▪︎ 012:𝐓ime ▪︎
❝TIEMPO❞
▄▀▄▄▀▄▄▀▄▄▀▄▄▀▄▄▀▄▄▀▄▄▀▄▄▀▄▄▀
HABÍAN PASADO VARIOS DÍAS ya, incluso semanas desde que el grupo de los perdedores dejaron de hablarse, Eddie se había roto el hueso de su brazo en dos completamente, fue enyesado de inmediato. Bill estaba encerrado en su habitación la mayoría del tiempo con sus cortinas cerradas y Lilith simplemente había empeorado.
Decir que las pesadillas eran frecuentes era poco, las pesadillas y alucinaciones eran diarias, no podía dormir sin el calor de sus padres abrazándola. No quería depender de ellos, pero allí estaba, completamente indefensa, siendo protegida por sus padres.
Ese día su madre se encontraba en el jardín cuidando de las frutas que cocechaba y sus flores, mientras Lilith se encontraba sentada en el sillón individual de su sala mientras veía la televisión.
Veía un documental sobre los animales, sobre sus instintos depredadores y lo que hacían usualmente para cazar, la castaña estaba que se dormía, sinceramente ese documental era lo único interesante que se había encontrado y eso era decir mucho. A pesar de que el sueño quería ganarle ella no se dejaría, pues las pesadillas eran tales que prefería dormir junto a sus padres por la noche, aunque eso no le ayudaba de mucho, pues aunque tenía pocas pesadillas también habían noches en las que no podía dormir.
Sus padres estaban muy preocupados por ella, veían que mejoraba sin embargo un día de pronto había empeorado, se hayaba triste y asustada, llorando a escondidas o gritando sobre algo que la atacaba, además, había dejado de salir con su vecino y los amigos de este, Bill tampoco salía mucho.
Los ojos de Berrycloth comenzaban a cerrarse, cabeceaba al sueño querer ganarle, sin embargo no se lo iba a permitir, la voz del hombre que documentada las acciones de un león al cazar su presa se hacía más lejana, de pronto, en un parpadeo todo cambió.
Al abrir los ojos se dio cuenta que era de noche, el sueño se le había quitado, estaba sentada aún en el sillón y la televisión estaba en estática ¿Qué había pasado? Parecía haberse quedado dormida, sin haber tenido pesadillas ni nada, era extraño. Se levantó lentamente del sillón, camino a las antenas para moverlas y regresar la señal, sin embargo por más que intentaba no lo lograba.
Una duda atacó su mente, si ella se había dormido ¿Por qué su madre no apago la televisión? Su padre no estaba al parecer y claramente su madre ya no estaba dándole mantenimiento al jardín.
Paso saliva ruidosamente, comenzando a sentir su corazón palpitar en su caja torácica como loco, dio un respingo en su lugar al escuchar un trueno, no se había dado cuenta de que estaba lloviendo ferozmente afuera, más su atención se desvio al pasillo oscuro de su casa, pues parecía algo se había caído en el cuarto de sus padres. Humedecio sus labios nerviosa y se dio la vuelta para caminar lentamente hasta divisar el oscuro pasillo, parecía no haber sido nada.
Otro trueno se escucho, con ello otro movimiento en el pasillo, con la respiración entrecortada Lilith escucho el timbre de una bicicleta en el interior de la oscuridad, los pedaleos se escucharon hasta que un juguete de payaso en una bicicleta salió del pasillo, el muñeco pedaleo unos pocos centimetros más hacia la castaña, se detuvo pocos metros lejos de ella y Lilith se pego a la puerta, alejándose del juguete con miedo. El silencio reinó, uno que hacía que la pequeña tuviera miedo a lo que estuviera por suceder.
Sorpresivamente la cabeza del payaso salto del cuerpo del juguete soltando una risa terrorífica, con un grito de horror Lilith abrió la puerta y corrió fuera de su casa, la lluvia la empapó y ella solo corrió hasta detenerse bajo un poste de luz, las calles estaban oscuras, las hojas de los árboles se movían bruscamente y nadie se encontraba por allí.
La respiración agitada de Berrycloth se corto cuando un barco de papel pasó flotando por sus pies, sin saber por qué y con el ceño fruncido lo siguió con la mirada hasta casi perderlo de vista y sin saber por qué camino detrás del objeto de papel. El barco seguía la corriente y Lilith iba tras el a pasos lentos, pasaron la casa de Bill e incluso una vaya para evitar el paso, leyó lo que tenía escrito.
