26 • 𝑺𝒐𝒓𝒑𝒓𝒆𝒔𝒂𝒔 •


Solté un quejido cuando salió de mi lentamente, haciendome sentir vacío y frío al instante.

Me volteé sobre la cama, viéndolo secar su miembro cubierto de saliva, lubricante y semen, antes de comenzar a vestirse.

-Extrañaba el mañanero diario- Dije estirandome sobre mi mismo, viéndolo subirse los pantalones de vestir.

-Lamento tener que irme a trabajar- Dijo sentandose en la cama con la camisa desabotonada. -Sabes que me quedaría-

Tragué duro asintiendo y recordando la conversación con Yeeun sobre su compañía.

Me senté sobre sus muslos, haciendo equilibrio para no manchar su traje, y comenzando a abotonar su camisa.

Sus labios se posaron en mi cuello y sus manos en mi trasero, haciendome suspirar y resistir el impulso de pegarme a él.  Mancharía su camisa de semen si lo hacía.

-Te prepararé una sorpresa para cuando vuelvas- Susurré sintiendo su miembro crecer en su ropa. -Así que vuelve a la hora que deberías de volver-

-Es mucho tiempo sin verte- Jadeó rozando mi lubricada entrada con sus dedos, haciendo gemir y escoder mi rostro en su hombro.

-Aguanta, guapo- Pedí, besando su piel antes de acabar de cerrar la camisa. -Te prometo que valdrá la pena-

-Cualquier cosa vale la pena por el simple hecho de que estés tu esperandome en casa- Susurró mordiendo mi cuello.

Definitivamente dejaría marca.

-Te amo- Susurré separandome para rozar sus labios con los mios. -Realmente te amo-

-Y yo a ti- Susurró besandome suavemente.

⊰᯽⊱┈────┈⊰᯽⊱

-Bien- Dije poniendome de pie frente a todos los empleados que vivían en la casa de Jungkook. -Día libre-

-¿Disculpe?- Preguntó la señora Jung.

-He reservado habituación en el hotel del centro que tiene esa estatua rara de un tipo desnudo en la puerta- Dije haciéndolos asentir dudosos. -Irán ahora y vendrán mañana a la tarde-

-¿Habla en serio?- Preguntó el jardinero y yo asentí en respuesta.

-Pueden venir mañana temprano si gustan, pero no antes de que amanezca- Dije serio haciendo a la señora Jung reír entre dientes. -Coman lo que quieran, aprovechen el SPA, diviertanse- Continué, restandole importancia. -Pero no quiero que pisen la propiedad hasta, al menos, mañana a las siete de la mañana-

-¿Se divertirá con el señor Jeon?- Preguntó la señora Jung con tono pícaro haciendome sonreír.

-Las reservaciones están a nombre de Min Yoongi- Dijo ignorando la pregunta. -Descansen-

⊰᯽⊱┈────┈⊰᯽⊱

Arremangué mi camiseta y escurrí el trapo para limpiar el piso en la bacha. Había limpiado todo el segundo piso y estaba acabando con el primero.

Sentía que sería una buena manera de acostumbrarme al lugar, ya que la mayor marte del tiempo solo estoy en el cuarto de Jungkook.

Todo el resto del lugar aún se sentía ajeno a mi.

Volví a humedecerlo en el agua perfumada y lo arrojé al suelo antes de continuar trapeando.

Seguí hasta el cuarto que había a modo de recepción para salir al patio trasero. Ese, particularmente, era un lugar que nunca me había parado a ver.

Era un cuarto pequeño en comparación a los demás de la casa, casi vacío con una puerta a un closet de herramientas para el jardinero y otra a un pequeño baño.

Pasé el trapo por el suelo, cuando se quedó atorado, impidiendome continuar.
Fruncí el ceño y me agaché para ver una depresión en la cerámica, haciéndome quitar el trapo para verla mejor.

Era un gran rectángulo en el suelo que parecía separado del resto del marmol blanco.

Adentré con cuidado mis dedos, rodeando el rectángulo, hasta que dí con una parte hueca debajo de uno de los lados.

Levanté la superficie dividida y una luz se encendió bajo esta, dejandome ver una escalera de concreto sólido.

Miré a los lados, esperando algo que nunca llegó y alcé los hombros restándole importancia.

Abrí por completo la compuerta y emprendí camino hacia abajo con cuidado y curiosidad.

Jungkook dice que parezco un gato cuando hacemos el amor, espero que la curiosidad no me mate.


⊰᯽⊱┈────┈⊰᯽⊱


-¿Qué carajos?-

No me lo podía creer ¿Tanto misterio por esto?

Era una enorme piscina cubierta.
Había unas luces en el techo de un color celeste suave, casi blanca.
Era una habitación sin ninguna ventana, sin ninguna otra puerta más de por la que entré, parecía una enorme caja negra con aquellas escaleras y nada más.

Bajé de aquél pequeño balcón que dividía la escalera y la superficie de la piscina, caminando al rededor de esta y deteniendome para adentrar la mano a esta.

