Seonghwa estaba algo aterrado y profundamente confundido. Tanto que había estado evitando a Hongjoong en los últimos tres días luego de la extraña confesión de este estando ebrio. Esa noche ni si quiera había podido dormir con el rubio, tuvo que dejarlo algo ido en la cama y él se quedó mirando por la ventana de la sala de estar como un imbécil con un cigarrillo en la mano, sin encenderlo. No fumaba casi nunca, solamente cuando habían cierto tipo de situaciones que ya le estaban pasando la cuenta, y realmente estuvo dispuesto a hacerlo, pero se mantuvo a raya.

Así que allí estaba, miércoles ya, sin si quiera haber podido mirar a Hongjoong a los ojos durante esos días porque esas dos palabras se repetían en su mente como un taladro y entraba en pánico, y era horrible, porque se había acostumbrado al toque de Hongjoong ya y Hongjoong al suyo, era difícil no estar cerca del rubio pero su mente le jugaba una mala pasada y se iba despavorido, dejando a Hongjoong extrañado y molesto por su actitud sin motivo, según el.

Ese día en especial, Hongjoong antes de que se fuera al trabajo lo había tomado de las solapas de su chaleco y jalado de él en un beso profundo, Seonghwa se aterró y por unos segundos e intentó forcejear, pero luego fue imposible evitar fundirse con él porque joder, lo extrañaba, aunque vivieran en el mismo departamento extrañada tocar a Hongjoong de la manera que fuese. Y luego de eso, el rubio le había preguntado si todo estaba bien entre ellos, con ese tono de preocupación tan lindo y cálido que por poco Seonghwa cede en soltar la lengua, pero solo había asentido ye se había marchado de allí.

Dejó caer la cabeza contra su escritorio, ni si quiera estaba atendiendo bien a sus pacientes por tener la cabeza nublada, agradecía no haber agendado cirugías para estos días o estaría perdido, seguro mataba a alguien por lo despistado que estaba.

Eunji, su secretaria, entró en su consulta para entregarle un café mocachino que de seguro consiguió en la cafetería para él, y le agradeció con los ojos cansados por tomarse la molestia de haberlo hecho. Eunji era, por lo que creía, lo más cercano al contacto femenino en su vida que no fuese su madre, podía incluso considerarla su única amiga, aunque no sabía si la rubia igual lo consideraba como tal.

"¿Problemas en el paraíso?", preguntó la rubia, Seonghwa no comprendió y tampoco hizo el esfuerzo de hacerlo, Eunji no sabía nada de su vida amorosa más que Wooyoung y San, así que intuyó que hablaba de ellos, "¿Te han seguido buscando? porque no me explico tu cara de muerto", y Seonghwa tenía razón.

"Aunque no lo creas, pararon, solo debía hablar con ellos de forma más.. ¿suave? no lo sé, pero no es eso lo que me tiene así", negó con la cabeza, ofuscado, tomando un sorbo del dulce y caliente líquido bajo la atenta mirada de Eunji.

"¿Entonces?", Seonghwa le miró, Eunji ocupando el bonito traje administrativo con el logo de la clínica. Seonghwa a veces pensaba en el por qué no le gustaban las mujeres, siendo que eran bonitas, suaves y delicadas. ¿Por qué no podía interesarse en Eunji? Era una mujer que cualquier hombre querría, ¿eso no sería más fácil? Estaba convencido de que no sería tan complicada su vida amorosa si fuese heterosexual.

Pero no lo era, le gustaba el pene y Hongjoong.

Oh.

Volvió a apoyar su cabeza en la mesa, suspirando.

"Eunji, ¿Qué debe hacer uno cuando alguien muy cercano a ti se te declara... no literalmente?", ante su pregunta, Eunji arrugó la frente. A Seonghwa no le tomó más de dos segundos en darse cuenta de que su pregunta había sido realmente idiota e incomprensible. "Hablo de que, hum... digamos tengo una relación sexual con alguien muy cercano a mi, esa persona hace unos días confesó que me amaba, ¿Qué debo hacer?"

Eunji, comprendiendo, asintió con la cabeza y miró por encima de él, pensativa.

