—El día de hoy iremos a un lugar sorpresa— mencioné agarrando mi celular.

Channie: Ya vienes?

T/n: Sipi

Apenas el auto se detuvo bajé con mi cámara.

— ¿Aún no lo reconocen? — les murmuré tratando de cubrir las personas que pasaban por mi lado, ya que de lo contrario sería mucho trabajo para mi editor el cubrir los rostros de muchas personas.

Entré por una de las puertas, mostrando la credencial que Chan me había dado, comencé a buscar hasta que los divisé, a un lado hablando entre ellos mientras arreglaban sus audífonos, peinados, etc.

Puse en pausa la grabación y los saludé a todos, incluidos los miembros de su staff, Minho tan sólo me mostró una pequeña sonrisa sin mostrar sus dientes.

Quizás estaba ocupado memorizando la canción o algo.

Opté por no acercarme hasta después y volví a encender la cámara.

— ¿Aún no lo adivinan? — hablé mirando al lente, moví mi cámara a mi lado para mostrar a Minho conversando con Seungmin, miró hacia donde yo estaba y esta vez sonrió en grande, acercándose un poco —Correcto ¡Estamos en los camerinos de Stray Kids! — susurré con emoción, como si le contara algo a un gran confidente. Me acerqué a ellos.

—Hay que darse, prisa, los dejo, no demores— Seungmin le advirtió a su Hyung, estaban a punto de subir al escenario para presentarse, él le mostró su pulgar.

— ¿Listo? — le sonreí a través de la cámara, él asintió.

—Siempre estoy listo— presumió con cierta gracia mirándome únicamente a mí.

—Entonces no necesitas suerte— le devolví la mirada.

—Si es tuya probablemente sí— guiñó un ojo dejándome apenada, reí y pausé la grabación.

—Bien, debo irme— no pude decirle más nada, tan sólo asentí y continué la grabación de él corriendo hacia sus compañeros para subir al escenario.

Estaban grabando la presentación de su canción reciente, la que había sido escrita por Minho.

Vi todo desde camerinos y grabé una que otra cosa, cuando volvieron sobre todo.

— ¡Chicos, estuvieron estupendos! — los felicité, todos estaban muy emocionados porque les había salido muy bien, pausé la grabación.

Se habían visto muy bien y por supuesto mi atención se había ido hacia el castaños de escorpio.

Me acerqué hacia él que quitaba sus auriculares con cuidado.

— ¿Te ayudo? — le pregunté, él negó.

—No, ya está, no te preocupes— me mostró cómo se había quitado ya, asentí y apunté mi cámara caminando tras él que se dirigía a una de las habitaciones de descanso.

— ¿Qué hará ahora el Señor Lee? — traté de verme como una entrevistadora, él sonrió y se echó sobre uno de los sillones.

—El Señor Lee va a dormir un poco hasta que acabe el show— comentó con diversión.

— ¿Podrías hacer algo tierno para la cámara? — le pedí dulcemente.

—No lo haré— rodó los ojos con diversión mientras se recostaba sobre el mueble.

—Hazloooo, anda, hazlo— le seguí pidiendo.

—Por favor para— se mostró un poco cansado ante mi insistencia.

—No te dejaré hasta que lo hagas— carcajeó rendido — ¿Harás algo lindo para mis seguidores?

—Y para ti también— comentó antes de mostrar un corazón con sus dedos.

—Ok, eso me basta, descansa— le dije dándome la vuelta, lo escuché reír tras de mí. Me dirigí hacia afuera y abrí la puerta, encontrándome a Hyunjin fuera de esta apunto de abrirla —Hey, me asustaste— solté una risita.

—Lo siento— murmuró, apunté para grabarlo.

—Chicos, ahora nos encontramos con el príncipe sexy Hyunjin— soltó una pequeña risa apenado —Sólo miren esos ojos ¿No es muy guapo? — él miró a través de la cámara con una sonrisa diminuta —Bueno, siguiente— hablé casi con timidez, me giré y encontré a Jeongin tratando de tomarse una selfie mientras trataba de imitar el llanto de un zorro fennec a pedido de Jisung —Ahora nos encontramos con este feo bebé llorón— se puso serio, con una mueca de que había destrozado sus ilusiones.

