❝This is gonna hurt, but I blame myself first
'Cause I ignored the truth
Drunk off of that love, it fucked my head up
There's no forgetting you
You've awoken me, but you're choking me
I was so obsessed❞

Me voy a arrancar los pelos de la qk.

Hoy era la fiesta de Halloween esa, ya eran las seis de la tarde y Melissa no terminaba de maquillarme. Jude y yo íbamos a ir como Tiana y Naveen, de la princesa y el sapo, Arda y Sofía como el joker y Pia iba a disfrazarse de las películas de la purga junto con Melissa.

Jude pasaba por mi a las seis y media para llevarme a comer, porque el man quedó traumado después de que me desmayara y luego nos iríamos a la fiesta.

Que recocha.

Terminé de ponerme el lipstick cuando sentí el claxon del carro de Jude, jueputa vida. Agarré un bolsito y metí lo necesario ahí, las chicas me desearon suerte y salí del cuarto de Melissa para luego salir de la casa. Ahí estaba él, apoyado en el carro con los brazos cruzados esperando por mi.

Ay Dios mío bendito, ¿Así quien no se enamora?

Caminé hacia él con una sonrisa, él me la devolvió extendiendo su mano hacia mi para darme una vuelta y luego besar el dorso de esta misma.

—Estas hermosa.—Dijo mientras sonreía.

—Tu igual, Judy.—Él rodó los ojos ante el apodo.—Va a pasar una brisa y te vas a quedar virolo, mijo.

Él rió mientras negaba con la cabeza, haciéndose a un lado para abrirme la puerta del copiloto, entré en el carro para que luego el cerrase la puerta y entrara al carro.

—¿Vamos a la fiesta?—Pregunté mirándolo.

—Primero vamos a comer, Aaliyah.—Bajé la mirada con pena al escucharlo decir mi segundo nombre.

—No me va a pasar nada si no como Judy, además, almorcé tarde.—Refuté, él me mandó a callar mientras ponía su mano en mi muslo.

Listo nojoda, muerte segura y un qkardio masivo también.

Me hizo sentir de todo con solo ponerme la mano en el muslo marica, es que Dios mío, esas cosas no se hacen de la nada.

Manejó hasta un drive thru y compró algo para comer, aunque pensandomela bien, el trago pega más fuerte si no comes nada antes de tomar, así que mejor comía algo pa que la pea no sea tan hijueputa.

Íbamos en el carro comiendo y hablando, hasta que llegamos a la casa de Rodrygo. Marica, sin echarles mentiras, que hijueputa bulla había, también había que cule poco de gente en esa casa, toditos todos disfrazados, ya me imagino el mondaquero que va ser entrar a esa caga y encontrar a mi gente.

Jude me tomó de la mano al salir del carro, le puso seguro y caminamos hacia la entrada de la casa. Cómo dije, cule mondaquero entrar, había gente arrumandose por allá en las paredes, pero aja pudimos entrar.

Nos dirigimos hacia la barra pa pedir algo tranquilito pa tomar mientras, entre risas noté que en esta mierda había aguardiente, ¡Nojoda por fin! Algo de mi pueblo.

Pedí un shot de aguardiente pa entrar en materia, joda, es que por fin pegaba una, porque aquí era puro vodka, tequila, ron y vainas así, don't like.

Apenas me lo entregaron me lo sampe, sintiendo el ardor sabroso del aguardiente, Jude se reía mientras me miraba tomar, él sabía que lo alcohólica no se me quitaba por nada del mundo.

Sentí que alguien tocó mi hombro y volteé, encontrándome con Alejandro Balde y una chica, los miré con una sonrisa notando que Jude me abrazaba por detrás.

—Ey, ¿To bien?—Pregunté con una sonrisa.

—No esperaba verte aquí.—Respondió.—Esta es Ashley, mi novia, Ashley esta es Kailani.

Me sorprendí al escuchar que esa vieja era su novia, ay marica, ¿Será que me lo besé él teniendo novia? Listo, me van a arrastrar. La vieja me miraba maluquisimo marica, como si me quisiera joder ahí mismo.

—Mucho gusto, Kailani.—Extendí mi mano y ella con hipocresía la estrechó.

—Ashley, ¿Tu eres la increíble Kailani?—Asentí con desconfianza.

Sentí un apretón en la cintura por parte de Jude, algo me decía que esto no estaba bien, esa vieja como que tenía ganas de arrastrarme.

—No me da buena espina.—Susurró Jude en mi oído.—Vamonos.

—Fue un gusto conocerlos, adiós.—Me despedí con la mano.