"¿Sientes lo mismo?", ante aquello, Seonghwa no supo qué responder, por lo que se quedó callado sintiendo esos ojos pequeños posarse de nuevo en él, "Si sientes que lo amas igual, ¿por qué no se lo dices?"

"Es que no sé si lo hago, y si lo hiciese, ¿Qué me asegura que funcionaría todo? lo conozco hace ocho años, me da miedo que todo se estropee", se llevó las manos al rostro, frustrado.

"¿Y qué si no pasa?", Eunji le respondió con otra pregunta, y Seonghwa a través de sus dedos vio como ella quería seguir hablando, pero su teléfono había sonado, y sabía que Eunji debía volver a su puesto en secretaría y él. volver a ser un cardiólogo.

Al final, la ayuda de Eunji le dejó con los mismos, e incluso más temores que antes.

Debía pensar en algo ya.

"Me estás ignorando", el control de la televisión se le fue arrancado de las manos, y en dos segundos, Seonghwa tenía el pequeño cuerpo de Hongjoong encima suyo, sentado en su regazo y acorralándole allí en el sofá. Seonghwa tragó saliva al sentir esas manos situarse en el respaldo detrás de sus hombros. Hongjoong se veía molesto y dolido, con la frente arrugada y una mueca, y con justa razón lo estaba, "Lo haz hecho toda la semana, no me lo niegues, ¿Por qué?"

Seonghwa no sabía donde colocar las manos, quietas en el aire sin tocar a Hongjoong, quería decirle, era demasiada ya la psicosis y más aún con Hongjoong encima suyo, estaba casi en la misma posición que aquella vez, ¿Cómo podía quitarse de la cabeza aquello y hacerlo pasar? era imposible.

¿Por qué Hongjoong le amaba? si era un idiota, un imbécil, un insensible que no sabe donde está parado y un fracasado cobarde que era horrible en el amor y tenía un carácter de mierda completamente chocante con el suyo. Hongjoong no tendría por qué amarlo, el rubio era demasiado para alguien como él, Hongjoong merecía a alguien mejor y habían muchos más que él allí afuera, alguien que le prometiese que no arruinaría las cosas y sea estable, que no tuviese el miedo de perderlo si algo no salía bien, alguien que e amase de verdad.

¿Y acaso él no lo hacía? no tenía idea, tampoco sabía sobrellevar bien como se sentía con Hongjoong y la necesidad de tenerlo con él. Una masa de sentimientos extraños se formaba desde hace semanas dentro de él y la confusión le estaba pasando la cuenta. él no era suficiente para Hongjoong, ni si quiera sabía leer sus propios sentimientos, solo condenaría a Hongjoong a pasarla igual o peor que cuando estuvo enamorado de Mingi años atrás.

Peor aún así pensar en alejarse era tan... Seonghwa no quería, por supuesto que no, se sentía bien con él. con como le miraba o tocaba, se sentía tan a gusto que no quería cortar ese contacto y si fuese por él no lo haría, pero la situación se le estaba yendo de las manos.

"¿Ni si quiera así me piensas hablar?", salió de sus pensamientos ante la voz de Hongjoong, sintiendo un tirón en el pecho al escucharla tan dolida, y ver ese rostro descompuesto en tristeza.

Seonghwa apretó los labios. suspirando con fuerza antes de rodear con sus brazos esa pequeña cintura, cerrando los ojos, dejó reposar su frente contra la contraria, jalando a Hongjoong más cerca suyo y sintiendo ese aroma a coco del shampoo de Hongjoong. En lo personal no le agradaba demasiado el coco, pero solo por ser Hongjoong lo aceptaba y disfrutaba.

Sintió a Hongjoong tragar saliva y removerse encima suyo, seguro intentando adivinar qué diantres le sucedía, pero Seonghwa guardó silencio y rozó la punta de su nariz con la respingada contraria en una suave caricia, logrando que en poco rato Hongjoong se rindiera y relajara los hombros, para dejar caer sus manos a su pecho y quedarse allí.

"Perdón, no sé que me pasa", y era cierto, no sabía qué carajo le pasaba con ese rubio.

