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Eve está sentada disfrutando del espectáculo de patinadores, incluso ríe anonada viendo al grupo como un éxito definitivo. Está segura de que este grupo será quién llene su coliseo entero, no habrá ni una silla vacía, según ella.

Para cuando mira atrás pega un pequeño brinco, -¡Oh, Mew! - y se levanta de la silla. -Ya estás aquí. Así que esté es el pequeño elenco que ahora tienes.

—Un puñado de actores, sí, pero un enorme talento. — Promete al sonreír. —Te presento a Gulf, Kapook, Mike, Book y Mob. Todos están dentro del aspectro autista, así que pido por favor su cooperación.

—Después de que sepan actuar no me importa lo que tengan, sean, luzcan, el arte no tiene cara ni color. — Eve vuelve a sentarse mientras las bocinas se apagan y ahora el chico rubio en patines se les acerca junto a su gran grupo de patinadores, todos en zapatillas.

—Oí que compiten con nosotros. — Gun brinca un hombro escaneando al puñado de actores. Los ve como perdedores. —Mi nombre es Gun, les deseo suerte, al igual que Eve estoy ansioso por ver qué presentarán.

Huh, mi nombre es Mew y no recuerdo haber pedido tu opinión. — Se toman de manos, pero Mew tensa la sonrisa. —Ustedes solo miren y ya.

El chico de baja estatura brinca las cejas todo presumido y toma asiento junto los demás. Todos acaparan una gran suma de sillas mientras que Mew finge no recibir escalofríos mientras sigue de largo con todos sus chicos.

Llegan tras bambalinas y Mew voltea hacia todos. —Muy bien chicos, no tengan miedo. Esa gente no son nada, seguramente intentarán intimidarlos, pero ustedes pueden. Confío en que sí.

—Pero... Si no quieren darnos la oportunidad, ¿por qué no mejor conseguimos nuestro propio coliseo? Así tus obras no dependerán de nadie, Mew. — Gulf sugiere nervioso y cabizbajo.

Mew se le queda viendo. Le parece bonito que el chico esté pensando en él, pero no pierde la concentración y mejor dice: —No te preocupes, Gulf, eso lo haremos si fallamos aquí. Por ahora den lo mejor de sí, chicos.

Baifern aplaude bajito tras todos sus estudiantes mientras estos asienten nerviosos. «¡Vayan! » Asegura Mew colocándose tras todos ellos y dándole una nalgada al último que viene siendo Mike, pero este le da una mirada asesina a la vez que traumada mientras va saliendo. Mew se arrepiente de sus decisiones y se rasga la sien izquierda.

—Vale, perdón, sí. — Expresa nervioso.

Para cuando los chicos salen al escenario comienzan la misma mini-función del hospital.

—¿Crees que le guste? — Mew se muerde las uñas mientras observa frenético.

—Yo pienso que sí, hermano, ten fé. — Opina Baifern asomando la cabeza para observar al grupo de patinadores. El líder de ese grupo carga una sonrisa maquiavélica. Seguro trama algo, ¿pero qué? La chica no puede evitar entrecerrar los ojos.

Gun pregunta si alguno de sus compañeros tienen botellas de agua luego pide que le pasen una. Al pasársela, pide que beban todos al unísono y crujan la botella.

— “...Soy una chica que puede ver los fantasmas del pasado, presente y--” Justo cuando Kapook va hablando ellos crujen sus botellas de agua. Las tuercen a propósito. Muchos se cabizbajan para ocultar las viles sonrisas que cargan. Todos en el escenario pierden concentración y los chicos intentan pegar sus oídos a sus hombros con tal de no oír lo que lastima sus tímpanos.

—¿Qué está ocurriendo? ¿Qué mierdas ocurre? — Mew se asoma enfurecido. Puede ver la maldad de los patinadores y cómo incluso Eve intenta detenerlos, pero mucho esmero no pone porque le ríe las gracias. Mew va a ir a las sillas cuando Kapook sigue con la obra al igual los chicos. Todos se recomponen pese los ruidos.

Los patinadores bajan las botellas asombrados y Eve baja la mano que aleteaba los vientos para detenerlos. Asombrados por la batalla de estos extraordinarios chicos, prestán atención. Baifern sonríe más que orgullosa y Mew está completamente asombrado. Va sonriendo de poco a poco, sus ojos se llenan de agua sin poder evitarlo al igual su hermana.

Es hermoso. Se niegan a rendirse y están decididos a darlo todo. Porque como bien dicen en su obra, la sociedad querrá derribarlos por ser cómo son, pero lo importante es nunca rendirse.

