❤︎𝑶𝒉 𝑮𝒆𝒏𝒐❤︎

Seré Dios

Seré un dios

Seré un dios

Hoy seré Dios.

Sostén mi cabeza bajo la bañera y respira...

El dios de la muerte se preparaba para un nuevo día de cosecha, como siempre...

Raja mis muñecas y mira cómo se evapora la sangre...

Por otro lado, un esqueleto de tez blanca lloraba por haber perdido a todos los que quería... Estaba completamente solo, no tenía nada... Lo había perdido todo...

Su llanto se detuvo cuando escuchó un portal abrirse, el dios de la muerte había llegado para cosechar aquella alma...

El contrario solo lo miró, aceptando su destino, de todos modos ya no le quedaba nada... No tenía ningún motivo por el que quisiera seguir con vida...

Aquel esqueleto de nombre "Geno" agachó la cabeza para que el dios de la muerte pudiera matarlo.

Algo en él cambió... Mirar como este entregaba su vida a él lo conmovió un poco...

Pero no lo suficiente.

Así que levantó su guadaña... Y apuntó el filo de esta contra aquel esqueleto...

Finalmente, la estrelló contra él.

...... Pero nada ...

Ser así de piadoso no puede ser bueno para...

...La seguridad de Geno...

El dios de la muerte decidió seguir con su trabajo, e ignorar a ese esqueleto... Por ahora...

....Día siguiente....

Jugaré a ser Dios

Jugaré a ser Dios

Jugaré a ser Dios

El dios de la muerte quiso ir por el esqueleto de tez blanca...

Llegó con este, y empezó un juego con él, quería ganar su confianza... Pero debía ser cuidadoso con sus jugadas.

Sube la apuesta y el juego de Dios como si fuera póker...

Pero no contaba con que el de bufanda roja no era nada confiado... Abandonando al dios de la muerte sin decir nada...

Camina lejos con todo el cambio de repuesto que hizo nuestro pequeño Dios...

Jugar con este Dios no puede ser nada bueno para la seguridad de Geno...

– ¡Geno escúchame!– gritó el dios de la muerte al ver al contrario irse de ahí...

El otro se detuvo, que el dios de la muerte supiera su nombre lo había impresionado, volteó hacia atrás para ver al contrario.

El dios de la muerte solo lo miraba, no iba a irse de ahí hasta tener una plática con aquel esqueleto de bufanda.

Geno se volteó por completo y fué caminando con el dios de la muerte, con su mirada tranquila, y sus pasos serenos.

El dios de la muerte estaba confundido, ¿Por qué ese esqueleto no se asustaba o venía hacia él tan tranquilo? Sin duda se sorprendió bastante.

El dios de la muerte empezó a entablar una conversación con aquel esqueleto, ya que estaba cerca.

Geno se sentó enfrente de él, mirándolo con tranquilidad, ni una palabra salía de él, solo escuchaba los viajes del dios de la muerte, y de vez en cuando, reía un poco por algunos chistes malos de este.

Quería preguntarle.. ¿Cómo sabía su nombre? Pero todavía no era el momento.

El dios de la muerte al parecer se dió cuenta de esto, la mirada, lo había dicho todo con esa mirada fija.

– ¿Quieres saber cómo supe tú nombre?–

Geno lo miró neutral, y negó con la cabeza, después de todo, sabía que este era el dios de la muerte, y tendría que saber el nombre de cada una de sus víctimas, con ayuda de alguien o algo.

El dios de la muerte lo miró sorprendido, ¿Tan rápido había cambiado de opinión? Era sorprendente para él ver tan de cerca las reacciones del semi-muerto.

– ¿Eres mudo? No te he escuchado decir ni una palabra.–

Geno solo cerró su única cuenca con tranquilidad.

– no soy mudo, solo no tengo ganas de mantener una conversación con alguien como tú.–

¿Aquel semi-muerto le había "faltado al respeto" al dios de la muerte? De nuevo, se quedó sorprendido, pero está vez por dos cosas al mismo tiempo.

Número uno; Su voz, era tan tranquila y onda... Simplemente se sentía como un día suave en una cabaña cálida, con un chocolate caliente, se sentía como estar en esa cabaña, tomando una taza de chocolate caliente, mirando por la ventana el resultado de la nevada en aquel lugar... Simplemente tranquilizante.

Número dos; el atrevimiento de aquel esqueleto, a simple vista podría decirse que era un esqueleto demasiado tímido, pero resultó siendo lo contrario, era demasiado seguro en sus palabras, y no le temía a enfrentarse a alguien como el mismísimo Dios de la muerte.