Solo le había bastado a Hongjoong dos meses en dar vuelta la cabeza de Seonghwa y olvidar esos ocho años de amistad para pasar a algo más profundo, ¿Qué era, para él, ese al que llamaba su mejor amigo antes, justo ahora? y no solo era eso, ¿Qué quería lograr Seonghwa con Hongjoong?

Sintió los dedos de Hongjoong en su cabello, acariciando sus hebras grises y dejando que Seonghwa siguiese con ese inconsciente beso esquimal. Era agradable, por primera vez en toda esa semana podía, y estaba, tocando a Hongjoong sin mortificarse por la situación del domingo. Seonghwa se sentía bien, liviano y cómodo, de pronto toda su preocupación y ansiedad se había esfumado con esos dedos acariciando su cabello.

"Haz estado así toda la semana, ¿seguro no hay una razón?", habló el rubio, con la voz dulce y comprensiva, "¿Ha pasado algo con Wooyoung y San... o conmigo, y no me lo quieres decir?", preguntó temeroso.

"Creo que debemos olvidarnos de Wooyoung y San, ya son pasado, no volverán a ser un problema entre nos- no volverán", se retractó en plena oración, pero Hongjoong de igual manera lo había entendido, sintió una aspiración de sorpresa y tuvo que morderse la lengua.

"¿Entonces es conmigo?¿pasó algo el domingo?"

Se quedó callado un momento, sin saber si decirle la verdad y afrontar todo, o si callarse por un rato más para seguir pensando -aunque seguro estaría cavando su propia tumba si seguía así-. Seonghwa no quería que todo terminara con Hongjoong, incluida su amistad, por su tonta cabeza y sus sentimientos confusos, no se lo perdonaría jamás si se dignaba a perder a ese rubio, así que con eso en mente, abrió los ojos para toparse con los orbes grandes y preocupados de Hongjoong, y sonrió con calma que no tenía en ese momento.

"No, todo está perfecto entre nosotros. Solo soy yo con el trabajo que me está estresando demasiado", y se odió, porque Hongjoong le creyó tan fácil, que una sonrisa abierta cruzó esa bonita boca y esos ojitos brillantes se convirtieron en medialunas, Hongjoong le atrajo en un beso empalagoso que correspondió con necesidad, disfrutando del amor que Hongjoong le estaba demostrando y enterrando lo confuso y mal que se sentía en un lado recóndito de su cabeza.

Cuando cubrió a un desnudo Hongjoong esa noche en su cama, mientras él se recostaba a un lado con el cabello aún húmedo. Suspiró cansado mentalmente. Hongjoong dormía con una sonrisa en el rostro, sujetando su mano derecha con la propia y los dedos entrelazados. Seonghwa vio la imagen con solo la lámpara de la mesita de noche encendida, la piel del rubio luciendo tan bonita y con un aspecto de ángel. Y es en esos momentos donde se decía que no le molestaría dormirse con esa imagen cada noche, y despertar de aquella manera igualmente.

Y de nuevo, las miles de alarmas en su cabeza, se dispararon dentro de él como pequeñas estacas en el pecho. La idea de que si daba aquel paso y no funcionaba tendría que tirar a la basura cerca de una década con el rubio y alejarse por completo, le detenía de todo, le enfermaba. La idea de que él no era suficiente, o que nunca llegaría realmente a amarlo y solo era su jodida cabeza confundiéndole era mil veces peor, Seonghwa no quería cometer el mismo error que con Wooyoung y San, no cuando al final de todo, se dio cuenta de que solo destruyó una relación y que no sabía si se iba a recuperar en algún momento.

Seonghwa no quería cagarla, aunque en el fondo sabía que lo haría de igual manera si no se aclaraba.

Él realmente, no sabía que hacer.

hwalight | 210622

Estoy reuniendo firmas para ir a patear a Seonghwa por tremenda estupidez que se carga.

Firme aquí.

Por cierto, una de las razones de por qué no indago mucho en las situaciones con el woosanhwa, es porque quiero que sucedan y se expliquen bien en el libro dedicado a ellos!