"Trabajo de construcción de Derry"
Se detuvo frente una alcantarilla cuando el barco terminó por caerse allí, el silencio tan abrumador a Lilith le asustaba más no tenía el valor de moverse, un trueno resonó al mismo tiempo que un payaso se hizo ver de la oscuridad de la alcantarilla, aquello hizo dar a la castaña un respingo en su lugar.
-¿Este es tu barco?–eso preguntó más Lilith no contestó–es lindo...–un pequeño silencio se formó y el payaso volvió a hablar–soy Pennywise, el payaso bailarín–se presentó con un tono extraño y sonrisa terrorífica–ya no somos desconocidos ¿Verdad?–Lilith tenía la respiración pesada.
Estaba bastante asustada, no se podía mover, es como si estuviera destinada a no moverse, como si estuviera viviendo algo que ya había pasado.
-¿No vas a venir a saludar?–preguntó Pennywise borrando su sonrisa y dándole una mirada intensa.
De pronto este rió y se alejó de la alcantarilla, entonces el foco del poste de luz se apago, soltando unas pocas chispas, Lilith soltó un suspiro pesado y se aleja de la alcantarilla con miedo.
Quiere volver a casa, cuando se da vuelta no corre ni tres pasos cuando se da cuenta que ya no está en la calle, sino que estaba en la entrada de las cloacas, la luz de la luna logra hacer que no esté tan a oscuras además de un foco de luz y sin ella saber de donde saco el valor, suspiró y apretó sus labios para comenzar a adentrarse.
Camina unos cuantos pasos, escucha unos pequeños chillidos lejos de ella, camina con cautela y en su corazón una punzada de miedo la atravesó cuando varias ratas corren entre sus pies, Lilith hace una mueca de asco cuando todos los roedores se van.
-Oye–escucha un susurro y se voltea, Pennywise entre la oscuridad estaba en la entrada de la cloaca sosteniendo un globo–¿Quieres un globo?–con ello, suelta el que tenía entre sus dedos.
El globo rojo se acerca a ella lentamente, ella retrocede un poco, entonces deja de hacerlo repitiéndose que debe ser valiente, que ya no debería huir; el globo gira en su eje cuando estuvo frente a ella para mostrar un escrito.
"Yo amo a Derry"
El globo al estar frente a ella comienza a flotar hacia arriba, Lilith alza la cabeza para ver como el rojo globo se detenía al estar contra el techo de las cloacas y sin previo aviso explota.
Espesa sangre cae sobre la cara de Berrycloth, está suelta un chillido de asco y susto, baja la cabeza para ver hacia la entrada y solo puede ver a Pennywise frente a ella soltando un gruñido.
Lilith grita y cierra los ojos mientras da un paso atrás, los abre cuando una brisa la golpea en su piel mojada por la lluvia, se da cuenta que eso ya no estaba. Ya llevaba varios sustos esa noche.
Una voz infantil se escucha lejana y en ecos, la castaña se gira y mira al interior de la cloaca, suspira comenzando a caminar por el lugar.
-No me molestes–pide triste una voz infantil sintiéndose lejana, la voz aun se escuchaba amortigiada y en ecos, pero Lilith la reconocía, era Georgie–mi barco se fue flotando...–la tristeza se escucha en su voz y Berrycloth no comprende de que hablaba el niño.
Deja de caminar cuando vislumbra un agujero en la pared de la cloaca, se acerca a él, incluso se inclina un poco para ver que allí había un par de camisetas infantiles, un payaso de juguete y un radio, entre el silencio el radio se enciende, escuchándose estática, sin embargo, una voz sale de él pocos segundos después.
-Si vienes conmigo, también flotaras–Georgie dice feliz–también flotaras, también flotaras, también flotaras–canturrea, repetía esa frase sin cesar hasta que Lilith se da cuenta que la voz se escucha cerca de ella, ya no sólo en el radio.
La castaña se aleja del agujero y camina unos pasos hacia adelante, girando la curva de la cloaca se encuentra a Georgie, ahoga cualquier sonido que haya querido salir de su boca.
-Georgie–murmura Lilith en shock, sacude su cabeza y quiere acercarse al niño, más antes de llegar a él una reja cae separandolos–¡Georgie!–le llama la chica.
Sin embargo, el no responde y se gira para caminar por un pasillo de la cloaca, Lilith gira su cabeza a su izquierda para encontrarse también por un pasillo de la cloaca, por lo que pensando en llegar al niño se adentro por allí. Corre cuando mira una puerta de metal sucia, la abre y se adentra a lo que parece un pequeño cuarto con tuberías y una luz amarilla tenue.
Baja por unas escaleras que estaban a su costado, oliendo el terrible olor del lugar hasta que una voz triste se escucha.
