8 🚫
╔═════════════════╗
Un instante eterno.
Parte 2.
╚═════════════════╝
El fresco aire del bosque le caló los huesos despertandola y dandose cuenta que ha dormido en su cama, recordando que ella estaba en el sofá con Garou. Se levantó preocupada y corrió por toda la casa buscándolo sin éxito alguno, quedándose mirando el ventanal abierto de la sala de estar… Él se había ido.
Y aunque lo sabía, sabía que él no se quedaría. Le dolió.
ㅡGarou…
ㅡ¿Qué? ㅡliteralmente la hizo dar un salto de gato por el susto que le ha dado. Giro a verlo y este le miraba extrañado, con una de sus cejas puntiagudas alzada en duda y con una coca cola en la mano.
ㅡPensé que, pensé… ㅡ tartamudeo y decidió quedarse callada, sonrió y sólo negó. Sin embargo Garou sabía que intentaba decir, la vio correr desde la cocina como loca sin siquiera haber revisado en donde estaba, le observó solo ver el ventanal abierto sacando conclusiones y, le sorprendió la mirada que dio al creer que él se había marchadoㅡ. ¿Harás algo hoy?
Garou mantuvo su rostro en duda.
ㅡNo.
ㅡEntonces salgamos a pasear ㅡsonrió aún manteniendo inerte al albino.
ㅡ¿Pasear? ¿En serio? ㅡ preguntó a lo que ella solo alzo los hombros desinteresada esperando su respuestaㅡ. Bien.
ㅡIre a traerte ropa ㅡde nueva cuenta dejaba a Garou escéptico ¿Ropa? ¿Pará él? ¿Qué no era suficiente con la que le había prestado? ¿Qué diablos pasa con ella? Y bebió de su refresco.
Intentó no mirarla, se sentía incomodo usando esa ropa y más aun que ella caminara a su lado con tranquilidad como si no fuera un loco cazador de héroes. Al menos por ahora podía caminar por las calles sin ser reconocido -aún- por lo que intentó "disfrutar" del día comparando algunas cosas con ella: como comida y ver como (Nombre) era bastante buena para convencerle a que pelee con aquel hombre, que estaba ofreciendo cinco mil yenes si le ganaban a una pelea de box; sin dudar había ganado y ahora sus mejillas estaban manchadas de rosa por los elogios que (Nombre) le estaba dando mientras volvían a su camino y, aún insistía en que ella se quedara el dinero.
ㅡPodrás necesitarlo en algún momento.
ㅡLo dudo ㅡrespondio cómo si nada, tomo las manos de (Nombre) y le deposito el dinero en ellas aun sujetandolas con fuerza para que tomará el dinero ㅡ. Es por toda la ayuda que me haz dado señora…
La hizo hacer mala cara.
ㅡ¡Qué no me llames señora! ㅡle gritoㅡ. ¡Tengo veinte! ¡Veinte!
Y lo hizo reír.
ㅡBien, bien ㅡ añadio el albinoㅡ. Pero, si no aceptas el jodido dinero te seguiré llamando así.
ㅡ¡Infame! ㅡGarou rio y, eso hizo sonreir a (Nombre) aceptando la ayuda financiera -de nuevo- del pequeño cazador de demoniosㅡ. ¡Voy a tomarlo, pero me ofende muchísimo! Además, eres dos años menor que yo, tienes ¿Qué? ¿18?
ㅡCon más razón te llamaré señora ㅡGarou siguió molestándola…
ㅡ¡No!
La lluvia provocó que los siguientes días los mantuviera en casa, mirando televisión o cualquier otra cosa como él por ejemplo: se estaba volviendo "normal" el mirarla, ya sea cultivar y cuidar sus plantas, ser meticulosa referente al dinero o que la vea quedarse hecha un ovillo mientras ve infomerciales de productos raros con publicidad aun más rara.
Parecía un niña pequeña.
ㅡ¿Qué tal? ㅡpreguntó después de quitarle las vendas y el cabestrillo después de días de curación.
ㅡNormal ㅡrespondió ella moviendo el brazo ㅡ. Supongo.
Él rio.
ㅡ¿Supones? ㅡ ella asintió y luego alzo los hombros no sabiendo bien que responderㅡ. De acuerdo.
Ninguno dijo nada de nuevo, tan solo él se levantó del tatami y se quedó de pie frente a la puerta corrediza mirando la lluvia. Sabiendo que ya había tardado en irse y eso no le gustaba.
Se estaba acostumbrando.
ㅡMe gusta la lluvia ㅡsusurro (Nombre) a su ladoㅡ. ¿A ti que te gusta?
La miró de reojo: aun seguía con la mirada hacia el bosque, solo que ese gesto en su rostro lo había notado antes. Estaba ¿Melancólica? ¿Triste? Ah, ni siquiera quería darse una idea, ya no quería seguir pensando en nada. Estaba cansado de ilusionarla. Por lo que volvió su vista hacia enfrenté.
ㅡNo se ㅡañadio seco.
De nuevo en silencio.
Ella noto su cambio de actitud, como es que movía su dedo con su brazo cruzado o el como intentaba no volverla a mirar.
¿Qué podía hacer para que se quedará?
¿Por qué quería que lo hiciera de todas formas?
¿Le aterra estar sola?
¿Le quiere?
Lo pensó tanto que llegó a una conclusión tan tarde que él ya no estaba junto a ella. Le busco con la mirada y le encontró a punto de sentarse en el sofá por lo que literalmente corrió hasta quedar frente a él, obteniendo una mirada de duda y después una de sorpresa cuando ella tomó una de sus manos.
ㅡ¿Qué hacés? ㅡle preguntó.
Y ella estaba lista para decirlo pero él lo entendió rápidamente antes de sí quiera dejarla decir algo él se alejo.
ㅡEs suficiente ㅡagrego deteniendolaㅡ. He perdido tiempo, debo irme.
ㅡ¡Pero
ㅡ¡No puedo quedarme! ¡Te lo he dicho! ㅡde nuevo el silencio, una mirada desilusionada y posiblemente un corazón rotoㅡ. No seguiré fingiendo que me gusta estar aquí.
Ni siquiera espero algo de ella, no quería si quiera que dijera algo por que le iba a hacer débil y no quería eso. Su único propósito era convertirse en un mounstro y él no tenía tiempo para cosas tontas como esta, no lo quiere.
No lo quiere.
No la merece.
Así que solo se marchó.
«Los mounstros no tienen finales felices»
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top