"Los hermanos Salvatore"

Bella desvió la vista de ellos, debía admitir que esos chicos eran atractivos pero de una manera distinta de los Cullen, siguió su camino hasta llegar a su clase de biología, solo esperaba que él profesor no la obligara a presentarse.

Con cada paso que daba se sentía nerviosa pero a la vez se sentía algo diferente, no sabía cómo explicar lo que sentía a dentro de ella, le dejó el papel que le dió la secretaria al profesor para que lo firmara.

La castaña observó como todas las mesas estaban ocupadas excepto dos, en una Bella reconoció a Edward Cullen, que estaba sentado cerca del pasillo central junto a la única silla vacante.

-Stefan Salvatore ¿Por qué viene tarde? .-preguntó el profesor, Bella volteó a ver hacía la puerta era el chico de cabello castaño claro y ojos color verde bosque.

-Perdón no volverá a pasar.- dijo el joven al pasar por la puerta mientras tenía la mirada sobre la joven castaña. La cuál fue regresada por Bella quedándose ahí parados chocolate contra verde 

-Muy bien tomen asiento todos.-dijo el profesor haciendo que ambos desviarán la mirada. 

Ella tuvo que tomar asiento a lado de Edward, pero Bella notó como él se ponía rígido, cuando sus miradas se encontraron, la expresión de Edward era de lo más extraña y hostil. Bella apartó la vista ¿Que le pasaba? Se preguntó la castaña viendo como él la miraba.

No alzó la vista pero ella notó como Edward se inclinaba en dirección opuesta, sentándose al borde de la silla, Bella olió su cabello con disimulo y olía a fresas, el aroma favorito de ella. Entonces ¿por qué Edward apartaba el rostro como si ella apestara?

Stefan estaba atento a cada reacción de el vampiro e frente a él por si cometía algún error o si se le iba encima a la joven que estaba así lado y se maldijo por no haberle dicho que se sentará a su lado él sabía que esos vampiros no contenían su sed y aunque ellos se alimentan de sangre animal no iba a arriesgarse de que él le hiciera algo a la joven, aunque no sabía el porqué se esa reacción. 

La clase termino y Edward Cullen casi salió huyendo, Bella estaba demasiado aturdida, él la miró casi con repugnancia y ella no entendía porque, empezó a recojer sus libros y reprimir las lágrimas. La castaña solía llorar cuando se enfadaba, una costumbre humillante para Bella.

-Bella Swan ¿cierto?.-inquirió el chico de cabello castaño claro, Stefan sonreía con cierta diversión al a ver impedido de que Mike Newton se acercara a Bella para hablar.

-Si… ¿Disculpa tú…?.- dijo ella recriminando se de no haber recordado el nombre de él cuando el profesor le dijo su nombre. 

- Stefan.-dijo el joven presentándose a ella.- Stefan Salvatore.- dijo él presentándose a la joven castaña

-un gusto en conocerte Stefan.-murmuró Bella con un leve sonrojó.

-¿Y cómo te vas adaptando?.- preguntó Stefan mientras caminaban juntos por los pasillos 

-Siendo honesta es algo complicado pero al menos creo que tengo una nueva amiga, se llama Hannah y me agrada ¿Quién era el chico que estaba a tu lado?.-preguntó Bella recordando al chico de cabello negro.-Antes de llegar a la clase de biología yo te vi con él.-aclaro.

-Adaptarse es algo complicado pero no imposible.-Stefan le sonrió.-y respondiendo a tu pregunta él chico que estaba a mi lado es mi hermano Damon.

-De acuerdo… ¿Así que eres de aquí o te mudaste?.- preguntó Bella tratando de encontrar un tema de conversación y no sentirse incómodos pero ella no era muy social que se dijera. 

-Nos mudamos, así que puedo entender como te sientes.-respondió Stefan tratando de no recordar el motivo por el cual Damon y él se mudaron.

-Toma tiempo acostumbrarse o eso dicen.-dijo Bella recordando el porque se había mudado con su padre. En el fondo ella se debatía si le preguntaba si olía mal o no.  

