El día transcurrió en un curso normal para Yoongi. Afortunadamente sus amigos y Taehyung estudiaban carreras diferentes.

De camino a encontrarse con sus amigos en su punto de encuentro con intenciones de despedirse e irse a su casa, su mente divagaba en los recuerdos del sábado anterior. La imagen de Namjoon cargando y besando a Jungkook causaba que su visión se nublara. Rápidamente se limpió el rostro con el dorso de la mano, seguramente Jungkook esperaba topárselo para burlarse de él y no le daría el gusto de verlo llorar.

Se abanico el rostro con la mano conteniendo el llanto. Al pasar frente al edificio de ciencias biológicas pudo ver a Taehyung salir de este. Como si fuera algo imposible de impedir que sucediera, inmediatamente cruzaron miradas. Las imágenes del beso lo bombardearon, sus mejillas se sonrojaron y una burbuja de enojo floreció en su interior.

Yoongi se dio la media vuelta como si con eso Taehyung lo perdiera de vista. Cuando las cosas se salían de control y no seguían su curso el omega se estresaba y no pensaba muy bien. Quería irse, pero sus pies no respondían, pensaba a la vez en qué dirección ir, olvidándosele hacía donde iba.

—¡Yoongi! —le llamo Taehyung.

Al escuchar al alfa su cuerpo y mente se conectaron, reaccionando. Sus amigos entenderían si se iba sin decir adiós por una vez. Camino apresurado a la salida más cercana, se preparaba para correr. La salida se veía cerca tanto que pudo divisar su autobús en la parada. Estaba salvado, pensó.

Taehyung vio al omega alejarse conforme él se acercaba corrió, era más rápido que el omega por lo que fue fácil alcanzarlo. Yoongi giró la cabeza y al ver que le pisaba los talones comenzó a correr. El alfa río, no imaginó que acercarse al omega sería tan difícil. Fue un impulso cumplir su acometido con una diferencia diminuta, según él. Acercándose completamente a lado del omega tomo la muñeca de este y corrió junto con él. El rostro de Yoongi se desfiguro de sorpresa. Intentó detener el paso mas no pudo.

El alfa lo arrastro por la salida, alejándolo del autobús con dirección a su casa. Corrieron un par de metros más, los suficientes para que cuando pararon Yoongi recargo las manos en las rodillas tratando de recuperar el aliento. Así que no se percató de lo que Taehyung hacía.

—Estás loco —dijo Yoongi con voz agitada.

—Entremos ahí —ignorando las palabras ofensivas arrastro de nueva cuenta al omega.

Esta vez Yoongi no se negó, estaba cansado para pelear. Cruzó la calle arrastrando los pies. Se detuvieron frente a un circus park. De esos lugares en los que jugabas y ganabas tickets para cambiarlos por un premio al final.

—¿Qué hacemos aquí? —preguntó Yoongi confundido al entrar.

El lugar apenas y tenía unas mejoras a la última vez que visitó el lugar. Un par de juegos nuevos se asomaban en el centro llamando la atención. Lo demás estaba en su lugar, canastas de basketball en una esquina, simuladores, videojuegos, etc.

—Jugar —respondió el alfa con obviedad. Yoongi abrió y cerro la boca inmediatamente, arrugo la nariz y negó con la cabeza. Taehyung pago una tarjeta con crédito y lo estiró al primer juego, video juego de motos —¿No te parece divertido? —señalo las motos.

—Cuando tenía 12 —el omega se encogió de hombros.

—No te creo —negó divertido —solo quieres aparentar ser un niño grande porque estas en la universidad.

—¿Niño grande? ¿Enserio? —Yoongi se río. Taehyung lo miro con diversión, alzando las manos al aire se encogió de hombros como diciendo "solo digo". El omega lo considero, la idea no le era ridícula en realidad.

—Tenemos solo 20, diviértete.

—Bien. Diré que soy muy bueno, así que no llores cuando gane.

—¡Let's go! —Taehyung aplaudió una vez con entusiasmo.

Cada uno subió a la moto más cercana dejando las mochilas en el piso. La competencia hizo que ambos jóvenes dieran todo de sí. Ninguno de ellos estaba dispuesto a perder o eso fue en un principio. No era como que Taehyung tuviera oportunidad de ganar, sin embargo, conforme avanzaba el juego ver la sonrisa del omega le hizo sentirse ganador. Era divertido presenciar como Yoongi se auto proclamaba ganador desde el inicio, su espíritu competitivo no era broma. Era como si fuesen amigos y fue feliz. Dejo de intentar ganar disimuladamente.

—¡Si! ¡Te gané! —festejo Yoongi aun en la moto, sacudió las manos en el aire sonriendo ampliamente —te lo dije —se burló del alfa.

—Este es solo el inicio —Taehyung no dejo de sonreír a pesar de seguir retándolo —¿Qué te parece si ves cómo te gano en encestar? —señalo las canastas a la vez que tomaba la mochila.

—Vayamos para que me veas ganar. El premio será mío —agito los tickets que gano en el aire.

Se dirigieron al lugar, tras unos minutos después Taehyung gano sin querer. En la tercera canasta, a lado de Taehyung se encontraba un niño de unos diez años que jugaba como si su vida dependiera de ello. De la maquina salía un gran rollo de tickets, el niño era un prodigio del basketball.

—Eres genial —le mostro ambos pulgares al niño. El amigable niño miro el marcador de Taehyung y rio con superioridad.

