009- Shameless.

❝They never had a pretty girl from Jo'burg
See me now and that's what they prefer
I don't touch no wheel 'cause I gotta chauffeur
First class, how I get 'round the world❞



























A la mañana siguiente desperté con un peso sobre mi, lo que me hizo abrir los ojos inmediatamente porque esa vaina no me estaba dejando respirar.

Nojoda, adivinen que.

Jude estaba durmiendo encima mío.

Marica, nosotros si dormimos maluco, aunque nada más hemos dormido juntos dos veces, pero bueno, eso cuenta pues.

Por su peso no podía moverme bien, porque al hijuemadre le pesaba ese culo, pero al menos alcancé a tomar mi teléfono pa ver qué hora era, no era muy tarde pero tampoco muy temprano. Me metí a la galería, encontrándome con las fotos que nos tomamos Jude y yo ayer, Dios mío, nos veíamos tan lindos juntos.

La real me estaba replanteando lo que estaba sintiendo por él, porque era extraño marica, era como un tira y afloja.

Me metí en la cámara y me tomé una foto con Jude en mi pecho dormido, se la mandé a mis amigas allá en Colombia, pero supuse que no me iban a contestar porque allá seguramente estaba tarde.

Feka, las peladas contestaron.

Viva er diablo 😈

1 photo
8:20 am
My negro 😞
8:20 am

Marianitaaa
Mrk que
8:21 am
Contexto
8:21 am

te la tragas sin pretexto JAKAKAKKA
8:21 am

Calendario 🤍
Ese es el tal Jude?
8:21 am
Está como simpático
8:22 am

atrás bitches, he's mine
8:22 am

Ari 💗
5mentarios mrk
8:22 am
Se ven lindos juntos
8:23 am

Mariaaa 💞
La verdad es que si, super tiernos
8:23 am
Ya son novios?
8:23 am

Siguiente pregunta
8:24 am
Apenas nos estamos conociendo, calma pueblooooo
8:24 am

Calendario 🤍
Cómo te la pasas hablando de él, niña
8:24 am
Tu estás enamora, no me digas que no
8:25 am

Ombeee
8:25 am
😞
8:25 am

Dejé de una el celuco al sentir a Jude moverse, sonreí como una pelaita estúpida y empecé a acariciarle el cabello, levantó su carita de mi pecho y aún dormido me sonrió.

Buenos días, Jude.—Murmuré suavemente haciéndole cariñitos en el cabello.

Estos si son buenos días.—Rodé los ojos al escucharlo.

Ay si, buen culito él.

No sé cómo llegamos a esta posición, pero si te incomodé, perdóname.—Bajó la mirada aún medio dormido.

Tranquilo, la que estaba como iguana a media noche era yo.—Reí para luego acariciar su mejilla.

—Si sigues haciendo eso terminaré por dormirme de nuevo.—Dijo en español.

Su voz se escuchaba tan dulce en español, listo, a este lo voy a convertir en un colombiano no nacionalizado.

—Por mi no hay problema...—Susurré mientras le miraba fijamente.

Mientras lo miraba pensaba en las cosas que me gustaban de él, no solo físicamente, también en su personalidad. Era atento, caballeroso, amable, adorable, cuando estaba borracho le daba al español y también cuando está medio dormido, físicamente es un negro hermoso marica, o sea, podría tener a cualquier mujer si él quisiera, pero está aquí durmiendo sobre mi sin ningún reproche.

No sé cómo llegamos a esta confianza en cuestión de días, creo que el salvarme de esa pea maquiavélica que me metí fue lo que reforzó el intento de amistad y ahora creo que estaba pasando a algo más. Desbloqueé mi teléfono para mostrarle la foto, lo volteé y él sonrió al verla, luego tomó mi teléfono entre sus manos y puso la foto de fondo de pantalla.

Ajaaaa, marcando territorio pues.

—Tu si eres atrevido, nojoda.—Su risa llenó el ambiente al escucharme decirle eso.

Para que me recuerdes cuando no esté.—Asentí con una sonrisa.

De la nada, Fede y Melissa entraron al cuarto, sobresaltandonos pero sin quitarnos de la forma en la que estábamos.

Ambos lucen lindos durmiendo juntos.—Resaltó Fede con su inglés joperico.

Eso sí les tengo que decir, de los dos hermanos, la que le mete al inglés es Melissa, si fuera por Fede estarían jodidos.