-Sí pero finalmente uno se adapta ¿Eres buena para educación física? .-pregunto Stefan al tiempo que entraban al gimnasio.

-Yo … bueno no del todo.-respondió Bella para después reírse y recordar cómo se tropezaba tantas veces antes.-no soy tan buena para las actividades que incluyan la coordinación. 

Y si era un desastre en él deporte hasta sintió náuseas al ver como jugaban al voleibol. Al fin la campana sonó indicando el final de las clases, ella se dirigió acompañada de Stefan a entregar él comprobante con las firmas de los profesores.

-No tienes algo que hacer… Digo no es que no me agradé tu… tu compañía pero…. Que.. lo que quiero decir es que si, si tienes que ir hacer algo mejor puedo ir sola no… no hay problema .-dijo Bella al ser consciente que todos la miraban a ella y a el joven a su lado además que no entendía el porqué alguien como él estaba con alguien como ella. 

Stefan rió entre dientes y negó con la cabeza.

-No te preocupes, Damon me puede esperar en él estacionamiento.-dijo Stefan mirando a la castaña sonrojarse.

-De… De acuerdo.- dijo ella volteando a ver a otro lado para no verlo y que se diera cuenta de sus mejillas cosa que no era posible pues él sentía el olor de su sangre. Al entrar a la secretaría ambos se quedaron callados al ver a Edward Cullen tratando de cambiarse de asignatura. 

-Bueno, no importa ya veo que es imposible. Muchas gracias por su ayuda.-murmuró Edward apretando sus manos en puño y mirando duramente a la castaña.

Bella frunció el ceño, no entendía el comportamiento de Edward, sin más se acercó a la señora para entregar él papel con las firmas de los maestros.

-¿Tuviste un buen día linda?.- le pregunto la secretaria a la hora de que le recibió la hoja a Bella 

-Si, gracias por preguntar.-respondió Bella, aunque una parte es verdad se la había pasado bien pero también se le hacía extraño el comportamiento de Edward.

-Me alegro cariño.-dijo amablemente la señora y después Bella se dio vuelta para asi dirigirse a la salida siendo acompañada por Stefan 

Ambos se dirigieron al estacionamiento, cuando Damon se acercó hasta ellos.

-llevo horas esperando ¿Donde estabas, Stefan?.-inquirió él para después mirar a la chica que estaba a lado de su hermano.-oh ahora entiendo y dime ¿Cual es tu nombre linda?.-preguntó Damon viendo a la castaña con una sonrisa.

-Damon en serio.-dijo Stefan en un susurro sabiendo que era lo que estaba haciendo su hermano.

-Creo… Creo que se me hizo tarde lamento mucho atrasarte Stefan de verdad lo siento.-respondió Bella ignorando la mirada y la petición del Salvatore mayor dejándolos a los dos sorprendidos 

-Descuida, a Damon le gusta exagerar las cosas.-Stefan trató de ocultar su sorpresa, Damon había tratado de hipnotizar a Bella pero no había funcionado.-te acompaño hasta tu auto.-dijo Stefan mirando como la castaña se ruborizaba. 

-Gracias pero no hay problema.- dijo la joven castaña tratando de no darle más problemas a su… se le podía llamar amigo con su hermano.- esta ahí asi que no camino mucho.- dijo señalando el auto haciendo que a Damon se le salieran los ojos por el hermoso auto 

-¿Ese es tu auto?.-pregunto Damon recordando que en la mañana había visto él Ford Shelby GT500, ahora tenía sentido de porque no lo había visto antes incluso pensó que era de los Cullen.

-Si… fue un regalo de mi padre.- respondió Bella orgullosa de lo que su padre le había dado era un regalo que le llegaba hasta el fondo del corazón.- así que si, se puede decir que es el mio. 

-Tienes que dejar que un día lo maneje.- le dijo Damon en un tono muy coqueto que hizo que no le gustara para nada a Stefan o a Edward que estaba desde atrás escuchando la conversación de Bella con los hermanos Salvatore.

-Tal vez un día te deje que lo manejes.-murmuró Bella desviando la vista.