•••

Tras finalizar la mini-función Eve los recibe fuera del escenario. —Son excelentes, me encantaron. — halaga. Todos ellos comparten una pequeña mirada entre sí, emocionados y sonríen tiernos. Algunos hasta se encogen de hombros. —Esa misma tenacidad quiero en el escenario. Son aceptad--

Mientras dicta la aceptación, un trío de policías entran por las puertas iluminando el lugar con sus linternas. Las apagan al ver que no está oscuro. —Srta. Eve Yorn, está arrestada por fraude de impuestos, tiene derecho a un abogado, pero por ahora deberá acompañarnos para hacerle unas preguntas.

—¡Ah! ¿Qué pasará con el coliseo?— Ríe nerviosa la mujer.

—Si usted no paga, ya no será de usted.

—¡Espere, oficial!

La policía rubia se detiene a distancia, agarrando a la fraude de un brazo mientras que mira atrás al chico junto su grupo. —¿Puedo rentar este sitio?

—Sí. Si lo habla con el dueño. — La policía humildemente ofrece sus servicios. Eve aprovecha la distracción para darle un codazo en el estómago y correr entre los asientos. Los otros dos policías corren tras ella. En el fondo se le puede ver agarrar un par de patines y amenazar a los guardias con estos.

—Habla con él. Sería un desperdicio que este lugar fuese a la quiebra. Solía venir aquí cuando niña, cuando el dueño daba sus propias obras de teatro, — Mira alrededor nostálgica. Algo sonriente. —¿ustedes son nuevos?

—En ascenso, pero sí. — Mew confirma.

—Vaya. Mucho ánimo. Si me entero de ustedes, vendré a verlos.

—Sería todo un honor para nosotros. — Menciona Mew siempre atento a los posibles clientes. La mujer policía se va.

—¡Chicos! ¿Oyeron eso? Deberé hablar con el dueño, ¡pero este lugar podría ser nuestro! Estuvieron increíbles ahí arriba.

—No queríamos defraudarte, Mew. — Gulf dice.

—Chicos... — Mew reduce la sonrisa. —¿van en serio? ¿Por mí?

—¡Usted está a cargo de nosotros! ¡Lo cuidaremos! — Kapook alza un puñito entonces todos los demás también lo hacen gritando «¡Sí! » como guerreros. Baifern mira a su hermano con ternura. Este no puede ni creer que ya le tengan tanto aprecio tras ser, bueno, un garañón.
Los patinadores se largan tras los policías llevarse consigo a Eve. Todos malhumorados.




Gulf y Mew quedan solos de camino a casa. El dramaturgo lo lleva en auto a su casa porque Baifern tenía que llevar a los demás. —Mew, ¿alguien te espera en casa? — Pregunta el chico mirando fuera de la ventana.

—¿A qué viene esa pregunta?

—Bueno es que, caminas con muletas. ¿Estarás bien al llegar a casa? ¿Cómo sabré si lo estás? — Reacomoda el trasero en el asiento como muestra de su ansiedad, pero Mew solo sonríe labial.

—No te preocupes por mí, Gulf, yo estaré bien. Bajaré bien, llegaré a la puerta y quizás un ladrón me asalte, pero...

Lo último lo dijo adrede y el chico contrario deja salir un jadeo traumado mientras lo mira. Mew ríe. —No, no, no me creas, Gulf. Lo dije a ver qué hacías. Estaré muy bien.

—Es aquí.

Mew reduce la velocidad para estacionar frente una pequeña casita. Pone el auto en estacionar y lo apaga por el momento.

—Tienes una casa bonita, Gulf.

—Eso es porque está bendecida por Dios. Así dicen mis abuelos. Ellos son tan bonitos como esta casa, pero no duraderos. Estaré jodido cuando mueran. Al menos puedo cuidar de mí. — Se quita el cinturón y mira a Mew. Este se le queda viendo atento.

—¿Me promete por la garrita que estará bien? — Alza su meñique.

—Sí, te prometo que estaré bien. — Mew entrelaza su meñique con el del chico. Este sonríe mirando a otro lado. —Incluso te llamaré.

—¡Es una promesa entonces! Esperaré su llamada.

—Si no llamo, es porque me dormí.

—¡De acuerdo!

El chico baja del auto para caminar a su casita. Mew lo observa en todo este rato, considerándolo algo interesante. Muy interesante.


•••

Al ir a su casa no puede ni estacionar frente a esta. La estaciona en el medio de la carretera para bajarse entre cojeos y sostenerse a la puerta. Su casa está en llamas. Literalmente, llamas. Alguien le ha prendido fuego.

Su corazón quebranta.

¿Qué más quiere esta vida? Recién cuando entra una oportunidad, aparece otro obstáculo. Lo importante es no rendirse, ¿cierto?











*N/A: ¿QUIÉN CREEN QUE LE QUEMÓ LA CASA? 😭💖, espero les guste el libro y perdonen por haberlo descontinuado, es que hace mucho no me venía el mood de comedia/drama/cosas de la vida, pero poco a poco va volviendo. ¿Qué les parece el interés de Gulfito? He is so cute. La nalgada a Mike me mató 🤣💖*

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