Jude rodó los ojos y se separó de mi, aunque no quería que lo hiciera, suponía que él debía irse.
Yo también, me la he pasado más en la casa de Pia que en el air bnb, mi mami me va a joder.

Melissa me hizo las típicas señas que tus amigos te hacen cuando quieren que les cuentes algo, bufé antes de salir de la habitación y dirigirme a la de Pia junto a Melissa. Ellas andaban ahí bien viva el chisme, porque la Sofía también andaba con su vaina con el Arda, ella a mí no me puede decir que no, yo ayer la vi metiéndose mano con él en el borde de la piscina.

—Hablando de la reina de Roma.—Escuché a Sofía.—Cuentanos, ¿Durmieron bien?

—Jude parecía una iguana montao' encima mío, le pesa ese culo.—Me le tiré a Pia encima, sacándole un quejido.

—¿Cuando vais a aceptar que os gustais mutuamente, Kai?—Preguntó Pia.

¿Es que yo le gustaba a él? De las cosas que uno se entera marica.

—Me gusta y toda la cosa marica, pero yo no sé si él piense o sienta lo mismo que yo, no voy a quedar como la propia ilusa.—Murmuré cruzandome de brazos.—Además, quien quita y Jude tenga novia, culito o casi algo.

—Ahí si te contradigo nena, Jude es muy respetuoso, él jamás estaría con una persona al mismo tiempo que con otra.—Refutó Melissa.

—Bueno, yo no sé, ahí si no tengo nada que ver.—Me encogí de hombros.

Las tres se miraron fijamente antes de soltar un resoplido cansado, ya está, ya tienen otro plan. Don't like.

—En unos días es Halloween, podría hablar con Rodrygo, Fede y Eduardo para que convenzan a Jude de disfrazarse junto contigo.—Propuso Sofía.

—Nombe, ¿Pa que? Eso es una perdedera de tiempo, mejor ponte a aprender inglés.—Fruncí el ceño fastidiada.

Eso es ganas de joder, porque si él hubiera querido, me lo hubiera dicho y él no me dijo na'.

—¡Dale Kailani! ¡No seas aguafiestas!—Exclamó Melissa con su acento ahí todo bacano.

—¡La que voy a pasar boleta voy a ser yo!—Estrilé cruzandome de brazos.

—Ya verás que no.—Murmuró Sofía literalmente rogándome.

—Y si así fuera, ¿De que nos vamos a disfrazar o que?—Pregunté incrédula.

Las tres se miraron fijamente de nuevo, ay no, ¿Pa que pregunté? Vida hijueputa.

Estoy algo jodido.

Había invitado a Kailani a acompañarme a entrenar, ella había aceptado diciendo que también quería hacer algo de ejercicio porque en Colombia tenía su mensualidad de gimnasio pero como estaba aquí, no había podido hacerlo. Habían pasado días desde el juego y desde lo que pasó en casa de Pia y Eduardo, así que ya teníamos un poco más de confianza ella y yo.

La notaba algo pálida, ida, le costaba hacer su rutina, incluso podía decir que estaba a punto de vomitar. La vigilaba desde lejos, pues estábamos en diferentes máquinas, pero sabía que algo le pasaba a mi chica y no me iba a quedar con la duda.

Terminamos alrededor de las nueve de la mañana, al salir del gimnasio nos dirigimos hacia mi auto donde ella se apoyó en la puerta del piloto, moviéndose de un lado a otro teniendo espasmos, sus manos temblaban y sus labios también, definitivamente esto no estaba bien.

Kai, ¿Que te pasa?—Pregunté tomándola de la cintura, con cierta preocupación.

Jude, yo...—Murmuró, le costaba hablar.—Si desayunaba llegaba tarde, pero se me ha olvidado que si me salto alguna comida me desmayo.

Abrí los ojos sorprendido y preocupado, cuando pude reaccionar, ella había perdido la conciencia, cayendo entre mis brazos. La cargué estilo princesa y la subí al auto para llevarla a mi casa, conocía algunas técnicas de primeros auxilios que mi madre me había enseñado en estos casos, siempre estaba preparado, nunca se sabe cuando algo pueda pasar.

Abrí la guantera buscando el alcohol junto con el algodón, al encontrarlos me hice a un lado en la carretera, tomé un poco del algodón y le puse alcohol, pasándoselo por la nariz a Kailani. Minutos después fue recobrando la consciencia, sacándome un suspiro de tranquilidad, vaya susto he tenido.