El agua estaba tibia, debía tener algúna calefacción porque sin un rayo de sol entrando en contacto con el agua, era imposible que esté así de caliente.

Me puse de pie, me quité la ropa y me adentré al agua.

⊰᯽⊱┈────┈⊰᯽⊱

Acomodé mi ropa, viendo la puerta abirse y a Jungkook entrando con su traje y su portafolio.

-Bienvenido a casa-

Se volteó y abrió los ojos de par en par viendome con el traje de mucama que había comprado cuando me mudé con él.

-Dios- Susurró parpadeando al verme.

-Dejeme ayudarlo-Dije acercandome.

Tomé su portafolio y lo dejé en la mesa del recibidor, para poder quitarle el saco del traje y abrir los primeros botones de su camisa.

-Esperaba muchas cosas, pero no esto- Dijo haciendome reír entre dientes.

-¿Le agrada?- Pregunté acomodando el saco y la corbata en el perchero.

-Dios, si- Susurró y vi sobre mi hombro como miraba mis piernas.

-¿Ya quiere cenar o se quiere relajar un poco?- Pregunté acercandome a él y pasando mis manos sobre su pecho.

-¿Puedo comerte a ti?- Preguntó haciendome sonreír. 

-Provecho-

⊰᯽⊱┈────┈⊰᯽⊱

-¡Ah, ah, ah, ah!-

Tenía apoyada la frente en la isla y sentía sus testículos golpeado con los míos empuje tras empuje.

Sentí sus manos separar mi trasero con firmeza, haciendome gemir con fuerza, sintiendo mi piel hirviendo y sus gruñidos tras de mí.

-¡Dios!- Jadeó pegandose a mi, haciendo sus empujes más duros y fuertes. -Me encantas- Soltó mordiendo mi cuello. -Te amo tanto, Yoon-

Cerré los ojos y gemí con fuerza, levantando mis pies del suelo para poder seguir con mis caderas los movimientos de las suyas.

-No puedo más- Susurré viéndolo sobre mi hombro.

Mordió su labio inferior y pasó sus manos por debajo del vestido, sosteniendome por la cadera con una, para tomar mi miembro con la otra.

-¡Joder!- Grité, viniendome en su mano sin filtro alguno.

Se empujó dentro de mi una última vez, llenandome de su semen caliente hasta lo más hondo, haciendome temblar de placer entre sus fuertes brazos.

Se dejó caer en mi espalda, respirando hondo, intentando controlar su agitación y su acelerado corazón.

-¿Donde está todo el mundo?- Susurró besando mi espalda cubierta.

-Les he dado el día libre- Respondí haciéndolo asentir.

-¿Tu harás la cena?- Preguntó haciendome reír.

-Lo intentaré-

⊰᯽⊱┈────┈⊰᯽⊱

-¡Déjame!- Grité entre risas.

-Acepta cuando no puedes hacer algo- Dijo riendo.

Me tomó de la cintura, alejandome de la cocina y sentandome sobre la isla.
Pasé mis manos por su barbilla y dejé que una nuestros labios en un beso risueño.

-Se quemará mi cocina si sigues así- Susurró sobre mis labios.

-¿Pediremos comida?- Pregunté sonriendo.

-Yo cocinaré- Dijo haciendome verlo sorprendido. -¿Qué?-

-¿Sabes cocinar?- Pregunté incrédulo.

-No soy chef profesional pero puedo alimentarnos una noche- Dijo sonriendo.

-Debes tener algo malo- Susurré sin dejarlo separarse y haciendolo reír entre dientes. -Y no digas que estás viejo porque cada año te pones más sexy-

-Estoy muy lejos de la perfección, amor- Susurró besando mi mejilla.

-Tal vez estás hecho para mi- Dije acariciando su cabello.

-Fue muy cruel quien nos hizo de hacerme esperar tantos años para conocerte- Murmuró acariciando mi cintura.

-¿Habrías salido conmigo si me hubieses conocido antes?- Pregunté curioso.

-Yoongi, hace cinco años ni siquiera podías dar consentimiento sexual- Rió entre dientes sobre mis labios.

-¿Y si tuviese tu edad?- Pregunté viéndolo espectante.

-¿Yo te hubiese interesado si tuviese tu edad?- Preguntó curioso y alcé los hombros sin saber que responder. -Tal vez esto tenía que darse así-

-No cambiaría nada- Susurré volviendo a besarlo.

⊰᯽⊱┈────┈⊰᯽⊱

-¡Cocinas increible!- Dije probando su comida y haciéndolo reír. -¿Por qué no cocinas más seguido?-

-Prefiero usar mi tiempo para pasarlo contigo- Dijo frente a mi. -Y tengo suficiente dinero para que alguien me cocine-

-Yo creo que no tendría tantos empleados- Dije pensativo. -Me gustaría estar lo más solo posible con esa persona especial-

-¿Esa?- Preguntó alzanzo una ceja. -¿Acaso no tienes ya a alguien?-

Reí entre dientes y apoyé mi barbilla en mis manos y mis codos en la mesa, con una sonrisa altanera y mkrada espectante.