Jude y yo caminamos hacia el patio de la casa, que hijueputa patio pa grande, nos sentamos en una de las sillas que estaba allí mientras tomábamos algo suave pa no prendernos tan rápido.

Él me abrazó por la cintura, haciendo que apoyara suavemente mi cabeza en su hombro, de la nada escuché la voz de Sofía y de Rodrygo viniendo hacia aquí, por lo que Jude y yo nos separamos.

—¡Se ven tan lindos!—Exclamó Sofía.—¿Podemos tomarles fotos?

Ambos nos miramos e intergalacticamente asentimos. Le pasé mi celular a Sofía y Rodrygo tenía una cámara analógica, ambos nos tomaron fotos. Revisé las fotos marica y la verdad era que nos veíamos chikiluki, nojoda jamás en mi vida había encajado tanto con otro ser humano además de mis amigos y mi mamá.

Caminamos dentro de la casa mientras sonaba "Downtown" de J Balvin y Anitta, Jude tomó mi mano para darme la vuelta e instarme a perrearle.

Y si, lo hice.

Marica, Jude por fin se movía, ya no parecía un tronco pa bailar, que bacano.

Él me tomaba fuertemente de la cintura moviéndose, mano, le estaba metiendo durísimo al borde interno, ajo, sabrá Dios quien le habrá enseñado. Me di la vuelta, poniendo mis brazos alrededor de su cuello, para luego irlos bajando por su pecho hasta su abdomen, noté como le dió penita, pero como yo soy poderosa le seguí bailando, bajando hasta abajo.

Este Naveen es como más penoso o más maricon que el Naveen original, que se ponga las pilas o esta Tiana se le va.

La canción cambió a "Doblexxo" del Ferxxo, ajo, por fin andaban poniendo canciones que yo sí conozco. Jude me agarró fuertemente de la cintura moviéndome de un lado al otro, Dios mío, he creado un demonio.

Luego de unas horas, él y yo ya teníamos unos cuantos tragos encima y estábamos en el balcón de la casa de Rodrygo, daba hacia el patio del antes mencionado, estábamos tomando aire marica porque esa vaina allá abajo estaba lleno de gente y me estaba asfixiando.

Ambos estábamos sentados en unos muebles que habían ahí, sin hablar, hasta que me puse de pie y me apoyé en el barandal de esa mierda. Tengo que admitir que me dio un hijueputa vértigo ni el maldito, pero ajá, que viva el perico nojoda. Extendí mis brazos a lo largo del barandal, el trago me tenía como más exquisita y ajá, para evitar problems.

Sentí una presencia detrás mío, sabía que era Jude así que me di la vuelta, encontrándome con él. Le di una sonrisa de boca cerrada dejando caer mi cabeza hacia atrás, él me tomó de la cintura firmemente, quizás con miedo de que me fuese pa atrás o yo que se.

Levanté mi cabeza para mirarlo, extendí mis manos hacia sus mejillas y las acaricié, para luego acariciar su cabello también. Todo de él me gustaba, no solo físicamente, también me gustaba lo poquito que había visto de su personalidad, me acercó más hacia él, pasando sus manos por mi espalda haciéndome estremecer.

—Vámonos, te llevaré a un lugar que te gustará.—Propuso en español y yo asentí, tomando su mano.

Caminamos entre la gente mientras Jude se despedía de todos nuestros amigos, al llegar al carro, me abrió la puerta como todo un caballero. Eso me gustaba de él, que sin importar que, era caballeroso y educado.

Jude me gustaba, me gustaba porque era real, era él. Quizás las personas dirían que me gustaba por la plata que él tenía o que era una interesada, pero créanme que yo ni lo conocía antes, de vaina sabía el nombre del club donde jugaba.

En el camino, volvió a poner su mano en mi muslo, apretándolo suavemente. Si eso se le iba a volver una costumbre, por mi que lo hiciera toda la vida, no me molestaba.

Noté que llegamos a un mirador con una naturaleza espectacular, así que me quité los tacones dejándolos dentro del carro, él nuevamente volvió a abrirme la puerta y a extenderme la mano para ayudarme a salir, todas esas pequeñas cosas sumaban, porque me hacían ver la calidad de hombre que era.

Yo no había tenido novio, quizás me había gustado uno que otro man de allá de Santa Marta, pero ninguno llenaba mis expectativas porque eran muy ellos, a veces muy machistas y me trataban de boba, pero yo no me dejaba. Por eso yo no tuve una relación con ninguno de esos manes, porque realmente no se merecían nada de mí, de vaina y di mi primer beso, que fue por accidente también.

