"Entrega tu alma al juego o serás devorado. ¿Suena aterrador, verdad? ¿No?"

Kojiro Hayashi es uno de los niños pertenecientes a la segunda generación de mis oc's. Su especialidad son las apuestas.

Apariencia física:

Kojiro heredó muchos de los rasgos de sus padres, sin tener alguna diferencia propia. Sus cabellos eran del mismo tono marrón de su padre, el cual gracias al descuido con el tiempo terminó oscureciéndose. Sus ojos son de un gris oscuro, casi sin reflejar brillo. Es medianamente alto, alcanzando los 1,70 a sus 15 años.  Tiene un mechón rojo teñido al lado derecho de su cabeza, además de múltiples piercings.

No tiene un gusto particular por ropa, simplemente usando lo que le compran sus padres. Prefiere la ropa holgada, así que acepta seguir con la "tradición" de los suéteres amarillos.

Usa el uniforme escolar casi correctamente, con el único cambio de llevar su suéter en vez del escolar.

Personalidad:

Suele ser descrito como una persona desagradable. La mayor parte del tiempo está malhumorado e irritado, lo cual provoca una actitud grosera hacia aquellos que lo molestan, y al parecer a Kojiro le molesta todo el mundo. No tiene escrúpulos en cuanto a insultar a otros se refiere, siendo lo suficientemente hiriente para que dejen de acercársele. 

Luego de un accidente en su niñez se volvió excesivamente paranoico. Su personalidad burlesca y rebelde se agravo muchísimo, al punto de "convertirlo en alguien diferente". Sus malos tratos hacia todo el mundo es su forma de protegerse, evitando que alguien lo lastime. 

A menudo se siente solitario y deprimido.

Historia.

Kaori Nakao y Ryu Hayashi tuvieron una excelente vida después de graduarse de sus estudios, por lo cual a Kojiro siempre tuvo lo que quiso. Hijo mayor de una familia adinerada, era frecuentemente mimado por sus padres, creciendo como un niño feliz en su mayoría. 

Luego de el nacimiento de su hermana dejó de tener toda la atención de sus padres, lo provoco que su personalidad se dirigiera hacia actitudes infantiles con el tal de llamar la atención. Solía causar pequeños revuelos, hacer berrinches y comportarse egoístamente. Se mantuvo así la mayor parte de su niñez, tomándolo más que como la personalidad que le gustaba tener a que una actitud por envidia a su hermana.

Como niño rico mimado y burlón, disfrutaba "jugar" con chicos de su edad, aprovechándose de ellos para hacerles pequeñas bromas. Fue reprendido muchas veces por su comportamiento, pero Kojiro nunca escucho ya que no lastimaba a nadie, ganándose la reputación de rebelde. A pesar de que tenia buen rendimiento escolar, no era realmente un chico que destacaba, además que estuvo varias veces castigado por sus bromas. 

En general estaba satisfecho con su vida.

A sus 13 años, volviendo de la escuela, fue victima de un intento de secuestro. Aunque pudo liberarse y huir, culpa del miedo y el shock termino corriendo hasta perderse, haciendo que llegara casi a la madrugada a su casa. Kojiro nunca hablo de lo que paso ese día con sus padres.

Producto de esto, desarrollo un miedo anormal hacia los desconocidos, refugiándose en una coraza de "chico duro". Comienza a asistir irregularmente a la escuela, dejo en gran medida de comunicarse con sus personas cercanas y se volvió la persona desagradable de hoy en día.

Algunos días tan solo quiere volver a su infancia para reírse de estupideces, y al volver a casa comer todo un paquete de dulces y molestar a su hermana menor.

Especialidad:

"Cuando se sentaba en la mesa podías sentir que dejaba de ser él mismo."

Kojiro es el rey de los juegos de cartas. Coronado por su carisma y su habilidad para mentir, nunca ha perdido un juego limpiamente. 

A modo de intentar calmar las bromas de su hijo, Ryu le enseño a apostar con la finalidad de que este engañase a las personas de una manera más limpia. Esto funcionó, ya que Kojiro dejo de hacer tantas jugarretas y le dedico más tiempo a perfeccionar su habilidad. Gracias a su esfuerzo duro, inició una racha arrasadora y extensa. 

Le gustaba el ver como caían las mascaras de tus oponentes, el como sus mentiras se destruían y rendidos entregaban su dinero. Naciendo con facilidades, nunca comprendió del todo la razón por la que las personas se aferraban tanto al dinero.

Luego del trauma, el único momento en el que se sentía confiado era durante los juegos. Ahí todos estaban al mismo nivel, y solo ganaba el que mintiera mejor, algo en lo que Kojiro era perfecto.

Curiosidades y datos:

— En algún punto considero la idea de pedirle ayuda a Masato sobre el accidente, pero le dio miedo el involucrarlo.

— No se lleva mal con su familia, pero prefiere evitarlos.

— Es notablemente menos inteligente que su hermana, pero lo compensa con sus mentiras.

— Su peor miedo es morir asesinado por chocolate.

— Probablemente se llevaría bien con Suisei, ambos teniendo un miedo hacia los desconocidos, pero es demasiado desconfiado como acercársele. 

— No aceptaría comida ajena, pero la de Daiki lo tienta muchisimo.

— Suele leer mucho para distraerse.

— Irónicamente, pasa mucho tiempo fuera de casa, en vez de encerrarse. Esto es porque cree que así despistaría a cualquiera que intentase seguirlo.

— Tengo el headcanon que haría apuestas con Hibiki, en las que Ame recaudaría mucho dinero en las predicciones de quien gana.

— Kazuki le da mucho miedo, mucho más que el generado por su trauma.

— Yohei le regalo un gas pimienta intentando entablar amistad con él. A pesar de que no lo logró, esto lo volvió inmune a los malos tratos de Kojiro.

— Es posible que Kojiro tenga a Yohei en estima.