—¿Estás bien? Kailani, ¿Recuerdas donde estás?—Pregunté en español, para que se le hiciera más fácil, tomando su cabeza entre mis manos para acomodarla sobre mi hombro.

—Uhm...Judy.—Murmuró con los ojos entreabiertos.

—Mantente despierta, ¿Si? Ya casi llegamos.—Acaricié su mejilla y puse el coche nuevamente en marcha.

Al cabo de unos minutos ya estábamos en mi casa, pues hice todo lo posible por llegar rápido. Antes de bajar, dejé su cabeza apoyada sobre la silla del auto, corrí a abrir la puerta del copiloto y tomarla entre mis brazos, para luego cerrar la puerta. No sé cómo hice eso sin dejarla caer, pero lo hice.

Me di cuenta que Kailani había vuelto a desmayarse, así que corrí hacia la puerta con ella en brazos, la abrí desesperadamente para luego correr a la sala sin antes cerrar la puerta y dejarla en el sillón. Subí sus piernas en algo alto y también su cabeza, volviendo a usar el algodón con alcohol para que reaccionara.

Vamos, Kai...Vamos.—Murmuré mientras pasaba el algodón por su nariz y acariciaba su mejilla.

Ella fue abriendo los ojos lentamente, acostumbrándose al reflejo de la luz, aún con debilidad movió su mano hacia la mía, que sostenía el algodón, para luego sostenerlo ella.

—¿Recuerdas donde estás? ¿Con quién estás?—Pregunté en español y ella asentía.

—E-estoy en España, con Jude...—Murmuró con dificultad.

El alivio recorrió mis venas, al menos estaría consciente de que Kailani no podía volver a saltarse una comida, en mi presencia nunca lo haría. Besé su frente y fui a preparar algo rápido para ambos, ella necesitaba recuperar fuerzas.

Al menos ya conocía algo más sobre ella y podría protegerla de aquellos desmayos.

Hice un sándwich improvisado junto con un yogurt de fresa, corrí literalmente arriesgandome a dejar la cara en el suelo, pero ella no podía pasar un minuto más sin comer nada. Dejé las cosas en la mesita de la sala, Kailani estaba recuperándose todavía.

—¿Aún tienes mareo, preciosa?—Pregunté tomando su mano.

—Algo así...—Murmuró débilmente.—Perdoname si te asusté, es algo que me pasa desde hace años.

Sonreí comprensivo, intentando tranquilizarla. Para nada me molestaba, claro que me había asustado, porque no es para nada normal que se desmaye así de la nada. Además que el hablarle en español me ayudaba a mi y también le ayudaba a ella, seguramente ya la tenía harta hablándole en inglés.

—Tranquila, ahora estás aquí conmigo y yo no voy a dejar que te pase nada.—Ella asintió.—¿Puedes levantarte? Traje algo para comer.

—Barajeamela más despacio, Jude.—Asentí sin entender que quería decir.

Sus manos pasaron a mis hombros y las mías a su cintura, ella se apoyó y logró levantarse, cerrando los ojos al instante. Aún tiene mareo, lo sé, pero se levantó solo para hacerme creer que está bien.

Kailani, no seas terca.—Ella asintió al escucharme hablar en inglés.

Siempre se me cruzan los idiomas.

—Marica cálmate, me hablas en inglés y en español, eso me abruma, me jode el cpu.—Abrió los ojos mientras decía eso.

Aún se seguía viendo algo pálida, así que tomé el vaso con el yogurt y se lo dí, ayudándola a sostener el vaso pues las manos le temblaban. Jamás había estado en una situación tan cercana como esta, es extraño porque quiero protegerla, que no le pase nada, como si quisiera meterla en una cajita de cristal donde nadie más pueda verla.

Al terminar de tomarse el yogurt, ya había recuperado un poquito más de color. Me senté a su lado en el sillón, abrazándola por un costado, haciendo que su cara terminase en mi pecho, acaricié suavemente su brazo en busca de reconfortarla.

—¿Mucho mejor?—Pregunté, sin recibir respuesta de parte de ella.

Hasta que escuché un sollozo.

Kailani estaba llorando.

