02: Why do I feel this way?


Cuando Sonic al fin logró entrar después de algunos (muchos) intentos, se encontró maravillado con lo que había dentro. Sí, el lugar era un poco oscuro, y había humedad entre las paredes si las manchas de óxido eran algo a lo que tomar en cuenta; pero para él, eso es lo que le daba al lugar una vibra aún más genial.

Y fue por eso que la idea de explorar la pequeña bodega con tal de matar algo de tiempo le pareció tan buena. En un rincón encontró inventos a medio terminar y había fórmulas en pizarras que no comprendía para qué eran o servían, pero sin duda lo que se llevaba el premio mayor era la gran pantalla desbloqueada que colgaba de la esquina de una pared.

Si bien sabía que era de mala educación utilizar las cosas sin permiso, pensó que el sujeto se lo perdonaría, después de todo Sonic no era el que llegaba tarde a su propia casa (si la cama a medio hacer que se encontraba en la plataforma alta era suya).

Fue triste que una pantalla tan grande sólo pudiera proyectar a un tipo con peluquín dando el mismo discurso con voz robótica de fondo en bucle: "grandeza, esperanza, neón; Nueva Yugork." pero era eso o toquetear los inventos sin terminar peligrando a descomponerlos y probablemente enojar a la única persona que podría ayudarlo con su problema... Así que mejor Sonic se concentró en inventar burlas para cuando se topará de frente con esa rata no mobian que pasaba por peluca

Tan buenos eran sus juegos de palabras hacía el cabeza de huevo, que no se dio cuenta que ya habían llegado a casa sólo hasta que vio negro.



Nine estaba recargado en la silla de su escritorio con una bolsa de provisiones ya anteriormente acomodada en su lugar para la semana, una caja de jugo vacío y un erizo bajo la luz de la única lámpara del lugar atado a un contenedor amarillo.

El zorro miraba el cuerpo azulado inconsciente con preguntas revoloteando en su mente; ¿Era alguien enviado por el consejo? Lo dudaba, en este mes no había ocasionado intermisiones en sus anuncios, y si así fuera, Nine estaba seguro que habrían enviado a alguien un poco menos... Orgánico; ¿A lo mejor se perdió y acabó aquí? Imposible, nunca nadie pasaba por estos lugares, se aseguró y personalmente se encargó de que no sucediera; ¿Quizás había dejado la puerta abierta? No, está seguro que la cerró bien y comprobó antes de irse, ¿Pudo ser...

Vio al erizo removerse en un intento inconsciente para soltarse de las cuerdas que lo mantenían pegado al tambo de metal. Al parecer ya estaba despertando.

Sólo 30 minutos inconsciente; comparado a anteriores veces, había sido rápido.

—agh, ¿Qué pasó? —se quejó él intruso a la par que abría pesadamente los ojos. Nine se levantó de su asiento para caminar alrededor por donde la luz no diera, sus colas metalicas resonando a propósito de una forma que pondría al otro alerta contra el suelo; era hora de usar el único conocimiento que había proporcionado el equidna y que servía. —¡Hola!, ¿¡Hola!?, ¿¡Quién está aquí!?

El erizo empezó a voltear hacia los lados con más demandadas insignificantes saliendo de su boca, la neblina del sueño provocado dejada de lado por el sentimiento de temor errático; el contenedor amarillo se tambaleo a los lados por sus movimientos bruscos, si seguía así se caería de costado y lo que menos quería Nine era levantarlo.

—yo aquí soy el que hago las preguntas, intruso. —se paró debajo de la zona iluminada, sus extremidades metálicas se irguieron de un modo que lo hacían lucir más alto de lo que era, esto con el propósito de dar una imagen más imponente. Apuntó al cobalto con una cola que no lo sostenía para dar mayor efecto de intimidación y le gruño: —¿Quién eres y qué haces aquí?

El erizo no respondió al instante, sólo lo miró directamente. Nine dio su mejor mirada de muerte y el otro parpadeo dos veces lentamente para después sacudir su cabeza con fuerza para, quizás, despejar su mente.

—¡Espera!, ¿Intruso? —la mueca de confusión fue clara, despues se transformo en algo como ofendida arrogancia falsa. —¡Tú me mandaste la ubicación, y yo sólo la seguí hasta aquí!

¿Mandar ubicación?

El zorro intentó que la confusión no se mostrará en su rostro tras escuchar sus palabras. Nadie sabía dónde estaba y jamás había compartido las coordenadas del taller excepto quizás con... Espera...

—el rojo te dijo, ¿no? —sus colas mecánicas inconscientemente alzaron su cuerpo aún más, haciendo que se impusiera ante la figura del erizo atado debajo.

Había alivio en su mirada, no se suponía que hubiera alivio en su mirada.

—¿hablas de Knucks? Si es así, sí.

