una mezcla de odio... Hacia él mismo, y un gran arrepentimiento.
En silencio, se acercó a la tumba de los gemelos, y se dejó caer.
Se tiraba toda la culpa.
Tal vez, si nunca hubiera querido enorgullecer a su padre...
Tal vez, si nunca se hubiera dejado influenciar por su tía Bellatrix...
Tal vez, si nunca hubiera sido mortífago...
Tal vez todo seguirían vivos.
Pero no existía un "y si nunca".
Él lo sabía, y por eso se maldecía.
Sólo le quedaba arrepentirse y aprender de sus errores.
De pronto, sintió que alguien más estaba presente.
Por un momento pensó que se trataba de su tía Andrómeda, quizás pasaría a devolverle su anillo.
Pero se trataba de Molly Weasley.
Y cómo era de esperarse, el rubio la ignoró, sintiendo una terrible punzada en su corazón al hacerlo.
Molly, al saber lo que debía hacer, sólo sonrío...
Su instinto de madre se lo decía.
Así que sólo llevó su dedo a la comisura de sus labios, haciendo señal de que no le contaría a nadie sobre su inesperada visita, y Draco sólo asintió, agradeciendo por el gesto.
Nadie nunca supo de ese encuentro.
Molly fue un soporte por un momento para Draco. Él le imploró perdón, diciendo que se arrepentía... Y que todo era su culpa.
Pero Molly se negaba a pensar en eso.
Ella sabía que él era sólo un muchacho... Un niño que no tuvo elección propia.
Ese encuentro marcó el inicio de una nueva amistad.
Draco se sintió por primera vez en familia cuando la visitaba, mientras ella le preparaba unas deliciosas galletas en cada visita.
Molly lo aceptó cómo un hijo más, sin importarle lo difícil que era convencerlo.
Aunque al inicio fue un secreto, los Weasley se dieron cuenta al poco tiempo, pero dejaron que ella lo hiciera.
¿Por qué?
Porque se dieron cuenta de que aquello le permitía a la mujer ser feliz por un momento.
Después de todo, Molly le tenía mucho afecto.
Y él a ella.
Ambos encontraron en el otro aquello que habían perdido.
Draco, encontró lo que significaba la atención total de una madre.
Y Molly, pudo estar en paz, porque él le contaba las maravillosas anécdotas de los gemelos en Hogwarts, las travesuras y locuras en su contra.
Todo tuvo un nuevo inicio...
Y un gran final.
Un final que no todos se esperaban, pero que terminaron por aceptar.
Fin.
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N/A:
LPM estoy llorando 😭
Se me hace muy difícil decirle adiós a estos chicos...
Cada capítulo se convirtió en mi forma de escape del mundo real... Y es algo de lo cual en parte me siento animada.
Mil gracias por todo.
Por sus votos, por sus comentarios, y por todo su apoyo.
Es muy lindo saber que han decidido continuar la historia hasta el final 😭✨
No quise dejar un final peor... Mi estabilidad emocional no podría con ello.
Es por eso que dejé a mis dos gemelos juntos... Fred y George.
Tal vez no cumpla con las expectativas de muchos, pero para mí fue lo mejor... No soportaba separar a este dúo.
Díganme, ¿Cómo fue que descubrieron la historia?
Mis obras no terminan aún <3
Si desean, tienen disponible nuevas historias en mi perfil.
Completas:
✓ Don't Leave Me Alone (Un Fanfic con George Weasley)
En proceso:
✓Heridas de Luna Llena (un Fanfic con mi bebé Remus)
✓ Plan Estocolmo (Un nuevo proyecto personal)
✓Songfics (Una colección de capítulos con personajes de Harry Potter basados en una canción)
Y tengo nuevos proyectos en borradores que pronto serán publicados, como:
✓ Cartas a la luna (Relatos escritos por Teddy Lupin a sus padres)
✓ Banished (Un Fanfic sobre la familia Black. Mucho drama con esta familia jajajaj)
✓ One Shots (Edición de Marvel)
✓Nuevos recuerdos (Un fanfic con Loki)
¿Cuál les gustaría leer primero?
El más nombrado en los comentarios tendrá un adelanto la siguiente semana.
Nos vemos el siguiente viernes con el prólogo final de esta historia ❤️
Besos y abrazos virtuales a todxs ❤️
Los amo un mundo.
Atte: Ashly.
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