-Quiero irme a casa–dice Georgie, Lilith lo busca con la mirada pero no logra verlo, la luz comienza a parpadear hasta apagarse haciendo que la castaña mordiera su labio inferior–¡Quiero irme a casa!–grita el niño.
Al mismo tiempo del grito la luz suelta chispas y parpadea furiosamente, entonces Pennywise aparece con dientes afilados y suelta una risa macabra estirando una mano al querer arrastrar a la castaña hacia él, sin embargo Lilith se había hecho para atrás soltando un grito y cayendo al suelo.
La luz vuelve a la normalidad, Berrycloth en el suelo suelta jadeos temblorosos y sus ojos estaban húmedos debido a las lagrimas que comenzaban a acumularse, deseaba no estar allí y que todo se acabara; más al parpadear por arte de magia aparece un globo rojo frente a ella, quieto en un solo lugar, entonces globos comienzan a descender del techo rodeandola, ella se levanta del suelo y suelta manotazos para alejar los globos, sin embargo no sirve de nada, siente como la arrastran por un pasillo de la cloaca, grita y forcejea para liberarse cuando nota que la dirigían hacia el payaso con varios globos en la mano, los objetos flotantes no se detienen hasta dejarla frente a eso y entonces comienzan a disiparse.
El payaso tenía muchos globos rojos tapándole la cara, exhausta Lilith le habla.
-Déjame en paz ¿Qué quieres de mi?–ella pregunta comenzando a llorar–¡¿Qué quieres de mi?!–vuelve a cuestionar más desesperada.
Sin previo aviso los globos que Pennywise tenía explotan llenándola de sangre, ella cierra la boca y los ojos, siente el líquido espeso en su boca, era un sabor metálico y asqueroso.
-Todos flotan aquí abajo–contesta Pennywise–y tú también flotaras–comienza a reír macabramente.
Lilith comienza a gritar, no puede escapar, se siente sin salida y el pánico se hace presente cuando ella comienza a flotar tan alto que el miedo no la deja pensar, grita, patalea, llora, los globos que también habían comenzado a flotar alrededor suyo explotan tirando sangre, ella llega tan alto hasta tocar la rejilla del techo de la cloaca.
-¡Ayúdenme!–grita desesperada–¡Por favor, ayúdenme!–Lilith suplica.
Sin embargo, todo se ve perdido cuando comienza a descender lentamente hasta después de pocos segundos comenzar a caer bruscente.
Mientras más caía todo alrededor más oscuro se volvía, el temor permanece, cree nunca llegar al final de la terrorífica pesadilla que estaba viviendo, sin embargo siente que está por llegar al final cuando siente un escalofrío recorriendo su espalda y cierra los ojos cuando el duro final estaba por recibirla, sin embargo, aquello no sucedió.
Lilith respinga bruscamente en el sillón individual, su respiración era errática y pesada, la televisión aún seguía hablando sobre los leones, el sudor estaba en su frente y al girar hacia la ventana mira a su madre limpiando tranquilamente el jardín.
Todo había sido un sueño, todo era una ilusión, nada era real, eso se quería creer y se lo repetía una y otra vez.
El pánico comienza a inundarla, se levanta del sillón y corre a la puerta, más un fuerte mareo nubla su vista, cuando recupera la vista cree tener una ilusión, una que la hace ver la puerta manchada de sangre y con el miedo apoderado de su sistema camina lentamente hacia atrás para luego correr despavorida hacia su habitación.
Abre la puerta y lo que menos espera es que una mano con un guante blanco tomara su cuello y la separara del suelo, el aire le falta y posa sus manos en los brazos de aquel payaso que estaba en su habitación, tan alto que si estiraba su brazo llegaba a tocar su techo, sus ojos amarillos brillantes la miraban y su sonrisa malvada se dirige a ella.
-No...–logra articular ella con dificultad.
Aquella cosa era tan real como se sentía, ya no podía engañarse más, no podía decirse que era solo una ilusión, por mucho tiempo quiso ignorarlo, hacer como si nunca lo hubiera visto, pero eso ya no funcionaba.
Eso ya lo sabía de sobra.
Sintió su final cerca cuando todo se torna cada vez más oscuro, cuando el sonido deja de escucharse poco a poco, cuando las fuerzas se le van y sabe que todo lo malo estaba por empezar cuando cayó por fin desmayada.
SWEETGIRL
¡Hola mor! Espero andes re bien, hace mucho que no actualizaba acá pero ya tuve la inspiración, también vine a avisarles que quedan como dos o tres capítulos para que esto se acabe.
En fin, l@s amo bai.
Vota y comenta, gracias.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top