Como una serpiente atacó. Su extremidad mecánica perforó el metal a centímetros de su cabeza e hizo que el erizo pataleara contra la nada sin razón. La ira se arremolinaba en su garganta. Había sido una trampa, lo sabía. El equidna necesitaba armas nuevas; no se las pediría a él; todo fue una artimaña para que se alejara y este erizo robara sus planos, después de todo tenían un nuevo (pero incompetente) inventor que podía...

—¡Ey, ey!, ¡No hay que recurrir a la violencia! —gritó atrayendo su atención y desviando sus pensamientos. Él cobalto respiró hondo y visiblemente se relajo. —Se que no debí entrar pero...

El zorro gruño para callarlo, estaba harto de su charlatanería que probablemente intentaba confundirlo para que bajara la guardia y acabarlo.

—dile a tu líder de la resistencia que si tanto quiere tecnología, él mismo puede fabricarla, y que si intenta volver a robarme, yo mismo iré a la puerta del Consejo y...

—¡Espera!, ¿Robarte?, ¡Tu dijiste que me ayudarías! —gritó el erizo con la indignación cubriendo su tono. Nine dejó que algo de la confusión que sentía se desplegará en su rostro.

—¿Ayudarte? Yo no quede en...

Ayudarlo.

Nine quedó en ayudar a un nuevo recluta hoy por un favor que aceptó por plena nostalgia. Un recluta enviado por Knucks, un recluta que no se presentó, un sujeto que tenía...

Una mirada y efectivamente, las suelas del erizo chispeaban energía, ¿Cómo no se había dado cuenta antes?

—¿Eres el tipo de las zapatillas de neón, cierto? —el erizo a eso asintió con una cara extraña. Ahora los puntos empezaban a conectar con sentido, excepto... —yo te cite en Scare Port, ¿Cómo terminaste en mi taller?

—¿Scare Port? Yo sólo seguí el mapa que le diste a Knucks, y ese mapa me envió aquí. —dijo el erizo irritado; el vulpino ya no sabía si decía la verdad o si se trataba de una artimaña elaborada.

Decidió que era mejor catalogarlo como un factor duda.

—déjame ver. —el cobalto intento sacar la mano donde tenía el comunicador sin éxito. Nine rodó los ojos fastidiado por lo absurdo que era esto y retiró la cola metálica de donde había estado incrustada para cortar la cuerda que restringía al otro.

El erizo se sobo el pecho para después levantarse y alzar su brazo con tal de mostrarle su comunicador. El cánido tomo su muñeca con fuerza y la alzó aún más para poder ver ese pequeño mapa de tan mala calidad.

—... El mapa está correcto.

—¿Qué?

—sí... Estás en la otra esquina, ¿ves?

Soltó su brazo para que comprobara por sí mismo. El chico miró confundido el holograma y se rascó entre las púas azuladas.

—em... Nop, estoy donde señala, ¿No ves que el punto rojo se encuentra donde estoy? —él cobalto alzó de nuevo la muñeca y señaló como para comprobarle su punto. Como si Nine fuera un niño de 5 años que no supiera donde se encontraba arriba y abajo.

El erizo no era un intruso, no fue mandado por el consejo, pero sí era estúpido.

Demasiado.

Nine suspiró internamente, supone que al menos podía tachar traición de la ecuación.

claroo... Mi error, como sea. —con su mano se talló el puente de su hocico, esto era tan frustrante. —sólo déjame revisarte, veré que hago y te largas. Ni una palabra al equidna de esto, ¿Entendido?

—por supuesto viejo, con tal de que soluciones "esto", yo feliz. —aceptó en un movimiento de hombros que denotaba lo poco en serio que tomaba sus palabras.

Nine miró al techo oxidado, contó hasta tres para tomar paciencia y sacó su pistola escaner para terminar rápido con esto.

—¡oye!, ¡Pensé que habíamos acordado que fue tu error!

Por la paz iba a ignorar eso.

—agh, sólo no te muevas.

Por milagro el cobalto acató su orden. La luz del escáner lo recorrió de abajo hacia arriba. Los datos que su lectura le arrojó no tardaron en aparecer por la pantalla: edad, especie, tipo de sangre, las cosas normales; eso hasta que su máquina leyó algo que parecía... Inusual.

—mmh, Pareces tener un nivel bajo de energía a través de todo tu cuerpo... Pero posiblemente un regulador... —no dio tiempo a que el erizo le diera una tonta respuesta y caminó con ayuda de sus colas hacía su estación de trabajo. En realidad el problema en cuestión tenía una solución relativamente fácil.

O lo hubiera sido si Nine no tuviera un erizo respirandole en la nuca y que le preguntaba sobre absolutamente todo.

—oye, ¿Tu hiciste esos grafitis? A mi me parecen muy geniales por cierto.

—¿Esta es tu casa? No crees que es algo pequeña y... No se, ¿Alejada de los demás?, ¿Acaso eres una especie de ermitaño?

