8_ It was never mine

.

El lugar se sumió en un silencio total.

Incómodo.

Aún podía sentir sus labios arder y su respiración un tanto agitada.

Tosió en su mano. Rompiendo el silencio.

La lluvia pareció detenerse. Aunque los truenos seguían haciendo temblar el cielo gris.

El frío se había ido. Siendo reemplazado por un sentimiento cálido en su interior, pero a la vez un leve dolor en su pecho.

Miro al castaño, que no se movía de su lugar y su mirada estaba clavada en el suelo.

Entonces Dazai levantó la vista. Chocando directamente con el gris de los ojos de Akutagawa.

El menor dió un tentativo paso había adelante. Tanteando significativamente el terreno.

Entonces una carcajada resonó en el lugar.

Akutagawa frunció el ceño, interrogando con la mirada al castaño que reía en su lugar.

Sus hombros se agitaban y hasta pareció que iba a caer al suelo.

Pero se detuvo.

La risa cesó, volviendo al silencio sepulcral en el que ambos se habían estando consumiendo hace rato.

La habitación apenas era alumbrada por la luz que entraba en la ventana, que poco a poco se hacía cada vez más escaza.

__ haa... Akutagawa, que haré contigo?_ aunque la pregunta fue más para él mismo. El azabache se quedó en silencio pensando en qué decir o hacer.

__ pensé que lo había dejando claro la última vez... Mooh~ creo que no soy bueno es esto_ el castaño aún así sonrió.

Sin apartar su mirada ni un segundo del menor, se acercó a pasos lentos y cautelosos. Cómo si estuviera hablando con un animal que podría saltarle a la yugular en cualquier instante.

__ Akutagawa... Tú no me gustas_

Un rayo alumbró el lugar.

Haciendo crujir los vidrios.

Akutagawa se quedó estático. Sentía como si le hubiesen golpeado en el estómago. Hasta sentía como si el aire no fuera suficiente.

Se sentía mareado y encerrado.

Pero aún así se quedó allí.

Ignorando la manera en la que sus ojos se empañaron, y como lentamente y casi imperceptible iba retrocediendo.

__ yo..._ ni siquiera sabía qué decir. Sentía su boca seca y pastosa, dejándolo con un sabor agrio en ella.

__ aah_ suspiró el castaño mientras negaba con la cabeza. __ Akutagawa... El primer amor es un asco. Cada uno cava su propia tumba al... Amar a alguien, al arriesgarse que esa persona no sienta lo mismo, y tu__ con su dedo índice apunto su pecho, ejerciendo un mínimo de fuerza. __ cavaste tu propia tumba al hacerte falsas ilusiones sobre mí __

El castaño volvió a sonreír, restándole importancia al asunto. Y se dió la vuelta encaminandose hacía la puerta.

__ deberías irte, ya paro de llover_ aviso mientras se perdía en el pasillo.

Akutagawa tembló.

Sintiendo el frío envolver su cuerpo. Se abrazo a si mismo, buscando el consuelo que nunca obtuvo.

Respirando hondo para mantener la compostura.

No es como si sirviera de algo.

Sus propias ilusiones había sido destruidas en un abrir y cerrar de ojos.

Tal como inicio eso. Se había terminado tan rápido que ni siquiera le dió el tiempo de saborearlo bien.

Caminó despacio. Sus cosas estaban en la mesita de luz. Las agarró, aunque solo era el teléfono y una arma.

Se desplazó hasta la puerta de salida. Estaban practicando uno frente al otro.

__ adiós, Dazai-san_ se despidió apesar de no obtener respuesta.

Abrió y cerro la puerta detrás de él.

Metió las manos en los bolsillos de su gabardina.

Salió a la calle.

El viento movía su ropa y sus cabellos.

Aspiró un poco de aire fresco, sus pulmones se sentían asfixiados y su cabeza dolía horrores.

Pero parecía que el dolor se centraba especialmente en su pecho, algo extraño que jamás había vivido (y esperaba jamás volver a hacerlo)

Sin importar qué, lo ignoró. Cómo a todas las cosas que giraban en torno a eso. Aguantando las ganas de gritar o romper algo.

Estaba roto.

La oscuridad lo había consumido. Y recién ahora de daba cuenta.

Se sentía ahogado, era como estar cayendo en un mar, sin oportunidad de salir a la superficie.

Tosió, cayendo de rodillas al suelo.
Apoyando una mano y tapando su boca con la otra.

Sentía la sangre caer de su boca. Deslizándose por su lengua dejando un sabor metálico en ella.

Su celular vibró en su bolsillo.

Respiró hondo y se limpió la mano descuidada mente en su ropa, antes de contestar.

__ hermano?_

Gin...

__ si..._ susurró con su voz más rasposa de lo normal.

__ está... Está todo bien?_

No...

__ si, voy para allá_

__ bien... Ten cuidado, adios_

Y colgó el celular.

Suspiró cansado, mirando el cielo que se estaba oscureciendo.

Aún no podía rendirse.

Aún no había obtenido el reconocimiento de Dazai.

Y aunque haya sido rechazado no importaba, porque en su mundo no había espacio para el romance.

Siempre lo supo.

Aunque tuviera una mínima oportunidad, iba a terminar muriendo.

Su enfermedad, el enemigo, sus propios compañeros.

Sus vidas eran como bombas de tiempo.

Que en algún momento iban a explotar.

Solo tenía que esperar el momento adecuado.

Guardo todo su dolor en lo más profundo.

Levantándose del suelo.

Caminando tranquilamente hasta el departamento.

La oscuridad iba encerrandolo hasta que solo se veía la figura escuálida perderse entre las sombras.

Las calles solitarias.

El viento frío.

El cielo nocturno se abrió, dejando ver un montón de estrellas.

Dazai tenía razón. El primer amor era un asco.

Y aunque no se arrepentía.

Daba igual.

Ya no tenía importancia.

Fin.

.

Nota del autor.

Cómo sea, quería por lo menos terminarlo. Darle un final.

Aunque talvez no sea lo esperaban, era obvio que Dazai no se iba a enamorar mágicamente.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top