El tremendo revuelo que se había formado en la entrada de la oficina del señor Min atrajo la atención de todos ahí.

Daehyun estaba hecha una fiera.

-¡Sueltame gata igualada! -Espetó empujando a Hyuna quien veía suplicante al señor Min.

-Lo siento señor Min no la pude detener insiste en verlo.

El señor Min asintió e hizo una seña a la asistente para que se retirara.

La mujer recorrió a todos con la mirada hasta que se posó sobre Yoongi. Rápidamente se acercó a él con cara de pocos amigos.

-¿Qué crees que haces Yoongi? ¿Por qué todo ese show que hablan en los noticieros? Todo el mundo cree que te has fugado con un amante. -Soltó de manera sarcástica, como si estuviese segura de que Yoongi no podría hacer eso jamás. -¿Qué es toda esa invención?

Sus ojos miraban a Yoongi esperando una respuesta pero el suave murmullo a su lado de Taehyung abrazando a su pelirrojo hijo la hizo enfocar su vista en él.

-¿Jimin tú que haces aquí?

-Hola Daehyun. -Saludó el como si nada.

-¿Me pueden explicar que está pasando? Yoongi me has dejado plantanda en el altar, dijeron que estabas secuestrado, que te has fugado ¿Qué tontería fue esa?

-No es una tontería, en realidad si se fugó con otro. Con Jimin de hecho y se casaron.

-¡Jungkook! -Reprendió el señor Min mirando a su sobrino de manera severa.

El pelinegro menor solamente se encogió de hombros, de todos modos nunca le había caído bien Daehyun.

-¿Pero qué estupideces dices niño? -Soltó mirando a Jungkook.

Yoongi se interpuso entre ella y su primo.

-Daehyun vamos a mi oficina a hablar por favor. -Pidió Yoongi tomándola del brazo para hacerla salir de su oficina.

-¿Es cierto Yoongi? -Preguntó soltándose de él y mirando a Jimin a su lado.

El pelinegro solto un largo suspiro, era mejor explotar la bomba de una vez a esperar más tiempo de todos modos de nada servían las excusas.

-Si, o al menos algo así..-Respondió.

La mujer miró a su hijo y éste le mostró sonriente su reluciente argolla de matrimonio y señaló la de Yoongi.

Daehyun tomó de las manos a Jimin apretando duro para mirar más de cerca el anillo y entonces su rostro se deformó al entender la situación.

-¿Cómo pudiste ser capaz Jimin? -Preguntó zarandeado a su hijo.

El zorrito se logro soltar de las manos de su madre y se escondió detrás de Yoongi.

-¿Cómo me hacen algo como ésto Yoongi? -Volvió a preguntar. -Que humillación, por Dios no lo puedo creer. -Soltó casi sacando espuma por la boca.

Todos los presentes solo eran espectadores de la situación del trio que ahora era el centro de atención.

-Solo pasó. -Respondió Jimin con simplicidad encogiendo sus hombros restando importancia.

Eso al parecer hizo enfadar más a Daehyun quien de pronto quiso golpear a Jimin pero esta vez Yoongi no lo permitió, solo la alejó más de él.

-Eres un estúpido Jimin, ¿Cómo no se me ocurrió que podías estar detrás de Yoongi? Claro... como no me lo imaginé ¿Qué hizo para envolverte Yoongi? ¿Te dio lastima? ¿Se metió en tu cama como la zorrita que es?

-Daehyun no te permito que hables así de tu hijo. -Espetó Yoongi molesto.

-Corrección, Jimin no es mi hijo podrá haber nacido de mi pero no se parece en nada a mi. Yoongi pudiste decirme antes que no querías casarte, me han humillado, lo van a pagar caro. -Amenazó señalando a la pareja. -Jimin, vas a pagar lo que haz hecho ya veras, y te dolerá, Vendrás a pedirme perdón.

Dió una última mirada a todos ahí antes de salir pero al parecer tenía aún más que decir porque volvió a girarse para ponerse frente a Yoongi.

-Yoongi, has incumplido el contrato prenupcial que hemos firmado. -Repuso con una sonrisa en sus labios.

Yoongi apretó sus labios, había olvidado por completo el contrato prenupcial que Daehyun había insistido en firmar para "beneficio y protección de ambos". Con la pequeña cláusula de sanción por incumplimiento claro está.

-¿De qué contrato habla Yoongi? -Preguntó ésta vez el señor Min quien sólo había tratado de estar al margen de todo.

-Uno donde hay una cláusula en particular sobre "Daños provocados antes o durante el matrimonio"

-Exijo hacer valer la rescisión del contrato. -Bramó ahora Yoongi de manera deliberada.

Yoongi sabía que una de las consecuencias del incumplimiento de dicho contrato que habían firmado era el pago de una indemnización millonaria por los daños sufridos por la otra parte. Sabía perfectamente lo que Daehyung le estaba exigiendo.

-¿Y cual es la cláusula esa? -Quiso saber esta vez Hobi que no había abierto la boca más que para defender a Yoongi hace un rato.

Suno a su lado se aferraba fuertemente de su brazo. Parecía estar muy asustado con la situación de su amigo Jimin.

-Si una de las dos partes incumple por infidelidad o por agravio antes y durante el matrimonio, todas las propiedades pasarán a ser del afectado. Es simple todo lo que Yoongi posee ahora es mio, tu casa, tus autos, tus empresas y negocios. Todo. -Soltó triunfante.

