Caminban con lentitud a sabiendas qué el alfa tras de ellos podría atacarles en cualquier momento, su plan primeramente era alejarse de la tienda de la señora no querían asustarla o algo peor, miro los movimientos de Chuya quien se detuvo dándole una mirada filosa al hombre, miraron como este se detuvo manteniendo una asquerosa sonrisa en su rostro sintió asco y repulsión más no retrocedió.

su mirada se enfocó en Chuya quien sin dudar ni un segundo se lanzo a pelear contra el haciéndole retroceder, estaba un lado mirando aquella pelea, de entre las sombras de aquel callejón desolado aparecían más sujetos que no conocian, todos alfas y de aspecto repugnante, uno de ellos se le acercó con la intención asquerosa de tocarlo, más, de un movimiento se alejo evitando cualquier tipo de contacto

— qué es lo que quieren – le escucho decir a Chuya quien se lanzaba a pelear con tres de ellos, por su lado hacia su parte no podía quedarse de brazos cruzados y mucho menos esperar a que su hermano le proteguiera de todo

Sus ataques eran destructivos incluso había hecho retroceder a aquel alfa idiota que intentó tocarlo, su hermano se mostraba tranquilo concentrado en su confrontamiento aunque notaba el nerviosismo y preocupacion por su persona. Aquel callejón comenzó a llenarse de mas Alfas quienes le rodearon de un momento a otro fue sujetado donde le dio una patada en su costado impulsando se del brazo del idiota que le tenía sujetado para dar un salto y patearle la cara

Usaba su habilidad y Chuya parecía llevar el control de la pelea, tenía a aquellos tipos contra las cuerdas o bueno ambos lo tenían cada uno haciendo su tarea por separado, ¿de donde venían tantos hombres? ¿Que es lo que querian? — vaya vaya, eres un mocoso realmente interesante – le escucho decir – jumm tal vez seas una buena mascota

Sintió asco y enojo ante aquel comentario, por ello solo tomo su daga dispuesto a acabar con ese sujeto, el filo de la daga alcanzó su garganta rozando levemente la piel haciéndole retroceder. La mirada fría en su contrincante no se hizo esperar, este le intento dar un golpe el cual esquivo de un salto para patearle, clavo su daga en su hombro escuchando al contrario quejarse — maldito mocoso – solo sonrió creando una brecha con su habilidad para alejarse de los demás.

Hasta ahora todos eran alfas y betas, eran más fuertes que el eso estaba claro, un le faltaba mejorar por mucho para alcanzar el nivel de Osamu y Osaru debía seguir entrenando, no solo su cuerpo si no que también su mente o eso decía Dazi. Este confrontamiento sin sentido hacia que comenzará a tener dolor de cabeza, chuya había acabado con la mitad y el apenas pudo Herir a tres, algo era algo ¿no? Lo importante es que reconocían su esfuerzo

Miro como otros diez hombres habían llegado, estos no eran alfas, eran Enigmas, miro a Chuya quien mostró su preocupación no entendía el por que, después de todo Osa era un Enigma ¿por que tan nervioso?. Sintió como uno de esos hombres le tomo del cuello, como reflejo clavo su daga en el costado de uno de esos tipos recibiendo así un golpe en en su estómago fue derribado sin siquiera darse cuenta — no puedo creer que sean tan débiles para que un niño Omega les esté dando tantos problemas – les escucho decir, miro a su hermano quien había matado a uno de los alfas estando dispuesto a acercarse a él sintió como era apuntado en su cabeza con un arma, esta si estába cargada – quieto, si no quieres que le volemos la cabeza..

— que es lo que quieren – pregunto sin bajar la guardia manteniendo su mirada fija en el, intento soltarse más el otro tipo pisaba su cabeza estaba completamente inmovilizado no podía soltarse– sueltenlo

— queremos tu completa colaboración – expreso el otro imbecil – si no quieres que lo matemos o mejor, juguemos un rato con el tendrás que hacer todo lo que nosotros digamos

El pelirrojo mayor apretó los dientes antes de responder, no podía dudar pero un movimiento en falso y le harían daño a su hermano menor, no se trataba de quien era más fuerte o débil, estos tipos tenían todo previsto les a estado vigilando conocian sus movimientos querían algo de ellos eso estaba más que claro — de acuerdo lo haré, pero suelten a mi hermano, dejen al niño fuera de esto

— Chuchu no! –intento soltarse de su agarre sintiendo como el sujeto le tomaba del cuello, esto aumentó más su enojo contenido así que solo le dio una patada en su costado clavando su daga en su mejilla fue que logró salirse de su agarre

— maldito mocoso

El tipo llevó su mano a su mejilla tomando su arma comenzando a dispararle frenaba las balas con su habilidad regresando estas de una patada llena de poder destructivo el hiriendo a aquellos tipos matando a algunos otros para acercarse al pelirrojo mayor quien le abrazo acariciando su cabello en un intento de darle calma y hacerle sentir protegido ¿por que Osamu y los demás tardaban demasiado?