Pues sabía que este no podía hacerle daño físicamente, y él tampoco podía hacerle daño al dios.

Estarían a mano por ser idénticos en situación.

Pasaron las horas de plática, el dios de la muerte descuidó varias almas, pero todo sería por su nuevo mejor amigo.

Reaper tuvo que irse a terminar rápido lo que le tocaba de trabajo, así que se despidió de su contrario y abrió un portal con su guadaña, no sin antes decirle a Geno que volvería más tarde.

Y sus palabras no serían mentira, no tendría ninguna razón por la que mentirle a Geno.

Pasaron los días, los cuales se convirtieron en semanas... Y esas semanas en dos meses, dos meses en los que el dios de la muerte no había visitado al esqueleto de tez blanca.

Finalmente, llegó a dónde estaba Geno, no estaba cansado, pero su trabajo era demasiado.

Geno se encontraba leyendo tranquilamente un libro, había notado la presencia del contrario, pero decidió ignorarlo, quería escuchar al menos una disculpa de aquel dios.

– Hola Geno, perdón por tardar tanto pero, el trabajo me está "matando" de nuevo jeje–

Geno solo le respondió con lenguaje corporal, mirándolo fijamente pero a la vez tranquilo, transmitiendo por medio de sus acciones, que lo perdonaba.

Señaló a su lado, quería que este se sentará y leyera junto con él, después de todo, no había nada más que hacer en aquel lugar.

El dios de la muerte se sentó a su lado...

Oh Geno, todavía estaré contigo...

....Eres el ángel que no pude matar....

Después de unos momentos, tuvo que abandonar a Geno para poder ir a una junta con los demás dioses, no sabía de qué se trataba, pero eso le daba más motivos para ir.

Se despidió de Geno y fué con los dioses, tomando su lugar correspondiente para poder escuchar al dios Asgore.

No había nada interesante, hasta que el dios Asgore empezó a hablar de un tema que el dios de la muerte conocía a la perfección.

– Bueno... Creo que todos aquí sabemos sobre una Anomalía en un universo de nombre "AfterTale"; el Sans de ahí no puede morir al parecer, y eso es una molestia, Reaper, debes encontrar la manera de cosechar la alma de esa cosa, antes de que nosotros hagamos algo al respecto.–

– Tranquilo, yo me haré cargo de él...–

El dios de la muerte se dispuso a ir con el semi-muerto para ver las debilidades de este, y poder acabar con él, aunque no quisiera hacerlo.

El semi-muerto ya se encontraba leyendo uno de sus tantos libros, estaba aburrido.

Reaper había llegado, mirando a Geno fríamente, examinando detenidamente cada parte del contrario.

El semi-muerto llevó su atención al de túnica, dando una pequeña sonrisa.

– Ya me sentía algo solo, que bueno que llegaste.–

El dios de la muerte se sentó a su lado para ver lo que leía, no le dirigió la palabra, no tenía intenciones de hacerlo, solo quería pasar algo de tiempo con él antes de iniciar su "plan".

– ¿El ratón te comió la lengua? Vamos, habla como perico, eso me divierte.–

El dios de la muerte volteó a verlo con su semblante serio, el cual no duraría por un leve golpe de este en su hombro.

– ¿Qué te hizo tan aguafiestas, eh? Tienes una cara de cagado que espanta hasta al mounstro más feo.–

El dios de la muerte se levantó, tomó su guadaña y la levantó, seguía con un semblante serio, que cambiaría a uno triste por ver a su Geno, de verdad no quería hacerlo, era el único al que podía tocar, y sí desaparece . . . No tendría otro amor después de Toriel y el inmortal.

– Oh Geno, todavía estaré contigo... Eres el ángel que no pude matar...–

– Compañero... De qué hablas?–

El dios de la muerte empezó a golpear fuertemente a su contrario con su guadaña, soltando una que otra lágrima, nada resultaba...

...No pude matar...

Golpe...

... No pude matar...

Tras golpe...

... No pude matar..

Hasta dejar inconsciente al semi-muerto...

– . . . D-Dios...  ¿¡Geno!? .... P-perdón... Perdón perdón perdón! No era mi intención! Yo no quería!–

Decía entre lágrimas el dios de la muerte.

Finalmente, después de unos minutos, el semi-muerto había despertado, encontrándose con la escena del dios de la muerte llorando sin cesar.

Se quejó un poco, le dolía la cabeza, más sangre salía de su boca, pero está ya estaba seca, no era como la antigua.

El dios de la muerte lo miró, estaba sorprendido y feliz de que el otro estuviera "bien", pensaba que este podría quedar en coma.

