꧁𝐿𝑎 𝑐𝑖𝑡𝑎꧂
Sanzu:
Me desperté y lo primero que hice fue mirar a aquella chica, esa camarera que desde el primer instante logro captar mi atención... estaba aun dormida, con su cabello algo despeinado y unos mechones cayendo por su rostro, realmente lucia tierna y bastante linda.
Tome mi celular y vi la hora, como aun era temprano decidí pararme de la cama y preparar el desayuno para Yuriko, hoy tengo una sorpresa para ella, así que tenemos que salir de su casa lo mas pronto posible.
Llegue a la cocina y comencé a revisar que podía usar para preparar el desayuno, después de un rato tenia los ingredientes necesarios para poder preparar unos panqueques, comencé a prepararlos y me puse a pensar en algunas cosas.
La noche que pase con Yuriko fue mas que increíble, cada momento lo disfrute al máximo, y no, no lo digo solo por el sexo, lo digo porque cada segundo que estoy con ella se siente especial, es como si de alguna forma me olvidara de todo lo demás y solo existiera ella.
El hecho de que ella cada día sea mas importante para mi me genera miedo, eso puede ser el blanco perfecto para acabar conmigo, y lo mismo aplica para Senju. No suelo preocuparme para nada sobre las personas enemigas, siempre pienso que todos en Boten estamos lo suficientemente locos para acabar con cualquiera fácilmente, pero, esta vez es diferente.
Lo único que me mantenía calmado es que por el momento no se había escuchado ni una noticia de los Yasumu, en cierta parte eso es como una espada de doble filo, es bueno no saber nada de ellos pero a la vez es bastante sospechoso que no hayan hecho su primer movimiento sabiendo que todos volvimos a Tokio.
Tenemos todo preparado por si un ataque llega a suceder, pero, ellos tienen una gran ventaja y eso es algo de lo que pueden sacar provecho.
Yasumu es una organización que surgió hace dos años, no se sabe nada sobre su líder, su apariencia es totalmente anónima, aun recuerdo cuando nos enfrentamos a ellos, la razón por la que nos buscan es totalmente estúpida...
Escuche el timbre de mi celular y eso me saco de mis pensamientos, cosa que agradezco bastante ya que no quería seguir sobre pensando las cosas, limpie mis manos con un trapo húmedo y tome mi celular, al ver de quien se trataba inmediatamente sonreí.
-Hola mocosa-. dije burlón.
-Hola hermanito-. sonreí. -¿Quería saber como va todo por haya?-. pregunto Senju.
-Todo esta bien...-. evidentemente Senju no tiene que saber nada sobre los Yasumu, así que digamos que fue una mentira piadosa. -¿Cómo va el viaje?-. pregunté rápidamente, ya que quería evitar el tema lo más pronto posible.
-Todo ha estado increíble, ayer fui a un parque de diversiones con Wakasa y su novia-.
Cuando me enteré de que saldría en un viaje de negocios le pedí a Wakasa que cuidara de Senju, el accedió al instante, desde siempre se lleva bien con Senju, incluso ella lo ve cómo a un hermano más. Al parecer Wakasa hizo planes para que salieran fuera de la ciudad, eso me alegro, ya que debido al trabajo no es como que pueda tomar unas vacaciones y llevar a Senju a algún lugar.
-Me alegra que la pases bien-. guarde silencio por un momento. -Aunque me haces falta-. Por más que me cueste decirlo es verdad, estos años que Senju ha estado viviendo conmigo me han hecho mucho más cercano a ella. Al inicio fue algo difícil, siempre estuve alejado de mis hermanos y que de la nada volvieran fue como si me cayera un balde de agua fría.
-También te extraño Haru... tengo que irme Wakasa volvió-.
-Nos vemos, cuídate y saludos para Wakasa-. finalice la llamada y deje el celular en la mesa.
Seguí preparando el desayuno, ya que quería que todo estuviera listo para cuando Yuriko despertara. Estaba seguro de que el desayuno le gustarían, no todos los días comes panqueques hechos por un mafioso como yo.