Casi como cuando le dices a un niño: "Eh, mocoso, Santa Claus no existe".

Bueno, esa expresión tenía en este mismo instante.

— ¿Por qué a él le has dicho las mil maravillas de belleza y a mí me has dicho feo? — cuestionó evidentemente ofendido.

—Estoy jugando, Innie, pero si eres lo más tierno del mundo— señalé su lindo hoyuelo con mi índice.

—No, ya no quiero— me miró con resentimiento —Fea.

...

Fui hasta la cafetería con Han y Hyunjin, allá nos encontramos a Changbin, nos dispusimos a comer un poco.

Después les pedí que hicieran algo lindo.

Mostré mi palma grabando el rostro de Hyunjin.

Él posó su rostro sobre ella.

—Jinnie siendo tierno para ustedes— argumenté casi conmovida.

— ¿Es para tu canal? — preguntó con curiosidad.

¿Para qué sería si no?

—Así es— respondí con simpleza, moví mi cámara hacia Jisung.

—Hola, Stay— batió sus pestañas y posó su rostro en mi mano.

— ¡Ouh, pero qué tierno eres! ¡Me muero! — chillé metida en mi modo fangirl.

—Cuidado se te cae lo Ot8— dijo con sarcasmo Hyunjin, rodé mis ojos y le mostré a escondidas mi dedo medio.

—Binnie, vamos, es tu turno de ser tierno— lo incité poniendo mi palma frente a él, hizo una mueca algo graciosa sacándonos una carcajada a todos.

Después de ello fui a buscar al resto de los chicos.

—Minnie ¡Mira acá! — lo enfoqué un poco a la distancia.

—No molestes— sonrió mirando más hacia mí que a la cámara.

— ¡No seas cruel! Sólo sé lindo y ya— lloriqueé, él caminó hacia mí, yo aún no dejaba de grabarlo.

Seungmin era imposible.

—Ok, pero...— se detuvo un minuto para darle suspenso a lo que iba a decir — ¿Cuánto me vas a pagar?

— ¡Aish! Sólo olvídalo— me di la vuelta.

—No, no, espera, está bien, está bien— trató de que lo grabara de nuevo.

—No, ya no— lo miré mal, empezó a reír.

Fue entonces que me encontré a Felix.

—Hola pollito— dije un poco desanimada por el mal rato.

— ¡Hola! — saludó energéticamente.

— ¿Puedes hacer algo tierno? — le pedí.

—Okey...— lo pensó un momento —Hola a todos, aquí Lixie— levantó su mano y mostró una extraña pose de euforia con una sonrisa alegre, mostrando por qué lo comparaban con el sol.

—Ya está, muchas gracias, Lixie— asintió.

Me dispuse a relajarme y conversar un poco con los chicos, era muy agradable pasar tiempo con ellos, incluso jugamos a la mafia.

Minho ya había despertado, caminó hacia nosotros y se sentó a mi lado.

—Miren, ya volvió el dormilón— lo apunté con la cámara, estaba conversando con Chan, miró hacia el lente con una sonrisa tranquila, sentía como si me mirara a mí, así que mi corazón no disimulaba el acelerarse a tal manera de que sentí que me estaría dando una taquicardia.

—Hola— hizo un gesto dulce con su mano y después acarició el aire como si fuera una pequeña cabeza de gato.

—Minho, todos hicieron algo tierno para la cámara, así que tú también deberás hacerlo—decreté asomándome un poco hacia él —Quizás tú puedas...¡Oh! Canta un poco ¿Sí?

Asintió y empezó a entonar otra canción que no había escuchado antes, la verdad me refería a la que él había escrito, pero no fue esa.

— ¡Hey, eso no! — suspiré cansada.

Todos rieron, seguimos hablando de algunas cosas y me dirigí hacia Chan para hablar de algunas cosas.

Él me había invitado al show para que saliera de mi rutina de grabar tantos vlogs, pero como soy tan obediente, nótese el sarcasmo, me había traído mi cámara para grabar uno con ellos.

Todo resultó divertido, hasta que...

— ¿Chan viste mi cámara? — pregunté asustada.