Narrador pov.

Los años no pasan en vano, probablemente no todo fuera color de rosa pero al menos vivían tranquilos, los mellizos cumplirían cinco años y muchas cosas habían pasado.

Como mudarse, si ellos se habían mudado a otro lugar para tener una vida tranquila. Sin embargo no habían pisado Forks desde que se mudaron ya que Charlie, Renée y los abuelos de Hunter llegaban seguido a visitarlos.

Pero para él cumpleaños de los mellizos irían a celebrarlo en Forks, después de tanto tiempo al fin estarían de vuelta aunque solo unos días o eso pensaban ellos.

Ya que después de que Dominic y Elizabeth cumplieran un año, Bella retomó sus estudios universitarios, por otro lado Hunter se había graduado por lo que tomaría responsabilidad en los negocios de sus abuelos. Edward estudiaba en la misma universidad que la castaña por lo que al principió fue difícil acomodarse.

Aunque al tener una familia grande habían pequeñas discusiones, sobre todo Rosalie y Leah.

¿Y que hacía Leah con ellos?

La respuesta era fácil, al momento en que la manada de Hunter quiso conocer a los mellizos, nadie esperaba que la imprimación de Leah fuera Dominic y la de Seth fuera Elizabeth. Por lo que al momento de mudarse ellos fueron con la familia Cullen.

Jared quedó en la reserva pero sin estar en la manada de Sam, lo último que supo de su hermano era que las cosas se estaban saliendo de control pero en realidad no quiso entrometerse en los asuntos de San.

Atravesó la calle, buscando un regalo para sus dos hijos. Entró a la primera tienda que encontró, con la fachada alegre y llena de colores llamativos.

Una inmensa juguetería, llena de todos los juguetes posibles. él debía encontrar lo que buscaba, de seguro Alice lo regañaría por llegar tarde a la celebración pero en su defensa no había encontrado él regalo que quería darles.

Observó con interés cada estante, mirando cada juguete en busca del indicado, Dominic y Elizabeth sus dos pequeños. Ambos heredaron el cabello castaño de Bella y los ojos azules de él.

Una combinación perfecta, y la familia Cullen estaba encantada con tener dos pequeños corriendo por toda la casa.

Bree ahora se controlaba mucho mejor, pero aun mantenía su distancia con Bella, con Dominic y Elizabeth no había ningún problema al parecer en él futuro posiblemente pudieran convertirse en lobos. Por lo que su sangre no les provocaba sed a ningún vampiro.

Algo que en cierta manera tranquilizaba al trio.

¿Cuál se suponía que debía elegir?

Buscó y examinó varios juguetes antes de tomar una decisión. Se apresuro a pagar por los dos juguetes y retomó su camino subiendo a su moto.

Le fue inevitable no pensar en la última vez que vio a Joshua, la verdad era que no se arrepentía de su decisión, no darle la oportunidad de acercarse a él.

Si en su infancia no lo hizo, al parecer Sam hizo lo mismo. Después de que los intentos de Joshua fuera en vano para acercarse a sus hijos se fue de Forks.

«Era lo mejor»

Pensó Hunter mientras veía como ya casi llegaba a la casa Cullen, pero en su camino se atravesó un lobo negro casi idéntico a cuando él se transformaba, él lo pudo reconocer de inmediato sin embargo decidió ignorarlo.

Después de unos minutos se encontró frente a la casa, una hermosa casa de aspecto simple familiar, la clase de lugar al que siempre se encontraría feliz de volver. Entró observando como los mellizos corrían de un lado para otro.

-Finalmente llegaste.-pronunció Edward mirando como Hunter entraba a la casa con cuido de no toparse con Alice.

-Déjame adivinar, Alice quiere que todo salga perfecto.-dijo Hunter acercándose al vampiro para después darle un casto beso.

-Es de Alice, de quien hablamos.-habló Edward divertido.

-Y Dominic se mancho por estar jugando con Emmett y Bree ahora debe estar cerca de un infarto.-dijo Bella mirando como una Alice molesta entraba.