Yuriko:
Me desperté y lo primero que vi fue que Sanzu no estaba a mi lado, supongo que debió irse temprano, a lo mejor por asuntos del trabajo, aunque eso me pone algo triste, esperaba que hoy pasáramos el día juntos.
Puede que de nuevo me usara, que tal si aun me ve como un juego, quizás lo de anoche solo fue una broma para el...
Todos esos pensamientos rondaban en mi mente, causando que de nuevo cuestionara todo lo que sentía por el.
Mis experiencias en el amor nunca han sido buenas, pero supongo que eso pasa cuando creces idealizando el amor, de niña solía ver muchas pelicular de romance, amaba leer libros sobre amores que hacen hasta lo imposible para estar juntos, lo cual solo era una farsa total, pero en ese entonces era demasiado chica para comprenderlo.
Cuando experimente mi primer amorío me di cuenta de que no era como lo pintaban, cosa que causo una gran decepción en mi, no todo era flores, citas románticas, detalles y atenciones especiales. Para mi fue todo lo contrario, sin darme cuenta termine dependiendo emocionalmente de una persona que probablemente me veía como un juego, tengo que admitir que en ese momento mis ganas de vivir se esfumaron totalmente... realmente era una niña idiota.
Las malas experiencias y lo sentimental que soy siempre me llevan a cuestionarme el tipo de relación que llevo con las personas, cosa que me pasa con Sanzu, al ver como de la nada es tan atento me alegro, pero, al pensar en que en algún momento se puede ir, eso me causa miedo.
Resumiendo todo esto, soy la típica chica que cree que todos los hombres la trataran de la misma manera, solo por una experiencia con un mocoso infantil de 15 años, amo a Mikey, pero no es fácil perdonarle todo lo que me hizo en el pasado.
Puede que sea patética por estar a la defensiva en cuanto a las personas, pero vamos, el que ya seamos mayores no quiere decir que las personas sean maduras y conscientes de lo que quieren.
Tengo que hablar de esto con alguien si no quiero que mis pensamientos me consuman y me creen un caos mental.
Me quite las sabanas de encima, para poder ponerme de pie y salir a buscar mi celular, el cual seguramente este en la cocina.
Todo iba perfectamente bien, hasta que quise ponerme de pie, mierda, Sanzu si que se excedió, el dolor que sentía en las piernas era algo fuerte, pero, eso no me preocupaba, el dolor en mi intimidad era aun mas. Si esto será todas las veces que lo hagamos tendré que terminarme acostumbrando, el dolor es fatal, pero, el placer que sentí anoche fue aun mejor.
Puedo decir que Sanzu me dio una de las mejores folladas de mi vida, he tenido sexo con otros hombres pero ninguno ha sido tan bueno como el, o quizá solo sea el hecho de que mi vida sexual estaba muerta desde hace un año. No es que no interesara tener sexo, realmente la universidad no me daba tiempo, fue una mala idea estudiar administración para seguir con el negocio "familiar".
Sali de la habitación y pude escuchar algunos ruidos que provenían de la cocina, comencé a caminar sigilosamente por el pasillo, pase por el perchero que estaba al final del pasillo y tome un paraguas, si alguien esta en mi casa desde temprano solo se puede tratar de un ladrón.
Estaba por llegar a la cocina y de pronto una silueta se paro frente a mi, así que lance uno de mis mejores ataques, levante el paraguas y golpe la cabeza de aquel extraño... espera... no es un extraño.
-Estas loca-. dijo Sanzu mientras se sobaba el lugar en el que lo había golpeado.
-Lo siento... lo siento-. fue lo único que pude decir al ver que estaba molesto.
-Enserio...-. tomo el paraguas.
-Creí que eras un ladrón, solo trataba de defenderme-.
-Esperabas hacerle daño a un ladrón con un paraguas...-. dejo el paraguas recargado en la pared, pero antes le dio una ultima mirada, era como si tratara de asesinarlo solo con verlo, pero vamos, solo es un paraguas. -eres mas tonta de lo que pensaba-. camino hacia el comedor y se sentó en una de las sillas que había en este.
