~ El verdadero amor es como los espíritus: todos hablan de ellos, pero pocos los han visto. ~

François de La Rochefoucauld

[Sizhui]

Al sentir como se apegaba a mi tuve una sensación extraña... Sin embargo era agradable, no estaba seguro de como podía expresarme, pero era agradable el sentirle tan cerca, era muy dulce y tierno. - Oh, entiendo - Susurré levemente al escuchar sus indicaciones sobre mi postura, no negaría que estaba algo nervioso, pues nunca en la vida me había pasado algo similar con algún Alfa.

-¿Comprendes cómo hacerlo?- me preguntó con un tono de voz suave y dulce, asentí levemente y de un momento a otro pude dar en el blanco, estaba demasiado feliz en esos momentos. - Bien, solo tienes que seguir practicando - Respondió y acomodo tres flechas en el arco, justo como era de esperar dio en el blanco, si que era demasiado sorprendente el ver ese tipo de habilidades. - Es fácil una vez te acostumbras y tienes práctica.

- Ya lo creo, es sumamente increíble ver cómo haces esto, yo jamás podría hacerlo - Admití algo apenado y mire mis palmas unos minutos, mi piel solía ser delicada y en esos momentos estás estaban rojas y con pequeños cortes - creo que tengo que irme - Susurré levemente y mire a otro lado, al estar por irme me sorprendió al sentir como Jin Ling me detenía, no esperaba eso. -¿Ocurre algo?- pregunte algo preocupado.

- Déjame revisar eso, podrías hacerte más daño - Sujeto mi muñeca y me llevo a su habitación, eso sin duda alguna me había puesto demasiado nervioso - ¿Así de delicado eres?- Se escuchaba algo preocupado por mis heridas leves.

- Si, a veces - Susurré levemente - No tienes que hacer esto, puedo encargarme solo - Sonreí - Además tienes que continuar con tu práctica.

- Cállate, puedo encargarme de esto - Me respondió y me guío hasta la habitación, una vez ahí me hizo sentar en la cama y el fue a buscar algunas vendas y otras cosas, estaba confundido pero feliz por ese lindo comportamiento que estaba teniendo, era algo muy raro, pero dulce. - Listo, déjame ver tus manos - Sujeto con cuidado mis manos y comenzó a limpiar las heridas, me era difícil poder callar los quejidos por el dolor y el ardor que los medicamentos me causaban. - Discúlpame, pero es necesario hacer esto.

- Está bien, no tienes que preocuparte de nada - Sonreí y mire sus manos, había una gran diferencia de tamaños - Es lindo que hagas este tipo de cosas - Susurré levemente.

- Solo intento ser amable - dijo algo serio y comenzó a poner las vendas en ambas manos - En Lanling tenemos algunos arcos que son buenos y no te harán daño, tal vez cuando vayas puedas usar uno... Si te parece bien - Acaricio mis manos con cuidado y le mire algo apenado.

- No estoy seguro, pero sea lindo poder ir a Lanling, muchas gracias - Acaricie su mano también y poco después acomode el flequillo de Jin Ling - Te vez lindo - Sonreí al ver qué sus mejillas se habían tornado de un lindo color rosado -

- Cállate - Dijo avergonzando y me miro fijamente a los ojos, no negaría qué sus lindos ojos me mantenían hipnotizado, era raro... Pero agradable a su vez, solo sabía que en ese momento estábamos el y yo... En la soledad de esa habitación - Jin Ling... - Susurré levemente y poco a poco nuestras respiraciones chocaban, nuestros labios se unieron y tuve una sensación chispeante, se acercó aún más a mí y lentamente comencé a recostarme en la cama...

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¡Holi! Disculpen por no haber actualizado, comenzaron a pasar muchas cosas en mi vida privada y me tocó alejarme un poco de Wattpad, bueno espero estén bien y que les gustará este capítulo chikitos, ¡PROMETO SEGUIR MEJORANDO!

𝓛𝓮𝓲𝓭𝓮𝓻 𝓐𝓷𝓭𝓻𝓪𝓼𝓽𝓮