☾︎⏱

Nos encontramos en el tranquilo entorno de un parque, donde Saeed y yo estamos sentados, disfrutando de la serenidad del momento. El suave murmullo de las hojas movidas por la brisa nos envuelve mientras compartimos una conversación ligera.

De repente, Saeed rompe el silencio con una propuesta inesperada: invitarme a Cedargroville. Me sorprendo un poco por su oferta, ya que nunca pensé que podría invitarme a un lugar así. Mi mente se llena de preguntas y anticipación ante la idea de explorar un nuevo destino con él.

Sin embargo, antes de poder responder, Saeed me dice que lo piense y que le avise con tiempo. Asiento con un gesto de entendimiento, sintiendo un torbellino de emociones revoloteando en mi interior. La idea de escapar de la rutina y sumergirme en una aventura con Saeed es tentadora, pero también siento una ligera aprensión ante lo desconocido.

23 de julio del 2022

El día finalmente ha llegado y nos encontramos en el aeropuerto, listos para embarcar en nuestra aventura hacia Cedargroville. La emoción palpita en el aire mientras nos preparamos para partir hacia el hogar de Saeed, donde pasaremos las próximas dos semanas juntos.

Aunque estoy emocionado por la perspectiva de explorar un nuevo lugar con Saeed, también me siento un poco confundido por toda la situación. El hecho de que estemos dando este paso juntos representa un nuevo capítulo en nuestra relación, uno lleno de emociones y desafíos por delante.

Mientras nos dirigimos hacia nuestra puerta de embarque, una pregunta pesa en mi mente y finalmente encuentro el coraje para expresarla.

— ¿Tu familia sabe de mí? —pregunto, sintiendo la confusión teñir mis palabras.

Saeed asiente con una sonrisa tranquilizadora y me explica que ha estado hablando de mí con sus padres, lo que le llevó a querer invitarme a Cedargroville. Su respuesta me deja sintiéndome extraño, un torbellino de emociones revoloteando en mi interior. La idea de conocer a la familia  de mi novio por primera vez es abrumadora, y me siento nervioso por lo que podría deparar esta nueva experiencia.

25 de julio del 2022

Después de un largo viaje, finalmente llegamos a Cedargroville en la noche del 23 de julio. Estábamos tan exhaustos que apenas tuvimos energía para hacer algo más que caer rendidos en la cama y dejarnos llevar por el sueño reparador.

El día siguiente, el 24 de julio, nos levantamos con renovada energía, listos para explorar nuestro nuevo entorno. Sin embargo, el cansancio del viaje aún pesaba sobre nosotros, y decidimos tomarnos el día con calma. Ayudamos un poco con algunas tareas en el hogar de Saeed, pero principalmente nos dedicamos a descansar y recuperarnos del viaje tan pesado que habíamos tenido.

Fue un día tranquilo y relajante, lleno de momentos de paz y serenidad mientras nos aclimatábamos a nuestro nuevo entorno. A medida que la noche caía sobre Cedargroville, nos dimos cuenta de lo afortunados que éramos de poder compartir este tiempo juntos, independientemente de lo que el futuro nos deparara.

Sin embargo, mientras disfrutábamos de la paz de la noche, el señor Lenzz, un hombre amable y acogedor, se acercó a nosotros. Nos saludó con una sonrisa cálida y comenzó a conversar conmigo. Su presencia me sorprendió un poco, pero me sentí agradecido por su amabilidad y hospitalidad.

Durante nuestra conversación, su padre mostró un genuino interés en conocerme mejor. Hablamos sobre mis estudios, mis intereses y mi vida en general. Su amabilidad y calidez me hicieron sentir bienvenido en su hogar, y me di cuenta de que tenía mucha suerte de formar parte de la vida de Saeed y de su familia.

Al final de nuestra conversación, el señor Lenzz me dio unas palmaditas en el hombro y me dijo que estaba contento de que su hijo me hubiera traído a Cedargroville.

29 de julio del 2022

El día transcurre tranquilo en el hogar de Saeed, donde paso tiempo con su papá,y con su hermano mayor, Daine. Nos sentamos juntos en el patio trasero, disfrutando del cálido sol de la tarde mientras compartimos conversaciones amenas.

Durante nuestra charla, Robert (el señor Lenzz) y Dainen muestran un sincero interés en conocerme mejor. Hablamos sobre mis intereses, mis metas y mis planes para el futuro. Me siento abrumado por la calidez y la hospitalidad que muestran hacia mí, y me doy cuenta de la importancia que tiene para ellos la felicidad de Saeed.

En un momento de la conversación, Robert me mira con seriedad y me dice unas palabras que me tocan profundamente:

— Endrike, quiero que sepas que consideramos a Saeed como una joya en nuestra familia. Es un chico increíblemente valioso y estamos agradecidos de tenerte a ti a su lado. No puedes actuar como un idiota con él, es un chico tan dulce y merece todo el amor y el respeto del mundo.

Sus palabras son directas y cortantes, llenas de una seriedad que me hace sentir como si estuviera en un interrogatorio. Me doy cuenta de que su preocupación por el bienestar de Saeed es genuina, pero su tono agresivo me deja sin aliento.

Dainen, por su parte, se une a la conversación con un tono aún más severo:

— Escucha, Endrike, no queremos problemas contigo. Pero tienes que entender que Saeed es especial para nosotros, y no vamos a tolerar que lo lastimes de alguna manera. Si realmente te importa, demuéstralo con acciones, no solo con palabras vacías.

Sus palabras son como un golpe directo al corazón, y siento una mezcla de vergüenza y determinación arder en mi pecho. Aunque sus palabras son duras, sé que provienen de un lugar de amor y protección hacia su familia