Camine hacia el y me senté en una de las sillas de a lado. Sanzu solo me observaba algo serio, como es posible que se molestara solo porque lo golpe con un paraguas, además lo hice en defensa propia. -Tienes que admitir que fue gracioso-. hable para tratar de hacerlo sonreír, ya que cuando su expresión se tornaba seria daba algo de miedo.
-No voy a negar eso... pero no lo hagas de nuevo-. puso sus manos sobre la mesa, al verlas fue inevitable no reírme, ya que aun no supero que la pijama de un mafioso parezca la de un niño pequeño. -De que te ríes, vieja tonta... me tienes envidia por que yo tengo uno de estos y tu no-. señalo su pijama.
-Envidia...yo no se que es eso-. lo mire seria. -no tengo nada que envidiarte, viejo que se pinta el cabello como payaso-. trate de contener una pequeña risa, pero me fue imposible.
-Ayer no me decías eso...-. se puso de pie y se paro detrás de mi. -acaso quieres que te recuerde como tomabas mi cabello...-. coloco su cabeza en mi hombro. -y gemías mi nombre de mil formas-. susurro en mi oído.
Sentí como un escalofrió recorría mi espalda, es que este hombre realmente sabia como volverme loca. Iba a decir algo, pero, instantáneamente guarde silencio al sentir como sus labios ya se encontraban dejando pequeños besos en mi cuello.
-Que haces...-. trate de quitarlo con una de mis manos.
-Quédate quieta-. siguió dejando besos húmedos en mi cuello, yo por mi parte solo me limitaba a disfrutar el roce de sus labios con mi piel.
Sentí como sus manos se metieron por debajo de la blusa de mi pijama, causándome un escalofrió ya que sus manos estaban frías. -Ni siquiera...-. solté un gemido al sentir como sus manos comenzaban a juguetear con mis pechos.
Sanzu aparto su boca de mi cuello y la llevo hasta mi lobulo, el cual comenzó a morder -¿Te gusta?-.
-Si...-. lleve una de mis manos a su cabeza y trate de bajarlo de nuevo a mi cuello, pero, el se aparto.
-Te dije que te quedaras quieta...-. se alejo y comenzó a caminar hasta la ventana que se encontraba en la cocina.
-Oye, esas salieron algo caras-. dije al ver como jalo una de mis cortinas haciendo que se rompiera.
-Te comprare otras-. camino hacia mi con un pedazo de cortina en sus manos, aunque no tengo ni idea de para que la necesita, si el es un mafioso, ¿acaso no tiene cortinas en su casa?
-Sanzu, ¿para que quieres eso?-.
-Ya veras-. se posiciono detrás de mi, aun seguía sentada en la silla, así que solo trataba de deducir que era lo que hacia. -Te dije que te quedaras quieta...-. tomo mis brazos y los paso hacia los costados. -tendré que castigarte-.
-Espera...-. sentía como amarraba mis brazos con el pedazo de cortina.
-Cállate si no quieres que te tape la boca-. su voz sonada demasiado seria, no se si soy una demente, pero, eso provoco que me excitara. Mis muñecas se encontraban amarradas a los cotados de la silla, era obvio que su castigo se trataba de otra cosa... si todos sus castigos son así me dan ganas de desafiarlo aun mas.
De nuevo los besos en mi cuello se hicieron presentes, emitía pequeños gemidos al sentir como Sanzu mordía y dejaba pequeñas marcas en mi cuello. Sus manos comenzaron a juguetear con mis pechos, los apretaba por encima de la blusa, la humedad en mi entrepierna se empezó a hacer presente.
Sanzu seguía concentrado en lo suyo, intercalaba entre mi cuello y oreja para dejar pequeños besos y mordidas, estas ultimas en vez de dolor me provocaban placer. Mi desesperación cada vez aumentaba mas, ya que no solo quería sentir sus manos en mis pechos, deseaba mas y era obvio que Sanzu también lo notaba, por que sus caricias cada vez se volvían mas bruscas, sus manos se abrieron paso hasta mi entrepierna, la cual comenzó a tocar por encima de aquel molesto pantalón.
