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CAPÍTULO QUINCE
THE GIRLFRIEND OF NEXT KING
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BIANCA NO TUVO oportunidad el domingo para hablar con Héctor siendo que este había arrojado su teléfono a su ventana más aparte que hubo un evento deportivo donde Hércules sería juez y Héctor estaba obligado a ir.
Ambos se habían quedado dormidos luego de declararse su amor y una larga sesión de besos. Hubiera despertado junto a él la mañana siguiente de no ser por los insistentes mensajes de Nicholas en la madrugada diciéndole que regresara a la casa antes de que sus padres se dieran cuenta.
Se fue sin que el pelirrojo se diera cuenta y al llegar a casa se extrañó demasiado al encontrar a Chad y Nicholas y este último con una peluca del mismo largo que su cabello.
Al parecer su madre fue en la noche y Nicholas tuvo que hacerse pasar por Bianca, le daba gracia pero también miedo ¿de donde habrá sacado la peluca?
En fin, ese día estaba ansiosa de por fin ver a Héctor, mandaría todo al inframundo por estar con el.
Pero esos no eran los planes de otro cierto chico...
( 👑 )
Mal se encontraba aburrida en clase de biología —dada por la mismísima Ariel — mientras hacía garabatos en su cuaderno.
De pronto escucho como los mesa-bancos eran arrastrados por el aula, al parecer la pelirroja había dado la indicación de hacer parejas para completar un ejercicio de la pizarra.
No parecía pues se mostraba desinteresada pero dentro de si, tenía miedo de quedarse sola. En la isla con una mirada amenazante bastaba para que alguien fuera su compañero de equipo o aveces ni hacía falta ya que compartía ciertas clases con sus amigos, pero no aquí. Si aplicaba lo mismo que en la isla solo los alejaría, le tomaría menos importancia pero de verdad que no entendía nada de esa clase y mucho menos los ejercicios.
Suspiro frustrada hasta que alguien tomó delicadamente su hombro.
— ¿Necesitas compañera? — preguntó una rubia de rostro angelical.
Mal simplemente asintió.
( 👑 )
"Las grandes moléculas, como las proteínas, si son solubles en agua, forman un tipo especial de disoluciones denominadas disoluciones coloidales. Explica lo que quiere decir esto y los diferentes estados en los que se puede presentar una disolución coloidal."
Mal frunció de más el entre cejo al terminar de leer el primer ejercicio.
— ¿Qué es esto? — preguntó desesperada a la chica su lado — No me servirá de nada en la vida ¿por qué tengo que hacerlo?
Crystal rio ante la respuesta de la muchacha. Lo bueno es que tenía mucha paciencia y que le gustaba ayudar.
— Son bases, Mal. — explicó con su amable voz — Necesitas pasar las materias para ser lo que tú quieras en un futuro.
La pelimorada resopló.
— Seré una emperatriz del mal, no necesito biología. — Crystal soltó una gran carcajada por la ocurrencias de su compañera.
De verdad la divertía mucho. A Mal le molestaba que por cada cosa que dijera la tal Crystal se burlará pero no podía reclamarle, era tan... buena que hasta daba pena decirle algo. Y estaba casi segura que no lo hacía con mal, al contrario se reía inocentemente creyendo que era sarcasmo todo lo que salía de la boca de la chica, lo cual no era así.
— Me caes bien. — Dijo con una sonrisa adorable dejando congelada a Mal.
Nunca nadie le había dicho eso.
Ni siquiera sus amigos, quiero decir, ella sabía que tenía lealtad con ellos pero nunca le habían dicho directamente que les agradaba su compañía.
Con Evie, se arrepintió de no haberla humillado en su proyecto final con Lady Tremaine cuando está no la invito a su fiesta de cumpleaños a la que todos fueron, menos ella, Mal como venganza arruinó parte de la fiesta pero Evie con tan bien corazón la perdono y le dio una segunda oportunidad.
Con Jay el siempre fue un matón y su amistad comenzó cuando Harry, el hijo del capitán garfio quizo jugarle una broma a Mal pero en ese momento Jay estaba en el lugar y en el momento equivocado, total una cosa llego a otra y ambos se vengaron del falso pirata.
Con Carlos ella siempre lo molestaba por ser "pequeño" no fue hasta que les tocó hacer un proyecto juntos donde el chico le demostraba que no le caía nada bien pero el siendo un genio en robótica y ella teniendo un poco de magia personal de su madre pudieron hacer un buen proyecto clamando las aguas entre los dos.
