Oh Joon-woo estaba en su apartamento, jugando mientras parecía que el dia era muy normal, su familia había salido y tenia todo el día para estar jugando.

Pero no todo estaba tranquilo, escucho unos golpes apresurados en su puerta, era su vecino que con desesperación esperaba que le abriera.

Joon-woo con pereza abrió la puerta, para ver que necesitaba su vecino.

El sin decir una sola palabra, cerro la puerta de golpe, parecía que había más gente fuera del apartamento.

—¿Quien diablos te dejo entrar? Sal de mi casa—
Joon-woo intento sacar a la fuerza a su vecino

—Tienes que dejarme quedar aquí—
Le suplico su vecino a Joon-woo

Por su parte el chico, no acepto quería que el tipo se fuera no confiaba en el.

—No largo—
Joon-woo estaba apunto de abrir la puerta para que se fuera

—Antes de que me valla ¿Puede prestarme tu baño?—
Su vecino pregunto

Joon-woo rodo lo ojos.

—Esta bien pero que sea rápido—

Su vecino le agradeció, y fue a dirección al baño, mientras que Joon-woo encendió la televisión, para su sorpresa las noticias, informaban de un ataque caníbal a muchas personas.

Se podía ver a gente correr, otros eran caníbales que corrían a gran velocidad por y devoraban a la gente, esto fue demasiado para Joon-woo, estaba apunto de apagar el televisor pero se dio cuenta de algo.

—Mamá—
Vio a una mujer parecida a su madre convertida en una de esas cosas

—Papá—
Estaba en shok por ver a su padre en ese mismo estado

—Ha-Neul—
Derramo unas lágrimas cuando vio que su hermanita también era una de esas cosas

Mientras aun no podía creer lo que sucedió con su familia, Joon-woo empezó a escuchar ruidos raros en su apartamento, eran de su vecino.

Lo habían moridio, el chico estaba en shok por el repentino cambio de su vecino, pero aun así le dio tiempo a empujarlo lejos, abrir su puerta y sacarlo sin antes apuñalarlo, para que se fuera del departamento.

Cerro la puerta sin más, estaba totalmente destrozado, ahora su familia estaba muerta, su padre, su madre y su hermana.

¿Había una razón para vivir ahora? A Joon-woo ya no le quedaba razones para seguir viviendo