Estaba segura de que mi entrepierna ya se encontraba mojada por aquellos toques previos, el idiota de Sanzu si que me estaba haciendo sufrir y lo hizo aun mas cuando vi como alejo sus manos y comenzó a desatarme.
-El desayuno se enfriara-. dejo un pequeño beso en mi frente.
-Okey-. hable seria, en ese momento estaba tratando de analizar como de nuevo el idiota me dejo caliente.
-Espero y te guste-. dejo un plato frente a mi, el cual tenia unos panqueques, pero no eran unos panqueques ordinarios... eran color rosa. También tenía pequeños trozos de fresa y algo de miel, se veía muy apetitoso.
-Parece que tienes una obsesión con el color rosa-. tome un trozo de los panqueques y lo lleve a mi boca. -Están deliciosos-.
-Sabia que te gustarían-. sonrió.
Ambos desayunamos en silencio, disfrutando del delicioso desayuno que el peli rosa preparo, nuestras miradas se cruzaron en uno que otro momento, lo cual me ponía algo nerviosa.
-Te parece si tenemos una cita hoy-. tomo los platos y los llevo al fregadero. -el día esta bonito, así que hay que aprovecharlo-.
-Claro que quiero-. corri hacia el y lo rodee con mis brazos, el hizo lo mismo y dejo un beso en mi cabeza.
Fui a mi habitación a cambiarme, me puse uno de mis vestidos que solía usar en el verano, era de color amarillo pastel y algo flojo, recogí mi cabello en una coleta y dejé unos pequeños mechones al frente, solo me puse un poco de labial y rímel.
Sanzu decidió que se cambiaría en el baño, según el quería darme privacidad, aunque no tiene mucho sentido con todo lo que hicimos ayer.
-Estoy listo-. voltee a ver a Sanzu, el cual iba vestido totalmente diferente a como se vestía diario. Traía un pantalón negro, le quedaba algo flojo y una camisa color blanca, la cual una abertura que dejaba ver hasta la mitad de su abdomen, tenía su cabello recogido en media coleta. Realmente lucia bien y más con esos lentes oscuros que tenía puestos, quien lo viera pensaría que es un modelo.
-Te ves muy bien-. dije mientras lo observaba, podría jurar que estaba viendo a un ángel.
-Luces hermosa-. me guiño un ojo. -Es hora de irnos-.
Narrador/a
Yuriko observaba el paisaje y de vez en cuando veía al peli rosa, duraba minutos admirando el perfil de este y como el aire despeinaba algunos mechones de su cabello. Esta vez no iban en el típico auto de Sanzu, iban en un convertible color rojo, el cual Sanzu solo compro por que la chica le dijo que su sueño era viajar en un auto de esos.
Si de algo estaba seguro el peli rosa es de que haría cualquier cosa para ver a su chica sonreír, no le importaría comprar todo un país si ella se lo pide, aunque sabemos que eso es algo imposible, pero, así es el amor, nos hace imaginar cosas imposibles y hacer promesas que no siempre pueden cumplirse.
Un nuevo sentimiento estaba presente en el, algo que jamás había sentido, o que quizá todo el tiempo se negó a sentir, parece ser que su obsesión se convirtió en amor... aun es muy pronto para decir eso.
Ambos estaban demasiados felices por la cita, la fémina estaba muy ansiosa, todo era una sorpresa para ella, así que no sabia que esperar.
-Amo esa canción-. grito emocionada.
(Suena Golden-Harry Styles)
Yuriko comenzó a cantar mientras sentía como el aire despeinaba su cabello, dejándose llevar por la sensación de felicidad que experimentaba en ese momento. Por su parte Sanzu tarareaba la canción y de vez en cuando volteaba a ver a su chica, una gran sonrisa se posaba en su rostro al ver como Yuriko disfrutaba ese momento.
Aunque estaba algo sorprendido, ya que no esperaba que ella cantara una canción inglesa a la perfección.
-You're so golden-. cantaron los dos al mismo tiempo mientras se veían.