A pesar de no haberse podido casar con Yoongi lo cual era una verdadera lástima porque de verdad le gustaba, había podido acceder a sus millones y todo de una manera tan fácil.

-¿Qué? ¡Espera Daehyun no puedes hacer eso! -Está vez Jimin fue quien se metió entre Yoongi y Daehyun para exigirle a su madre que parara. -No le puedes quitar sus cosas a Yoongi. Él no incumplió en anda yo fui...

-Tú Cállate y claro que puedo y lo haré desde el momento que él firmó para casarse contigo me cedió toda su fortuna, así que ve a disfrutar tu luna de miel en la pobreza hijito mío. -Sonrió con maldad asesinando a su hijo con odio encendido en sus ojos.

El señor Min fulminó a Yoongi con sus ojos ambarinos como los suyos. Con aquella mirada simple le estaba diciendo un "Te lo advertí" que Yoongi entendió a la perfección.

-Te espero con mi abogado el lunes Yoongi para pasar a mi nombre todas tus propiedades a menos que, reconsideres tu estúpida idea de estar casado con Jimin, te divorcies y vuelvas conmigo.

La mujer miró duramente a Jimin antes de salir de ahí dejando en el lugar un aura pesado de malestar y molestia.

Ahora si Jimin se sentía todo un tonto. ¿Cómo no se había imaginado que algo así podía pasar? Por su culpa ahora Yoongi no tenía nada, no tenía casa, su adorado Penthouse, sus carros de colección que tanto quería y lo más importante, sus empresas y sus negocios.

Miró con los ojos cristalizados a Yoongi, se sentía tan mal que ni si quiera sabía que hacer o decir. Había ayudado a su madre a dejar a Yoongi en la calle.

No pudo decir nada y lo único que hizo fue salir corriendo de ahí hacia el pasillo para llegar al elevador y entró apretando todos los botones sin saber exactamente lo que estaba haciendo. Estaba furioso consigo mismo.

Cuando llegó abajo supo que ni si quiera sabía como irse de ahí porque no tenía su auto con él ni dinero para el taxi porque su bolso lo dejó arriba en la oficina por salir corriendo.

Sentía que iba a llorar en cualquier momento, comenzó a caminar por la acera, había metido la pata hasta el fondo pobre Yoongi. La mirada dura que le dio el señor Min no se la podía sacar de la cabeza.

Era un total idiota.

Cruzó la calle cabizbajo sin saber que hacer o a donde ir y vio una banca donde se sentó para poder llorar tranquilamente.

Lo había estropeado todo.

Soltó sus primeras lágrimas cuando vio a una pareja de enamorados pasar fente a él muy alegres tomados de la mano, la chica iba feliz y el chico sonreía al verla.

Que tonto había sido al tratar de imponer un sentimiento donde no lo había, era tan claro que Yoongi no sentía nada por él. ¿En qué estaba pensando al obligarlo a casarse con él?

-Fuiste tan tonto Jimin. Sigo decepcionado y enfadado contigo.

Al parecer alguien podía leer sus pensamientos.

El pelirrojo se sobresaltó cuando la voz de Yoongi llegó hasta sus oídos. No lo había visto llevar porque tenía sus manos tapando su rostro.

Se sentía tan avergonzado que ni quiso verlo a los ojos. Había arruinado la vida de Yoongi, su boda, todo. Tenía razón de estar enojado con él.

-Lo siento tanto Yoongi no sabía que podía ocasionar todo esto. -Se disculpó aún escondiendo su rostro entre sus manos.

-No actuaste de la mejor manera Jimin, pero no todo es tu culpa si yo te pedí que te cases conmigo y firmé una hoja aunque no lo recuerde también es culpa mía.

-Lo hiciste porque estabas bajo la influencia de lo que te di Yoongi, así que tampoco vale, si quieres que nos divorciemos ahora adelante, podrás recuperar tus cosas y casarte con Daehyun, es lo que tanto querías tú. -Dijo aún con su voz temblorosa. -Ya entendí que No es no... siempre me lo dijiste Yoongi y yo no lo acepté. Lamento todo.

-Jimin, quiero que sepas que no estoy enojado por no haberme podido casar con Daehyun, al contrario quizá hasta estoy aliviado, pero de todos modos yo no puedo ser el hombre que tú quieres, yo no soy bueno para ti. -Añadió mirando con pena al pelirrojo.

Jimin volvio a sorber su nariz, entendía si Yoongi veía en él a un niño inmaduro indigno de él.

-Pues vaya y casese con Daehyun ya le dije.

-Primero debo saber si el acta matrimonial es legal, para poder pedir que se haga efectivo el divorcio. -Respondió Yoongi sin inmutarse.

-¿Entonces de verdad no quiere estar conmigo? -Preguntó otra vez al borde de las lágrimas.

-No. -Respondió Yoongi.

Jimin abrió su boca para decir algo pero no pudo, nuevamente su corazón se sentía adolorido porque Yoongi si quería el divorcio.

Se levantó tan repentinamente que casi sobresaltó a Yoongi y comenzó a alejarse.

-Jimin no te vayas, déjame decirte las razones. Rayos Jimin vuelve.

Jimin podía escuchar la voz de Yoongi llamándolo con insistencia pero él ya había entendido que tenía que alejarse.

Así que solo corrió lejos de Yoongi y aún podía escuchar como le llamaba insistentemente y pasos detrás de él pero no iba a detenerse ya se había humillado lo suficiente.

Sólo quería huir ahora de todo eso que él mismo había causado.