El alfa fue buena onda y el niño resulto un odioso presumido. Tras ese momento la competencia ya no era contra Yoongi si no contra el niño de diez años. No se quería dejar vencen, sin embargo, el pequeño le llevaba ya una gran ventaja y él tampoco era un gran jugador. La competencia llego a su fin gracias a que el niño se aburrió y se marchó a canjear sus tickets, ni siquiera volvio a mirar a Taehyung luego de ver el marcador, había triunfado.

Taehyung se quedó estético, miro los tickets que salían de la máquina, era similar a la inicial del niño. Abatido con el orgullo en el suelo, levanto los tickets y su mochila, al menos eso si podía llevarse. Al mirar hacia Yoongi, se percató de que lo había hecho a un lado. El omega tenía un rostro serio. Pensó en que no solo había perdido si no que arruino el momento con el omega que le gustaba.

—Al menos me ganaste a mi —Yoongi ya no aguanto más y rompió a reír.

—Lo hice —mostro el montón de tickets en ambas manos. Rio apenado.

—Un niño te ha ganado —siguió burlándose —vayamos a recuperar tu orgullo en otro juego.

El omega le dio unas palmaditas en el hombro sin dejar de reír. Perdió contra el niño, pero gano escuchar la linda sonrisa del omega, en definitiva valió la pena.

Tras jugar en la mayoría de los juegos, decidieron retirarse. Al final no se enfocaron en quien ganara y menos se supo cuando el alfa mezclo los tickets con los del omega en el mostrador. Tras contarlos alcanzaba para un par de cosas, de entre ellas un peluche de Mike Wazowski y una pistola de burbujas.

—Yo quería el peluche —Taehyung le disparo burbujas al rostro a Yoongi.

—No debiste mezclar los tickets —rio alejando las burbujas.

—Solo bromeo —le disparo más burbujas. Sintió orgulloso al hacer reír al omega —pude obtenerte un peluche en nuestra primera cita, así que ahora podemos ir a comer ¿Qué te gusta?

—¿Nuestra qué? ¿Una qué? ¿Cita? —balbuceo Yoongi espantado —¿En que momento se dictó que esto era una cita?

—Me gustas Yoongi.

—¿Y eso que? —reclamo —esto no fue una cita —se negó rotundamente.

—Pero.

—Adiós Taehyung —peligrosamente Yoongi se atrevió a cruzar la calle mientras el semáforo estaba en amarillo.

El alfa ya no lo pudo seguir. Lo vio alcanzar un camión y subirse. Al menos no le devolvió el peluche o peor aún se lo aventara con furia. El sonido de una llamada entrante no le permitió seguir lamentándose.

—¿Qué quieres?

—Oye. No desquites tu enojo conmigo —exigió Jin al otro lado de la línea.

—Solo dime que quieres. Yoongi acaba de fingir que nuestra cita no fue una cita —menciono con tristeza.

—Te dije claramente que él está enamorado de Namjoon. Tomará tiempo para que sane antes de volver a abrir su corazón, sabes como es eso —el consuelo de su hermano funcionaba por lo menos un poco.

—Tienes razón. Le daré su tiempo a la vez que intento conquistarlo —se propuso.

Acostado en su cama Jin rodeo los ojos. Su hermano era persistente gran virtud y defecto en algunos casos.

—Inténtalo. Solo recuerda que no es no y no quiero que te vuelvas un espeluznante acosador Taehyung —advirtió.

—Por supuesto.

Yoongi entro a su habitación azotando la puerta detrás de él. Los dos hermanos menos de quince y trece años lo siguieron desde la sala. Tocaron la puerta sin pasar.

—Yoongi entraremos —avisaron al ver que no respondía.

Los alfas respetaban el espacio personal de su hermano. Al estar dentro se toparon con un peluche verde tirado en el piso encima de la alfombra, subiendo la vista Yoongi estaba acostado en la cama boca abajo y con una almohada en su cabeza.

—Mamá te estuvo buscando. Hoy nos tocaba ir con ella, era su día de la semana.

Con padres divorciados y tras quedarse con la custodia su padre omega, a los hijos Min les tocaba pasar tres días a la semana con su madre alfa. La alfa tenía una agenda apretada por lo que a veces solo podían comer con ella.

—Iré la próxima vez —la voz de Yoongi se ahogó en a almohada mas no se perdió.

—Nos regaló tablets nuevas —presumió el menor, contento —la tuya esta en tu mesita de noche.

—Váyanse.

Su padre se unió a la reunión en la habitación del omega. Sus hermanos siguieron hablando de sus regalos y la rica comida que tuvieron mientras que su padre le preguntaba donde había pasado la tarde. Eran muy ruidosos cuando sus hermanitos insistieron como su padre saber el paradero del omega. Yoongi pataleo y manoteo, la almohada abandono la cama al paso.

—¡Estaba teniendo una cita! ¿Contentos? —Yoongi respiraba agitadamente.

—Genial. Estas en edad, tu madre entenderá —dijo su padre con normalidad.

—Salgan de mi habitación —pidió. Antes de seguir escuchado se hizo bolita sujetando sus piernas.

—Bebe —la cama se undio a su lado a espaldas de el —¿No salió como esperabas? —su padre le acaricio la espalada.

—No fue con Namjoon —se giró quedando acostado y de frente a su padre —además que no sabía que era una cita. Mi primera cita —los ojos del omega se humedecieron.

—Si no sabias entonces no era una cita —la mano de su papá acariciándole la mejilla fue reconfortante, su padre era consciente de lo significativo de las primeras veces para Yoongi —tu cita ideal llegara pronto, tranquilo —el amoroso padre le beso la cien.

Luego de eso los tres salieron de la habitación dejando al omega solo. Otro de sus planeas fue estropeado por Taehyung. Debería de cuidarse o de lo contrario perdería más primeras veces con una persona que no le gustaba.

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