– ¿¡Por qué mierda hiciste eso!? ¡Me dolió, estúpido!–

– Estoy obligado a matarte, ¡Pero no quiero hacerlo! Perdón... Por favor perdóname.–

El semi-muerto dió un suspiro, perdonaría al único que estaba a su lado.

Y así fué, lo perdonó...

Pasaron los días, los cuales se convirtieron en semanas... Meses... Años...

Hasta que una idea pasó por la mente del dios de la muerte. 

Invitarlo a una cita para por fin declararle su amor, hace algunos años el semi-muerto había captado la atención del dios de la muerte...

Haciendo que una chispa, que anteriormente se había apagado tras la partida de su amada, volviera a sentirse con gran pasión.

Estuvo practicando varias maneras en las que declararle su amor al semi-muerto, no encontraba ninguna... No le quedaba de otra que improvisar.

Pasaron algunas horas, el dios de la muerte estaba arreglándose para ir a su cita con el semi-muerto, el cual había aceptado gustoso a aquella cita.

El dios de la muerte fué con el semi-muerto, después de unos minutos, empezaron su cita.

Todo avanzó con normalidad, los dos se divertían, todo iba a la perfección.

Pero el dios de la muerte decidió que era momento.

Tomó las manos contrarias y las acercó a su "boca", para depositar un tierno beso en estas.

El semi-muerto lo miró con un leve sonrojo, no sabía porque había hecho eso, pero de todos modos le había parecido algo tierno por parte del dios de la muerte.

– Geno, te amo más que a nada, eres el único ser en todo el multiuniverso, al que le entrego mi amor, quiero pasar toda mi vida a tú lado, a pesar de que seas una anomalía.–

El semi-muerto lo miraba impresionado, apartó sus manos unos momentos.

El dios de la muerte se quedó perplejo, nunca pensó que eso podría pasar, ¿Había hecho algo mal? Se preguntaba por tales acciones.

El semi-muerto lo abrazó, dió un suspiro y acarició la espalda contraria con cariño, comprendía a su contrario, quería desde hace muchos años que el dios de la muerte le dijera eso.

– siento lo mismo por tí, Reaper... Quiero ser algo más que tú amigo, quiero una relación más allá de una amistad, quiero ser... Tú novio.–

– ¿Qué es un novio?–

El semi-muerto miró de reojo al otro, estaba sorprendido, ¿De verdad no sabía que era un novio?

– ¿Cómo no sabes que es un novio?–

– Me la paso cosechando almas, no tengo tiempo como para investigar que es un novio o ese tipo de cosas.–

Geno dió un suspiro y audio acariciando la espalda contraria, tuvo que explicarle lo que eran las relaciones más allá de una amistad.

Después de aquella cita, formaron un noviazgo, sorprendentemente dulce, cada uno estaba muy interesado por el otro, eran casi inseparables, sí no fuera por el trabajo del dios.

Pasaron algunos años, el dios de la muerte había Sido obligado a volver a intentar matar al semi-muerto, aunque sabía que esto sería en vano.

Tomó su guadaña y se acercó a Geno, el cuál leía con tranquilidad, pero sabía que él contrario estaba atrás de él.

– ¿Acaso juegas a los piratas? Ven, siéntate a mi lado, quiero hablar contigo sobre un tema en específico.–

El dios de la muerte no había logrado su objetivo, no tuvo de otra más que sentarse al lado de su amado para saber de qué trataba el tema del que quería hablar.

– Quiero intentar tener una familia contigo, quiero saber que se siente, estuve leyendo mucho al respecto, creo saber cómo cuidar a un niño, puedes traerle cosas de tu trabajo para que se sienta más cómodo.–

– bueno, No perdemos nada con intentarlo.–

Probaron de distintas maneras por días, pero no resultaba...

Hasta que finalmente, habían logrado obtener un primogénito, lo cual ponía a los dos demasiado felices, por fin tendrían su familia.

Aquel integrante de nombre Goth, era la vida de aquellos dos, era el relleno que llenaba el vacío entre estos, sin duda fué una de las mejores ideas que habían tenido.

Geno y Reaper cuidarían a ese pequeño como sí fuera lo más importante en todo el mundo, su pequeño Goth, haría que el dios de la muerte pensará menos en matar a esos dos, no quería hacerlo, y no tenía porque hacerlo.




...No, no pude matar...

...No, no pude matar...

...No, no pude matar Geno..





































ꕥꕥꕥꕥꕥꕥꕥ𒊹︎︎︎☕︎~𝐎𝐡 𝐆𝐞𝐧𝐨~☕︎𒊹︎︎︎ ꕥꕥꕥꕥꕥꕥꕥ

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