20 de Noviembre 2020

Uno frente al otro. Cruzábamos miradas.
Seguramente de mis ojos el color rojo aún no se había ido, y mis ojeras se habían extendido.

—Lo he pensado toda la noche—bajé la mirada—probablemente te diste cuenta de ello por mi apariencia

—¿Lo has firmado?—preguntó incómodo

—Puedes concederme una última cosa—lo miré y suspiré—Dame solo hasta el 1 de Diciembre ... si tú prometes que me darás ese tiempo, yo prometo que volverás a enamorarte de mi

Poco a poco lograba recuperar la respiración, levante la mirada hacia el cielo azul repleto de estrellas, buscando alguna esperanza, una respuesta.
Recordando los momentos en que sonreí, y me llené de euforia.
Pidiendo volver así pronto.

Qué equivocada estaba viviendo como si el tiempo fuese infinito, y el amor incondicional.

Días.
Solo tenía unos pocos días. Y aquello era la única esperanza.