»No juegues con los alemanes«

Palestina es un joven muy rebelde, le encanta darle dolores de cabeza a su padre, Israel. Éste es muy serio y estricto con él, intenta que sea responsable y maduro pero claramente no lo está logrando. Israel está realmente preocupado, pues su hijo muestra rechazo ante su sangre, quiere ser independiente y él no quiere que eso ocurra.

Desde pequeño le inculcó una clara y concisa regla, "no juegues con los alemanes", siempre le dejó en claro que estos no son para nada inocentes, aunque parezcan fáciles de manipular y engañar no es así; según su padre estos llevan en el ADN la mentira y el engaño, son expertos en ello.

Pero Palestina simplemente creyó que esa regla siempre fue por culpa de sus traumas, así que desobedeció.

Un día se encontró a Alemania, el joven que acarrea consigo la sangre del Diablo, según su padre, pero a él siempre le pareció demasiado inocente y puro.

Decidió acercarse a él con una sonrisa ladina para comprobar si su teoría era cierta, -Hola, alemán- saludó el palestino observándole fijamente, el germano alzó la mirada para encontrarse con Palestina, se sorprendió ante la forma en que se dirigió hacia él pero decidió ignorarla.

-Hola, Palestina, qué se te ofrece?- interrogó amablemente, el más bajo se sorprendió al ver que su padre no mentía con respecto a los dientes del alemán.

"La marca del Diablo"

-Sólo para preguntarte si es verdad que la Unión Europea fue creada para mantener a todo Europa bajo tus pies- tras sus palabras una sonrisa burlona se pintó en sus labios.

Alemania le miró con una ceja alzada ante sus palabras, era una verdadera falta de respeto a su parecer. Nada ocurrió, simplemente Alemania le miró confundido ante sus palabras, él se esperaba que sus ojos se tinten de rojo y en su cara apareciese la esvástica pero no.

Palestina soltó un suspiro, quizás no lo enfadó lo suficiente, -Tu militarización es tan mala, mi padre es superior a tí en ése sentido- soltó el palestino captando la atención del alemán.

De forma repentina el ambiente se tornó pesado, sentía la presencia de alguien detrás de él, su cuerpo se estremeció al ver como una sombra lo cubría entero y para terminar de aterrarlo Alemania alzó su vista por encima de su cabeza.

-Hallo, vater- saludó el alemán, Palestina sintió como su corazón bombeaba con rapidez y entonces sintió una cálida respiración en su oído, -Usualmente detesto el tabaco, pero ahora mismo sólo utilizaré un cigarro para apagarlo en tí, sucio judío- una voz profunda y grave se presentó en su oído.

"La voz del mismísimo anticristo"

Se estremeció al sentir como algo cálido se acercaba a su brazo, se arrepintió tanto de desobedecer a su padre en ése momento. Entonces observó como un mechero de gran tamaño se presentaba frente a él.

"El fuego obedece a cada una de sus palabras"

Con gran horror escapó del lugar aterrado por ser enviado a un campo de concentración clandestino o algo por el estilo, no quería terminar siendo un jabón.

Alemania soltó una carcajada al igual que la nación frente a él, -Danke, Russland- agradeció entre risas el alemán, el ruso por su parte guardo el mechero antiguo, -Verás que no se atreverá a meterse contigo nunca más- respondió el ruso divertido.

Y efectivamente, Palestina nunca más se acercó al germano.

»Nunca juegues con los alemanes«

Una patata XD ha ingresado al chat

OLA! Aquí estamos nuevamente con otra historia, por qué? Pues porque se me antojo XD

Nunca he visto en una historia que hablen acerca de Israel y su miedo compulsivo hacia Third Reich, además tampoco nombran a Palestina así que ahí está.

Según yo Palestina es el hijo de Israel y por el momento lo seguirá siendo XD

Rusia mide 2,25 (sí, es alto) y tiene la voz muy grave, así que Alemania aprovechó esas cualidades para que Palestina no joda.

Alemania: pensar correcto es lo que hago .jpg

En fin, hasta aquí el primer capítulo, espero que les haya gustado, yo me despido B)

Shau

Una patata XD ha abandonado el chat

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top