La canción en ese momento tomo un gran significado para ellos, es obvio que Yuriko es demasiado brillante ante los ojos de Sanzu, así como el lo es para ella. Ambos con miedo a estar solos y asustados por los corazones rotos.
Ellos eran su Golden y en ese momento lo supieron.
Después de un rato de camino llegaron a un mirador, en el cual había un árbol y debajo de este una manta en la cual se podían observar pequeñas cosas encima. Ambos bajaron del auto y entrelazaron sus manos, caminaron hasta aquel árbol, ella al ver todo lo que había no pudo evitar sonreír, sin duda Sanzu planeo la cita perfecta.
La vista era hermosa, se podía observar el perfecto azul del cielo y un campo de flores hermoso.
-Ten esto-. Sanzu le extendió unos binoculares para que viera perfectamente el paisaje.
La fémina los tomo y comenzó a ver con ellos. -Es una broma-. volteo a ver a Sanzu y se lanzo a sus brazos, el la tomo de los muslos para que no se callera. -gracias, gracias... es hermoso-. decía mientras le daba pequeños besos en todo su rostro.
-Me alegra que te gustara...-. por un momento unió sus labios con los de la chica. -desde que me dijiste cuales eran tus flores favoritas me dedique a buscar un campo que estuviera repleto de ellas-. observaba los ojos de la chica, en los cuales se hacia presente un brillo muy notorio. -No es fácil encontrar un campo de Cosmos en Tokyo-.
(Kosumosu o Cosmos, es una flor típica de Japón, es algo parecida a las flores de cerezo.)
-Sanzu-. bajo de sus brazos.
-Que sucede... no te gusto algo-.
-Estoo... no se como decirlo-. se podía notar que Yuriko estaba nerviosa y eso preocupo a Sanzu, en ese momento se estaba imaginando mil cosas.
-Tu... me gustas... y esto es algo difícil de decir para mi porque digamos que mis experiencias en el amor no han sido muy buenas... sinceramente me de miedo que tu solo trates de jugar conmigo-.
El peli rosa sintió como su alma regreso a su cuerpo al escuchar aquellas tres palabras, era la primera vez que alguien le decía algo así. -Yuriko... tu también me gustas-. la mencionada al escuchar eso se puso muy alegre. -Ven aquí-. dijo Sanzu mientras extendía sus brazos. -Jamás te hare daño-.
-¿Lo prometes?-. pregunto algo tímida
-Lo prometo-. la tomo del mentón y levanto su rostro. -Pequeña dama... me concedería el honor de ser su pareja-. la fémina lo miro algo confundida -o sea... tu novio... tu chico... tu hombre... como tu quieras tomarlo-.
-Acepto-. lo tomo de la camisa y lo jalo hacia ella para poder darle un beso en los labios.
-Ven, aun queda algo mas-.
Caminaron hasta la manta, en donde había algo de comida, un caballete y distintas cosas para pintar.
-Cuando hablamos por llamada me dijiste que pintar era lo mejor para ti, así que hice esto para que puedas pintar una de tus cosas favoritas-.
Yuriko no podía creer que Sanzu había hecho todo eso por ella, cada una de las cosas que le gustan estaban en esta cita, sin duda era el mejor día de su vida.
(Yo: odio el romance y las cursilerías.
Also yo: todo sea por la historia.)
Ambos disfrutaban de aquella cita, Yuriko pintaba el paisaje que estaba adornado por esas miles de flores y Sanzu observaba como lo hacia, ambos estaban tan concentrados en eso, que ninguno noto que alguien los observaba a los lejos.
-Lo seguí justo como me lo ordeno, hay una chica con el-.
HOY ESTOY FELIZ, LA HISTORIA LLEGÓ A LOS 60K DE LECTURAS.
En verdad gracias por todo el apoyo que le dan a la historia, gracias por mucho, perdónenme por tan poco):
Mañana subiré otro cap, así que estén pendientes.
Recuerden votar si les gusto el capítulo.
Si hay faltas de ortografía las corregiré en cuanto pueda.
Cuídense y tomen agua.💐💖
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