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Osamu caminaba por los pasillos del edificio no había visto a su hermano menor, tampoco había visto a su amado y menos al pequeño pelirrojo, se preguntaba por ellos pensaba que podrian salir todos a comer algo y disfrutar de la hermosa tarde. Gracias a toda esta semana agetreada no a tenido tiempo para estar con ambos niños con su amado pasaba la mayoría del tiempo.

Le había preguntado a Chuury por el paradero de Chuya este solo supo decirle que fue a buscar Chyusei eso fue todo, salió un rato al jardín para tomar algo de aire no se espero toparse con Arthur y Koyo quienes estában teniendo una charla animada — madre, hola – saludo a la mujer pelirroja quien hizo una expresión de desagrado fingido, todos sabían que ella lo quería a él y a su hermano como una madre les cuido y aunque no lo dijera sentía felicidad cuando le llamaba de esa manera

— hola querido – respondió esta dándose por vencido

— Arthur-san, ¿as visto a Chuya y Chyu? – el nombrado simplemente conecto su mirada con la de la mujer, quien también se veía en conflicto por la pregunta repentina

— no, se supone que haríamos unas cosas – respondió de lo más tranquilo – y al pequeño Chyu, no lo e visto creo que desde que salió conmigo hace una semana, e estado ocupado no e tenido tiempo para estar con el ¿sucedió algo?

— ah, no solo les estoy buscando pensé en que podríamos salir un rato, los niños no an hecho más que estar encerrados cada uno estudiando y entrenando por su cuenta, necesitan un poco de distracción..

Ambos asintieron con la cabeza, para que negar su pequeña molestia creciente, sentía la aflicción de su pareja no sabía a que se debía, eso aumentaba su pequeña ansiedad. Justo cuando ingresaría al edificio nuevamente escucho el pequeño aullido del lobo del pelirrojo menor, apartó su mirada en esa bola peluda qué se acercaba no llevaba su correa tampoco venía en compañía de nadie ¿habría salido solo?. Suspiro agachandose para acariciarlo — hey, que haces aquí.. – Murmuró levemente tomando suavemente de la carita al cachorro quien juguteaba con su mano, fue cuando se dio cuenta lo que el cachorro le dio – este es el collar de Chuya – tanto Arthur como Koyo se acercaron a él, aquella nota en el collar llamaba su atención decidió tomarla para leer su contenido

"Osa, necesitamos refuerzos no sabemos cuantos son ni quienes son, también creemos que hay una infiltración en port Mafia, fuimos a comprar unas galletas y las comunicaciones no funcionan el alfa qué nos está acompañando esta extraño copito les mostrará el camino.. No tardes.. "

Una letra inconfundible, miro a Arthur y a la mujer quienes también habían escuchado lo que decía en la carta no sabían ni cuanto tiempo había pasado ¿habían traidores entre ellos? ¿Desde cuando?, tal vez aun quedaban aquellas personas al servicio de Mori, eso no era importante por el momento debían encontrar a Chuya y Chyusei a como de lugar — ¿qué hacemos Osamu? – pregunto la pelirosa mostrando su creciente preocupación

— debemos movernos con prisa, no sabemos si ellos están bien, Chuya esta embarazado y en estos momentos está pasando por cambios haciéndole sentir vulnerable, si hay traidores en nuestras filas debieron saber esta información

— traeré a algunos hombres – expresó Arthur para ingresar al edificio nuevamente

El por su lado se agachó para acariciar suavemente la cabeza del cachorro — buen chico – expreso recibiendo un ladrido como respuesta – no se que clase de entrenamiento tienes pero espero que Chyusei siga haciendo lo que esta haciendo contigo, ya tenemos un buen recluta peludo... Tal vez si fue buena idea el traerte

El lobo ladro en respuesta y el sigio acariciando su cabeza, escucho la voz de Arthur quien venia junto a otros hombres, se levantó dándoles una mirada seria a todos comenzó a dar órdenes escuchando su respuesta afirmativa, la mayoría iban armados no sabían con quienes estaban tratando o que es lo que querían ¿querían una guerra entre organizaciones? — copito, llevanos con Chuya y Chyusei – ordeno al cachorro quien simplemente ladro empezando a correr alejándose de ellos el subió al auto con Arthur y Koyo seguían al cachorro quien les guiaba esperando a que ambos recistan hasta que lleguen.

rogaba por que ambos estén bien, Chyusei se estaba volviendo fuerte más era un niño era obvio que se cansaría más rápido, Chuya con su embarazo estaba en una situación vulnerable maldita sea, ¿por que ellos no le pidieron que le acompañarán?... No era momento de echar culpables debían encontrar a ambos y asegurarse de que estén bien