No fue hasta que Diablo le informó a Maléfica del regreso completo de su magia (obvio que no la podría usar en la isla) y Maléfica le pidió a Mal que la recuperara y esta para demostrar que era malvada le dijo a los tres chicos que la acompañaran a la isla de los condenados y fue cuando se hicieron amigos.
Crystal al no escuchar respuesta de la chica puso gesto preocupado.
— ¿Sucede algo? ¿Dije algo malo? — preguntó angustiada entonces Mal comenzó a negar rápidamente con la cabeza.
— Yo em... — juega con sus dedos nerviosa — nunca me habían dicho eso...
— Aww — La rubia sin previo aviso abraza a la pelimorada sorprendiéndola — No te preocupes seremos buenas amigas.
Mal sin soportar tanto el contacto físico la alejo con discreción pero la otra ni cuenta de eso, solo sonreía.
«Cuanta bondad en una sola persona» pensó.
Mal giro nuevamente la vista a su cuaderno un tanto incomoda hasta que se le ocurrió una gran idea.
Sin que nadie se diera cuenta — más que Crystal que observaba extrañada sus acciones — sacó el libro de hechizos que le dio alguien muy especial antes de salir de la isla.
— Wow ¿qué es...? — Mal interrumpió a la chica con un siseo sin quitar la vista del antiguo libro.
Solo esperaba que funcionara, solo llevaba una clase de magia pero se sentía capaz. Era la hija de una de las más grandes hechiceras, podría con un hechizo de kínder.
— Libro mío tú qué tienes las respuestas dámelas ya. — La de vestimenta morada rozó sus dedos en las hojas de cuaderno donde inmediatamente aparecieron las respuestas a las preguntas del ejercicio.
— ¿P-Pero qué...? — Crystal comenzó a tartamudear y a decir cosas sin sentido.
— Suéltalo, soy increíble — hablo presumida la otra chica hasta que la rubia la saco de su burbuja.
— ¡No! — gritó/susurró — Está mal, es hacer trampa.
Crystal se sentía sucia, como si hubiera cometido el peor de los crímenes, estaba fatal.
— Si lo sé — exclamó con tranquilidad.
— Pero no puedes... — Iba a seguir replicándole hasta que se oyó un toque suave en la puerta de aula.
Era el príncipe Ben.
Mal arrugó la nariz molesta al recordar el incidente del sábado. Aun no salía el olor a vomito de su chaqueta.
Mientras tanto Crystal olvidó por completo lo que le iba a decir a Mal y sin importarle su presencia se quedó mirando a su amor platónico soñadora y con una sonrisa de enamorada cosa que por supuesto Mal se dio cuenta.
Crystal estaba completamente enamorada de castaño, le encantaba su bondad y el que pusiera el bien de otros antes que el suyo y sobre todo lo bueno que era con ella, era todo lo que había soñado. Guapo, lindo, atento y divertido, perfecto ante sus ojos. Sin mentir llevaba enamorada de él desde los doce años cuando paseaban en bicicleta y ella cayó, después el le puso una bendita y luego besó su herida. Ese día vio algo diferente en el, algo mágico, algo sin igual y que le encantó.
— Sabes escoger, — Crystal salió de su ensueño y miró confundida a la chica a lado suyo — el próximo rey... — Explico.
Crystal frunció un poco el entrecejo por dicha acusación, su amor hacia Ben no tenía nada que ver con que fuera a ser coronado el próximo rey de Auradon. Todo lo contrario a ella le gustaban sus principio y su personalidad.
Y su madre al casarse con su padre sufrió mucho entre la realeza ya que todos la vieron como una interesada lo cual no era así y tampoco en este caso.
— No me gusta por eso... — Mal levantó las cejas — Además su novia es Audrey... — Cambio de tema haciendo que la pelimorada rodara los ojos ante la mención de la otra princesa.
— Hablas de la princesita irritante ¿verdad? — Audrey era su amiga pero no podía negar lo obvio por lo que asintió con pesar.
La villana bufó.
— Ella siempre está con el, en sus entrenamientos, en el coro y próximamente en la coronación junto al hada madrina. — Habló resignada a que no podía acercarse como ella quería al castaño.
Pero Mal no puso tanta atención en el problema de su nueva... amiga podría decirse, sino en el gran detalle de la coronación.
