—¿Quieres quedarte con nosotras hoy? —preguntó Kanae viendo a Rosslenne por el retrovisor.

—¡Oh, claro! Solo tendría que buscar algunas cosas.

—Perfecto. Dime dónde vives y te esperamos.

Se estacionó al frente del edificio al transcurrir unos minutos.

—¡No tardaré!

Cerró con cuidado la puerta del carro para acercarse a la puerta principal. Ya adentro esperó el ascensor.

Mientras veía los números cambiar su teléfono sonó.

Peppa Pig:

¡Oye! Disculpa que no pude acompañarte hoy.

Sonrió.

Cuando escribía una respuesta le salió una solicitud de un número desconocido.

???:

¡Rosslenne soy yo! ¡Senjuro!

Rosslenne:

¿QUÉEE? ¿MI BEBÉ HERMOSO, SOLECITO, SENJURITO?? (ಥ﹏ಥ)

Senjurito bb:

Jajjaja... Aunque sea por mensaje me da pena que me digas así ('͈ ///ᐜ ///')

Rosslenne:

Lo siento, me emocioné JUASDJASOD

Dejó de escribir cuando vio que el ascensor llegó.

Tenía que buscar sus cosas sin distraerse. No quería hacer esperar mucho a las hermanas Kochō.

Al llegar y organizar todo lo que llevaría vio cómo su teléfono seguía sonando.

Senjurito bb:

Estamos preparando sopa miso!

Le mandó unas fotos. Todo se veía demasiado rico.

Rosslenne:

AHHHH QUIEROOO

Senjurito bb:

La próxima vez puedes venir ^^

Oh! Hermano mayor llegó!

Guardó el teléfono a causa del pánico.

Ya basta de distracciones. Si seguía así iba a preocupar a Shinobu.

Revisó todo por última vez para evitar dejar algo. Cuando estaba afuera cerrando la puerta escuchó unas voces.

—¡Recuerda comprar los vegetales!

—Sí, cariño. —el joven cerró la puerta. Al momento de voltearse notó a Rosslenne.

Ella hizo que no estaba ahí y llamó al ascensor.

No solía ser así con cualquiera. La verdad era muy educada pero...

No podía explicar porque no le caía bien Hakuji.

El azabache se quedó a su lado esperando. En ese momento quería gritar para que pudiera irse rápido del edificio.

Para rematar el ascensor se quedó en uno de los pisos más altos.

—Oye... ¿Te hice algo malo?

Rosslenne volteo a verle. Él estaba rascando su nuca con una mueca.

—No lo sé, ojalá pudiera saber si nos conocimos en otra vida.

Para su sorpresa empezó a reír.

—Entonces quizás si lo hice.

Mordió un poco su labio.

—A mi esposa le caes muy bien, es gracioso pensar que tú conmigo es todo lo contrario. ¿Podríamos volver a comenzar?

Estiró su mano hacia ella. La castaña frunció el ceño un poco.

—Vamos, enserio no quiero seguir de esta manera. Quisiera que nos lleváramos mejor.

Aceptó el gesto de manera lenta. Mientras más se acercaba a apretarle la mano hacía como si aquello le costará demasiado. Su rostro fingido de dolor ocasionó que ambos rieran.

—¡Eso es! ¡Mucho gusto Rosslenne!

El sonido de las puertas les hizo voltear. Entraron para marcar la planta baja.

En ello volvió a sonar su teléfono.

Kyojuro (っ˘ڡ˘ς):

¿Llegaste bien?

Senjuro me dijo que estaba hablando contigo y se le veía muy feliz

¡No puedo evitarlo, eso me da algo de celos!

Sonrió con ternura.

Rosslenne:

Sip, estoy bien! Solo estaba buscando unas cosas porque me quedaré con Shinobu

Baia baia ( ͡° ͜ʖ ͡°)

—¿Te gustaría cenar con nosotros en uno de estos días? —la pregunta de Hakuji le hizo alzar la mirada.

—Oh, claro.

—Puedo darte mi número para ponernos de acuerdo.

Se agregaron para entonces salir del edificio. Al tomar caminos diferentes el azabache se despidió.