-¿Crees que por tener dinero, tienes a todo el mundo de rodillas?-

Rió entre dientes y rodó los ojos, imitando mi posición y mi expresión al quedar frente a mi con semblante de superioridad.

-No- Respondió lamiendo su labio interior. -Sé que porque está prohibido te tengo a ti de rodillas-

Mordí mi labio inferior y me puse de pie para rodear la mesa y subirme sobre sus piernas.

Adentré mi lengua en su boca y sentí sus manos apretando mi trasero bajo el vestido.

Dios, no podía resistirme a él.  Quería estar todo el tiempo contra su cuerpo y sentir el calor de su piel contra la mía.

-Nunca te cansas ¿Verdad?- Preguntó entre besos húmedos y profundos.

-Contigo, nunca- Respondí agitado, quitandole la camisa casi desesperadamente. 

Era una pena que tan rica comida se desperdiciara, pero comería algo más delicioso que se endurecía bajo de mi.

⊰᯽⊱┈────┈⊰᯽⊱

Sentí sus manos pasar por mi espalda y me pegué más a él, cerrando los ojos y sintiendo el agua tibia pegando en mi cuerpo.

-Ha sido un día activo- Reí entre dientes junto a él y sintiendo sus besos en mi cuello. -¿Te ha gustado mi sorpresa?-

-Me ha encantado- Susurró rodeando mi cintura con sus brazos. -¿Sabes de que me he dado cuenta?-

Negué disfrutando el contacto de su cuerpo con el propio, notando su palpitar contra mi espalda y sus labios rozando mi cuello.

-Dime- Susurré arqueando el cuello.

-Quiero pasar el resto de mi vida contigo- Susurró haciendome abrir los ojos y voltearme entre sus brazos. -Dure lo que dure-

-¿Estás seguro?- Pregunté sorprendido.

-Jamás sentí esto por nadie- Soltó alzando los hombros. -Con tu padre siempre fue...-

Alzcé las cejas esperando a que continúe y cerré el correr del agua al verlo buscar la palabra adecuada.

-Un anhelo- Susurró sentandose en el banco de ceramica de la gran ducha. -Nunca lo vi como algo real-

Asentí sentandome a su lado, acariciando su muslo para darle apoyo.

-Con Soomin era real pero no era atracción- Suspiró sin verme. -Contigo es real y es atracción-

Parpadeé viéndolo curioso, pegandome a él y haciendo que sus brazos me rodeen y me acerquen más a él. 

-Lo que siento por ti es más y mejor de lo que he sentido por cualquiera- Dijo susurrando y besando mi cabello mojado. -Y no quiero perderlo-

Me separé para verlo a los ojos, haciéndolo tragar duro y morder el interior de su labio inferior.

-Entiendo que no quieras- Murmuró bajando la mirada.

Lo tomé de las mejillas y junté nuestros labios en un beso suave y lleno de amor.
Sus brazos me rodearon y me senté sobre sus piernas únicamente para pegarlo a mí y poder abrazarlo con más fuerza.

-Juro que si vuelves a decirme algo así...- Murmuré pegando nuestras frentes para poder respirar. -... Te propondré matrimonio-

Rió entre dientes y besó rápidamente mis labios, dejandome acariciar sus mejillas húmedas.

-No puedo casarme por Iglesia si estoy divorciado- Soltó haciendome reír entre dientes. -Ni con un hombre-

Reí entre dientes y lo abracé con fuerza, escondiendo mi rostro en su cuello y sintiendo sus manos pasar de mi cintura a mi espalda,  para pegarme más a él.

-Podríamos casarnos por civil- Susurré y noté su corazón golpear con fuerza contra mi pecho.

-Te juro que hay una voz en mi interior que dice que te deje vivir tu juventud- Susurró con voz pesada. - Pero la otra que dice que no me queda tanto y no quiero perderte, grita mucho más fuerte-

-Tu te casaste joven- Dije separandome para limpiar mis lágrimas de felicidad perdisad en las gotas de la ducha. -Te divorciaste y no fue el fin del mundo- Dije tragando duro. -Estaría feliz de haerlo comtigo, no tengo miedo-

Sonrió y cerró los ojos, arrojando su cabeza hacia atrás y riendo a la par mía.
La situación era tan surreal pero se sentía tan correcto todo.

-Yo ya propuse matrimonio- Dijo viendome desde arriba sonriendo. -Creo que me toca a mi dar el si-

Reí sin poder evitarlo y asentí volviendo a besarlo, sintiendo sus brazos volver a rodear mi cuerpo desde mi cintura.

-Prepararé la propuesta más increíble que puedas imaginar- Susurré sobre sus labios.

-Te amo demasiado, Yoongi-

-Y yo a ti, Jungkook-


⊰᯽⊱┈──╌𝑷𝒓𝒐𝒉𝒊𝒃𝒊𝒅𝒐╌──┈⊰᯽⊱

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top