— ¿Junto al hada madrina dices? — Crystal asintió inocente — ¿Con su varita...? — siguió asintiendo sin darse cuenta de las negras intenciones ocultas — Y... ¿Crees que mis amigos y yo podríamos estar igual al frente? Digo... para que se nos pegue la bondad.
Crystal sonrió por milésima vez feliz de que la villana tuviera iniciativa para ser mejor persona pero entonces recordó cómo estarían los lugares y ocultó sus blancas perlas.
— No lo creo... — Mal frunció el ceño — La única que puede estar hasta el frente es la familia y novia de Ben, — levantó los hombros — pero puedo hablar con el para que les consiga otro lugar. — habló rápidamente haciendo que Mal negara.
— Oh no será necesario, así está bien.
Y sin que la bondadosa chica se diera cuenta comenzó a formar un plan en su mente al igual que una sonrisa malvada en sus labios.
Tenía el plan perfecto.
Después de aquella clase la rubia no se quiso separar de Mal por lo que estuvieron juntas la mayoría de la jornada escolar donde Crystal aprovecho para hablarle de Auradon y por que no su "historia" con Ben.
( 👑 )
Evie en cambio estaba entrando al aula de matemáticas cuando una chica morena obstruyó su paso con una sonrisa.
— ¡Hola! ¿Eres la nueva verdad? — Evie sonrió nerviosa mientras asentía, no conocía las intenciones de la chica. — Mucho gusto, soy Tina, hija de Tiana y Naveen — Le extendió su mano y la pelinegra la tomó dudosa, pues había escuchado varías cosas de ella, no muy buenas por cierto. — Si quieres puedes sentarte conmigo.
— Lo lamentó — Bianca llegó de la nada interrumpiendo la conversación — pero Evie y yo habíamos quedado en sentarnos juntas. — Se dirige a la morena con una sonrisa falsa — ¿No es así? — le pregunta a Evie la cual solo asiente para darle una mirada de disculpa a Tina.
— Adiós y un gusto Tina. — Sonríe y se adelanta a tomar asiento en cambio Bianca y Tina se veían desafiantes.
— No te le acerques, primera y última advertencia. — Amenazo por último para después ir detrás de Evie.
— ¿Por qué la odias? — preguntó la villana en el momento en que Bianca se sentó junto a ella.
La descendiente de Blanca Nieves bufó al recordarlo.
— Es la ex-novia de Héctor — rodó los ojos, pero inmediatamente recordó lo bueno que había ocurrido con el pelirrojo cambiando su expresión completamente a una feliz — ¡oh! lo que tengo que contarte.
Evie la mira intrigada y Bianca comienza a contarle todo sobre Héctor. Desde que lo conoció en aquella fuente hasta la noche del sábado.
La ex-peliazul asentía ante cada detalle que la otra chica relatara, Bianca se veía feliz y emocionada por Héctor (el cual ubicaba por las alfombras amarillas de Auradon) pero solo pensaba en cómo darle la notica a Carlos de que el corazón de su princesa ya tenía dueño.
( 👑 )
Al terminar el día los descendientes de los villanos se reunieron en el dormitorio de las chicas pues Mal les había dicho que tenía un plan infallible para apoderarse de Auradon.
Cuando los chicos llegaron Mal estaba en llamada según esto con alguien que podría ayudarla a hacer una poción en tanto Evie miró con pena a su amigo peli-blanco y simplemente le susurró "tengo que hablar contigo".
Carlos se extraño pero no dijo nada, en cambio siguió a la pelinegra afuera de la habitación para tener mas privacidad.
— ¿Qué pasó? — pregunto inocente.
— Mira, no quiero que te sientas mal ni nada por el estilo pero-
— Ya suéltalo Evie — la interrumpió nervioso.
La nombrada suspiro.
— Bianca está enamorada de alguien más...
El chico sintió una fuerte punzada en el pecho, tuvo el sentimiento de que todo el mundo se le venía encima. Abrió la boca sin poder creerlo y con el corazón totalmente destrozado para después bajar la cabeza tristemente. Si creía que tendría una oportunidad esta se esfumaba poco a poco. Evie lo miró triste y solo pudo abrazarlo en consolación.
Voten y comenten ❤️
La amistad entre Jelsen y Mal y Crystal y Mal será muuuuuy importante en la historia.
La verdad publique ahorita porque no me quiero desvelar, pero técnicamente cuenta como la actualización de mañana.
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