—Perdoname, es solo que... Recordé las veces que me desmayaba estando sola y recobraba la consciencia horas después, sola me tocaba hacerlo todo.—Se separó un poco para mirarme mientras se limpiaba las mejillas, mi bonita...—Inclusive alguna vez estuve hospitalizada por esa vaina y me tocó dejar de ir semanas al colegio.

La abracé fuertemente en mi pecho, subiendo su pierna derecha con mi otra mano sobre mi, estaba literalmente sentada sobre mi, pero eso no me molestaba en lo absoluto, ella era más importante en este momento.

—No estarás sola nunca más.—Murmuré acariciando su espalda.—Yo estaré aquí, para ti.

Ella se aferró a mi, acomodándose a horcajadas en mi regazo, su brazos apretaron mi cuello en un abrazo simbólico. Ella representaba la paz que necesitaba en este momento, agradecía a mi mismo por haberla salvado ese día en su fiesta de cumpleaños, de no ser por eso, quizás ni siquiera estaríamos así.

Quizás era algo rápido, porque solo habían pasado unos días, pero sentía que la conocía del todo, que quería protegerla de todas las maldades que este mundo podría traer. Nos llevábamos tres años, eso era cierto, pero para mí aquellos tres años no significaban nada, eran más que todo la unión que en este momento estábamos teniendo, más me importaba ella que lo que dijeran los demás.

—Te quiero, Jude.—Me sorprendí al escucharla decirlo.

Sentía aquellas mariposas en el estómago, su voz tenía ese efecto en mi y además de eso, escucharla decirme "te quiero", era algo hermoso.

—Y yo a ti, Kai.—Respondí de igual forma.

Ni siquiera los dioses de arriba podrán separarnos, nada puede interponerse entre ella y yo.

Las horas pasaron y dejé que ella durmiera un poco, quizás necesitaba descansar de todo lo que estaba sintiendo. Sirvió y también pensé un poco las cosas, el sentimiento era algo abrupto, porque de la nada empecé a verla no solamente como la amiga de Pia y Eduardo, sino como alguien que podría entrar a mi vida y hacerme sonreír.

Cada que hablaba me hacía replantearme la razón por la cual no la había conocido antes, incluso si en momentos pasados decía que no quería nada con nadie, ahora lo quería todo con alguien. Estaba dispuesto a conquistarla, a estar con ella todo el tiempo y ayudarla en lo que sea que ella quisiera hacer, obviamente quería protegerla de comentarios maliciosos cuando las personas se dieran cuenta de que entre nosotros, hay más que una amistad. Ella se estaba convirtiendo en mi debilidad, si algo le pasaba yo debía estar ahí para ayudarla, si ella quería hacer algo, con gusto lo haría con ella.

Incluso, antes de que se durmiera, fui capaz de ayudarla a cambiarse, pues el mareo que tenía la estaba matando, no me molestaba que usara mi ropa, se veía tierna con ella.

Estaba en el balcón de mi habitación cuando sentí a alguien abrazarme por detrás, sonreí al saber que era Kailani, siempre había sido así.

¿Que tanto piensas?—Preguntó haciéndose a mi lado.

Vaya diferencia de altura, abismal, eh.

En muchas cosas.—Admití.—Ayer hablé con Rodry, dijo que mañana haría una fiesta de Halloween y me rogó porque vinieras conmigo.

Ella me miró sorprendida, al menos lucía mejor que hace unas horas cuando se desmayó, porque de no ser así, la llevaría inmediatamente al hospital.

Sofía, Melissa y Pia también me dijeron que si no quería disfrazarme contigo para la fiesta.—Rodó los ojos con una sonrisa.—Todos nos quieren juntos.

Bajé la mirada con una sonrisa ante su afirmación, era verdad, todos mis amigos desde que conocí a Kailani habían insistido en que hiciera todo con ella, desde su fiesta de cumpleaños, hasta disfrazarme con ella en Halloween y eso me gustaba, porque se daban cuenta de que nosotros éramos más goals de lo que parecíamos.

Entonces, ¿Les damos el gusto?—Pregunté y ella me miró con incredulidad.

No les daremos el gusto a ellos, nos daremos el gusto a ambos.—Respondió haciéndome reír.

Hecho.

Author's Note 💕

Feliz año mis cositas preciosas, espero la hayan pasado bien, yo por mi parte la pasé increíble con el amor de mi vida y mis amigos.
Ojalá este 2025 esté lleno de muchas cosas buenas y chocoaventuras.

-With love, Danna 💗

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