Caminamos juntos hasta el mirador tomados de la mano, me di cuenta que él también estaba descalzo, quizás también había hecho lo mismo que yo antes de salir. Al llegar al borde del barandal, me puso frente a si mismo, abrazándome por la espalda, acaricié sus brazos con mis uñas haciéndolo estremecer, me encantaba que conmigo todo le daba pena, que le hacía sonreír cualquier cosita que yo dijera por más insignificante que fuera.

Jude y yo no éramos nada, pero por mi parte quería serlo todo, ignorando el hecho de que en algún momento voy a tener que irme, yo sé que podríamos intentarlo. Me sentía bien con él, veía un futuro en sus ojos, él me daba esas esperanzas.

—Me gusta estar contigo, Judy.—Murmuré haciéndolo sonreír y apoyar su mentón en mi hombro.

Cabe aclarar que él es más alto que yo, pero le importa una monda y él se agacha, mis respetos.

—A mi también me gusta estar contigo, Kai.—Cerré los ojos con una sonrisa ante el apodo.—¿Nunca has pensado que...Hemos hecho todo esto sin ser pareja?

Asentí levemente, dándome la vuelta para poner mis brazos alrededor de su cuello.

—Muchas veces, incluso mientras te veía dormir pensaba en eso. En muy poco tiempo te convertiste en alguien importante en mi vida Jude, no quisiera perderte por nada en el mundo.

Sus manos apretaron mi cintura, como si se estuviera reteniendo de hacer algo, yo sabía que era pero no sabía si este era el momento indicado de hacerlo.

—Tu eres diferente a las otras, Kailani.—Murmuró acariciando mi mejilla.—Por eso no puedo tratarte como las otras, eres sencilla, eres gentil, das demasiada risa cuando te pones nerviosa, ni hablar de tu belleza caribeña que me trae besando el piso por donde pasas, mujer, eres una cosa espectacular.

Fruncí el ceño al entenderle muy poquitas cosas debido a su acento, si antes no les dije que este que cule vale hablaba enredado por el acento, ahora se los digo.

Pero de igual forma me enternecí al escucharlo hablar así de mi, hablaba como toda una persona enamorada, que me lo dijera frente al imponente risco que teníamos al frente era algo que me hacía feliz, porque se juntaban dos de mis cosas favoritas: La naturaleza y Jude.

Me puse de puntillas alcanzando su mejilla, para dejar un beso ahí, aunque la cercanía era notoria, ninguno de los dos dió el paso, quizás por miedo, quizás por pensar que el otro no correspondería.

—Ambos no podemos ignorar esto, Jude.—Susurré rozando mi nariz con la de él.—¿Que es lo que me pasa contigo, ah?

Cerré los ojos en busca de la respuesta a esa pregunta, la verdad era que no sabía lo que me pasaba con Jude, quería tenerlo cerca siempre, sin importarme que. Él conocía mi alma más allá de lo físico y aunque me diera miedo abrirme más a él, lo haría, porque quería que conociera a esa Kailani que mis amigos y mi familia conocen, porque se lo merece.

—Esa pregunta debería hacertela yo, ¿Que es lo que me pasa contigo?—Abrí los ojos al escucharlo preguntar.

Sus manos me pegaron más hacia él, como si quisiéramos fundirnos hasta quedar un solo ser, éramos Jude y yo, yo y Jude.

Él me miró en busca de ese permiso que tanto estábamos anhelando tomar, asentí lentamente, hasta que sus labios rozaron con los míos.

Me besó, marica Jude me estaba besando, qkardio total nojoda.

Marica debo admitirles que moría por hacerlo, quería saber a qué sabían sus labios y por fin nojoda, dar un beso de verdad a alguien en esta mierda.

No sabía besar, pero no me importa, eso es lo de menos, igualito y él sabe.

Su lengua me pidió permiso para entrar en mi boca, así que como había visto en las películas, abrí un poquito más mi boca para darle ingreso, su barba me daba cosquillas, pero poquito me importaba. El beso de volvió algo más desesperado, mis manos jugaban con su cabello tirando suavemente de él, mientras que las suyas me sostenían de la espalda baja, queriendo bajar aún más.

Por más que el ambiente estuviese empezando a ponerse más arrechistico, ni él ni yo queríamos esto ahora, al menos no en este momento, yo no estaba preparada para dar el culo todavía, no, no, no.

Pero si maricas, me estaba comiendo a besos al Jude Bellingham.

-With love, Danna 💗