—oye, tus colas son geniales, ¿Me fabricarás unas púas de metal?, ¿O tal vez unos pies de metal? No espera... Eso se vería ridículo, mejor no lo hagas.

—¿Tu televisión no tiene mas canales? Ver al calvo es repetitivo, creo que ahora odio a las ratas...

El vulpino hizo oídos sordos a toda esa charlatanería sin sentido que buscaba crear un vínculo aparte de conocidos. Sólo debía terminar esto, bloquearía al equidna de sus contactos y volvería a la soledad a la cual estaba tan acostumbrado.

—sólo unos toques más y... Listo. —bajo de su asiento y se acercó al erizo que se encontraba rayando una de sus paredes con tiza. Por su bien, ignoró eso también. —toma, ponte estos, tal vez puedan regular el exceso de energía que sale de tu equipamiento para que no explote.

Ignoro ese "¿talvez?" dudoso y se lo colocó él mismo. A este paso el otro nunca se iría.

—está energía sigue siendo un misterio, pero es rastreable, por lo tanto me tomé la libertad...

Si bien Nine había previsto varios resultados (uno de ellos el cual empleaba el uso de un trapeador y una buena excusa de a donde se había marchado el nuevo recluta) en realidad no había visualizado un escenario donde el erizo brillara y su  equipamiento cambiará.

—wow, ¿Qué es esto? —dijo maravillado el cobalto mientras corría de un lado a otro. —No hay desbordamiento de energía, ¿y el look?, ¡Que cosa!

Bien, al parecer le encantaba y su trabajo funcionaba. Nine tenía nuevos datos que analizar, su deuda estaba saldada, todo había terminado finalmente y sin contratiempos.

Al parecer la vida finalmente le estaba sonriendo.

—mhm... Siguen siendo tus guantes y zapatos, pero parece que se sintonizaron con la energía de tu cuerpo en vez de resistirse... ¿Me pregunto porqué será?

El erizo interrumpió su divagación cuando se situó a su lado, demasiado cerca, ¿No sabía que era el espacio personal?

—¡Son lo maximo!, ¡No más deslizarse y resbalarse; no más humo!, ¡Muchas gracias...

Nine lo miró sin entender su silencio repentino, después se dio cuenta de que la mirada sin palabras al final era porque el otro estaba esperando que le suministrará su nombre.

Que descaro.

—esa información no te incumbe. Hice mi parte y tú ahora puedes correr, así que largo de aquí y dile a Knucks que no me llame ni aunque sea algo importante.

El erizo lo miró extrañado y después tuvo el descaro de sonreír y guiñar en su dirección un ojo. Nine quería estampar su cabeza contra la mesa.

—como tu digas colitas de hojalata, ¡Nos vemos luego! —dijo para desaparecer en un parpadeo, sin siquiera darle la oportunidad para golpearlo por ese tonto sobrenombre.

El cánido se sentó en su escritorio y miró la pantalla pegada en la pared.

"nos vemos luego"

Nine esperaba que se tratara de una despedida estándar y no un aviso de alguna futura interacción.

Él en definitiva esperaba no tener que volver a verlo, eso era cierto. Cualquier cosa con el nombre de rebelde ya entraba en sus malos libros sólo por existir. Pero, supone que algo de información extra tampoco le vendría del todo mal.

El dibujo hecho a tiza de un erizo con un pulgar arriba se destacó como pintura neón entre el óxido que inunda la pared.

Quizás... podría soportar tenerlo cerca.

Sólo por la recolección de datos.


Nine tiene serios problemas de persecución, no lo culpen.

No m gusto el título del capitulo, en la noche se me hizo la mayor frase poetica d una canción y ahora se ve bien pedorro ksjsjdkd

Tmbien

AL FIN TERMINE CON EL POV D SONIC 🎉🎉🎉

No saben lo q se me dificultaba escribirlo porq en serio no se como hacerlo... Osea tampoco se como caracterizar a Nine, igual por eso probable lo vean un poco OC pero x, ni modo es lo que hay.

Tmbien, alfin puedo escribir los 123 escenarios que tengo d ellos en este AU poq finalmente se conocieron 🙏🏻

Ahora, datos que nadie pidió pero que aún así dare:

-mi hc es q sonic tiene un muy mal sentido de la orientación si le das un mapa. No se de donde lo saque, juro q no es un mayami m lo confirmo, pero es q lo vi d un capitulo de creo sonic boom... Sólo q no recuerdo cual XD

—a lo mismo, knucks le enseño a nine sobre como hacer interrogatorios efectivos (ya quiero escribir sobre ellos ayuda no estoy soportando)

–Nine está ciego, debería usar lentes aquí, pero no.

Y creo q es todo lo que quería recalcar.

Y ya, eso seria todo, gracias por leer 💐

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