—¡Nos vemos entonces! ¡Ten cuidado!

Al volver al carro Shinobu le ayudó a colocar su bolso en la parte del maletero.

—Lo siento si tarde mucho.

—Para nada, en realidad fuiste rápido. —dijo Kanae. —Vamos a comprar algo para cenar. ¿Les parece?

Ambas asintieron.

Al pasar un rato llegaron a la casa con los ingredientes necesarios.

—No esperes que onee-san te dejará cocinar. Eres nuestra invitada. —Shinobu estaba colocándose un delantal.

—De acuerdo... —hizo un puchero. —Si necesitan algo igual pueden decirme.

El olor de la comida era agradable.

—¿Y de que trabajan tus padres Ross? —preguntó Kanae volteando a verla.

—Mi papá es contador y mi mamá abogada. Suelen viajar mucho.

—¿No están contigo? —se sorprendió.

—En los últimos meses no. Se supone que volverían pero se presentó otro trabajo.

Aquello le entristeció a la azabache.

—Qué mal... Nosotras nos mudamos por temas de mi trabajo. Pero nuestros padres suelen visitarnos cada semana, tienen su propio negocio de floristería.

Sirvió los platos con ayuda de Shinobu. Ella se sentó a su lado.

Kanae apoyó su mentón de sus manos.

—¿Te parece ir un día de estos con nosotras?

—¡Oh, me encantaría!

Agradecieron por la comida.

Al dejar todo limpio fueron al cuarto. Rosslenne le gustaba mucho la cama de Shinobu, era muy cómoda.

Cuando cerró la puerta sonrió de una manera que le causó escalofríos.

—Tienes cosas que contarme señorita.

—No sé de qué me hablas. —fingió demencia.

—No te hagas del rogar, por favor.

Suspiró y se sentó. Jugó con sus manos mientras recordaba lo sucedido. Pronto su rostro enrojeció demasiado. No pudo evitar soltar un chillido de emoción.

—Nos... Nos besamos. ¡Oh por Yoriichi nos besamos! ¡Sigo pensando que estaba soñando despierta!

Shinobu colocó una mano sobre sus labios.

—¡Dime todo con detalle! No te creo si me dices que fuiste tú quien lo hizo.

—Se nota que no me tienes mucha fe. —fingió ofenderse.

—Lo siento pero no es muy creíble. Aun te falta dejar de ser tan insegura.

—Sí. Bueno, no te lo niego. Pero a pesar de eso lo abrace porque dijo que le afectaba que me estuviera alejando de él.

—¡Espera! ¿Sucedió en el salón? —asintió. —Ara ara ~ Que atrevidos.

—¡Shinobu! —se sonrojó.

—Entonces él te beso. —colocó una mano en su mentón.

—Dos veces. Ni siquiera me dejó asimilar el primero.

—No me sorprende. Se nota que Rengoku sensei es alguien apasionado. Además no puedo creer que no te des cuenta cómo te ve ~

—¿Ah? —Rosslenne parpadeó varias veces.

—Nada. Me alegro mucho por ti, espero que su relación siga así de bien.

Continuaron hablando hasta que notaron que ya era algo tarde así que decidieron acostarse.

Rosslenne abrazó a Shinobu quedándose dormida.

Doble actualización porque no me aguanté de nuevo <3. Me encanta como Shinobu es la típica amiga que le gusta que le cuentes el chisme JAJAJSFDF

Mientras escribía este capítulo se me ocurrieron cosas para el siguiente ;; También andaba viendo como hacia el dibujo de Rosslenne. Creo que podría subirlo dentro de tres capítulos.

Una anécdota graciosa. Como veo la serie con mi papá me comentó que Rengoku compró 300 cajas de comida para los empleados del tren y 300 para él AJJAJAJJA

También cuando intenta decir umai suena como si tuviera 80 años. Se puso a repetirlo mientras andábamos comiendo. Tenían que ser cejones XDD

Pronto subiré el especial de San valentín. Ahora sisisi. Gracias a punto-chan26 por su aporte en elegir los trabajos de los padres de la prota <3