-Son un completo desastre.-se quejo mirando al hombre lobo, quien solo se limitó a encogió de hombros.

-Solo son niños, si hablamos de Emmett aquello no es ninguna novedad.-habló Hunter mientras prestaba atención a la casa, ahora podía observar todos los arreglos que compraron para organizar la fiesta.

-Y espera al pastel.-comentó Rosalie entrando con Elizabeth.

-¡Papá Hunter!.-exclamó la niña corriendo a abrazarlo.

Él sonrió, aunque estaba pensando en lo sucedido con Sam.

-¡Feliz Cumpleaños Lizzie!.-él hombre lobo le entrego su regalo, miro como Elizabeth sonrió emocionada.

-Le mostraré a los abuelos.-pronunció Elizabeth entusiasmada al tiempo que empezaba a correr hacía afuera donde estaba Charlie, Renée y los abuelos de Hunter.

-Con cuidado Lizzie.-mencionó Bella con una leve sonrisa.

-¡Sí, mama!.-exclamo Elizabeth.

Hunter paso su brazo por los hombros de Bella, la decisión estaba tomada ella se convertiría.

Dominic bajaba con cuidado de las escaleras junto a Esme y Leah.

Observo a su primero a su papá Edward para después mirar a su papá Hunter, como comúnmente los llamaban él y Lizzie.

Él sonido de los sus pasos llenó la sala dirigiéndose en si dirección, sin más remedio se separó de su esposa y sonrió abiertamente, agachándose para abrir los brazos y recibir él pequeño cuerpo del niño que corría hacía él.

-¿Has traído mi regalo?.-preguntó Dominic aferrándose a los hombros de su padre.-Le he dicho a Lizzie que me traerías un regalo mas grande que la de ella.

Hunter rió entre dientes, y le entrego su regalo.

-¡Feliz cumpleaños Dominic!.-lo felicitó haciendo que los pequeños ojos azules de su hijo de iluminaran por la emoción olvidándose de todo lo demás.

-¿Lo puedo abrir?.-inquirió él niño observando a sus padres, él trio asintió en respuesta.-Leah ayudame a abrirlo.

Leah sonrió, aunque fue inesperado que su impronta resultara ser Dominic. Estaba feliz por fin había dejado atrás la infelicidad por lo que pasó con Sam.

-Y pensar que llegamos tarde, cuando uno de los padres de los festejados no estaría aquí.-comentó Jared entrando junto a Kim.

-En mi defensa no encontraba él regalo indicado.-repuso él hombre lobo animado.

Después de un rato Bella se levantó de su asiento pero una extraña sacudida de vértigo la recorrió. Se tambaleó y casi cae de espaldas de no ser porque Edward se apresuró a detenerla.

-Wow… un mareo.-pronunció Bella.

-Posiblemente tengamos otro nieto.-comentó Renée.

Charlie casi se ahoga con él refresco que estaba tomando.

Aquel comentario hizo fruncir el ceño a Hunter y Edward ya que sabían que la castaña había utilizado el DIU para no quedar embarazada hasta que hace unas semanas se lo quito, pero Hunter estaba utilizando condón por lo que se negaba a creer que Bella estaba embaraza.

-Has dormido mucho, doce horas.-comentó Edward en voz baja.

-¿Doce?.-inquirió Bella sorprendida, eso era raro en ella. Más las pesadillas que últimamente estaba teniendo.

-Tal vez fue por lo del viaje.-habló Hunter. Sin embargo les fue inevitable pensar en la posibilidad de que estuviera Bella embarazada.

La tranquilidad no puede estar para siempre aquello lo sabían pero ¿Había la posibilidad de que Bella estuviera de nuevo embaraza?.

Hunter estaba incrédulo ante lo que veía, era Sam apareciendo en su forma humana y ¿ahora que quería?.

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Maratón 4/4

Capítulo dedicado a: Lunadesangre_88

Lo siento por la tardanza pero no me gustaba como estaba quedado él capítulo hasta que este fue él resultado final ¡Espero que les guste!